Cuando la gente me pregunta que les hable de mí, generalmente no sé qué responderles, es complicado hablarles de una chica de 19 años, de nacionalidad chilena. Amante y odiadora de muchas cosas, obsesa de los videojuegos desde muy pequeña. Es una lectora casual que una vez que está realmente interesada en un libro, lo terminará en una noche. Cuesta contarles que soy una chica muy introvertida, pero que en confianza suele ser confundida por todo lo contrario. Que me cuesta muchísimo menos expresarme de manera escrita que en persona. Que físicamente hablando es confundida por una niña de 10 años, que mide un metro y 55 centímetros y pesa menos que una pluma. Es gracioso, porque siempre me preguntan si tengo descendencia asiática por la forma particular de mis ojos o que estoy enferma por lo pálida que es mi piel. Siempre me piden consejos sobre como mantener mi largo cabello intacto. No estoy estudiando nada por el momento, estoy en una especie de preuniversitario, pero el próximo año me gustaría dedicarme a la psicología. La razón podré contársela a aquellas personas que estén interesadas en ganarse mi confianza.

Acerca de mis fanfics, tengo tres que son antiguos, dos oneshot y un longfic (que lamentablemente he dejado en hiatus). Que tratan de una caricatura que hasta el día de hoy me llama mucho la atención por su humor e inocencia.

En la actualidad mi obseción por League of Legends me ha motivado a retomar la escritura.

Cuando hablo de mí siempre omito el hecho de que me manejo muy bien en el inglés y en los ramos que son del círculo humanista. También omito que soy una cantante casual, que de mi familia soy la hermana mayor aunque siempre piensen que soy más joven que mi hermana.

Mi nombre es fácil de adivinar. Pero boe.

Eso.