Disclaimer: Los personajes de One piece no me pertenecen, hago esta historia con el fin de saciar mi imaginación (?)

El sol comenzaba poco a poco, a perderse en el Orizonte, dando una bella vista del anaranjado ocaso. La ciudad era embargada por el gran bullicio de toda la multitud.

En el conjunto de personas, que se encontraban en las calles, se podía apreciar a dos pelinegros, uno de mayor altura que el otro.

— Ace.— Canturreó.— ¿Ya iremos a comer, verdad? —

— Si Luffy.— respondió, regalandole una pequeña sonrisa.

Ambos hermanos, se dirigieron al restaurante Grand Line, en el que iban rutinariamente. Cuando entraron, fueron recibidos con amabilidad y efusividad-Conociendo el gran apetito de este par, y la enorme ganancia que esto significaba.

Se dirigieron a la mesa más cercana, y a los segundos, el mesero los atendió.

— Bienvenidos a Grand Line, Ace y Luffy— les regalo una amable sonrisa— ¿Que pedirán esta vez?— preguntó por cortesía, sabiendo la respuesta de antemano.

Los hermanos se miraron entre sí, sonriendo, a lo que ambos respondieron;

— ¡TODO!—

— Enseguida les traigo su pedido, chicos.—

Los minutos pasaron, siendo seguidas por las quejas de Luffy y el sonoro ruido de sus estómagos.

— La comida tarda mucho, Ace.— volvió a quejarse, por milésima vez.

— Si Luffy, me ha quedado claro eso.— Buscó con la mirada al mesero y lo vio, trayendo una enorme cantidad de platillos.— Mira, ahí esta.—

El mesero, acomodo los platos, tratando de que entraran en la estrecha mesa.

— ¿Eh? Esto no es todo — Dijo Luffy con tristeza, miró intensamente al mesero, preguntando en silencio. El mesero sintió la mirada y alzó una ceja, no entendiendo.

— Lo que quiere decir, mi tonto hermano, es que hemos pedido todo... Y claramente esto no es todo.—

El mesero suspiró — El cocinero esta haciendo todo lo posible para apresurarse, ahora en unos minutos les traeré todo lo que falta.—

Comenzaron a comer, Ace con parsimonia y Luffy, demostrando sus nulos modales.

—Ace, ¿Qué tenías que decirme?— preguntó con la boca llena, sabiendo que eran contadas las veces que su hermano lo invitaba por simple gusto, sino, que siempre lo hacía porque debía decirle algo importante.

El mayor, al escucharlo, dejó de comer para mirarlo. Apoyo su cabeza en su mano derecha y le sonrió.

— Mejor te lo diré cuando estemos yendo a casa.— La sonrisa en un punto, se volvió tensa.— Dale idiota, o me lo comeré yo. — respondió con gracia, robandole un pedazo de carne de el plato de Luffy.

— ¡No hagas eso! — Rezongó, inflando las mejillas.

La cena, transcurrió normalmente, con risas y robándose comida mutuamente. Cuando se fueron del restaurante-prácticamente los habían echado.- Se dirigieron por el camino más largo hacía su casa, caminando pausadamente.

—Luffy. — le miró serio. — Ya tienes 19 años, casi 20 y lo sabes, ¿Verdad?—cuestionó

—Sí.— respondió con obviedad, sin entender a lo que se refería.

—Ya han pasado casi tres años desde que has terminado la preparatoria.— dejó de mirarle, le agarró el brazo y se acercaron a la plaza que estaba continúa. Se sentaron en una banca y nuevamente, Ace volvió a centrar su mirada en Luffy.

— Luffy...— Suspiró, mostrando la incomodes que le resultaba este tema. — Deberías hacer algo más que comer, lo sabes,¿No? —

— ¿Algo más como qué? —

— Como...Ir a la universidad como lo hace Zoro, Nami o trabajar como lo está haciendo Sanji y Ussop. —

Luffy, procesó la información y se relamió los labios, en un gesto nervioso.

—Yo... no sé lo que podría seguir estudiando y sabes que se me da mal — Miró para otro lado, evitando la mirada severa que le estaba dedicando su hermano. — Y trabajar como lo hacen Sanji y Ussop...— se quedó callado por un completo minuto. — Ellos trabajan de algo que les gusta y no creo que me paguen por comer, shishishi.—

—Luffy, es un tema serio, te estoy hablando enserio — lo regañó.

Infló las mejillas, molesto. — Yo también te estoy hablando enserio.—

Ace se llevó la mano a la cabeza. — Solo te quiero ayudar, Luffy.—

Luffy lo miró por unos segundos y bajó la mirada — Cuando yo te quiero ayudar, te enojas y me dices que no me entrometa.— le discutió, demostrando molestia en su voz.

—Es diferente.— acotó, frunciendo el ceño.

— Es lo mismo.— le corrigió, se levantó y se alejo unos pasos. — ¡No te entrometas!— Le gritó, respirando agitadamente. Se giró, dándole la espalda y emprendió a alejarse lo más que podía de Ace, demostrando una inusual velocidad.

— ¡LUFFY! — apretó los puños. — Ese idiota... — comenzó a perseguirlo, tratando de seguirlo el paso, pero el menor era mucho más escurridizo.

Luffy siguió corriendo, atravesando las calles sin importarle nada, quería que aquel molesto sentimiento que sentía en su interior desapareciera.

— Odio discutir.— susurró enojado, empujando sin querer a la gente que se le atravesaba.

— ¡LUFFY! — Escuchó a la lejanía, como le llamaban, miró de soslayo y pudo ver como su hermano estaba una cuadra detrás, siendo detenido continuas veces por la multitud.

Cerró los ojos y se apresuró lo que más podía. Y en un instante...Todo lo de a su alrededor, se volvió en cámara lenta.

Escuchó los gritos de su hermano se aproximaban y observó que este miraba para su derecha con pánico, miró donde dirigía la mirada Ace y sintió una luz que lo cegó por segundos y el ruido del claxon le siguió.

Abrió los ojos sorprendido, y justo su cuerpo,se negó a responderle, quedando estático.

Poco a poco, el ruido fue desvaneciendo a su alrededor, pudiendo solo escuchar los latidos de su corazón, sintió como lo agarraban, y pudo ver el rostro marcado de dolor de Ace, y con las pocas fuerzas que le quedaban, le sonrió.

Lo ultimo que pudo escuchar segundos antes de desmayarse, fue Ace llamándolo.

Bueno este fic, es realmente raro jaja, este sería el prólogo, ya el próximo capítulo comienza todo la historia :3 Si pueden dejar un review dejando lo que piensan o algo, me ayudaría muchísimo ^^ Un saludo! Nos vemos en el siguiente capítulo :3