Nota del Autor:

Otra vez me he demorado mucho en subir el siguiente capítulo u.u disculpen.

lovemikey23, LuisaTatis-Weasley, Sara Mury 11, Rosita y Rosalia muchas gracias por sus comentarios, y gracias a todos por leer :D

Espero que les guste este nuevo cap :D

Capítulo 8

- Ya ríndete Yone – comentó dando un suspiro un hombre que caminaba junto a una chica de madrugada.

- !Tenemos que apurarnos! la microbateria del chip puede acabarse, he usado estos chips muchas veces antes para jugar- dijo la chica mientras miraba su rastreador GPS.

El hombre y la chica vestían con abrigos, pelucas rubias y largas, llamaban la atención pero no había problema ya que prácticamente no había personas en las calles.

- Escucha – dijo Robert – incluso si estamos cerca, que es imposible saber su localización exacta, si está en un edificio…

- ¡No importa!- respondió sin despegar su vista del monitor – estamos cerca, lo encontraré.

Robert solo suspiró resignado, ya que cuando algo se le pasa por la cabeza a "La princesa del grupo" no hay quien le haga cambiar de idea.

- Cuando regresemos tienes que disculparte con todos – comentó en tono comprensivo - en especial con el manager, por tu culpa ahora debe estar histérico, ¿entendido?

La vocalista solo guardo silencio continuando con su búsqueda, pero se detuvo de pronto.

- Se apagó – musito sorprendida y decepcionada.

- Ya debió agotarse la batería.

-Pero…

Yone aún no podía abandonar la idea de encontrar a Mikey, quería verlo de nuevo, a esa criatura de apariencia de tortuga pero a la vez humana y bandana naranja, por lo que se quedó callada contemplando el rastreador.

- Yone – dijo preocupado el guitarrista y puso su mano en el hombro de la chica – regresemos es muy tarde.

Pero la chica lo ignoraba, planeaba huir de nuevo en busca de la joven tortuga que debería estar cerca pero una voz amenazante la hizo reaccionar.

- ¡Son ustedes! – exclamó Leonardo apareciendo frente a los humanos– ¿Qué están haciendo aquí? ¡Respondan!

xXx

Mientras saltaban de azotea a azotea Leonardo cuenta a Raphael lo sucedido en la habitación de Yone, Raphael se detiene abruptamente sin poder creer lo que estaba escuchando.

- No puede ser, Mikey… no… - musitó Raphael mientras que caminaba de un lado a otro e ignorando las palabras de Leo que le pedía que se calmara.

Raphael se dirigió a la orilla de la azotea y dio una fuerte patada al borde.

-¡Esto es imposible! ¡¿Por qué esa tipa le haría eso a Mikey?! Imposible – dijo mientras se sujetaba la cabeza.

- Raphael en verdad debes calmarte, yo tampoco sé por qué paso todo esto…

Raphel se dirigió a él y lo empujó.

- ¡Debiste hacer algo!

- ¡Lo sé! – expresó Leo sintiéndose culpable y con un nudo en la garganta.

Raphael se calmó un poco al ver a su hermano mayor también alterado, pero no podía creer lo que le hicieron a su hermano pequeño, una chica besándolo y…

- Continuemos – dijo Leo recobrando la compostura y mirando fijamente a Raphael – estoy seguro que Donatello quiere ayudar a Mikey de algún modo, debemos decirle que también nosotros lo apoyaremos.

Raphael se calmó y asintió, luego continuaron su búsqueda.

Mientras avanzaban por las azoteas Leonardo vio dos figuras sospechosas, un hombre y una mujer de cabellos largos y de color rubio, uno de ellos cargaba una especie de rastreador, se detuvo para contemplarlos mejor.

- ¿Que sucede Leo?

- Ellos – musitó furioso, y rápidamente bajo del edificio y de un salto apareció frente de ellos.

xXx

Yone apenas podía ocultar su cara de alegría tras esa peluca, pero aguanto y cambio su expresión.

- Estamos buscando a Mikey – dijo tranquilamente mientras se sacaba la peluca, Robert hizo lo mismo.

Al reconocer a la chica de cabello verde, Raphael quien llegó después de Leonardo, no contuvo su furia.

- ¡!Tú! – gritó y corrió rápidamente donde Yone para atacarla, pero Robert se interpuso en su camino, lo que hace que Raphael se detenga y empuñe sus sais.

- ¡Raphael espera! – exclamó Leonardo pero fue interrumpido por Yone.

- ¡Lo siento mucho! – gritó arrepentida la chica poniéndose de rodillas e inclinándose hacia adelante con su rostro el piso– en verdad lo siento mucho, yo solo busco a Mikey para disculparme con él, en verdad – y unas lágrimas corrieron por sus ojos.

- ¿Acaso crees que te vamos a creer?, chica pervertida – exclamó Raphael.

-¡Es cierto! – continuó el hombre – nosotros venimos a buscar a esa tortuga porque Yone quiere disculparse, se arrepiente de lo que hizo.

- Pero ¿Por qué lo buscan en este lugar? – preguntó seriamente Leonardo e inmediatamente la chica respondió:

- Él me dijo que podría encontrarlo aquí cerca, no me dijo exactamente dónde pero aun así salí a buscarle.

Leonardo y Raphael no le creían, ella ocultaba algo pero su actuación era perfecta, en verdad parecía arrepentida.

- No te creo nada… - comentó Raphael.

- ¡Es verdad! Por favor déjenme hablar con él, aunque sea por teléfono, por favor.

- Claro que no, ¡tú lo drogaste! –exclamó Leonardo.

- En verdad me arrepiento, no sabía que más hacer, lo siento .

- Escuchen – interrumpió el guitarrista – por favor dejen que Yone se disculpe.

- ¡Claro que no! – dijo rápidamente el de rojo .

- Pero piensen en su hermano, acaso él no estará mejor con una disculpa, seguramente está confundido, estará mejor si escucha una disculpa de Yone.

Los hermanos guardaron silencio, ellos querían que Mikey se sintiera mejor, que esto no se convirtiera en un "trauma", se miraron entre ellos y finalmente Leo respondió mirando a la chica:

- Te disculparas por teléfono.

-¡Leo! – replico Raphael.

- Pero yo estaré al lado tuyo cuando lo hagas y si dices algo de más ¡yo mismo acabare contigo!

Raphael se sorprendió por la amenaza de su hermano, pero aun ese plan no lo convencía

- Si, puedes estar a mi lado cuando me disculpe, si quieres puedes tener una de esas espadas en mi cuello, no me importa.

Leonardo no confiaba en esta chica, pero continuó.

Dame tu número y yo te avisare cuando te disculparas.

- Si – dijo aliviada – enseguida te pasare una de mis tarjetas de presentación – y comenzó a buscarla en los bolsillos de su chaqueta pero no la encontraba.

- Mejor te daré mi tarjeta, yo le avisare a Yone – dijo Robert y saco su billetera, haciendo que la vista de los chicos se dirigieran a él.

- No, espera, ya encontré una de mis tarjetas – dijo la vocalista – toma – y se la entregó a Leonardo.

- Bien, ahora váyanse, es peligroso que gente famosa este por estos lugares.

- Si.

Y las tortugas volvieron a escalar por los edificios, alejándose de azotea en azotea.

- jajaja gracias Robert.

- Sospechaba lo que planeabas, pero Yone… - expreso preocupado, pero la chica parecía ignorarle, solo se concentraba nuevamente en su rastreador- Por eso – continuó tristemente y sacó una pequeña jeringa – yo me encargare de todo – y rápidamente la clavó en el cuello de su compañera.

- Robert… - exclamó Yone antes de quedar inconsciente, Robert se agacho a tomar el rastreador con una mano y con la otra levanto un poco a la chica.

Los hermanos seguían avanzando mientras que hablaban sobre lo sucedido, no confiaban en esas personas y lo pensarían bien el de llamar a la cantante, todo dependía en la reacción del menor… luego se preguntaban donde iría Donnie.

- ¿Al departamento de Abril? – comentó Raphael.

- No lo creo, tal vez en un lugar cercano.

- Donde Murakami está muy lejos…

- Espera, ¿por aquí no estaba el antiguo laboratorio del Dr. Rockwell? – dijo el mayor mientras seguían avanzando, dirigiendo a aquel lugar conocido.

xXx

-¿Por qué? – preguntó el menor confundido poniendo sus manos en su cabeza – Yo…Yone… ¿significa que le gusto? ¡No entiendo!

- ¡No recuerdes! ¡! Olvídalo! – gritó Donatello.

- ¿No le importa que sea una tortuga? ¿Por qué? – continuó.

Donatello quería que su hermano no recordara lo ocurrido, por lo que hizo lo único que creía efectivo, abrió la jaula y usando su bō dio un golpe en la cabeza a Mikey dejándolo inconsciente.

- Lo siento Mikey, mejor sigue durmiendo, yo encontré la forma de que lo olvides…

De pronto le pareció escuchar a uno de sus hermanos gritar su nombre, por lo que sale rápidamente por la ventana rota y se dirige al techo del edificio.

- ¡Donnie! – gritó Leonardo quien lo divisa un edificio atrás, y se dirige a él junto a Raphael.

- ¡Donnie! ¿Estás bien? – preguntó Leonardo preocupado – ¿Qué paso? ¿Dónde está Mikey?

- ¿Por qué te lo llevaste? – preguntó el de rojo.

Donatello se quedó inmóvil frente a sus hermanos bajo la mirada, mirando al piso intento con todo su esfuerzo encontrar una solución, y entonces exclamó alegremente:

- ¡Cierto! ¡Encontré la solución para que Mikey mejore y olvide todo!

Leonardo y Raphael se quedaron observando incrédulamente a su hermano quien tenía una gran sonrisa en su rostro.

- ¡Una terapia electroconvulsiva!

- ¿Que? – expresaron confundidos.

- Si, mejor conocido como electroshock, yo puedo construir fácilmente una máquina para dar las corrientes eléctricas necesarias, así Mikey olvidará lo sucedido.

Los hermanos estaban sorprendidos pero también muy preocupados por Donnie, en verdad le había afectado lo sucedido, sabían con su mente racional Donnie intentaba ayudar a su hermano menor.

- Donnie escucha – se acercó Leonardo intentando tranquilizarlo.

- No tienes que hacer eso.

- ¡Si tengo! Tengo que hacerlo o si no…

Raphael también se acerco.

- Donnie, nosotros nos encontramos con Yone …

Esto hizo que Donatello se sobresaltara.

- Ella planea disculparse con Mikey , así sentirá mejor.

- Tal vez – siguió Leo – podríamos decirle a Yone que le diga algo más para que Mikey le reste importancia, ella accederá…

- ¿Qué?! No! ¡Ella no lo hará! – exclamó retrocediendo.

Y se dirigió a la orilla del edificio para saltar y volver al laboratorio, pero fue rápidamente detenido por sus hermanos.

- ¡Donnie! No, tranquiilizate!

- ¡Suéltenme!

Mientras que Donatello forcejeaba con sus hermanos, una persona ya se encontraba dentro del departamento, acercándose a Michelangelo.