Todos los personajes de Ranma ½ pertenecen a Rumiko Takahashi

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*SIN COMPROMISO*

Capítulo 18

Confirmaciones

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A unas cuantas cuadras de la escuela furinkan, estaba Akane dentro de una farmacia. Se armó de valor para comprar una prueba casera, pero al entrar al dichoso lugar, se le fue. Además, al estar vestida de estudiante sentía que las miradas podrían juzgarla, sobre todo en una sociedad tan conservadora como la japonesa, pero de todas formas entro.

Sin pensar mas recorrió los pasillos encontrando lo que buscaba, pero al tomar una de los test su mano tembló más de lo debido.

E-esto no puede estar pasándome a mi…no

En ese momento sus miedos superaron su valentía.

Soltó lo que tenía para salir huyendo.

Corrió a través de varias calles hasta que se detuvo en un lugar conocido para ella.

Sabía que a esta hora el doctor Tofu estaba ocupado atendiendo pacientes, pero no tenía a donde más ir según ella. Por eso entro y espero hasta que desocupara.

Luego de un rato la pudo atender. Se acerco a su oficina en donde estaba la asustada muchacha. Tomo una taza de té, ofreciéndole otra a ella.

-ten-

-gracias-

- ¿qué sucede pequeña Akane? -

-pues…yo…-no sabía cómo empezar con el tema.

-dime Akane-la animo mientras bebía de su infusión.

-es que…-la chica no se atrevía a mirarlo a los ojos-

-del tiempo que te conozco, nunca te has saltado las clases, ¿Qué sucedió para que lo hicieras? –pregunto sonriendo como siempre.

La chica se sonrojo de vergüenza. Olvidaba que este hombre la conocía demasiado bien.

-em…-tenia que hablar de algo, así que lo hizo-vera…m-me pelee con Ranma-

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Las clases terminaron hasta que el joven artista marcial pudo irse al fin camino a su casa, pero con la inquietud de no saber el porque de la ausencia de Akane.

Maldición, si tan solo viviera en el dojo, podría verla

- ¡Ran-chan! –

Ranma se detuvo sin tener ganas de lidiar con la cocinera.

-Ah…Ukyo-dijo desanimado. Se le había pegado en el almuerzo y ahora solo quería llegar a su hogar. Estaba algo harto, y hasta agotado de su insistencia.

-No debes irte sin esperarme ¿Eh? -

-¡qué dices!-

De pronto las otras prometidas autoproclamadas del chico aparecieron.

-¡Aireen!-

- ¡Ranma- sama! -

-Ay no-se acongojo. Realmente no tenia ánimos de lidiar con las jóvenes.

- ¡Váyanse! ¡Ran-chan y yo estábamos muy a gusto sin ustedes! -reprocho muy molesta.

-no digas idioteces insignificante plebeya, mi Ranma-sama debe haber sufrido por la ausencia que tuve estos meses-

¿Se había ido? no tenía idea

-¡A nadie le importas!-respondió la castaña.

Ignorando sus palabras la loca chica se lanzo a abrazar al chico sacando su listón enredándoselo en el cuello para acercar sus labios con los de este. Ante esto las otras dos echaron chispas.

-ugh…no-puedo-resp-pirar-dijo ya morado.

-¡Suéltalo locaa!-

-amor mío, imagino lo triste que estabas por mi ausencia ¿no? Lo que pasa es que estaba en entrenamiento con mi grupo de gimnasia-

Sacando fuerza interior el chico logro sacarse el listón rompiéndolo.

-Uy, que salvaje mi vida-dijo fascinada Kodachi.

El aludido se tallo el cuello. Estaba harto de las insistentes jóvenes. Tenia claro que una de las razones de sus peleas con Akane, cuando esta era su prometida, fueron por las entrometidas chicas, aunque en parte era su culpa por no aclararles nada, pero lo que había pasado a penas hace un día detenía cualquier acción de aclarar lo que tenia con ella. Mientras no hablaran no podía decir nada.

-pues Shampoo venir a estar con esposo-respondió la amazona, mientras se arrimaba al brazo del artista marcial, el cual se sintió incomodo al recordar el inapropiado comportamiento de la chica al ofrecérsele tan directamente el día anterior.

-eh…hola Shampoo-saludo, pero tenía muy presente que debería estar furiosa, por como la había dejado el día previo.

-bien, pero airén ¿no contar a estas perdedoras que ayer Ranma besar a Shampoo? -pregunto mientras cruzaba sus brazos alrededor del cuello del chico.

Las dos prometidas miraron sorprendidas, pero no quisieron creer.

-Mujer mentirosa, mi Ranma-sama no haría tal cosa-alegó llegando al lado de Ranma.

- ¡Eres una maldita mentirosa! -

-Ukyo estar molesta porque saber que ser verdad ¡Ser así! ¿Cierto Ranma? -

El chico callo bajando la vista avergonzado por eso. Solo lo había hecho por despecho, pero era verdad, aunque había sido la amazona quien lo había besado, él había respondido por su propia voluntad.

La chica de la espátula sintió mucha decepción al ver que Ranma no negaba nada, sintió mucha rabia.

-Si así fue, seguro lo tomaste por sorpresa como siempre ¿No? ¡Maldita ofrecida! –

- ¡Callar!

-¿Es así Ran-chan? ¿paso algo para que respondieras ese beso? -

-b-bueno…yo-

-¡SOLO BESAR A SHAMPOO PORQUE AMAR A SHAMPOOO!-grito molesta la chica al recordar como el joven la hizo menos frente a "chica violenta" como solía llamar a la joven Tendo.

- ¡Eso es mentira! Nuca te amara, ¡Zorra! -

- ¡Shampoo matarte! -

Rayos…otra vez problemas por culpa de estas locas

-¡Deja de mentir amazona! mi Ranma-sama tiene gustos exquisitos, ósea le gusto yo, no podría rebajarse a besar a una tipa como tu-contraataco segura mientras se arrimaba al otro brazo del artista marcial.

-Estar envidiosa, porque de nosotras tres, ¡yo ser única que besar a Ranma!-dijo con superioridad, provocando mas enojo en las dos chicas.

Ukyo tomo su pala y se fue encima de la china, al igual que la rosa negra.

-¡Te daré tu merecido bruja!-

-¡Jojojojojo! También yoo!-

- ¡Chicas deténganse! -

El pobre chico recibió espatulazos, golpes con el listón y bombaris tratando de parar la pelea sin poder lograrlo, hasta que se hartó de la situación.

- ¡Ya BASTA!-

Las chicas hicieron caso, estando agitadas, aunque la pelea había sido corta.

-Miren…la verdad es que, si bese a Shampoo fue porque…porque-

Ranma jamás ser capaz de confesar amor por violenta chica. Ser cobarde todavía. Eso a Shampoo convenirle.

Eso pensaba la amazona, pero estaba equivocada.

No puedo decir nada hasta que Akane este de acuerdo…además no hemos aclarado nada

-¡Ranma-samaaaaa! ¿Como te atreves a engañarme? -la loca gimnasta se le fue encima provocando una nueva pelea.

-¡Déjalo Locaa!-defendió la cocinera.

-¡Airén admitirlo! ¡Dejarlo en paaaz!-

Las tres jóvenes continuaron peleando por el muchacho, el cual solo quería salir de allí, por eso cuando tuvo la oportunidad, viendo que estaban preocupadas de darse golpes vio el momento justo para huir.

-Lo siento, debo irme-

Las chicas escucharon, pero siguieron su lucha. Dos de ellas estaban molestas por no haber recibido ese beso, pero una pensaba más de la cuenta. No era tonta. Le molestaba que Ranma admitiese lo del beso, pero algo le decía que había gato encerrado. Que eso debió haber sido provocado por algo en especial. Era notorio el desinterés de Ranma por Shampoo y el que, sí tenía por Akane, aun sin ya ser prometidos, pero el pensar en esa posibilidad la molestaba de sobremanera. Todavía no olvidaba que Ranma andaba con alguien, y era muy posible que ese alguien fuese Akane.

No puede ser…tal vez…Shampoo, averiguo algo y…por eso…

- ¿Qué descubriste Shampoo? -pregunto de pronto deteniendo la pelea.

- ¿Qué decir? -

-No es normal en Ranma admitir un beso, que realmente no quiso dar-la china acentuó su entrecejo enfadada -está más que claro que lo hizo por algo-

-Shampoo no saber a qué referirte-

- ¿Qué insinúas insignificante mujer? -

-Deja tus idioteces Kodachi, lo que digo es que Shampoo hizo algo para que Ranma la besara-la aludida dejando de lado su pantalla de locura, presto atención estando de acuerdo con lo dicho por su rival-O genero una situación para que eso pasara…la pregunta es... ¿Por qué? -

La china guardo silencio. No sabia si le era provechoso incluir a las dos jóvenes en sus planes de arruinar la relación de Ranma y Akane. Su treta debió cumplir ese objetivo, ahora solo quedaba que Ranma confirmara su ruptura con la chica Tendo. Si no fuese así, podría incluirlas en un plan. No estaba segura.

Shampoo pensar bien…todavía no saber que ser mejor.

-tener que ir a Nekohanten-dijo saltando al techo de una de las casas retirándose inesperadamente de la conversación.

-¡Espera! ¡Shampoo!-grito Ukyo tratando de detenerla sin éxito.

Kodachi se cruzo de brazos

-Sin duda, esa vulgar mujer está escondiendo información-

Ambas asintieron.

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Sentada en la cama de su habitación, aun teniendo su uniforme puesto, estaba Akane. Podía sentirse como la peor persona del mundo al haberse atrevido a hacerle algo tan bajo al doctor, pero no. Lo que tenía su completa atención era los objetos encima de su escritorio, olvidando todo lo demás.

Flash back

- ¿Y…esta vez porque se pelearon? -

-em pues, sé que yo lo soy, pero él también es…es muy celoso-decía sin atreverse a verle a los ojos. Si bien, no era del todo una mentira, lo que de verdad la preocupaba y la había llevado hasta el, era otro asunto-y-y no sé cómo lidiar con eso a veces-

-Bueno, Ranma es muy emocional cuando se trata de ti-

- ¿Usted lo cree? -pregunto interesada.

Pero de pronto, vio por encima de la cabeza de Ono, en uno de los estantes, unas pruebas caseras de embarazo además de otros elementos para mujeres embarazadas, pero solo ese capto su interés.

-por supuesto-

El teléfono del pasillo irrumpió su conversación.

-disculpa, debo atender. Debe ser un paciente-

-adelante-

-No tardo-

-claro-

Volvió a fijar sus ojos en el estante. Estaba nerviosa, pero sus impulsos ganaron. Sin pensar mucho, se levantó tomando más de un test. Pues quería asegurarse, por eso, sin mucho más que hacer en la consulta, le dijo al doctor, mientras este hablaba por teléfono que ya se tenía que ir. Este solo asintió sonriendo.

Fin flash back.

La joven tenía su mirada fija en las 5 pruebas, las cuales arrojaban dos líneas en su resultado, teniendo esto un solo significado.

-estoy embarazada…-unas lagrimas bajaron de sus ojos. No sabía si era emoción o miedo.

Voy a tener un hijo de Ranma

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Ranma estaba en su casa entrenando, pero no lograba concentrarse. Su mente se iba sin poder evitarlo al asunto con Akane. Quería ir a su casa, pero no sabía cómo tomaría su visita. Si bien, el día anterior la había visto besándose con Hanami, y luego él, lo había hecho con Shampoo, ya no tenia seguridad de como eran las cosas ahora. Pues el había terminado con ella, pero realmente todo era extraño, porque Akane era una buena novia, incluso cariñosa, cosa que gratamente lo sorprendió, y a pesar de que peleaban de vez en cuando, resolvían sus problemas porque se entendían de maravilla. Algo que no se hubiesen imaginado, pues se habían dado cuenta que solo bastaba con tratarse mejor y comprenderse. Su única pelea fuerte había sido esa, y justo…

…la amazona estuvo presente.

Qué raro, aunque Shampoo siempre ha jugado sucio… ¿Habrá hecho algo?

Pero si yo mismo vi como Akane tenia abrazado a ese imbécil ¡Rayos!

El chico dio golpes mas fuertes recordando lo sucedido. No podía soportar el que otro tocara a su chica. Lanzo unas cuantas patadas más imaginando que se las daba a ese desagradable sujeto.

Ella es mía… ¡Mía! No se la daré… ¡jamás! Akane es mi mujer y no dejare que ese estúpido beso me separe de ella

Resuelto a resolver todo, dejo lo que hacía. Tendría que esperar hasta el siguiente día, pues su madre le había dado obligaciones que tenia que cumplir. Ya vería a Akane. Hablaría con ella para saber de una vez por todas que había pasado. No podía equivocarse. Akane no era de las que jugaba a dos bandos. No. Ella era diferente, y si tenia que obligarla a que volvieran, lo haría.

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Día siguiente.

Las clases en Furinkan comenzaron con la atrasada llegada del joven Saotome, el cual al situarse en la entrada se detuvo al ver a la persona que tanto había buscado el día de ayer. Vio como su ex prometida ya estaba en su puesto, la cual sintió su presencia. Ambos conectaron sus miradas sintiéndose nerviosos.

Ranma

Akane

Pensaron ambos al mismo tiempo.

A punto de entrar el profesor se adelantó.

-Saotome, afuera. Llego 20 minutos tarde-

-Pero profesor yo-

-Fuera-

-pero, ¡Ah! está bien-

Mirando por última vez a Akane, salió a cumplir su castigo esperando que los minutos pasaran rápido para poder al fin hablar con su chica.

Mientras tanto dentro de la sala Akane tenía sus propios pensamientos.

Ranma…tengo que hablar contigo. Debe decirte que esperamos un hijo, pero, aunque hayas terminado conmigo, debes saberlo

No puedo ocultártelo

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Después de las dos primeras clases, llego el receso. Ambos jóvenes estaban en el patio de la escuela buscándose, pues habían salido del salón nerviosos, pues de tanto interés en verse, ahora sentían inquietud por ese mismo hecho. Se alejaron sin darse cuenta cada uno con sus amigos, pero lograron reponerse, para poder hablar, sin embargo, como siempre había personas que impedían sus intenciones, tuvieron que lidiar con ello. Sobre todo, Ranma, quien ya tenía a Ukyo pegada nuevamente a él. La chica estaba tratando de llamar su atención sin lograrlo, pues no hacía caso a nada de lo que le hablaba. Solo lo ultimo que le dijo capto su atención.

-Ran-chan, quiero saber si es cierto eso de que tienes novia, ¿Es así? -pregunto molesta.

- ¿Eh?... b-bueno, ¿ya te lo había dicho o no? –respondió nervioso, viendo como Akane se situaba con sus amigas en una banca del patio, para luego disculparse e irse, dirigiéndole una significativa mirada. Se apresuro a seguirla sin importarle su amiga-em...ya vengo.

-¡Ran-chan! ¡Estamos hablando! -

-después seguimos Ukyo, nos vemos-

-pero Ranmaaaa-

El joven desapareció bajo la molesta mirada de la joven, la cual noto como su prometido se iba justo después de Akane Tendo.

¡Rayos! ¿será que quiere hablar con ella? Grr…siempre está al pendiente de esa… ¡maldición! Ellos ya no son nada… ¡Nada! porque tiene que ser así… ¡Ran-chan! … ¿porque no te olvidas de esa estúpida?

Su angustia creció al ver el camino al cual se dirigía su prometido.

¡Lo sabía! La siguió…pero… ¿Por qué? ellos solo pueden ser amigos…nada más

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El chico llego a cierto terreno trasero y alejado de la escuela. Camino siguiendo su instinto. Algo le decía que encontraría a la chica allí.

Camino mas hasta verla al fin. Estaba recargada en la pared que daba hacia el exterior.

- ¡Akane! -

La aludida solo lo vio asustada. No sabia como la trataría, por lo que prefirió quedarse callada esperando que se acercara.

Ranma al no obtener respuesta desde lejos, llego hasta ella.

Vio como la joven lucia nerviosa, y no lo miraba de frente. Le rehuía. Eso lo molesto un poco, ya que anteriormente la había buscado, esperaba que ella comenzara a hablarle dándole las explicaciones que tanto necesitaba, pero no fue así. Los segundos pasaban y seguían de pie sin decir nada. Ranma se estaba cabreando. Akane aun no se dignaba a mirarlo. Eso termino con su paciencia.

- ¡Por un demonio Akane! ¿vas a hablar o no? -le grito harto del silencio.

- ¡no me grites! - respondió haciéndolo.

Ranma la tomó de los hombros y la sacudió levemente levantando su rostro.

-no me evites, tienes mucho que explicar ¿entiendes? Dime de una vez ¿porque te estabas besando con ese tipo si eres mi novia? -

-pues por lo que oí ese día ya no lo soy ¡Tu terminaste conmigo! -

-Si lo hice fue porque me estabas engañando-

- ¡pues también te besaste con Shampoo! -

-lo hice cuando ya no eras mi novia-

- ¡Ah claro! Terminas conmigo y te vas tan rápido con otra ¿tan fácil eres? -dijo en tono acusatorio.

- ¡No! Lo hice porque estaba molesto, además ella me tomo por sorpresa y yo…-

-tu le respondiste porque estabas enojado conmigo… ¿Cierto? Lo hiciste para vengarte-resolvió.

- ¡Si! Así es-

Akane abrió los ojos amargamente sorprendida frunciendo el ceño.

-idiota-la chica levanto la mano para abofetearlo, pero se detuvo.

Ranma había cerrado los ojos, pero noto como ella lentamente bajaba su brazo. La joven comenzó a llorar muy despacio derramando lágrimas. Ante eso, el chico se espantó. No podía verla llorar. Eso lo rompía por completo, por lo que no sabia que hacer. Su corazón se estrujaba cada vez que la veía así, y esta vez no fue la excepción.

-A-Akane… ¿por qué lloras? no lo hagas-

-eres u-un bobo, todo es-so no es importante…-dijo para después sollozar.

- ¿No lo es? Se trata de nosotros, ¿Cómo no va a serlo? -

-es que…no es tan importante como…-la chica se dio valor-…algo que tengo que contarte-

-¿Y qué es?-

-Ranma, primero debo saber…-la chica se acercó más a él, mirándolo directamente rozando su nariz con la del chico.

Este trago saliva. La cercanía con su chica siempre lo ponía más que nervioso. Además, el ya tener casi un día sin tocarla, algo que no estaba acostumbrado a hacer desde que eran novios, todo lo contrario, lo estaba alterando.

-pues…quiero saber si…me amas-

-Akane-iba a responderle, pero todavía estaba esa espina clavada por el beso con el otro sujeto. Beso que aún no aclaraba, por eso tenía dudas, y si admitía que la amaba, el sentía que quedaría en desventaja, pero la penetrante mirada de Akane lo tenía perdido.

-Ranma…algo muy importante me está pasando y…para contarte…debo saber si me sigues amando-dijo viéndolo intensamente. Sus temores traspasaban su mirada, por eso esta le llego tan de lleno al joven, que no dejaba de admirar esos marrones.

-Akane…-el chico no resistió mas y la beso de pronto con todas las ganas que tenía desde que la había visto. Se veía tan frágil, que lo único que quería era estrecharla entre sus brazos y besarla hasta cansarse.

La joven recibió ese beso olvidando el reproche de que el también se había besado con otra, concentrándose en disfrutar el arrebato de su chico, el cual sabía que la seguía amando, pero necesitaba oírlo de sus labios. Pues estaba con mucho miedo al saber lo que le ocurría. Por eso necesitaba su apoyo. El saber que frente a esa situación tan complicada el estaría con ella.

Termino el beso afirmándose de los firmes brazos del muchacho.

-R-ranma…dime… ¿Me amas? -su mirada marrón lo dejaba sin armadura, por eso dejo que su corazón hablara por él.

-Claro que te amo tontita… ¿Por qué crees que me dolió tanto verte con otro, ¿eh? -le dijo con una cara de enamorado que no podía ocultar.

-¡Ranma!-la chica se lanzo a sus brazos llorando nuevamente, dejándolo más desconcertado.

-Akane…que te pasa… ¿Estas bien? ¿Estas así por cómo te trate? L-lo siento, no quise ser tan rudo … perdóname-

-Ranma, quiero estar contigo, te amo-

-¡Akane!-volvió a besarla hasta estamparla delicadamente conta la muralla besándola más pasionalmente siendo gratamente correspondido. Bajo sus manos hasta la cintura, tocando uno de sus pechos, los cuales estaban mas sensibles de lo normal.

-Ahhh…Ranma, espera-

-Akane, eres mía, nadie te va a arrebatar de mi -dijo perdiéndose en su cuello. Ella que estaba sensible, sentía como el contacto la dejaba con ganas de estar con su novio, por eso tuvo que detenerlo, pues ella quería conversar con él. No hacer el amor. Porque eso pasaría si no lo detenía.

-Tenemos…que ha-hablar-dijo alejándose un poco para verlo a los ojos.

Algo aturdido por separarse del niveo cuello de la joven, Ranma la vio con interés-¿qué paso Akane?-

-Ranma, es muy importante que me escuches-

-Claro-dijo rodeándola con sus brazos.

-bien…veras yo…-

-Si-dijo acariciando su rostro.

-yo…estoy…-

-estas-

-tengo…-

-tienes-

-t-tengo…dos meses de atraso-

-¿Cómo?-

-eso…-la chica movía nerviosa sus dedos desviando su mirada-hace dos, dos meses que no me baja-

El chico sin entender a que se refería, solo pregunto-¿estas atrasada con que Akane?-

La chica sintió como su escaza paciencia reventaba.

-¡Ranma! ¡¿Como puede ser que no entiendas?!-inquirió exclamando.

-p-pero es que dijiste que tenias dos meses de atraso y entonces-se excuso sin soltarla todavía.

-uy…-la chica sintió que se rendia en hacerlo entender. Si ya era difícil decirle lo que pasaba, lo era aun mas lidiando con la ignorancia de su ex prometido. Dándose ánimos, inhalo y exhalo unas dos veces. Tenia que aceptar que Ranma en algunas cosas era muy inocente o simplemente ignorante, gentileza de Genma Saotome.

Por eso, lo intentaría una vez más.

No puede ser tan difícil…va a comprender

Lo hará.

Debo tener paciencia

-¿Akane? ¿Qué pasa?

Akane ya se enojó…pero es que no sé qué quiere decirme…

Pero…no es difícil… ¿cierto?

¡No quiero que piense que soy un idiota!

Debo prestarle mucha atención…Si. Eso haré.

-Ranma…yo-

-que…-

-¡Estoy embarazada!-soltó de golpe cerrando los ojos.

Lo dije.

Ahora si…Ranma lo sabe…ahora si entenderá

Temerosa…abrió los ojos, viendo como su novio volvía a tener un gesto de duda.

-¿embrazada?-

Su nuevo globo de paciencia volvió a reventar.

-¡No idiota! ¡Embarazada! -grito algo alterada por el error del chico al decir esa palabra. Sus nervios estaban de punta. Esperaba que ya hubiese entendido.

Cuando de pronto, Ranma, sin importar el humor de su novia, recordó la conversación con el Dr. Tofu meses atrás, sobre la protección con el preservativo y las pastillas. Lo que significaba el "embarazo adolescente".

Al procesar las palabras sus manos soltaron el cuerpo de la joven-A-aakane…tu…estas-

La aludida lo miraba con ilusión de que al fin comprendiera, y sí. Lo hizo. La mirada sorprendida y transparente del joven se lo dijo. Ranma bajo su mirada al plano vientre de la muchacha cubierto por el uniforme de la preparatoria. Trago saliva notoriamente al entender la magnitud de sus palabras.

Akane será… será… ¿m-mamá?

y-y yo...yo ¿Seré padre?

Yo…Akane…ella y yo…

El joven dejo de divagar para concentrarse en su novia. La miro muy intensamente, sintiendo de ella lo mismo. Ambos se quedaron callados, pero sin apartar su vista el uno del otro. Era algo inesperado, nuevo, no planeado. Sentían su corazón latir a prisa.

Ranma levanto su mano y acaricio la mejilla de su chica levemente, mientras Akane recibía la caricia tomándole la mano, dejando escapar una lagrima, ya fuese de miedo, emoción, o desahogo al contarle a quien mas le interesaba que supiera.

Ranma le sonrió dándole confianza y Akane supo que podía volver a respirar tranquila, porque sus zafiros le mostraron su aceptación genuina a lo que les acontecía.

-Akane…qui-

-¡Ran-Chan!-

La voz de la cocinera de okonomayakis los saco de la burbuja que tenían para observarla. Soltaron sus manos ante la severa mirada de esta, la cual claramente había visto esa acción, y con toda la intención había interrumpido, luego de buscar a su "prometido".

- ¿Qué…que pasa Ukyo? -pregunto nervioso sin mirarla a los ojos. El suelo se había vuelto de pronto más interesante.

-¡¿Cómo que, qué pasa?!-pregunto indignada y furiosa-te encuentro con esta, muy de cerca, y no puedo soportar algo así Ranma ¡Soy tu prometida por un demonio!-mascullo en tono fuerte llegando al frente del chico empujando a Akane con el cuerpo, dejándola atrás de ella para dirigirse a su "supuesto prometido" provocando el enojo de esta.

-¡oye que te pasa!-se quejo Tendo. Su paciencia para aceptar groserías se estaba acabando

-Ten cuidado Ukyo- le aconsejo algo molesto recordando el estado de su chica.

Esta lo miro extrañada-no debe importarte esta estúpida, ¡Ya tiene un novio para que se ocupe de ella!-

Akane sintió como la sangre se le subió a la cabeza. Con su fuerza volteo a quien le daba la espalda-¡Deja de insultarme! Yo no tengo culpa que Ranma prefiera estar conmigo que contigo-

Ukyo sintiendo rabia por esa declaración que sabia era cierta le respondió-no digas idioteces marimacho fea, siempre has sido la mas insultada por Ranma, para el soy más bella que tu-

Akane viendo con Rabia a su novio, este la miro negando la cabeza, pues era una certeza que delante de otros el joven no admitía su preferencia hacia ella. Por eso lo miro con cara de decepción y dolor, dejando que una lagrima saliera, aunque estaba actuando, pues al saber su actual estado sabía que el chico no soportaría verla así.

-¡Akane, no es-

-puede que sea verdad-interrumpió- pero Ranma siempre me ha querido, le sigo importando, aunque él tenga novia-le dijo con voz cortada a Ukyo, que la miro enojada-una que lamentablemente no eres tú-dijo con cizaña.

-¡Te daré tu merecido imbécil!-la cocinera saco su espátula para golpear a su rival.

-¡Pues hazlo!-le respondió esta sin miedo.

Ranma preocupado detuvo cualquier acción- ¡Basta Ukyo!-tomo su brazo interviniendo a tiempo-¡Déjala! ¡no te atrevas a golpearla!-declaro quitándole la espátula y poniéndose en frente de su ex prometida, desatando más enojo en la otra chica.

Harta de lo que sucedía, miro a su prometido- ¡No la defiendas! Ella no tiene que estar cerca de ti ¡No tienes que estar cerca de ella! -

-¡Ukyo, no tienes por qué decirme que hacer!-se quejó el joven también hastiado de tantas ordenes que no tenían ningún derecho sobre él-Se lo que hago-

-Ranma, solo no quiero verte más con ella-

-¡Vaya! parece que tu inseguridad habla por ti-acoto Akane.

-¡¿Qué?!-

-Claro, sabes que Ranma me toma en cuenta solo a mí, por muchos insultos que me diga, siempre es a mí a quien busca-dijo cruzando los brazos divertida al ver la cara roja de enfado de la otra-A pesar de que ya no somos prometidos, somos amigos aunque él tenga novia, pero sé que siempre le he gustado-Akane callo para esperar una negativa del joven, al igual que Ukyo, cosa que no llego, ambas contrariadas, pero la primera sonrió-Si yo quiero…-dijo acercándose a Ranma y sosteniéndose de la espalda de este con sus manos-…puedo quitárselo a su actual novia-dijo en un susurro que erizo la piel del muchacho, el cual rogo internamente no tener un cambio en su pantalón, ya que además sentía la curva de los senos de Akane-

-Ah…yo-yo-

Ukyo vio lo colorado que estaba el chico y su agitada respiración. Sabia que solo Akane lograba ponerlo así de nervioso y no le gusto nada. Admitía que la chica tenía razón, pero nunca se la daría.

-¡Cállate! Pareces una zorra hablando así-

-¡Ukyo!-grito Ranma en tono de reproche por el insulto a su novia.

-¡Ja! La verdad duele-dijo Akane sin importar los insultos.

-¡No es cierto!-exclamo negándose a darle la razón. Estaba ya bastante sorprendida por las palabras de su rival, que en el fondo eran ciertas-¡No lo es!-

-¿A…si?-

Akane sintió que podía darle una lección, por eso, tocando su vientre, sacó fuerzas de donde no sabía, tomo a Ranma de la cintura y lo giro lentamente. El joven la miro nervioso, porque no entendía que es lo que su chica pensaba hacer, pero solo basto un gesto seductor de ella para que quedara hipnotizado en su mirada, sintiendo que todo lo demás desaparecía.

-Ranma-dijo con voz melosa-quiero besarte-

La castaña agrando los ojos al entender lo que pretendía Akane, pero de pronto vio como esta se enganchaba al cuello besándolo con una pasión que hizo responder de inmediato al joven que la envolvió con sus brazos.

Ukyo con la mirada desencajada veía como Ranma y Akane se besaban de una manera intensa por varios segundos.

Saliendo de su estupefacción, la chica solo atino a gritar con sus ojos humedecidos por la conmoción de lo que veía.

-¡RANMA!-

El chico salto dentro del beso, recordando lo que estaba haciendo y con quien. Akane en tanto lo soltó sintiéndose victoriosa. Acaricio la mejilla de su novio sonriéndole como solo ella sabía, para luego hacerle frente a su compañera de clases haciendo que Ranma la soltara.

-pues ya vez, Ranma acepto y respondió mi beso-dijo triunfante, viendo el odio de la castaña.

-¡Maldita!-quiso írsele encima, pero Ranma se giró hacia ella y lo impidió.

-¡E-spera, Ukyo!-dijo saliendo de bobolandia, su temperatura había subido considerablemente, pero trato de evitar cualquier ataque físico hacia su novia, pues aun recordaba la charla reciente sobre su actual estado.

-¡Como puedes hacerme esto Ranma!-respondió tratando de zafarse del agarre del chico, pero no podía.

-Ranma, me voy, luego hablamos-dijo Akane, ya no quería seguir peleando con Ukyo. Sabia que no entendería. Era demasiado testaruda.

-¡Akane!-Ranma estaba consciente de que necesitaba seguir hablando con la chica, pero siempre sus otras prometidas interrumpían, además el reciente beso lo hacia creer que ella podría querer decir que estaban juntos, algo que le gustaría.

-¡No la llames! ¡deja que se vaya! Después de lo que me hiciste al menos debe importarte darme una explicación-termino de decir mientras sentía como al fin era soltada por su prometido.

Ranma solo vio como Akane se perdía de vista, luego giro hacia la otra chica-Ukyo…dijo mirándola con lastima-tu lo sabes…sabes que yo-

-¡Cállate!-

-Ukyo…está muy claro-

Plaff

Ranma sintió su mejilla arder. No esperaba otra reacción. Al final de cuentas siempre debía estar dando explicaciones por sus acciones, solo que esta vez, era una que había disfrutado. Había recibido un beso consentido que no rechazo ni quiso hacerlo. Estaba ya algo cansado de fingir, y si eso implicaba recibir rechazos en forma de golpes por sus otras prometidas, bienvenidos sean.

Estoy con Akane…con la chica de la que estoy enamorado hace tanto tiempo y yo…no tengo porque pedir disculpas por eso…ella me ama así que…no tengo que tener miedo

Hemos decidido estar juntos por nuestra propia voluntad desde que estamos sin el compromiso…por eso…debo luchar por nosotros…aunque eso signifique herir a otras personas

Toco su roja piel, la cual ardía como un demonio.

-¡vaya!-dijo sobándose la adolorida mejilla- Akane no es la única violenta-

-¡Traidor!-

-No soy ningún traidor, te dejé en claro esa vez que fui a tu local que solo te veía como amiga-ella cerro los ojos sin dejar de lagrimear-Te lo dije, solo te quiero como amiga, ¡Entiéndelo! Siempre has sabido que amo a-

-¡CALLATE!-Ranma dejo de hablar por el estridente chillido-¡CALLATE! ¡NO TE ATREVAS A DECIRLO! –exclamo tapando sus oídos con ambas manos.

La chica se fue corriendo sin poder evitar el contenido de sus lágrimas.

Ranma negó con la cabeza. Era bastante molesto lidiar con los sentimientos femeninos, pero sabía que faltaba más de uno, ya que su decisión dejaría a varias personas en contra suyo, pero ya nada más podía hacer. Ahora solo tenía en mente hablar con Akane del embarazo, era un tema pendiente e importante.

Demasiado.

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つづく...

¡Holaaaa!

Esta vez no tarde tanto.

Les mando un abrazo a todos los lectores. Agradezco que en estos tiempos tan difíciles que vivimos, dejen lugar para leer esta historia. Espero terminarla pronto aprovechando la cuarentena, pues como vemos están muchas actividades suspendidas a lo largo de todo el mundo, por lo tanto, hay que avanzar.

Ojalá pronto esto cambie.

Nos leemos pronto.

#mequedoencasa

Akane Kou.