Agosto 2014

FANFIC EDITADO

NOTA INICIAL:

Bienvenidos a este proyecto llamado EL ÚLTIMO ENEMIGO.

Les comento que este fanfic es secuela de ENCUENTROS INESPERADOS. Ambos fanfics están enlazados a partir del epílogo de la primera historia. Si desean leer EL ÚLTIMO ENEMIGO, sin haber leído el anterior, no habrá mayor problema.

Les daré algunos datos que resumen ENCUENTROS INESPERADOS:

Hace quince años Leon y Claire se conocieron en Raccoon City.

Umbrella y Wesker cayeron a manos de la BSAA

Jill y Chris se casaron y tienen quintillizos de seis años.

Hace seis años Leon y Claire se encontraron en Cancún, México, donde se casaron.

Leon renunció a su empleo como Agente Gubernamental cuando el presidente Graham deja el cargo, hecho que coincide con su boda con Claire (por lo tanto, los eventos del juego Resident Evil 6 no sucedieron en el fic). Actualmente apoya al gobierno de EU con algunas misiones especiales, pero su principal empleo es en la DSO.

Claire trabaja para la ONU

Leon y Claire tienen una hija llamada Madeleine de dos años de edad.

Rebecca Chambers y Billy Coen están casados.

Sherry y Carlos Oliveira viven juntos.

Pues, no les molesto más, espero que le guste esta historia.

Pily-chan.

CAPÍTULO I… DESCUBRIMIENTOS

Claire estaba frente a la estufa dándole los últimos toques al desayuno masivo que preparaba para su familia. Su esposo había ido al minisuper a comprar los complementos para la montaña de hotcakes. De pronto, el teléfono comenzó a sonar, por ello cerró la perilla de la estufa y se dirigió a la sala, donde estaba el auricular, para responder.

-¿Hola?

-¡Claire, Claire! –escuchó la pelirroja una voz que conocía a la perfección, pero esa voz no mostraba su serenidad habitual.

-¿Becky? ¿Qué sucede? ¿Estás bien?

-Claire, estoy más que bien, de hecho. ¡Dios!

-¿Qué ha pasado? –interrogó ella sintiéndose aliviada. Su amiga estaba bien y eso era lo importante.

-Es que aun no puedo creérmelo. ¡Ni siquiera lo sospechaba!

-Supongo que sabes que no te estoy entendiendo… -añadió con una sonrisa la pelirroja.

-Oh, lo siento. Es que todo ha sido tan rápido. Y tenía que decírselo a alguien antes que a él. Y desde que tú eres mi mejor amiga…

-Becky, linda. A ver: respira profundo –luego añadió cual profesora de Yoga-. Ya sabes, inhala y exhala… Ahora sí, cuéntame qué sucede.

-Bueno… ahhh… Bien, creo que ya puedo. Verás, desde hace unos días me he sentido un poco… extraña.

-¿Te has sentido mal?

-No, no mal, sólo extraña. Es decir, he comido y dormido de maravilla. Pero yo sentía algo…

-Doy por hecho que ya te has hecho los debidos análisis y sabes de qué se trata, ¿no es así?

-Me conoces bien, mi amiga.

-¿Y?

-Oh, Claire… ¡Estoy embarazada, totalmente embarazada!

-¿Qué? Ay Dios… Becky… ¡Ay Dios! –Comenzó a dar brinquitos, extasiada por la noticia-. ¡Serás mamá y yo tía! ¡Muchas felicidades!

-¡Sí, sí, sí!

-¿Lo sabe Billy?

-Nop, aún no. Tengo los análisis en mis manos en este preciso momento. En cuanto leí los resultados te llamé, así que mi querido esposo no sabe nada aun. Pero quiero darle la noticia de un modo especial…

-¿Una cena, quizá? ¿Necesitas ayuda?

-Sé que necesitaré mucha ayuda, pero de momento iré de compras y pensaré bien cómo le daré la noticia al señor Coen. Se llevará una enorme sorpresa.

-No es para menos. Acaban de llegar de su Luna de Miel. Sí que trabaja rápido el hombre…

-Oh vamos, tú sabes que nosotros llevamos mucho tiempo de Luna de Miel.

-Sí, lo sé… Y dime, ¿cuántos meses tienes?

-Siete semanas… ¡En aproximadamente 30 semanas más tendré a mi bebé en los brazos!

-Pues tenemos que celebrarlo… Ahora mismo cocino un desayuno masivo para Chris, Jill, los niños y nosotros, puedes venir y… -en ese momento la línea comenzó a sonar avisando que estaba entrando otra llamada-. Becky, hay alguien en la otra línea, te llamo en unos minutos, ¿de acuerdo?

-Claro, y lamento declinar tu invitación, pero te veré en la tarde, ¿sí?

-Ok. Y felicidades de nuevo, futura mami.

-Gracias, hasta al rato.

Claire terminó la llamada y presionó el botón para tomar la entrante. Con una sonrisa en los labios, atendió:

-¿Diga?

-Me comunica con el señor Leon Scott Kennedy, por favor.

-Lo siento, pero él no se encuentra ahora mismo. ¿Puedo ayudarle?

-¿Con quién tengo el gusto?

-Con su esposa.

-Bien, señora Kennedy, un gusto. Habla el Detective Johnson, de la división Forense de Columbus, Ohio. Dígame, ¿usted conocía a la Oficial Miller Ángela?

-Sí, hace años. Mi esposo y yo la conocimos en Hardvarville. No hemos tenido contacto con ella desde entonces.

-¿Está segura que su esposo no frecuentó a la señorita Miller?

-Completamente segura. ¿Puedo saber qué sucede y por qué la pregunta?

-Lamento decirle que encontramos el cuerpo sin vida de la Oficial Miller hace un par de horas. Entre sus pertenencias apareció una tarjeta con el nombre de Leon S. Kennedy y sus datos personales.

-Vaya… no sabría decirle por qué lo tenía. Mi esposo no ha viajado a Ohio en ningún momento.

-La razón por la que la llamamos es para que alguien reconozca el cadáver de la Agente Miller y se haga cargo éste, pues ella no tenía familiares.

-Sí, entiendo, si me deja su número le pediré a mi esposo que se comunique con usted en cuanto regrese.

-Se lo agradecería. Si es tan amable, el número es…

Claire tomó nota, pero no dejaba de preguntarse cómo es que Ángela Miller podía tener el número telefónico de su casa entre sus cosas. Cierto, era una oficial y generalmente ellos pueden acceder a bases de datos ricas en información personal de sus conocidos. Pero ellos se habían conocido durante un solo día hacía años. Claro, para ella fue más que evidente que la rubia se había sentido atraída por Leon. Y también había sido evidente que Claire no estaba en su lista de personas favoritas en el mundo, pero de allí a que ella portara el número de Leon al momento de su deceso había una gran diferencia.

-¿Señora Kennedy? ¿Señora?

-Ahm, lo siento, me distraje un momento, ¿qué me decía?

-Se ha abierto el expediente sobre la muerte de la Agente Miller. Si bien es cierto que necesitamos que reconozcan su cadáver, también necesitamos hacerle unas preguntas a usted y a su esposo, ya que son el único nexo con su repentina muerte. Comuníquese conmigo cuanto antes para confirmar su llegada, y le sugiero que no pase de hoy, o de lo contrario el asunto pasaría a mayores…

-Entiendo perfectamente a lo que se refiere. No se preocupe, mi esposo y yo viajaremos hoy mismo para hacer los arreglos necesarios. Ya tengo su número, le llamaré en media hora.

-Perfecto, agradezco su amabilidad, señora Kennedy.

-No hay por qué. Hasta pronto.

En cuanto finalizó la llamada, Claire permaneció sentada en el sillón con el teléfono en sus manos. Su mente aun no acababa de procesar toda la información. ¿Leon había viajado a Columbus, Ohio sin que ella lo supiera? ¿Ángela y él se habían vuelto a encontrar y Leon no se lo había dicho? No, imposible. Pero entonces ¿cómo y por qué rayos tenía su número telefónico?

Y a todo esto ¿de qué había muerto? Ángela debía tener su edad así que descartaba automáticamente las causas naturales. El oficial mencionó algo sobre "hallar", es decir, que ella probablemente estaba en una misión encubierta o llevaba desaparecida un buen tiempo.

Se sentó en el sillón para procesar la información. No entendía nada, pero lo haría pronto. Hablaría con él y aclararía ese malentendido…

Leon regresó de hacer las compras. No se había tardado ni quince minutos. Llamó a Claire en cuanto cerró la puerta. Era un hábito que tenía. A cambio, quien lo saludó fue Scottie, como siempre, agitando la cola para saludar a su amo. Acarició la melena del hermoso animal, y volvió a llamar a su esposa.

-¿Claire?

Otra vez sin respuesta. Eso siempre le angustiaba un poco, no podía evitar pensar en aquel día en la que la había encontrado desmayada en el departamento que usaban antes de tener esa casa. Caminó aprisa y suspiró aliviado cuando la vio sentada en el sofá, perfectamente a salvo, con el teléfono entre sus manos. Se rió de sí mismo, a veces podía ser tan paranoico… Pero lo que no era paranoia era ver a su siempre radiante mujer con gesto pensativo sin siquiera percatarse de su presencia. Se acercó lentamente, no quería asustarla. Cuando estuvo lo suficientemente cerca, tocó el hombro de Claire mientras decía:

-Preciosa, ¿estás bien?

Ella respingó ante el contacto y la voz de él, ¿en qué momento había llegado?

-¡Leon! Lo siento, no te oí entrar –movió su cabeza enérgicamente, como si deseara despejarla, y enseguida añadió-. No tardaste.

-No, no había gente en la fila. ¿Sucede algo?

Claire sonrió, como siempre, su esposo yendo directo al grano, y ella no podía evitar seguir su ejemplo.

-Sí. Dime, ¿has ido recientemente a Columbus?

-No, ni siquiera conozco el estado, ¿por qué lo preguntas? –respondió él sin dudarlo un segundo. Claire orgullosamente sabía que podía leer los pensamientos de Leon a través de esos hermosos y fríos ojos azules. Él no mentía, aunque de hecho estaba sorprendido por la pregunta. Ella liberó un suspiro, aliviada. Su momento de duda había sido en vano. Ahora se avergonzaba de sí misma por haber desconfiado de él.

-Amor, acaba de llamar un tal Detective Johnson preguntando por ti. Hallaron el cadáver de Ángela Miller hace unas horas, en Ohio.

-Vaya, qué lamentable, pero… ¿Por qué me buscaron?

-Parece que entre los objetos personales de Ángela estaba una tarjeta con tu nombre y nuestros datos.

-¿Ángela tenía información nuestra? Hasta donde sé ella no se ha puesto en contacto con nosotros, ¿o sí?

-No. Pero eso no es todo, el Detective me dijo que tenemos que viajar a Columbus a rendir declaraciones, pues aparentemente estamos involucrados con su misteriosa muerte. Además, debemos reconocer el cadáver y hacer los servicios fúnebres, pues ella no tenía familia.

-¡Qué bien! Justo cuando pensé que podíamos pasar un domingo en familia sucede esto.

-Hey, no me siento más feliz que tú, pero debemos hacerlo…

-Bueno, si he de serte honesto, además de fastidiarme tener que viajar de esta forma, algo no acaba de gustarme…

-Lo sé, pero no…

-¡Claire! -de pronto, el grito de un hombre llamándola interrumpió su frase. La voz fue reconocida ampliamente por ambos…

CONTINUARÁ…

Uyyy… y como fantasma, regreso para dar muestras de vida!

Este fic se quedó en mi tintero y quiero cerrar la publicación de resident evil con esta historia.

Es un intro super corto, pero el próximo capítulo habrá más acción!

Saludos a todos!

Pily-chan!