Otro one-shot made in Cana Lawliet-san, aunque One piece no es de mi propiedad :)) Además, esto es más bien un drabble...

Espero que os guste el RobinXSanji. Bueno, aunque no soy partidaria obsesiva de esta pareja, pensé que a Robin le gustaba la compañía de Sanji, de modo que pensé en hacer un drabble sobre ellos y aqui estoy.

CAFÉ PARA LA DAMISELA

Hacía ya un buen tiempo que Robin estaba en la tripulación de los Mugiwaras. Una tripulación pirata marcada por la buena suerte y las aventuras, y caracterizada por la capacidad de meterse en situaciones asombrosas que ni ellos mismos sabian como se habian metido.

Y allí habia terminado ella.

Sentada en una de las mesas de plastico plegables, Robin estaba disfrutando de uno de sus libros favoritos de historia, que explicaba la formación de varias de las islas del Grand Line. Estaba completamente inmersa en la lectura que ni se daba cuenta de todo el barullo que estaban armando sus camaradas.

Nami, persiguiéndoles de un lugar a otro, no paraba de gritar y exigir que dejasen de hacer tonterias puesto que estaban perturbando su paz interior. Era algo muy común pero curioso de escuchar para la arqueóloga, aunque ahora se encontraba en el otro mundo que le proporcionaba ese libro que estaba leyendo con sumo interés.

Definitivamente, estar en la tripulación de los Sombrero de Paja era algo agradable y extrañamente refrescante, motivo de más para hacer todos los posibles por quedarse.

Además, estaba el cocinero. No le gustaba exactamente del modo en el que ella le gustaba a él, pero habia algo en el rubio que la hacia sonreir. Era refrescante estar con él.

Dicho joven bajó las escaleras moviéndose como un gusano y llamándola con voz melodiosa. Era algo perturbador, pero jamás se habia visto en tan buen ambiente que con aquella gente. Además, él era muy cortés y educado.

-El café.- Dijo, colocándolo con suma gracia y elegancia en el sitio libre de papeles y libros de aquella mesa de plástico.- Para que la lectura sea más agradable, mi querida Robin-chwan.

-Gracias.- Puso el punto de libro en la página correcta antes de tomar la taza humeante y darle un sorbo, deleitándose con su sabor.- Delicioso.

-Oooh~.- El modo gusano del cocinero de la tripulación de los Mugiwaras entró en fase activa. Se acercó a Nami llamándola como de costumbre para ofrecerle café, pero solamente recibió una respuesta seca, tajante y frívola por parte de la navegante.

Deprimido se dejó caer al suelo. Robin, en un acto poco común para hacerle sentir querido entre las mujeres de ese barco, le pidió otra taza de café y lo halagó por saber preparar bebidas con tan buen sabor.

-Enseguida, Robin-chwan~ ~.

Sí, le gustaba ese barco. Esa tripulación. Y también la agradable compañía de Sanji.