Kingdom Hearts Las Crónicas del Corazón

El Camino de los Elegidos

Capítulo 6:

"Culpa"

Un extenso campo verde se extendía a su alrededor, numerosos árboles tan altos que llegaban a tocar el cielo azul y a los lados había varios edificios destruidos. Al su lado, nueve siluetas oscuras y algo borrosas comenzaban a correr en grupos. En su mente no paraba de escuchar las palabras "correr", "nos volveremos a encontrar", sólo podía correr junto a tres siluetas más. El cielo se pintó de rojo, una enorme sombra oscura acechó justo delante suya. Desapareció instantáneamente y se posicionaba junto a una de las siluetas que huía del lugar y con un movimiento de mano hizo desaparecer al individuo.

Gritos de desesperación retumbaron en su cabeza, "Zoro" sonaba constantemente. No era capaz de manejar aquella situación, volvía a escuchar en su mente que corrieran todo lo que pudieran. Uno a uno las siluetas fueron desapareciendo entre gritos de desesperación y un odio intenso se apoderó de sí mismo y comenzó a avanzar hacia la enorme sombra. Las siluetas que quedaban no paraban de gritar su nombre, como si no quisieran que se pusiera de esa manera, pero su cuerpo le era irracional y no era capaz de controlar sus acciones. La sombra enorme esquivó y bloqueó todos sus ataques con suma facilidad, ni siquiera en ese aspecto podía tocarle. La oscuridad le rodeó rápidamente, impidiendo que se moviera, sus pisadas se volvieron pesadas y parecía que le faltaba el aire. Justo delante de sus narices, la sombra que hizo desaparecer las siluetas le comenzó a hablar. Lo único que escuchó era "Volverás donde empezaste… adiós", y la oscuridad lo cubrió todo…

-¡Chicos!- gritó a todo pulmón, despertando de la pesadilla que estaba pasando. Abrió los ojos fuertemente y la vista nublada sólo le permitió ver a unas cuantas siluetas alrededor. Estaba acostado en una cama de algodón y completamente lleno de vendas.

-¡FRAN!- gritaron todos.

- ¿Qué demonios ha pasado?- preguntó Fran reconociendo a sus amigos. Su vista volvió a la normalidad y allí estaban Sebas, Álvaro, Xamo y Peralta felices de verle- ¿chicos?

- ¡Por fin has vuelto!- gritó Álvaro abrazándole muy fuerte.

- Me haces daño Álvaro- le dijo Fran con dolor en todo el cuerpo.

- Nos tenías muy preocupado aunque ninguno hemos pensado que hubieras muerto- le dijo Sebas chocándole la mano a su amigo.

-¿Dónde has estado?- preguntó Xamo.

-Aún no me he hecho la idea de que esté aquí con vosotros… ¡CHICOS POR FIN HE VUELTO CON VOSOTROS!- gritó saltando de la cama con velocidad y abrazando a todos sus compañeros- he pasado por tanto, no he podido contactar con vosotros pero tenía la esperanza de poder volver algún día… ¿eh? me noto poco pelo…

- Culpa mía… ¡habías llegado con una gran cantidad de pelo y te he pelado yo misma!- le contestó Xamo con orgullo.

-¡Vaya destrozo!- gritó Fran cuando se vio en el espejo de la habitación. Su ropa también estaba destrozada y como novedad en el brazo derecho tenía un brazalete de cuadros blancos y negros.

-¡No te quejes!- le gritó Xamo golpeándole en la cabeza y tirándolo de nuevo a la cama.

- Cuéntanos qué te pasó- le dijo Álvaro sentándose a su lado.

- Ha pasado tanto desde aquel día… en mitad del espacio me atacó el barco pirata del Capitán Garfio- comenzó a contar Fran.

- Lo suponíamos, nosotros fuimos al País de Nunca Jamás y nos encontramos la sorpresa de que había sido robado antes- le contó Sebas- pero ahora eso es cosa del pasado, ¡cuéntanos más!

- Me estrellé en un mundo repleto de agua donde no había cobertura para llamar y me recogió una tripulación de piratas… gracias a ellos conseguimos hundir el barco del Capitán Garfio junto a los comandantes de la Banda Brol- les contó Fran- el capitán no tuvo más remedio que destruirlo, por eso no tuve escapatoria… pero ellos me acogieron y me invitaron a unirme a su tripulación. ¡Me convertí en el mago del barco!

- Mi nave gumi…- lloró Álvaro.

-He vivido muchísimas aventuras, he estado en una isla prehistórica, en una helada, en un enorme desierto, ¡e incluso en una isla en el cielo! – les fue contando Fran a la par que Álvaro seguía llorando su pérdida- Tuvimos que enfrentarnos a innumerables peligros, desafiamos al propio regimiento mundial, rescatamos a compañeros de las garras de nuestros enemigos, luchamos contra seres invencibles e incluso con un dios muy poderoso… he aprendido muchas cosas con ellos y me lo he pasado genial siendo un pirata… hasta aquel día…

- ¿Qué día?- preguntó Peralta asombrada.

- Llegamos a la mitad de nuestro viaje y allí nos esperaba un enorme pirata a las órdenes del gobierno… comenzó a hacer desaparecer a todos mis amigos uno a uno hasta que me tocó a mí…- dijo Fran con tristeza- me mandó volando por el espacio durante tres días hasta que llegué aquí… chicos, tengo que volver…

- ¡Para el carro Fran, no seas egoísta!- le gritó Xamo- ¿sabes por lo que hemos pasado nosotros?

- Te íbamos a buscar pero nos atacaron los sincorazones, destruyeron el edificio principal del instituto y todas las murallas- le explicó Álvaro.

- Y ahora que acabas de llegar, ¿te quieres ir?- le preguntó Peralta igual de enfadada que los demás.

- No quise decir eso… prometimos que nos encontraríamos dentro de tres días desde el momento en el que nos separamos… ya llego tarde- dijo Fran apretando sus puños- tengo que volver cuanto antes, al menos para despedirme…

- Te llevaremos pero antes tendrás que escuchar lo que tenemos que decirte- le dijo Sebas con seriedad- el cabecilla del ataque al instituto fue Jesús… él es uno de los encapuchado que nos atacaron en La Tierra.

-¡¿Jesús?! ¡¿Cómo es posible?!- gritó Fran con los ojos bien abiertos- ¿por qué lo hizo?

-No lo sabemos, desapareció tras el ataque y no lo hemos vuelto a ver- le comentó Álvaro.

- Fran, te buscan a ti… no debes separarte de nosotros- le dijo en voz baja Peralta.

- Quiero hablar con él…- les dijo Fran seriamente.

-Ya te hemos dicho que no sabemos donde está- le replicó Xamo.

- ¡Pero no me explico por qué os atacó sabiendo que yo estaba en mitad de un viaje solo!- dijo Fran con fuerza- tengo que averiguarlo…

- Veo que estás sano y salvo…- dijo una voz desde la puerta de la habitación.

-¿Quién eres tú?- preguntó Fran.

- Es el Comandante de la Guardia Galáctica Norte, su nombre es Gadius- le explicó Xamo cuando vio al hombre de nariz larga y pelo rizado- fue el que nos ayudó en el ataque al instituto.

- Estoy aquí porque estoy investigando la organización secreta "Banda Brol"- le explicó Gadius- aunque todavía no he recibido noticias de mis soldados, estoy ahora mismo aquí por el tema de vuestro amigo Jesús.

- Dice que últimamente le han visto por los alrededores del pueblo- le comentó Álvaro.

- Iré a buscarlo ya mismo- dijo Fran intentando levantarse, pero Xamo y Álvaro intentaron pararle.

-¡Aún estás herido! ¡No debes moverte de la cama!- le gritó Xamo.

- Quiero saber el motivo que hizo que Jesús se volviera en nuestra contra- les dijo Fran.

- Nosotros también, pero lo único que podemos hacer es esperar- le replicó Álvaro.

- Te acompaño… - le dijo Sebas.

-¡¿Pero qué dices?! ¡Si no se puede mover de la cama!- le gritó Xamo enfurecida.

-Yo cuidaré de él…- dijo Sebas- cuando tú quieras.

En el tiempo en el que Fran no estuvo, les dio tiempo a reconstruir el edificio principal del instituto. Como el primer piso fue aplastado por los superiores, se quedó con únicamente dos pisos. La cocina y la enfermería fueron traslados al nuevo primer piso mientras que el superior quedó intacto con respecto a instalaciones. Entraron en la habitación de los chicos a recoger ropa, ya que estaba en vaqueros cortos por el tratamiento médico. Fran se puso una camiseta verde oscura con una sudadera negra con gorro y cremallera. Salieron los dos fuera del instituto y comenzaron a andar cuesta abajo.

- Espero que no tengan muchos problemas- pensó Álvaro en voz alta.

- Ahora que Fran está aquí tienes que darte prisa en acabar tu proyecto, recuerda la misión que nos encomendó Gadius- le recordó Xamo.

- Debo ir a mi nave para informar a la base del regreso del elegido, debemos protegerle a toda costa- comentó Gadius- nos veremos más tarde…

- Adiós Comandante…-se despidieron los dos cuando el chaval salió por la puerta.

- Queda poco para acabar, sólo tengo que ir a la tienda de informática del pueblo a por unos cables y pasar la tarde entera intentando que funcione el generador- le explicó Álvaro.

-Tendré que ir contigo, ¿vienes Peralta?- le preguntó Xamo.

- No hace falta, prefiero quedarme hoy aquí…-le dijo en voz baja saliendo de la habitación.

- Esta chica cada vez sale menos- comentó Álvaro saliendo con Xamo al exterior.

La chica entró en su habitación nada más salir Xamo y Álvaro del instituto, miró por la ventana y cerró las persianas de un tirón. Sacó del cajón de la mesita de noche un móvil, tecleó un número y esperó que le respondieran.

-¿Eres tú?-preguntó Peralta hablando con su supuesto "amigo"- sí… ya está aquí…

Bajaron por la avenida, torcieron a la derecha hasta llegar al paseo marítimo, en una plaza donde había un enorme faro pintado de rojo, blanco, rojo y blanco. Se sentaron en unos escalones de piedra mirando hacia el inmenso mar. El tiempo estaba tranquilo como siempre, ni una pizca de viento o una nube en el cielo, pero el calor era tremendo y la temperatura podía llegar hasta 35º como máximo.

- Desde que te fuiste, no he parado de entrenar yo solo…- le comentó Sebas.

- Seguro que te has vuelto bastante más fuerte- contestó Fran- gracias a las aventuras que he vivido todo este tiempo, me he vuelto muchísimo más fuerte que después del entrenamiento.

-¿No lo eras lo suficiente después de los tres meses de entrenamiento que hiciste con Riku y Donald?- preguntó Sebas.

- ¿Sabes qué?, he aprendido mucho en esos viajes… y llegué a una conclusión- le dijo Fran- el verdadero entrenamiento radica en la experiencia, cuanto más aventuras vivas más fuerte te volverás. El enfrentarte a peligros día a día te hace mejorar… es cierto que a veces hace falta pararse para aprender nuevas cosas, pero el uso de lo aprendido en el día a día es lo que te ayuda a mejorar.

- Sabias palabras, se nota que te han comido el coco en ese mundo- le dijo Sebas medio sonriendo- supongo que ya no te ganaré en la esgrima, ¿no?

- Eso se me da fatal, prefiero darte un buen puñetazo- empezó a reírse Fran junto a Sebas.

- Será hora de buscar por otro lado- le contestó Sebas- rastrearemos todo el paseo marítimo e iremos subiendo hasta el instituto…

Estuvieron buscando toda la tarde pero no obtuvieron ningún resultado. En una de las pequeñas calles de Barbate, situada en el centro del pueblo, estaba Álvaro sentado en el filo de un bordillo con unas pocas bolsas llenas de cables. Detrás de él había un casino, con luces brillantes y parpadeantes.

- Esta mujer aún no sale del casino…- dijo Álvaro aburrido.

- ¡Listo!- gritó Xamo saliendo del casino sin nada.

-¿Seca?- le preguntó Álvaro mientras ella disimulaba con la mirada.

- Ya me aburrí… pero mañana pienso volver…- le dijo Xamo empezando a andar cuesta arriba.

- Oye deberíamos de hacer algo con Peralta- dijo Álvaro caminando junto a ella.

- ¿Qué le pasa?- le preguntó Xamo con normalidad.

-Últimamente no sale demasiado, además siempre la hemos dejado atrás en todas las misiones al exterior- le comentó Álvaro.

- Pero si ella siempre se quiere quedar, allá ella…-contestó Xamo.

- Creo que es porque espera que vuelva Jesús… o ese "alguien"- le comentó Álvaro.

- Según Jesús y Peralta ese "alguien" murió al poco tiempo de venir… tú y yo no lo conocemos- respondió Xamo- Esa historia… nos es desconocida… nunca quisieron compartirla con nosotros…

- Tal vez Peralta piense que algún día volverá y por eso se queda siempre en el instituto… cerca del pueblo- pensó Álvaro en voz alta.

- Ya te he dicho que esa persona murió…- dijo Xamo mientras subían por la cuesta del instituto. Justo detrás de ellos, un majestuoso atardecer se podía divisar. El sol caía poco a poco sobre el mar, desapareciendo tras él.

- A mí no me da esa sensación…- concluyó Álvaro entrando en el instituto tras ver por tres segundos el bonito atardecer.

El atardecer disimuló la aparición de unas enormes nubes oscuras que se divisaban justo detrás del instituto. Una sombra observó la entrada de los chicos a las instalaciones y de un gesto con la mano izquierda hizo que comenzara a moverse una leve brisa cada vez más intensa sobre el pueblo.

El silencio del instituto fue perturbado por unos lentos pasos en el final de la escalera. Un escalofrío recorrió todo el cuerpo de Peralta, cogió de un primer cajón una daga púrpura con el filo curvado. Los pasos cesaron y con lentitud giró la vista hacia la puerta. Jesús estaba ante sus ojos, con una mirada fría y siniestra, las ojeras eran mucho más pronunciadas y su pelo se había vuelto mucho más oscuro. Llevaba puesta la gabardina de su organización y portaba su espada-navaja en la mano izquierda.

- Vives en una cárcel… aunque pienso que es mejor así…- le dijo Jesús entrando en la habitación armado- ¿se ha ido?

- Desde que lo vi necesite hablar contigo, pero ahora que ha llegado el elegido era el momento idóneo…- le respondió Peralta con las manos detrás de la espalda.

- ¿Qué sabrás tú?-le preguntó Jesús dando vueltas por la habitación.

- Él está muerto…-le volvió a responder Peralta cada vez más nerviosa.

- No lo está… él está vivo…- le dijo Jesús acercándosele poco a poco.

- Ya no es humano, es alguien frío y sin sentimientos- dijo Peralta tranquilamente con los ojos cerrados- ya no es la misma persona que conocimos… sólo es una cáscara vacía…

-¿Cómo puede decir eso la persona que siempre lo ha amado? ¿Cómo eres capaz de dudar de que tenga sentimientos? ¿¡Sabes el motivo por el que no hemos destruido este lugar antes!?-preguntó Jesús seriamente, dejando a Peralta totalmente callada con la cabeza agachada- porque estabas aquí… aún siendo un caparazón vacío todavía te ama y lo último que quiere es hacerte daño…

- A veces las personas cambiamos…-susurró Peralta muy bajo.

- Pero yo… ¿sigo siendo yo?- preguntó Jesús mirando hacia ella.

- ¿A qué te refieres?- le preguntó Peralta algo dudosa.

- Aún sigo aquí, y nada de mi ser ha cambiado… cuerpo… mente… sentimientos…-dijo Jesús en voz cada vez más baja.

- Por más tiempo que pasemos no olvidaré a Javi… ¿sólo hace falta tiempo juntos?- se dijo Peralta con el corazón en la garganta cuando vio a Jesús darse la vuelta y cerrando la puerta, dejándolos encerrados en la habitación.

-¿Qué pretendes hacer? ¿Estás loco?- le preguntó Peralta asustada pero con los brazos aún detrás de la espalda.

-Sí, loco por ti, y con el tiempo juntos… aprenderás a amarme, más de lo que habrías hecho por Javi-le dijo Jesús acercándose a Peralta lentamente y parándose junto a ella a escasos centímetros.

-Nunca cambiaré de parecer, Javi es único… es… especial-susurró Peralta por lo bajo y con los ojos cerrados.

- ¡MIENTES!- le gritó Jesús furioso- ¡hace poco que estabas diciendo que él no era lo que era!

- Sí…pero aún así… le amo…- le dijo Peralta soltando lágrimas descontroladamente.

- Entonces sólo tengo que abrirte los ojos…- le dijo Jesús haciendo gesto de abrazo. Los ojos de Peralta se abrieron al instante, inhalo aire y exhalo un triste suspiro. De la boca goteó un pequeño chorro de sangre y su cuerpo comenzó a temblar como si quisiera deshacerse de algo. Jesús le había atravesado desde el estómago con su navaja, la sangre cayó sobre la alfombra de algodón rosa del suelo- vivirás eternamente en mi corazón, tanto en vida, como en muerte…

Sacó la navaja del cuerpo de la chica, cayendo esta al suelo sin poder moverse. La navaja-pistola estaba cubierta de su sangre y Jesús con una cara diabólica y sádica empezaba a murmurar frases in entendibles, se había vuelto completamente loco. Un grito ensordecedor llamó la atención del asesino, miró hacia atrás con las manos manchadas de sangre.

-¡PERALTA!- gritó Xamo aterrorizada con las manos en la boca.

-¡¿Pero qué has hecho?!- gritó Álvaro en cólera cuando Jesús se le acercó con velocidad y cortó sobre su abdomen.

- No os entrometáis…-dijo Jesús pasando sobre los dos.

- ¡Álvaro!- gritó Xamo de nuevo atemorizada, intentando sacar su varita del bolsillo con muchos nervios.

- Tranquila, no ha sido un corte profundo... ¡Medio Nudo: Soga al cuello!- gritó Álvaro sacando una cuerda de la manga y atrapando del cuello a Jesús sin tensarla.

- ¡Ustedes para mí sois sólo moscas!- les dijo Jesús dándose la vuelta con la soga al cuello y apuntando con la navaja-pistola.

- ¡Cuidado, Expelliarmus! – gritó Xamo colocándose justo delante de Álvaro. Lanzó su conjuro pero no dio en la navaja-pistola de Jesús, sino contra su portador, lo cuál lo lanzó por los aires y se estampó contra la pared- ¿estás bien?

- No ha sido nada- le dijo Álvaro cayendo al suelo sangrando- llama a los demás…

- Jesús ha desaparecido…- concluyó Xamo tras ver que Jesús dejó de estar presente ante ellos- ahora la prioridad es Peralta…

En el exterior la noche oscura ya había caído, el viento comenzó a soplar cada vez más fuerte y empezaron a caer chispitas de agua. Bajo el instituto salió Jesús con las manos manchadas de sangre agarrándose el cuello de dolor. Caminó cuesta abajo y se montó en una moto Harley Davidson Chopper de color negro, arrancó y se largó cuesta abajo mientras que la lluvia comenzó a caer más fuerte. Este suceso extraño hizo que Fran y Sebas subieran en seguida al instituto, la puerta estaba abierta y se apresuraron a subir al piso superior.

- ¿Qué habrá pasado aquí?- se preguntó Fran subiendo las escaleras corriendo junto a Sebas.

- El propio hecho de que llueva en esta época es mal augurio- susurró Sebas.

-¿¡QUÉ CARAJO HA PASADO AQUÍ!?- gritó Fran llegando al salón y viendo a Peralta tumbada en el suelo boca arriba, apoyando la cabeza sobre las piernas de Xamo.

- Esto no puede estar pasando…-se impresionó Sebas cuando llegó.

-¡PERALTA!- gritó de nuevo Fran poniéndose de rodillas junto a las dos chicas- ¡¿QUIÉN TE HA HECHO ESTO?!

- ¡Lo siento, no he podido hacer nada!- dijo Xamo berreando con las manos en la cara.

- Ha sido Jesús… vino aquí hace muy poco e hizo lo que ves-le informó Álvaro- le intentamos parar pero desapareció, aunque aún debe estar en el pueblo…

- ¡Nunca se lo perdonaré!- gritó Fran enfurecido intentando levantarse, pero la mano de Peralta le agarró del brazo.

- Por favor no te enfades con él… él ya no es el mismo... todo ha sido culpa mía- tosió Peralta una mancha de sangre y llena de lágrimas- siento mucho lo que os he hecho, debería de habéroslo contado antes… lo siento, sólo quería estar junto a él una vez más…

- No te tienes que disculpar, no has hecho nada malo…- le dijo Sebas con seriedad, sin derramar ninguna lágrima pero con una gran pena en la cara.

- Sí… ha sido todo culpa mía… todos nuestros planes se los iba contando a Jesús en secreto… por eso siempre permanecía aquí… sólo quería tener una oportunidad de encontrarme en persona con Javi- dijo llorando Peralta- de verdad chicos… ¡lo siento!

- ¡PERALTA!- gritó Xamo cuando la luz de Peralta se apagó, cerró los ojos y dejó de respirar. Fran se levantó derramando lágrimas y se dirigió a las escaleras.

- ¿Dónde vas?- le preguntó Sebas tras ver que se iba a ir.

- Quiero hablar con él…- le dijo Fran mirándole fijamente. Bajó por las escaleras, cogió un chubasquero negro y se puso la capucha para evitar mojarse con la lluvia.

- ¿No vas con él?- le preguntó Álvaro llorando al igual que Xamo.

- No… confiad en él…- le susurró Sebas.

Los rayos comenzaron a caer sobre el tranquilo pueblo, los ciudadanos extrañados por ese fenómeno cerraron todos sus establecimientos y se aislaron todos en sus casas. La ciudad estaba vacía, no pasaba ningún coche por la calle excepto la moto de Jesús pasando a gran velocidad. Entre la iglesia y el ayuntamiento se situaba un bonito parque con árboles y atracciones pequeñas para los niños más chicos. Jesús pasó a través del parque para cortar camino, pero un haz de luz descendió a gran velocidad y golpeó en la cara de Jesús tirándolo de la moto al suelo.

- Pensaba largarme cuanto antes, pero veo que no ha podido ser… has sido más rápido que yo- dijo Jesús levantándose tras ver patinar su moto y estrellándose contra los matorrales.

- Aún con esta lluvia y los rayos ha sido fácil localizar la moto… eres el único que está fuera…-le dijo Fran muy serio sin quitarse la capucha. Dejó de llover tan fuerte pero aún así seguía lloviendo- ¿Por qué lo hiciste?

- ¿Matarla?- le preguntó Jesús con cara de sádico loco- Peralta moría sin amor, y el amor la mató…

- ¿Qué te ha pasado? ¿Qué te llevó a hacerlo?- le preguntó Fran con seriedad- ¿quién es Javi?

-Javi… fue mi mejor amigo…-le contestó Jesús.

-¿Fue?- le volvió a preguntar Fran un poco dudoso.

- Peralta, Javi y yo no somos de este mundo… nosotros nacimos en el Planeta Trafalgar- le empezó a explicar Jesús- Desde pequeños teníamos la ilusión de salir del planeta, pero eso no ocurrió hasta hace 5 años. A nuestro mundo llegó cierta persona del exterior, se hacía llamar el Guardián del Emperador y se llevó con él a Javi. Pasaron tres meses y Javi volvió, pero con un arma algo inusual.

- ¿Aquella espada larga?- preguntó Fran.

- Su nombre es Murasame y pertenecía al Guardián que se llevó a Javi. Cuando volvió Javi nos llevó con él al espacio en su nave, al parecer el Rey Iván quería invadir esa zona de la Galaxia Este- le fue explicando Jesús- A partir de ahí me hice el Guardián de Javi y Peralta. Desde pequeños, a Javi y a mí siempre nos ha gustado Peralta, pero el destino no estaba a favor de mí… mi amor no era correspondido pero aún así siempre quise proteger a mi mejor amigo ante todo… hasta aquel día…

- Aún no entiendo ese tema de reyes, príncipes y esas cosas…- comentó Fran- ¿qué ocurrió?

- Llegamos a Vicent Alexis y nos tendieron una emboscada… el Guardián del Emperador, Zote, la misma persona que se llevó a Javi y le prestó su katana Murasame… nos tendió una trampa para recuperar lo que era suyo, pero Javi se negó y en una ardua lucha sucumbió a la oscuridad- dijo Jesús con voz baja- Peralta y yo creíamos que había muerto y yo dejé de ser guardián, hasta que una semana antes de que atacáramos el instituto se presentó ante mí…

- ¿No estaba muerto?- le preguntó Fran.

- Ahí está la gracia… cuando sucumbió a la oscuridad su corazón dejó el cuerpo y lo que dejó fue una cáscara vacía, no existía pero "era". Se convirtió en un Incorpóreo, un ser que no existe pero existe… era la nada. Se volvió un ser frío y oscuro, ya no era lo que era…- le explicó Jesús- se había unido a la "Banda Brol" y me buscaba para que le ayudara a conseguir el objetivo de la organización… Kingdom Hearts.

- Otro chiflado con el mismo objetivo…-dijo Fran en voz baja- sin duda los hay a miles…

- Kingdom Hearts es una enorme cantidad de corazones unidos y por consiguiente uno de ellos debe de ser el de Javi… para invocarla dicen que hacen falta un elegido de la luz y otro de la oscuridad… su lucha puede desencadenar el verdadero Kingdom Hearts- terminó de explicar Jesús y poniendo pose de combate- por eso te llevaré ante ellos para recuperar el corazón de mi mejor amigo…

- Creí que nosotros éramos amigos… pero veo que el camino que has elegido se tuerce bastante del nuestro…-le dijo Fran remangándose las mangas, quitándose el chaquetón mojado y flexionando un poco las rodillas.

-¿Qué piensas, matarme?- le pregunta Jesús con ojos desafiantes.

- No, después de lo que has hecho aún te considero mi amigo… ¡y lo que voy a intentar es que vuelvas a ver la luz del pozo en el que has caído! ¡Aunque sea a base de palos!- le gritó Fran furioso inflando sus mofletes al máximo y lanzando unas llamas por la boca- ¡Aliento de Fuego!

- Muy lento- dijo Jesús esquivando la llamarada de fuego con agilidad, apartándose a un lado como si de un rayo se tratase.

- ¡Lluvia de Meteoritos!- lanzó Fran una serie de bolas de fuego contra Jesús, pero éste las iba esquivando al igual que el anterior ataque, deslizándose a los lados como si se tratase de un rayo.

- ¡Ráfaga Prismática!- empezó a disparar Jesús una ráfaga de disparos con la navaja-pistola. Fran comenzó a esquivarla de la misma manera que lo hizo él anteriormente con las bolas de fuego, se deslizó por el resbaladizo suelo sin que le diera ninguna bala. Concentró una bola de fuego en su palma derecha y la presionó tanto hasta reducirla la mitad de su tamaño original.

- Te crees más rápido que yo pero he sido capaz de igualar tu velocidad sin necesidad de usar magia, ¡Bola de Fuego Explosiva!- lanzó Fran su bola de fuego comprimida hacia Jesús, el cuál intentó cortarla de un tajo pero nada más tocarla ocasionó una explosión en todos los morros- ¿Te ha gustado?

- ¡Tus truquitos de mago no volverán a afectarme!- gritó Jesús saliendo corriendo de la cortina de humo directo a Fran con la intención de cortarle con su arma.

- ¡Para mí sigues siendo igual de lento!-le gritó Fran esquivando con maestría y velocidad los numerosos tajos que ejecutaba Jesús, echándose a un lado y a otro. Fran intentó golpear a las piernas, pero saltó con los dos pies y se quedó suspendido en el aire justo enfrente de Jesús siendo un blanco fácil- ¡ups!...

- Te tengo…-dijo Jesús intentando cortar a Fran de nuevo con la espada.

-¡Caíste en la trampa! ¡Triple Ascenso!-gritó Fran pegando una patada en el mentón de Jesús, dejándolo descolocado. A la mitad de la caída volvió a patear a Jesús en el estómago, elevándolo un poco del suelo. Apoyó las manos en el suelo, cogió impulso y golpeó de nuevo con las dos piernas lanzándolo al aire- Y la especialidad de la casa… ¡Doble Bola de Fuego Explosiva!

En cada mano creó una bola de fuego, presionándola para hacerla cada vez más pequeña y las lanzó contra Jesús. La explosión que creó fue mucho más grande que la primera bola de fuego explosiva y la cortina de humo era mucho mayor. Con rapidez salió Jesús como un rayo del humo con la intención de tajar a Fran con la navaja-pistola, pero consiguió defenderse invocando su llave espada León Durmiente.

- Creí que no volverías a usarla…-le dijo Jesús con una tira de sangre cayendo de su frente y boca.

- Eres uno de los que me busca, no veo inconveniente de usarla ahora cuando sea necesario…- le dijo Fran seriamente tras bloquear el ataque de Jesús. Comenzaron a chocar las espadas una y otra vez, Fran no paraba de defenderse y esquivar con su propio cuerpo los ataques de Jesús, ya que no era tan bueno como él en el arte de la esgrima. Fran retrocedía poco a poco hacia atrás, hasta que se vio acorralado en la estatua de la plaza.

- Llegó tu hora…-Jesús levantó la espada e asestó un golpe en el hombro izquierdo de Fran pero sin profundizar mucho en el cuerpo- ¡te llevaré conmigo aunque sea sin brazos!

- ¡Ni lo sueñes! ¡El brazo se queda donde está!- le grita Fran haciendo fuerza con la mano izquierda para que la espada no le rebanara el brazo. Alargó su llave espada hasta llegar al mango de la navaja-pistola de Jesús y con rapidez la enganchó y se la arrebató de las manos- ¡Fuera espada!

- La esgrima no es lo único que sé ha…-le dijo Jesús tras ver a Fran quitarse su espada del hombro, se le manchó toda la sudadera de sangre y la expresión de la cara se le cambió completamente. Tiró la espada lejos y asestó un puñetazo con la izquierda en toda la cara de Jesús, tirándolo hacia atrás. La caída no fue la esperada, ya que un hilo metálico le ató del tronco.

- Ahora jugaremos a mi manera…-susurró Fran tras haber extendido el gancho de su reloj hasta el cuerpo de Jesús, jaló con fuerza e hizo que diera muchas vueltas en círculo en el aire hasta estamparlo definitivamente en el suelo. Después de recoger el gancho, corrió hacia Jesús con una bola de fuego en la mano.

- Asesinato Eléctrico…- lanzó Jesús rayos por las yemas de los dedos, electrocutando a Fran con un efecto mayor al estar mojado, Fran quedó inmovilizado pero todavía en pie y sin la bola de fuego en la mano. Jesús sacó de su bolsillo un haba púrpura y se la tragó sin masticar, su cuerpo empezó a temblar, le entró un intenso dolor de cabeza. Las ojeras que tenía se volvieron más grandes y oscuras, sus ojos se tornaron de rojo y su pelo se volvió completamente negro- me has obligado a tomar la Semilla Oscura…

Con la velocidad de un rayo se plantó delante de Fran y le golpeó un puñetazo revestido de un rayo azul oscuro, hizo que retrocediera pero seguía sin caer. Le golpeó en el estómago y en el pecho varias veces intentando que cayera inconsciente.

- ¿¡Qué te han hecho!? ¿¡Qué te han obligado a hacer para que llegaras a estos extremos!? , Peralta tenía razón… ya no eres el que era… ¡pero no ha sido culpa tuya!…- le gritó Fran consciente y agarrando los puños de Jesús con sus propias manos y haciendo que retrocediera poco a poco hacia detrás.

- Conseguiré el corazón de Javi cueste lo que cueste… ¡aunque tenga que sacrificar vidas!... Paseo Azul- gritó Jesús soltándose y empezando a correr en círculos, dejando a su paso un camino azul y electrificando el suelo que pisaba Fran.

-¿Sabes qué vida es la que has sacrificado?... ella sólo quería estar de nuevo junto a vosotros… ¡¿Y ES ASÍ COMO LA TRATÁIS?!- gritó Fran levantando el puño derecho y propinándole un fortísimo puñetazo en la cara, chocándolo contra el suelo y resquebrajándolo. Le dejó la marca del puño en la cara, soltó sangre por la boca y lo dejó inconsciente en el suelo. Fran decidió retirarse tras ver el cuerpo de su amigo, se dio la vuelta y comenzó a andar en dirección al instituto.

- ¡COBARDE! ¡AÚN NO HE ACABADO CONTIGO!- le gritó Jesús levantándose del suelo con la cara totalmente llena de sangre. Atrajo su navaja-pistola con un rayo que desprendió por las manos y se abalanzó envuelto de electricidad hacia Fran. La espada envuelta en rayos aumentó a un tamaño impresionante.

- Mierda…- se sorprendió Fran parando la hoja de la espada chocando sus dos puños, electrocutándose pero aguantando con fuerza en pie. Fran resistió las grandes cantidades de voltios que recorrían todo su cuerpo, sus pies comenzaron a resbalarse y sentía que las fuerzas se les estaban yendo. En su mente recordó la escena de su amiga Peralta muerta y el arrepentimiento le recorrió el cuerpo, sentía que podría haber hecho algo para evitarlo pero ya era demasiado tarde. Abrió los ojos, que se habían vuelto amarillos en un instante y vio el rostro de su amigo intentando matarle- Pro…pro… ¡PROTEGO!

Una cúpula verdosa emergió con tremenda fuerza del cuerpo de Fran, repeliendo a Jesús y la espada, la cuál salió volando dando vueltas hasta caer en el cuerpo de Jesús. El espadachín cayó al suelo sangrando y viendo su propia espada atravesada en su pecho.

-¡NO! ¡JESÚS!- gritó Fran tras ver la navaja-espada atravesada en el cuerpo de Jesús. Se acercó con velocidad y se agachó para intentar ayudar a su amigo.

-¡Cof, cof!- tosió Jesús soltando grandes cantidades de sangre.

- Tranquilo Jesús, te pondrás bien- le dijo Fran desesperado- te llevaré enseguida a que te traten, ¡resiste!

-No… ya no se puede hacer nada…-le dijo Jesús costándole hablar- ya es demasiado tarde… al final… me convertí en un sincorazón…

- ¿Pero qué dices?- le preguntó Fran desconcertado.

- Caí en la oscuridad… y la oscuridad me engulló…-susurró Jesús dándose cuenta de lo que había hecho- escúchame bien, él no es lo que parece… él no controla la espada, la espada le controla a él… sólo te puedo decir una cosa… ¡LO SIENTO!

-¿Pero qué dices? ¡Ha sido culpa mía!- le gritó Fran, cayendo lágrimas en el rostro de Jesús.

- Supongo… que hasta en lo más hondo de la oscuridad… se atisba un pequeño rayo de luz… pero yo… lo he encontrado demasiado tarde… ahora sólo espero reencontrarme con ella… adiós Fran… has sido un digno amigo… hasta el final- le dijo Jesús apagándose poco a poco, dejando sólo un gritó de desesperación de Fran. La lluvia dejó de caer, las únicas lágrimas que cayeron fueron las de Fran en el rostro de su amigo.

Aquel día ocurrió todo muy rápido, del día a la noche perdieron a dos viejos compañeros. Nada más acabar el combate dejó de llover y la única agua que caía eran las lágrimas derramándose en los cuerpos de sus compañeros perdidos. Fran llegó al instituto con el cuerpo de Jesús a cuestas y su navaja-pistola manchada de sangre en la mano. Cuando los demás lo vieron, rompieron en enojo e impotencia, culpándose ellos mismos de las muertes al no ser lo suficientemente fuertes, sobre todo Sebas, que era Guardián.

Al día siguiente subieron a la colina del instituto, donde construyeron dos tumbas una al lado de la otra y en dos piedras grandes picaron el nombre de los dos fallecidos. Xamo y Álvaro explotaron en llantos por las grandes pérdidas, conocían a Jesús y Peralta desde hace muchos años y los recuerdos pueden ser, a veces, dolorosos.

-Deberíamos irnos ya…-dijo Sebas vestido al igual que los demás de negro.

- Las rosas rojas eran sus favoritas…-dejó Xamo un ramo de flores encima de la tumba de Peralta.

- Esta espada… sigue siendo tuya… manchada con vuestra sangre y la mía…-dijo Fran clavando la navaja-espada de Jesús al lado de la tumba- todo ha sido culpa mía…

- Todos somos culpables, desde que nos enteramos de que Jesús desapareció y nos atacaron deberíamos de haber supuesto que era él… pero no queríamos creerlo… lo llevaron por el mal camino y ha acabado así…-consoló Sebas a sus amigos.

- Peralta siempre se quedaba en el instituto cada vez que salíamos fuera… nunca quería venir y yo me preguntaba siempre por qué…-se secó las lágrimas Álvaro y levantándose del suelo- jamás pude imaginarme que estuviera siempre en contacto con él y no nos lo dijera…

- Intentó por todos los medios posibles que no nos pasara nada, pagando un precio… y es éste…- les dijo Xamo levantándose junto a Álvaro y marchándose con los demás cuesta abajo.

-Chicos, desde el momento en el que llegué sólo os he dado problemas. A vosotros y a ellos dos… nunca debería de haber vuelto…-dijo Fran con tristeza mientras se quitaba los parches de la cabeza.

- Es algo que iba a pasar tarde o temprano independientemente de que vinieras…-le dijo Álvaro llegando a la entrada trasera del edificio.

- Quiero irme… no os quiero causar más problemas, tengo que irme al Grand Line a reencontrarme con mis compañeros piratas. Así la Banda Brol no me encontrará y a vosotros os dejarán en paz- pidió Fran con la cabeza agachada.

- No, no te rindas, aún queda el tal Javi en pie. Hay que seguir las instrucciones del Comandante Gadius para desmantelar a la Banda Brol de ese mundo y detener a Javi- le explicó Xamo- ¿sabes por casualidad qué mundo es el que ocupan para alistar a soldados? La ciudad natal de Jesús y Peralta, ¡el Planeta Trafalgar!

- Vamos a ir contigo o sin ti… después del daño que ha hecho esa banda no podemos dejar que les pase lo mismo a los habitantes de ese mundo- le animó Álvaro a unirse.

- No sé…-dijo Fran cuando del cielo cayó y atravesó la cúpula un objeto rodeado de una esfera de aire. Cayó justo en la coronilla de Fran, estampándolo en el suelo con un enorme chichón rojo.

- ¿Eh?, ¿esa no es la misma marca que cayó cuando llegó Fran?- se preguntó Álvaro al ver la marca que se le quedó en el chichón- Y ha vuelto a atravesar la cúpula de plasma… y ahora la mejorada…

- ¿Qué ha pasado?- preguntó Fran medio inconsciente y sin saber lo que había ocurrido.

- Te has salvado porque no ha sido una persona… ha sido un periódico… -le informó Xamo recogiendo el periódico y leyéndolo- es de hace unos tres días…

- ¿Qué pone?- le preguntó Álvaro.

- "Después de la Guerra de Marine Ford, el pirata Luffy Sombrero de Paja tras haber perdido a su hermano adoptivo…"-leyó Xamo, pero Fran le interrumpió dando un salto y gritando.

-¡¿LUFFY?!- se impresionó Fran- ¿es un periódico del News Coo?

-¿Qué es un News Coo?- preguntó Álvaro.

- Es un pájaro parecido a una gaviota que reparte periódicos a lo largo de todo el mundo, debe de habérmelo enviado el mismo hombre oso que me mandó volar hacia aquí… no sé porque lo habrá hecho…-les comentó Fran- pero lo más grave, ¡Luffy ha perdido a su hermano en una guerra, debo de ir a ayudarle de inmediato!

- Calla ruidoso, sigo leyendo: "Tras haber perdido a su hermano adoptivo, el joven pirata del sombrero de paja volvió al lugar del campo de batalla y se dirigió a la campana Ox Bell del ala oeste y la hizo sonar 16 veces, luego lanzó un ramo de flores sobre algunos rastros de la batalla aún visibles en el suelo para seguidamente realizar unas plegarias en silencio. Completamente eufóricos, varios reporteros lograron fotografiarle"- les leyó Xamo detenidamente, cuando acabó le entregó a Fran el periódico donde se veía a Luffy vendado rezando justo delante de una enorme campana dorada.

- ¡Es Luffy y está junto a Rayleigh!-se sorprendió Fran al ver a Luffy en la foto junto a un anciano llamado Rayleigh y a un hombre pez- ¿eh?, hay algo raro en esta foto…

-¿Raro? ¿Qué le pasa?- le preguntó Xamo.

-3D2Y, es un tatuaje en el brazo derecho- comentó Fran- prometimos reencontrarnos en cierto lugar dentro de tres días…

-3 DAYS, eso es lo que debe significar el 3D… pero está tachado. Luego pone 2Y… 2 YEARS- le tradujo Xamo en seguida.

- 2 años… no nos encontraremos dentro de 3 días, sino dentro de 2 años. El resto no era más que una farsa para atraer la atención del mundo… - pensó Fran en voz alta- es un mensaje dirigido solo para nosotros… es la decisión de Luffy. Debemos aguardar y hacernos más fuertes, ¡entonces nos reencontraremos! ¡DENTRO DE DOS AÑOS! ¡EN EL ARCHIPIÉLAGO SABAODY!

-¿2 años?, es tiempo de sobra para entrenar…-comentó Álvaro.

- No, ya no… no voy a pararme a entrenar…-les dijo Fran con una sonrisa de oreja a oreja.

- ¿El mejor entrenamiento es la aventura?-le dijo Sebas sacando la misma sonrisa.

-¡Tú lo has dicho! Tengo dos años enteros para salir de aventuras, así que primero zanjaremos los asuntos pendientes que tenemos con la Banda Brol, ¡por la memoria de Jesús y Peralta!- gritó Fran entusiasmado- iremos al Planeta Trafalgar y le patearé el trasero al tal "Javi".

- ¡Para el carro bala perdida! ¿Recuerdas que no tenemos nave espacial para viajar?- le preguntó Xamo comenzando a enfadarse.

- No creo que sea ése el problema…-susurró Sebas.

-¡Já! ¡Creo que será hora de mostraros mi proyecto! ¡Seguidme!- les anunció Álvaro con una sonrisa resplandeciente, llevándose a los tres a la puerta del segundo edificio del recinto.

- ¡Wow! ¡Nos vas a enseñar por fin el proyecto con el que tanto por saco has dado!- le gritó Xamo cuando Álvaro abrió las puertas de par en par.

- ¡Os presento el J-Vortex!- gritó Álvaro destapando unas sábanas, debajo de ella había un pequeño barco rojo con decorados blancos duros como el acero. Tenía dos mástiles, uno mayor que sostenía la vela mayor y el mástil menor situado en la parte trasera con una vela triangular roja y amarillo. Tenía una cabina donde en la parte superior tenía una especie de cúpula de cristal. El mascarón de proa era una especie de cabeza de pájaro pero sin ojos, las barandillas blancas y en vez de timón tenía un cañón de propulsión.

-¡UN BARCO!- gritaron Fran y Xamo completamente sorprendidos al ver la majestuosa nave espacial en forma de barco.

- Es la niña de mis ojos, mi mayor creación, con esta nave haré mi sueño cumplir… ¡ser el mejor piloto que navegue por el espacio!- gritó Álvaro a los cuatro vientos su más anhelado sueño.

- Te tiene que haber costado mucho construirlo tú- le comentó Sebas igual de impresionado- sabía que tramabas algo parecido, por eso no me sorprendí, pero para no ser un carpintero el barco está muy bien hecho.

- ¡Cierto! ¡Ahora necesitamos a un carpintero o mecánico para que nos ayude en el mantenimiento del barco!- gritó Álvaro con una sonrisa.

-¡Pero primero un músico!- les dijo Fran.

-¡Tú te callas!- le grita Xamo enfadada y golpeándole en el chichón.

- Y pensar que venimos de un funeral…-dijo Sebas por lo bajo.

-¡Has puesto una llama en el barco!- gritó Fran enloquecido por ver el símbolo de una llama rodeado, resaltado por el blanco de la nave- ¡Es impresionante!

-¿Y cómo va a funcionar un barco en el espacio? ¿Nos quedaremos sin aire?- le preguntó Sebas dudoso.

-Tiene velas solares, con ellas recoge la energía del sol y lo guarda en un generador que está justo debajo del mástil mayor bajo la cubierta. Con la energía obtenida alimenta con una parte todo el sistema informático del barco, tanto la cocina, las luces, el propulsor, absolutamente todo- les fue explicando Álvaro- El propulsor es sustituido por un timón cuando vayamos a tocar mar… eso sí, la nave es para estar en el espacio o en el mar, no es ningún tren o algo con ruedas así que siempre tendremos que aterrizar en un mundo con mar ya que no podemos levitar.

- ¿Y el aire en el espacio? ¿Y la gravedad?- insistió Xamo preguntándole.

- Ya te digo que no soy un mecánico, así que lo único que he conseguido es que haya oxígeno dentro del barco, es decir, mientras estemos en el espacio no podemos estar en cubierta- explicó Álvaro- en cuanto a la gravedad, he colocado un equipo que crea una gravedad de 9,82 m/s2 en todo el barco… me fue bastante difícil encontrarlo y montarlo.

- Por eso tardaste tantísimo tiempo en acabarlo tú solo…-concluyó Sebas- ¿Oye y la Play 3?

- ¡Evidentemente tenemos un salón con la televisión de plasma, ordenadores, portátiles, sofás, consolas y juegos!- les dijo Álvaro entusiasmado.

-¿Y la cocina?- preguntó Fran hambriento.

- Está totalmente equipada, tenemos salón, cocina, habitación para los chicos, para las chicas, sala de reunión, trastero y todo lo posible para un viaje espacial- informó Álvaro- Estaba pensado para 6 personas…

- Sí… - dijeron todos callándose y agachando la cabeza con tristeza.

-¡Pero bueno! ¡Ya tenemos barco y destino! ¿Qué nos parará?- les preguntó Sebas animado- ¡tenemos un asunto pendiente y ellos dos no nos querrían ver encerrados y deprimidos aquí!

- Chicos… hagamos esto por nuestros compañeros… ¡por ellos y por las aventuras que nos esperan!- gritó Fran saltando al mascarón de proa- ¡CHICOS! ¡RUMBO A TRAFALGAR!

Continuará…

Autor: Fran López – Captain Soraking.

Corrector: Joaquín Garci – Jojogape.

Colaboradores: Atahonero - Fauxuquito11.

Álvaro García – MrTrompero – Lautenorx.