Bonjour! Un pequeño Fic de la pareja que más amo GaLe

Espero que les guste

Disclaimer: Todo lo relacionado a Fairy Tail es propiedad del magnífico Hiro Mashima-sama.

Capítulo 1: Una estrella por una rosa

-Qué buscas Gajeel?- preguntó Lily, el Redfox buscaba algo con la mirada por todas partes.

-Una tienda de magia, pero todas ya están cerradas- dijo sin mirar al pequeño gato.

-Ya es tarde, son casi las 8 y ya está oscureciendo- dijo Lily que empezó a buscar con la mirada alguna tienda abierta para ayudar a su amigo -Y para que quieres tú una tienda de magia?- preguntó curioso.

-Hum?, eso no te incumbe- dijo molesto el Dragon slayer de hierro -Porqué mejor no vas a la posada? Yo buscaré un poco más-

-Está bien, te veré más tarde- dijo el Exceed extendiendo sus alas y se dirigió hacia la posada.

-o-o-o-o-o-

-Estoy en mitad Freesia City y no encuentro ninguna tienda abierta- dijo molesto Gajeel -Una vuelta más a la ciudad y si no encuentro nada me voy a la posada- caminaba distraído y no vió a una pequeña figura con la cual se tropezó, gruñó molesto al ver a una niña levantándose del suelo sacudiendo un pequeño vestido maltratado por el tiempo y arregló la bandana que cubría su cabeza.

-Perdón señor (snif), no vi por donde caminaba (snif)- dijo la niña tratando de ocultar su rostro, Gajeel se asustó al notar que la niña estaba llorando.

-Oi, estas bien? te hice daño?- preguntó el moreno poniéndose en cuclillas para estar a la altura de la niña, ella sólo negó con la cabeza -Tsk... Entonces porqué estás llorando?- dijo Gajeel molesto pero a la vez tranquilo, para no asustarla; él no estaba acostumbrado a tratar con niños.

-Unos niños (snif) me robaron (snif) algo muy preciado para mí (snif)- respondió la niña volviendo a llorar, algunas personas que caminaban por el sitio se giraban a ver y murmuraban culpando a Gajeel del llanto de la niña.

-Hey! Hey! Cálmate! No llores- dijo desesperado el come hierro -S-sí dejas de llorar, te acompañaré para recuperar lo que te robaron- la niña alzó la mirada hacía el moreno, él no la miraba, como si estuviese avergonzado de lo que había dicho.

-Harías eso por mí?- preguntó la niña, secándose las lágrimas con sus manos.

-Ya te lo he dicho, con tal que dejes de llorar- dijo el moreno y miró a la niña que ya no lloraba sino que sonreía ampliamente -Qué es lo que te robaron?-

-Un collar- la niña busco en la pequeña mochila que llevaba en la espalda -Es igual a esta- sacó de la mochila una lacrima en forma de estrella con una correa atada a ella.

-Si tienes una, para que quieres otra igual?- preguntó Gajeel tomando en sus manos el collar para observarlo.

-Porque esta la hice yo, y la otra me la regaló mi hermano cuando era pequeña- dijo la niña quitando de las manos del moreno el collar para ponerse por el cuello y dar un pequeño destello -Es mi escudo, mi guía, mi protector en las noches oscuras. Me da miedo la oscuridad, y esta lacrima brilla cuando la hay.

-Oh!... Es la primera vez que veo esta cosa... Jeje, de seguro le gustará a la Enana- pensó Gajeel en voz alta, la niña dio una pequeña risa al ver el sonrojo del moreno -De que te ríes?- dijo molesto el Redfox.

-Esa persona que llamaste Enana seguro es alguien especial para tí, por eso te sonrojaste- dijo entre risas la niña

-Y donde están esos niños?- dijo Gajeel rápidamente cambiando de tema y poniéndose de pie.

-En el parque- ella sonrió y tomó la mano del come hierro para conducirlo hacia el parque -Haruko- dijo la niña con una sonrisa.

-Haruko?- Gajeel miró extrañado a la niña.

-Sip! Mi nombre es Haruko... Y el tuyo?- preguntó curiosa la pequeña.

-Eh... Gajeel- dijo el Redfox, estaba un poco avergonzado de la forma que la niña tomaba su mano.

-Ahí están!- dijo Haruko señalando unos niños jugando en el parque con una pequeña bolita de luz -Y están jugando con mi collar!- ya era de noche, por lo tanto el collar brillaba fuertemente, corrió hacía ellos soltando la mano de Gajeel -Devuélvanme mi collar!- gritó la pequeña al acercarse a los niños.

-Ahora es nuestro, así que lárgate- se burlaban los niños, el moreno llegó detrás de Haruko con los brazos cruzados y el ceño fruncido asustando a los niños -Haru-chibi! detrás de ti, un monstruo!- dijeron temblando los niños al ver esos ojos rojos brillantes, ella giró y vio al come hierro, sonrió maliciosamente y volvió a mirar a los niños.

-Él es el monstruo que protege el collar, y si no me lo regresan les va a ir muy mal- dijo aún con la sonrisa malvada, los niños lanzaron al aire el collar y salieron corriendo con un grito de terror. Gajeel tomó en el aire el collar y se lo dió a Haruko.

-Oh no! Se volvió a soltar la cuerda…- dijo con un puchero en sus labios e intentando reparar la cuerda que sostenía la lacrima en forma de estrella.

-Tsk- Gajeel arrebató el collar de las manos de la pequeña -Si le pones una correa tan débil siempre se soltará- cubrió con las manos el collar y empezó a brillar, Haruko miró extrañada.

-Gajeel-kun, eres un mago!?- preguntó la pequeña, el abrió las manos y en donde antes había una simple cuerda ahora había una fina cadena de hierro.

-Con esto no se volverá a soltar- dijo Gajeel entregándole el collar.

-Gracias!- sonrió y saltó para abrazar al moreno.

-Hey! Eso no hace falta... A-ahora ve a tú casa, ya es tarde y tu hermano seguro está preocupado por tí- dijo tratando de separarse de la niña, ella hizo un puchero y bajó la mirada a la cadena, la apretó contra su pecho y se la puso por el cuello, guardando al otro devuelta en su mochila.

-Claro! ya me voy, muchas gracias Gajeel-kun- sonrió y empezó a correr.

-Ah! Pequeña... Tú vives por aquí?- dijo el Redfox llamando la atención de la pequeña, ella asintió.

-Te puedo ayudar en algo?- dijo Haruko aún con la sonrisa en su rostro.

-Conoces alguna tienda que esté abierta a estas horas?- preguntó el Dragon slayer, ya no tenía nada que perder y era tarde.

-Claro! Obaa-chan tiene abierta su tienda todo el día! Yo vivo allí y suelo ayudarle, si quieres te puedo llevar!- Haruko tomó de la mano al come hierro y caminaron hacia el pueblo.

-o-o-o-o-o-

Haruko entró corriendo por la puerta y el sonido de la campanilla llamó la atención de una anciana atrás del mostrador.

-Obaa-chan! Ya llegué!- dijo ella subiendo en una butaca para sentarse en la barra del mostrador.

-Haru-chibi! que son estas horas de llegar y sola?- regañó la anciana.

-Perdón por la hora pero no vine sola, vine con Gajeel-kun- ella sonrió cuando la pequeña campanilla volvió a sonar al momento que Gajeel entró por la puerta.

-Buenas noches señor, muchas gracias por acompañar a mi nieta hasta aquí- dijo la anciana.

-Como sea, yo sólo necesitaba una tienda y ella me dijo que encontraría una aquí- el Redfox no miró a la anciana pero miraba todo en la tienda.

-Gajeel-kun, me esperas? Te traeré algo- dijo la niña que subió unas escaleras.

-Gracias, has hecho sonreír a Haru-chibi otra vez. Desde que su hermano murió me ha costado tenerla vigilada. Puedo ayudarte en algo?- dijo la anciana con una sonrisa.

-Su hermano murió?- dijo sorprendido el moreno.

-Sí, fue hace unos 6 meses, no sé que hiciste pero está muy feliz- la anciana le señaló un pequeño cuadro que colgaba por la pared, en el se podía ver a un muchacho de cabello azul un poco más oscuro que de la niña que abrazaba

-Sólo le reparé la cadena del collar que lleva. A lo que venía, tiene libros o pergaminos sobre runas o algo así?- el Redfox miraba algunos pergaminos sobre la mesa.

-Runas? Oh, eso no es muy común pero creo que tengo algo- dijo la anciana buscando entre algunos muebles -Esto es lo que tengo, cada uno cuesta 2500 jewels- puso algunos pergaminos sobre la mesa y un pequeño libro. -Tengo muchas categorías, cual te gustaría?-

-Yo no entiendo nada sobre runas, es para una amiga, le gusta leer runas y esas cosas- Gajeel buscó en su bolsillo y sacó una pequeña billetera de cuero –me llevaré este- tomó el pequeño libro y se la entregó a la anciana con el dinero.

-Oh! Esa amiga es a la que llamaste Enana?- la pequeña niña se trepó a la barra, Gajeel desvió la mirada de los ojos marrones de Haruko -Te quiero agradecer Gajeel-kun, mira, te daré esto- el come hierro vio una pequeña lacrima en las manos de la pequeña, ella lo empezó a moldear como si fuera una masa.

-Haru-chibi tiene una magia increíble, puede moldear lacrimas a su antojo, su hermano también podía hacer lo mismo- dijo la anciana acariciando la cabeza de la pequeña sobre la bandana, algunos mechones de cabellos azules se escaparon de la misma.

-Aquí tienes- Haruko le extendió la mano con una lacrima en forma de una rosa -Es igual que la mía, brillará cuando haya oscuridad- el Dragon slayer tomo la pequeña rosa con una mano.

-Pero yo no tengo miedo a la oscuridad- dijo el Redfox observando más detenidamente la pequeña rosa transparente.

-Entonces puedes regalárselo a esa amiga que mencionaste antes, cuando te mostré mi collar dijiste que le interesaría- Gajeel sonrío de lado por el comentario de Haruko.

-Bueno, me tengo que ir- tomó el libro y se lo guardó en el bolsillo junto a la pequeña rosa –Sabes? ahora que te veo mejor, te pareces mucho a ella…- dijo Gajeel saliendo de la tienda.

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-Te has tardado mucho, dónde estabas?- pregunto el pequeño gato que se despertó cuando el Redfox entró al cuarto.

-No tengo porque darte explicaciones a tí- dijo el Dragon slayer tirándose en la cama. Lily alzó una ceja molesto por la respuesta del come hierro.

-Buenas noches, ah... Y mañana nos vamos en tren porque tardaremos el triple si nos vamos caminando- dijo el gato acurrucándose para volver a dormir.

-Qué! No pienso ir en tren!- gritó Gajeel levantándose de la cama.

-Me da igual lo que digas, ya compré los boletos mientras tú dabas un paseíto- dijo Lily divirtiéndose por los berrinches de su compañero, parecía un niño pequeño protestando por no ir al doctor.

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-Buenos días Obaa-chan!, saldré a jugar- decía Haruko que salía corriendo de la tienda.

-Haru-chibi!- gritaron algunos niños acercándose a la niña -por favor, perdónanos- decían mientras hacían una reverencia.

-Heee?! No hagan eso!- dijo sorprendida y avergonzada Haruko -Y porque piden perdón? No hay nada que perdonar- dijo sacudiendo las manos.

-Fuimos muy malos contigo y nos burlamos de ti- dijo uno que parecía el mayor.

-Además ese monstruo del collar nos amenazó que no fuéramos malos contigo- dijo el más pequeño casi susurrando y los otros reaccionaron tapándole la boca -eso lo no teníamos que decir!- susurró otro

-Oh! Se refieren a Gajeel-kun? Dónde lo vieron?!- pregunto emocionada la peliazul.

-En la estación del tren, iba con un gato negro, que hablaba!- dijo el niño pequeño.

-Graciaaas!- gritó Haruko abrazando al más pequeño y corrió en dirección a la estación.

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-Esta me la pagarás caro- amenazó el Dragon slayer cruzando los brazos y acomodándose en una de las sillas del tren, en frente se encontraba Lily con una sonrisa maliciosa.

-Pero disfrutaré mucho de este viaje- y dio una pequeña carcajada -Nos llevará casi todo el día en el tren-

-Eres despreciable- bufó molesto el come hierro.

-Gajeel-nii!- se escuchó un grito desde fuera del tren haciendo que ambos miraran a través de la ventana -Gracias por todo!- Gajeel asintió para corresponder con un saludo a la niña. El tren empezó a moverse, Lily miro extrañado a Gajeel que se mantenía aún firme. Miró otra vez la ventana y aún podía ver a la niña agitando sus brazos, sonrió para sí y volvió a mirar a su compañero que ahora se cubría la boca con una mano.

-D.. De q_qu_e te ri_e_es?- dijo Gajeel que intentaba no vomitar.

-Mmm... De muchas cosas. Coincidencias, posiblemente. Pero me pregunto, quién será esa pequeña niña? Se parece mucho a Levy-san; y además, porque te llamó "nii"?- Lily preguntaba alegremente.

-N...no t_te in_cu...mbe- Gajeel bajó la cabeza intentando dormir, iba a ser un viaje muy largo.

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Había pasado casi medio día y faltaba poco para llegar a Magnolia. El tren se detuvo en una de las estaciones, Gajeel bajó cuanto antes para tomar un poco de aire y alejarse de ese tren (según él) "maldito".

-Mira Charle! Son Gajeel-kun y Lily!- dijo una pequeña maga con su características dos coletas

-Wendy, Charle- saludó educadamente Lily.

-Qué le pasa a Gajeel-kun?- preguntó Wendy señalando al Redfox que se encontraba sentado en el suelo apoyando su espalda contra un pilar de la estación y no se percató de la presencia de ambas.

-Es por el tren, al igual que Natsu no le sienta bien dar viajes en transportes- explicó el Exceed

-Que raro, a Natsu-kun y Gajeel-kun no se llevan bien con los transportes- dijo la pequeña maga -A mi solo me da mucho sueño ir en tren-. Wendy caminó hasta Gajeel y acercó una mano hacia el rostro del come hierro que empezó a brillar, inmediatamente el Redfox se puso de pie.

-Con esto te sentirás mejor- dijo la Dragon slayer de cielo, el mostró una sonrisa burlona y dio una pequeñas palmadas en la cabeza, ella sabía que era su forma de dar las gracias.

-El tren con destino a Magnolia parte en 5 minutos, favor abordar!- se escuchó a unos de los funcionarios gritar desde el tren.

-Debemos subir- dijo Charle caminando hacia el tren.

-Vamos niña- dijo Gajeel entrando al tren, el Redfox se molestó al ver que su gato no se sentó junto a el sino que platicaba feliz con la gata blanca, el tren empezó a moverse y Wendy cayó dormida sobre Lily.

-Wendy?! Estás bien?!- dijo el Exceed acostándola en la silla.

-No te preocupes, ella siempre se desmaya cada vez que va en un transporte- dijo Charle ayudando a Lily. El gato se fijó a su compañero, miraba despreocupado hacia la ventana, y apenas se le notaba su malestar por el movimiento del tren. La magia de Wendy sí que era sorprendente.

-Charle...- dijo el Exceed sentándose junto a ella -Que dices si te invito un té?-

-Me encantaría- contestó la pequeña gata, se sentía muy cómoda junto a el en comparación con Happy. Lily era serio, menos juguetón y no le pasaba regalando pescados.

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-Ya llegué!- dijo Haruko con una enorme sonrisa entrando a la tienda.

-Haru-chibi, dónde fuiste?- preguntó la anciana.

-Me despedí de Gajeel-nii y jugué con mis amigos en el parque- contestó la niña con una sonrisa -no sabes lo que hizo Gajeel-nii por mí!, les pidió a esos niños que siempre me molestan que no me vuelvan a tratar así y hoy jugué con ellos sin que me molesten…- la anciana estaba feliz al ver como Haruko volvía a ser la niña sonriente de antes.

-Ah... Toma, han contestado tu carta, una chica aceptó enseñarte a leer y escribir- dijo la anciana extendiendo una pequeña hoja de papel doblada.

-Kiaa... Gracias Obaa-chan!- tomó el papel y empezó a leer. -A-cep-to con gus-to en-se-ñar…te- a Haruko aún le costaba leer bien -Le_vy Mc_Ga_r_den del Gre_mio Fa_i_ry Ta_il-.

Me encanta GaLe... los amoooo *¬*

me he vuelto a inyectar inspiración y el insomnio ayudó a terminar este fic...

espero publicar pronto el próximo (si el colegio me deja un poco de tiempo T-T)

Ah... y agradezco a mi beta (es mi hermanita y por cierto su apodo es Enana... se lo puse yo y mucho antes que se publique Fairy Tail)

No olviden... Gajeel-kun se enojara si no dejan reviews X3

spoiler (para los que no leyeron el 297 del manga)

O_o PORQUÉEEEEEEEEE Mashima-sama?... PORQUÉEEEEEEEEE le hiciste eso a mi Le-chan y Gajeel-kun?

TT_TT