Hello! Habla Kari-Chan99 y aunque este no sea el proyecto del cual les estaba hablando anteriormente (es mas no es mío el fic) les traje esta simpática (si claro ^_^) historia creada por mi "hija" (tengo 13 y ella 12 es pura joda) y pues me gusta y como ella no puede subirla la subo yo ahora. Mi fic, mañana o el viernes :3
Summary: Nunca busques al amor él te encontrara a ti y antes que te des cuenta eres adicto a este, al punto que no puedes imaginarte tu vida sin él, el amor es el la fuerza para lograr las cosas pero lo que te da fuerza siempre será tu debilidad si alguien atacase a lo que más amas ante tus ojos, tu sufrirías el doble de su dolor, si tu lo lastimaste te derrumbarías por dentro y si este te lastimara tu estarías muerto en vida.
Un ser que no ame y nunca haya amado o querido ni siquiera tiene un alma"
Disclaimer: Ni digimon ni la historia me pertenece, Digimon le pertenece a Toei Animation y la historia a Miyuki, si digimon me perteneciera la tercera temporada hubiera sido de los hijos de los elegidos y si la historia me perteneciera…no la hubiera hecho (¿?) XD
Sin más que decir…
Disfruten la historia:
The Melody of my Angel
¿Quién dijo que los ángeles y la música no combinan?
Desde hace miles de años algunos ángeles bajaban a la tierra y algunos se hacían pasar por humanos para predicar la palabra de Dios y alejar a los humanos de los demonios que eran tentados con facilidad y llevados al infierno.
Los ángeles que solo eran espíritus vagaban en las noches para vigilar las calles y los que se hacían pasar por humanos eran acogidos por familias y salían en el día para velar la seguridad de los humanos, pero todos ellos alguna vez iban a los bosques para relajarse que a pesar de ser seres divinos y de la paz, también tenias presiones, Muchas más que los seres humanos, pero a su diferencia, los ángeles si sabían sonreír a pesar de ello, si sabían ver el lado positivo de todo en lo absoluto.
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Capitulo 1
Los ángeles no existen
"Quizá Dios haya enviado ángeles para ayudarnos y nosotros los ignoramos porque son un poco distintos a nosotros, tal vez los celos o porque confundimos su buena voluntad con hipocresía"
El había salido a respirar aire, estaba molesto, otra vez sus padre había preferido a su hermano más que a él, siempre era lo mismo, su hermano era puesto en un pedestal y él se volvía invisible, aunque su madre siempre le decía que él era mejor por ser mayor, para animarlo ¿y qué creen?... no surtía efecto alguno… por más que él se esforzara solo notaban a su hermano. Debía distraer su mente alejarla de los problemas y se dirigió a el parque para así mismo perderse en el pequeño bosque, el cual él llamaba su escondite secreto el siempre lo usaba cuando quería llorar nunca permitía que nadie lo viese llorar, ni su propia madre, no sería capaz de mostrar su debilidad ante nadie ni a mucho menos su familia. Y allí estaba llorando por frustración… demasiada para un pequeño niño de apenas 12 años de edad.
¿Qué es eso? – se pregunto para sí mismo el pequeño rubio intrigado por lo que sus ojos veían, había visto una luz provenir de más adentro del el bosque una luz… cálida y hasta era… celestial, siguió dicha luz y vio algo que lo dejo anonado la luz provenía de una niña, una muy pequeña de más o menos unos 4 años, la pequeña llevaba un simple pero hermoso vestido blanco y estaba sentada abrazando sus piernas y su cara enterrada entre estas, sobre un lago como si este fuere solido, tenía un color castaño de cabello, pero lo que más le llamo la atención fue la enorme ala blanca que brotaba de su espalda – un ángel – susurro el pequeño rubio y chiquilla levanto la cara y lo miro a los ojos, los ojos de la pequeña eran de un hermoso color cafe.
¿Por qué llorabas Takeru-kun? – le pregunto la chiquilla aun mirándolo a los ojos.
Yo no estaba llorando, ¡HMP! – Se hizo el fuerte y miro hacia otro lado, ella soltó una risilla – y ¿Cómo es que sabes mi nombre? ¿Quién eres? – la pequeña peli-marrón le sonrió ampliamente
Mi nombre es Hikari – esta se levanto del el agua camino así él… era como dos cabezas más pequeña que él, sin contar las alas, por su puesto.
Eres un… ¿un ángel?
¡Takeru despierta ya es medio día! – lo llamo su amigo castaño mientras lo zarandeaba, el castaño estaba vestido cómodamente, llevaba puesta una franela naranja con una chaqueta negra por encima y un Blue Jean obscuro junto a unos tenis negros con naranja.
Suéltame– lo empujo y se volvió a recostar – ¡es tu culpa que no haya dormido nada! Así que si me disculpas puedes irte – reclamo enojado, lo que él decía era cierto, a Daisuke se le había ocurrido la "grandiosa" idea de hacer una fiesta después de llegar todos agotados de la gira que habían hecho y para colmo la fiesta había durado hasta la madrugada.
Siento haberte despertado de tu magnifico sueño de belleza – le respondió con burla e ironía rodando los ojos, Takeru lo miro con desprecio, lo hacía trasnocharse y cuando consigue el sueño no lo deja dormir y de paso se burla de él, si Daisuke seguía así definitivamente ese no sería su día.
¡Vete! – ordeno entre dientes enojado por su amigo que siempre los fastidiaba, hasta que el castaño terminase en el hospital por uno de los intentos de homicidio en su contra.
¡Está bien… está bien! Me iré... luego de que deje de aburrirme– Era obvio que el castaño lo hacía para molestarlo, claro un Daisuke aburrido significa un Takeru molesto y un Takeru molesto significa gran gasto por hospital.
Si no te vas ahora mismo, te aburrirás en el infierno – Declaro con una voz realmente amenazante, lo que intimido al pobre castaño que antes que dijera otra cosa ya se había ido corriendo de la habitación. Resignado se levanto de la cama y fue a tomar una buena ducha de agua caliente. Luego de su relajante ducha se dirigió a la cocina y "raramente" su amigo estaba comiendo unos fideos instantáneo.
Takeru, ¿tú que comerás? – curioseo su amigo castaño mientras se metía un bocado de sus fideos de puerco a la boca, el rubio suspiro con cansancio.
No tengo hambre… ¿Koushiro y Taichi? – pegunto con su tono de indiferencia total y su inquebrantable semblante serio y sereno, Takeru estaba vestido con uno Jean negro de tubo, y un polero azul obscuro, junto unos converse de Blue Jean obscuros.
No sé, cuando desperté ellos no estaba, de seguro salieron – respondió sin interés alguno del tema.
Daré una vuelta – aviso y agarro las llaves del apartamento en lo que sonó el teléfono. Takeru suspiro con resignación y agarro el teléfono.
¿Quién habla?... – contesto Takeru con su ya típico tono de indiferencia, él escucho atentamente lo que le decía la persona del otro lado de la línea y solo respondió con un "Aja" de mala gana y tapo el auricular –Daisuke es tu madre quiere hablar contigo – el castaño dejo inmediatamente su desayuno/almuerzo y agarro el teléfono, el rubio por curiosidad (una que nunca admitiría) espero a que su energético amigo terminara su conversación con su madre la cual a él solo respondió un "aja" un "¿enserio?" y algo que le hiso reír para sus adentros un "si mamá" que lo hiso sonar como niño de 10 para luego colgar – ¿Qué quería tu madre? – pregunto divertido, lo cual hiso suspirar con fastidio al castaño
Pues… ¡tengo una nueva hermanita! – imito el tono de su madre, Takeru enarco una ceja
¿Tu madre estaba- – pero no pudo terminar ya que el castaño le respondió con un "¡No!" deduciendo lo que él iba a decir
Tiene 9 años, mi madre la adopto esta mañana – completo aburrido
Entonces ¿para qué querría tu madre adoptar? Además, ¿qué te pasa? Deberías estar feliz ¿no? O ¿estás celoso porque tus padres se ocuparan más de ella que de ti? – expreso irónico el rubio
No lo sé, tal vez… la soledad y no es eso, lo que pasa es que mis padres quieren que vaya a verla… dicen que es un angelito… lo que significa que de seguro será una de esas niñas que son muy inteligentes y que son inocentes pero con sus hermanos son el vivo demonio– conto con horror exagerado
Idiota – Murmuro y rodo los ojos – no seas paranoico puede que no sea un "angelito" como dicen tus padre pero no puede ser tan mala
Tú me acompañaras – propuso o más bien declaro y se lo llevo prácticamente a rastras hasta la casa de sus padres.
Takeru suspiro resignado, estaba enfrente de la casa de los padres de Daisuke ¿Cómo había llegado tan lejos? Además que la curiosidad también lo mataba aunque no lo desmostarse. Daisuke toco el timbre y los recibió Kaori, la madre de Daisuke con una gran sonrisa pintada en la cara.
Takeru-kun cuanto has crecido, la última vez que te vi- – alguien atrás de las señora Motomiya carraspeo, Takeru le agradeció internamente, no quería oír ese discurso que daba cada vez que lo veía aunque hubieran sido 5 segundos de la última vez que lo había visto
Cariño, ¿no será mejor que los dejes pasar? – propuso amablemente el padre de Daisuke, Motomiya Hikaru, Pasaron dentro de la casa con dirección a la sala
Takeru ¿y si es malvada? – pregunto nuevamente con aires de preocupación, por enésima vez mientras entraban a la sala
No seas idiota, tiene 9 años no puede ser malvada… además tu madre dijo que es un angelito – dijo tratando de animar a su amigo –aunque los ángeles no existan– susurro para sí mismo
Los ángeles si existen – dijo una voz dulce y cálida proveniente de lo que parecía ser una niña atrás de él haciendo que un escalofrió bajara por su cabeza hasta su columna vertebral ¿Cuando había aparecido?, girando todos la cabeza por acto reflejo hacia la dueña de la voz. Takeru quedo pasmado a lo que sus ojos veían haciendo que el recuerdo de lo que él pensó que era un sueño, volviese, esa niña era idéntica a aquel ángel, su cabello castaño y las dos piedras preciosas que tenía en los ojos, era el mismo pequeño ángel que hacía 6 años se había encontrado en el parque, aquella pequeña niña que aunque fuera solo un poco le había conseguido subir el ánimo, aquella pequeña niña que solo con el estar allí parada le hacía sentirse honrado de estar en presencia de un ángel, Takeru estaba totalmente ajeno a su alrededor, estaba en un mundo totalmente distinto a los demás, uno donde solo estaban él y ella, sonrió, ese pensamiento le hacía feliz, le hacía feliz el solo pensar que lo del bosque no había sido solo un buen sueño, todos miraban atónitos a Takeru ¿Por qué rayos estaba sonriendo? No una sonrisa cualquiera, era una que llevaba consigo ternura, felicidad y ¿nostalgia?
¿Y a este que le pasa?– se preguntaba internamente el castaño tonto, su amigo miraba esa niña como si pudiera ve el paraíso en su cara… como si… la hubiese extrañado, este suspiro resignado y decidió sacarlo del el transe que este llevaba – Takeru ¿te encuentras bien? – pegunto preocupado ya que el sonriendo era algo "paranormal"… el estaba agitando su mano de arriba a abajo delante de la vista del rubio que parecía estar en su propio mundo mientras miraba a la niña, y gracias a la acción de su amigo volvió a la tierra borrando todo rastro de la expresión de hacia unos segundo, volviendo a su rostro indiferente de siempre.
¡Hmp! – musito su monosílabo favorito y se sentó en un sillón doble de la sala, su "mejor amigo" se sentó a su lado, los padres de Daisuke presentaron a su nueva hermanita la cual se llamaba Hikari, lo cual al ver sus pintas no resultaba ser tan sorprendente, Y la cual resulto se adorable para Daisuke, Por otro lado el Joven Ishida no podía evitar mirarla discretamente de vez en cuando que al parecer ella no notaba, paso un tiempo y Takeru se comenzó a arrepentir de no haber almorzado cuando tuvo la oportunidad, le estaba comenzando a dar hambre.
Takeru se levanto de su puesto había estado en ese sillón una hora y media, los padres de Daisuke habían salido y les habían pedido que cuidaran de Hikari en su ausencia, había un silencio funerario en la sala
Daisuke, yo tengo que ir por lo de el nuevo álbum que nos menciono Kido, así que me voy – mintió deliberadamente él se iba porque tenía hambre, ya que lo del álbum era para el día siguiente, aunque fue una mentira muy convencible, o a lo menos para Daisuke el cual solo asintió, Hikari lo miraba fijamente, como examinándolo
Mientes – Al menor de los Ishida le volvió a recorrer el mismo escalofrío ¿Cómo rayos ella pudo saberlo? Esa niña lo estaba leyendo como una historia en un papel, ella sonrió ampliamente como lo hiso en el lago – cuando mientas yo lo sabré, Takeru-kun – declaro la peli-marrón a Takeru no le gusto esa idea y otro escalofrió recorrió su espalda mientras tanto Daisuke tenía la palabra confusión tatuada en toda la cara y lo único que le cruzo la mente fue…
¿Se conocen? – pregunto el castaño más que confundido, los dos callaron y hubo un breve momento de silencio.
No – negó indiferente el joven Ishida rompiendo el silencio y trato de salir de la casa, pero no llego ni a salir de la sala porque una pequeña lo agarro de la camisa.
Perdón Takeru-kun no fue mi intención molestarte, de seguro debes tener hambre si me dejas pue- – ofrecía amablemente la pequeña, con una sonrisa tierna, pero alguien la interrumpió
No necesito tu hospitalidad, ni mucho menos tú comida – dijo fríamente, se soltó bruscamente de su agarre y salió de la sala luego de un rato se oyó un portazo, se había ido, la pequeña derramo un par de lagrimas, aunque resultara una ridiculez para unos para un ángel que vivió en la paz y el amor casi 1000 años solo eso era muy cruel.
Hikari-chan perdónalo, el es así… el es un insensible… es un tonto – La pequeña rio por la expresión que había puesto el castaño – no llores, te vez más linda cuando ríes, así que no dejes que un insensible, orgulloso te quite tu hermosa sonrisa – la animaba sonriente el castaño, la pequeña se contagio se su sonrisa y sonrió
¡Gracias Onii-chan! – Hikari lo abrazo y el rubio le correspondió el abrazo.
¿Para qué son los hermanos?... –
Suspiro con fastidio por enésima vez como un ángel conseguía sacarlo tan fácil de sus casillas, Daisuke era un Demonio y a él le costaba bastante (a excepción cuando ya estaba molesto de por sí con otra cosa), le molestaba el hecho que una niña de apenas 9 años supiera cuando miente y si ella estuviera cerca cuando dice unas mentira piadosa para salvar su pellejo, de seguro frustraría sus planes y se volvería el hazmerreir de todos, él vivía de la mentira y si ella anda revelando sus mentiras su vida se tornaría una burla, maldecía para sus adentros aun tenía que saber si lo del parque había sido un sueño y el parecido de la niña solo haya sido mera coincidencia, Pero, un sentimiento era latente en su corazón… algo que no sentía así por mucho tiempo… culpa, culpa por haberle gritado aquello ella no se merecía eso ¿o sí?
Ya habías pasado una semana y ya habían terminado las vacaciones de invierno y seguirían el último curso al día siguiente y no había señal de Koushiro, Taichi o Daisuke, se los había tragado la tierra tal vez, es que ni siquiera se le había ocurrido, dejar una nota, llamar o a lo menos decir que habían tomado vacaciones para Hawái sin él. Cobardes
Se encontraba con dirección al parque de su infancia, el compartía su apartamento con sus 3 amigos que habían sido secuestrados por idiotas que aun no llamaban por la recompensa. De seguro Daisuke estaba en casa de sus padre pasando "tiempo de calidad" con su querida hermanita y aunque él no lo admitiese ni que su vida dependiese de ello, el también quería verla… Pero, el pobre chico con mal karma por enviar al hospital tantas veces a su mejor amigo, necesitaba relajarse, con la desaparición de sus compañeros había tenido bastante trabajo con la disquera por el nuevo álbum, e allí otra razón por la cual escapar, una de dos o no querían hacerse cargo o escaparon al ya saber de sobra el humor de él cuando están esas presiones, en pocas palabras… Un desalmado demonio, pero él no quería pensar en eso ya tenía suficiente con vivir con ellos y su desorden, aunque no era tan mala idea una semana solo para él, cuando llegasen les obligaría a limpiar toda a casa por desaparecer y dejarlo con todo el trabajo, sonrió ante el pensamiento ya se encontraba adentrándose al pequeño bosque deduciendo que más adelante estaría el lago, claro que si hubiese sido un sueño el lago no estaría allí, ya que no le había dado tiempo a comprobar cuando lo enviaron a estudiar en el extranjero, Gran parte de su ser deseaba que ese lago estuviese allí, ya que eso comprobaría que no estaba loco y conocer a un Ángel sería fantástico, pero la otra no, no quería estar involucrado con un ser divino, con todos sus pecados él se sentiría incomodo.
Se acercaba mas al lugar donde había visto a su ángel, quedo extrañado y sorprendido por el retrato que veían sus ojos era algo sacado de una película de terror, todo árbol cerca del lago estaba seco y lo que se supone que era un lago ahora era un cráter gigante, no había explicación lógica posible de que un lago se secase en 5 años y medio a menos que le hubiera caído un meteorito allí o una bomba nuclear aunque tampoco era muy probable, eso era imposible, el lago estaba allí o a lo menos sus restos pero no podía decir que hace 5 años y medio tenia agua, fauna y flora.
Sorprendente ¿no crees? – escucho decir con seriedad, esa voz que había escuchado muy poco pero conocía a la perfección el giro la cabeza, petrificado, ¿Cómo es que aparecía de la nada?
¿Q-qué haces aquí? – No pudo evitar tartamudear esa niña le comenzaba a dar miedo, a pesar de ser adorable y pensar que podía ser un ángel
Takeru-kun ¿crees en los ángeles? – pregunto seria, así que los ángeles tenían también los métodos de policía bueno y policía malo ¿curioso no?
No, y no tengo razones porque creer, la magia no existe – respondió serio, seguro y un poco burlón.
No somos seres mágicos, la magia no existe, somos seres divinos, seres de la alquimia – respondió automática como si fuese un robot – podemos multiplicar y trasformar materias, predecir eventos, leer el aura y revivir seres, no aparecemos un conejo de un sombrero – era buena Takeru comenzaba a creérsela pero aun no estaba convencido.
Ja, ¿Sabes?, serias una buena actriz – respondió burlón, aunque la verdad seguía con la duda.
Ver para creer ¿no? – Respondió posando su mirada al suelo – tu lo has pedido – susurro lo que él no pudo escuchar y sonrió terroríficamente ¿enserió? ¿Un ángel? Tal vez lo que Daisuke decía no era del todo mentira tal vez no era con su hermano si no con el mejor amigo de este
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Mikuki: Gracias x leer, no sean duros y espero que les guste ^o^