Siiii Mpreg lo amo, este es el fin; vean el video esta genial y si es ¡un rubio!
Agradeciendo a Makyone por su review.
4. Míralos enamorados
Al otro día y con el Maou de su mano, el rubio Honey chan se despedía de sus publico y admiradores, el pueblo no se asombro de que Honey chan conociera al mismísimo Monarca, para no molestar mas a esa buena gente los tres faltantes del grupo los aguardaba a las afueras con los caballos listos.
Al llegar la pareja real Yuuri se paro frente a su rubio con actitud protectora. Gwendal camino y con fuerza separo al rey pero al llegar a su hermano lo tomo en brazos y lo apretó con cariño ¡ berrinchudo y desobediente! y ahora ¡bailarín exótico!... Wólfram siempre seria su hermanito, Conrad empujado por su prometido se unió y Wólfram extendió sus brazos en muda invitación.
Con la certeza de un prometedor futuro, los mazokus iniciaron su camino de vuelta a pacto de sangre. Al llegar Gunter y Adolph los recibieron con gritos de jubilo, Wólfram conoció a su primer sobrino y Yuuri tuvo razón, lo quiso mucho desde ese momento.
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Los meses siguieron y cuatro exactos después de su regreso; la boda real se llevo a cabo, solo una semana mas tarde, la segunda la del León de Ruttenberg y su Espía de cabello naranja; ambas coordinadas por todas la mujeres -incluida Greta- del castillo y por supuesto a la cabeza Cecile.
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Adolph dormía tranquilamente sobre esa persona, acomodado sobre el vientre que albergaba a su primo o prima, ahora el pecho y estomago de su tío Wólfram era su lugar favorito para tomar la siesta, al quedarse dormido Gunter lo tomaba en brazos para que siguiera durmiendo, no es que el bebé molestara al rubio; es que tenían que ser cuidadosos, con el peso extra de Adolph sobre el heredero real. Yuuri entro cuando Gunter salía vio a su hermoso rubio dormido, se acerco y se reclino, beso el vientre de su esposo; cuatro meses no era mucho y sin embargo Wólfram estaba … muy llenito, Gisela aseguraba que era normal y por fin en una semana podrían saber que era su hijo, el rubio se removió y abrió sus ojitos, el moreno lo vio con esa carita de sueño ¿quien diría que su esposo fuera un experto bailándole sensualmente para despertar sus pasión?, lo beso con ternura; para el Maou no había mas felicidad que esa y su madre aseguraba que al tener a su hijo en brazos se duplicaría, se pregunto preocupado ¿seria capaza de aguantar tanta felicidad?, esperaba que si. A pesar de sus cuñados que lo tuvieron reclamándole, todo un dia por embarazar a Wólfram antes de la boda, el como buen Rey recibió la regañina, pero su venganza fue ¡peor! Sus cuñados aseguraban que solo aun adolecente hormonado haría algo así… Digamos que Yozak y Gunter como buenos súbditos, ayudaron a su Rey, esa noche en pacto de sangre el compas de una canción se oía en dos habitaciones y ninguna era la de Yuuri y Wólfram…
La revancha corre en la sangre Mazoku, y el soukoku lo supo cuando una antiquísima ley fue convocada por un sonrojado Gwendal -los gritos y gemidos, de ambos hermanos del príncipe mazoku, se oyeron hasta las caballerizas-. Esta ley aseguraba que una semana de castidad antes de la boda era necesaria para la purificación del matrimonio, y con una cara de signos de interrogación recibió la noticia el Rey demonio, en esos días se veía una situación muy cómica –para los que no la Vivian- Yuuri hablaba desde debajo de un balcón a ¡¿una mano enguantada? Lo único que Wólfram le era permitido mostrar a su futuro esposo, afortunadamente su rubio inteligente se le ocurrió apelar a Shinou y así el rey original puso paz entres los hermanos del rubio y Yuuri…
Wólfram lo beso regresándolo de los recuerdos.
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En una de las habitaciones, Yozak era penetrado con sumo cuidado por su esposo, su vientre de casi seis meses era la razón por que Conrad se excedía en atenciones, aun así el de ojos azules aun disfrutaba plenamente de los encuentro sexuales con su pareja y que decir de este, que aunado a la felicidad de amar y ser amado, seria padre en poco tiempo, el clímax llego al pasivo y el castaño lo siguió poco después, las sonrisa picara junto con los brazos de Yozak recibieron a Conrad, se recostó a lado de su esposo y lo atrajo tan cerca como lo permitía el estomago del espía, después de todo Yozak era delgado*.
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Cuatro años después Adolph tomaba de la mano a Imre –un pelinegro de ojos verdes- mientras trataba de quitarle a Manfred -el gemelo de este- la flor que se comía, el de cabello gris se estaba desesperando pues Manfred, no soltaba -lo que consideraba una suculenta golosina-, Mientras Adolph forcejeaba con el niño. Imre se jaloneaba para agarrar su oso de arena -regalo de su tío Gwendal-, que se había caído cuando su primo lo levanto, el pequeño von Voltaire rogaba por ayuda de Shinou, mala la hora en que se le ocurrió decir que ellos no necesitaban niñera y se ofreció para ser el cuidador ; vio llegar a Blaz quien se acerco a sus primos y tomo a Imre y a Gun gun -nombre del oso- llevándolos con el, Adolph suspiro aliviado y por fin le quito la flor a Manfred… ¿y sus padres y tíos contaban con esos dos como herederos al trono?, el lo dudaba, sobre toda por que seguramente le tocaría ser consejero y a Blaz su guardaespaldas… No importaba se dijo feliz, amaba a todos sus primos, a Blaz por ser su apoyo a pesar que algunas veces desaparecía, junto con su papi el tío Yozak -claro que por poco tiempo- pues si no, su tío Conrad salía tras ellos para traerlos de regreso, y quería mucho también a esos gemelos despistados y de mal genio, y no por que fueran los príncipes; si no por que eran sus primos mas pequeños y sabia que esos enanos lo seguían como pollitos a su mama, su tío Yuuri decía que era por que se sentían seguros en su compañía, cuando Wólfram y él no estaban. No sabia la razón, solo entendía que se amaban unos a otros y eso era lo importante. Esperaba que sus tíos trajeran otro bebé; hacia falta un rubio entre ellos, Imre y Manfred eran pelinegros, Blaz castaño y él de cabello gris, solo faltaba el rubio y así serian… El rubio y los demonios.
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Los padres de todos esos pequeños los vigilaban escondidos detrás de unos arboles, la guardia real, también los seguía a distancia segura, no debían ofender la sensibilidad de Adolph, Gwendal casi corrió cuando vio a su bebé a punto de llorar de frustración, pero Gunter y Yozak lo detuvieron mostrándole que con pasos lentos pero firmes Blaz se acercaba para ayudar a su primo el mayor, Yuuri se comía las uñas viendo que su Manfred tenia unos raros gustos alimenticios y Wólfram solo negaba con la cabeza, culpándolo por que sus hijos heredaran su despistes, Conrad sonreía tranquilo, eran niños ¡que esperaban! Además esos gemelos eran la consecuencia del baile de un rubio para un demonio o ¿no?
Fin
*Lo vi en las ovas cuando en el baño se encuentran a Saralegui y guau esta buenísimo
Blaz protector constante
Imre gran rey
Manfred hombre de la paz