Entonces con el valor que había reunido, esperó, dejó de lado su disfraz y tomó asiento. Con desazón abrió el periódico que se encontraba sobre la mesa, sabía que Watson no tardaría mucho más en regresar. Sintió como el perro se acostó a un lado del sofá, si, ahora eran dos esperando por el doctor. Uno con más posibilidades de salir ileso del encuentro que el otro, pero ambos esperando… y cuando unas pisadas se escucharon sobre el piso de madera del pasillo, el detective tomo aire. "Esto no será fácil" Fue su ultimo pensamiento antes de que la puerta fuera abierta.

"Mi querido Watson"- Saludó con una gran y temblorosa sonrisa. Miedo, ese sentimiento que no podemos controlar y que ha acompañado a la humanidad desde su origen, entró en su cuerpo de manera tan rápida que prácticamente se adueñó de su cuerpo. Por más que analizara la situación desde diferentes puntos de vista no estaba completamente seguro de como reaccionaria John hacia su resurrección.

"Idiota"- Mascullo el doctor antes de impactar su puño contra la mejilla del otro. Coraje, todo el cuerpo de Watson hervía de furia y lo único que quería era estrellar su puño repetidamente sobre el rostro ajeno. Con un gruñido se apartó, por lo menos trataría de ser civilizado.

"Ouch"- Llevó su mano hacia la zona afectada, si, dolía… Y seguramente también dolería mañana. Se levantó del sofá y sus ojos entraron en contacto con los de Watson. Arrepentimiento, ese nudo en la garganta refreno el comentario sarcástico que estaba por expresar. Cuando vio los ojos lacrimosos de John, supo que tal vez no solo su mejilla saldría lastimada de este reencuentro. Porque ese peso en el pecho no era algo cotidiano.

"¿Tienes idea…? ¡No, seguramente no la tienes! ¡Te tiraste por la cascada, organice tu funeral, te creí muerto! ¡Muerto! ¡Y tú solo estabas jugando como siempre! ¡Pero esta vez es la ult…!"– Vergüenza, en el rostro de ambos una sombra carmín se hizo presente. Solo había sido un ligero roce de labios sin embargo Sherlock repetiría hasta el cansancio que solo quería callarlo, y Watson juraría que no lo vio venir y por eso no pudo evitarlo.

"Bien, ahora que hay silencio explicare como esta aventura no termino con mi cuerpo hecho pedazos o congelado"- Alegría, llana y simple alegría de poder tener una charla como las de antaño- "Pero primero, tenemos que omitir los detalles que son irrelevantes."

"¿A sí? ¿Cómo cuáles?"- Como el detalle que estando en el agua casi al punto de congelarse lo único que le dio las fuerza para bracear y salir de ahí fue que tenía que volver para dejar en claro porque de todas las personas le había elegido a él. Lo que le hacía único. Lo que hacía que entre tantos otros candidatos hubiera optado por el retirado doctor de guerra. Lo que hacía que cualquier otra compañía fuera irrelevante.

"Bueno, eso es elemental, mi querido Watson."


Primero quiero disculparme por tardar tanto en publicar, pero si, llegamos al final de este cortó camino. También quiero agradecer a todas las personas que leyeron esta historia: A las que decidieron seguirla, a los que la guardaron en sus favoritos, los que la comentaron y a los que nunca comentaron y probablemente nunca lo harán. Gracias por tomarse la molestia de darle un "click" al título. Estoy trabajando en un crossover entre Sherlock de la BBC y El Hobbit, además otra historia de Sherlock Holmes, así que este no es un adiós. Espero volver a publicar algo antes del 15 de Enero. Nuevamente muchas gracias por llegar hasta aquí.