Soy una caradura ¿no?, desapareciendo y apareciendo sin más de la nada xD

PERO MEJOR TARDE QUE NUNCA! JAJAJA

Wi, quise demostrar que no me olvide de esta historia, este cap esta recién salidito del horno :O

Y espero lo disfruten! Aunque por el bien de mi partido rostro, ya no prometeré regularidad x)
Sigan atentos… queda poco; y no planeo dejarlos sin el final de esta "apasionante historia" 8o

Deliraba la pobre chica…

Os dejo con el capítulo… ya no recuerdo cuanto jajajja

Titulado:

Cupido 2.0


Vaya sensación más interesante. Recientemente había abierto los ojos y además de que no reconocía el cielorraso que tan fervientemente analizaba le encantaba como éste se inclinaba, se acercaba y alejaba.

No estaba nada bien que se muevan las paredes; y no era para nada bueno no saber donde estaba. La cabeza le estallaba. Y sentía un fuerte dolor punzante en la parte izquierda de su mandíbula. Recordaba si ayer haber ido al cumpleaños de un amigo. Y que no estaba en su mejor estado anímico… pero una hermosa laguna blanca aparecía en su mente cuando intentaba avanzar más en el cuentito de su noche. Y le hacía doler la cabeza.

Tenía que moverse, averiguar dónde estaba. Se incorporo no sin antes golpearse la cabeza contra la esquina de una mesa de luz.

-Joder.- Dolor de cabeza por dos…

Con miedo fue recorriendo tambaleante la habitación. Dándose con todo lo que hubiera en el camino. Si bien el no sabía en casa de quién estaría, su anfitrión ya no tendría dudas de que se despertó.

Cuando abría lentamente la puerta casi se fue de bruces al suelo cuando desde afuera la tiraron y en su oído hicieron sonar una vuvuzela.

-¡LA P*** MADRE QUE LOS PARIO! ¡KANDA FUCKING BASTARDO!

Aaaaaaaaaaagh todo le daba vueltas.

-¿Por qué carajo hiciste esto?

-Por lo de ayer.

Silencio incómodo. Así que estaba en lo de Kanda… hace tanto no iba a esa casa. Quiso avanzar pero casi se come una pared por lo que increíblemente su amigo le tomo del cuello y lo fue empujando en dirección a la cocina.

-¿Qué hora es?

-3 pm.

-Mierda, debería hablar con la jef-

-Ya lo hice.

- Espera a que procese que estoy lento… Ahora sí, ¿Por qué te molestaste?

-Pfff, ella llamo. Creo que se alarmo después de que desaparecieras no se ya cuantas horas.

-Auch. No quiero irme…

-Oh, yo sí.

-¿Qué hago en tu casa?

-Era esto o el piso vomitado de Alma. Los otros ya no estaban.

-Ah…

-¿Me pelee con alguien? Tengo la mandíbula destrozada.- A estas alturas ya estaba por tomar café y notaba su boca lastimada.

-No, solo te pegue una piña.

-¿Eh? ¿¡Por qué?

-A tu pedido.

-Qué carajo, explícate.

-Solo viniste y me pediste que te golpeara. Habías hecho algo estúpido según tu.

-Y no te hiciste rogar, ¿No?

Una sonrisa socarrona se dibujo en su rostro- ¿Nee, ¿Para qué?

-Sin duda sos un amigo ejemplar… único.

-¿Qué había hecho?

-Te iba a preguntar lo mismo. Te traje para que te expliques (Y porque te desmayaste luego de que te golpeara por lo que me encajaron el bulto).

-We, no recuerdo nada…-Rió preocupado.

Intentó recapitular. Empezaba a recordar lentamente cosas. Ya memoraba su intento asesino de emborracharse con todas las letras, su beso con la ex compañera de curso. Todo eso suponía demasiado dolor de cabeza. Y Kanda lo interrogaba acusadoramente con la mirada.

-¿Tiene algo que ver… con que Lenalee se fuera llorando?-. Soltó muy serio tras un rato.

Se quedaron mirando unos eternos segundos.

La mirada de Kanda se helo mientras que la de Lavi se tornaba culposa.

-¿QUÉ PASO?- Apenas alcanzó a preguntar antes de que su amigo con parche golpeara la mesa y buscara entre su ropa arrugada de ayer su celular.

Ignorando la inquisición asesina llamo a la china.

Escucho el tono, el celular llamando, que sonaba, una, dos, tres, veces… más. Hasta que saltaba la contestadora.

-Por favor, no.- Se decía en voz baja.

Repitió la maniobra reiteradas veces, y nunca contestaban.

-Lenalee, no me hagas esto.- Era una chica que no dejaba nunca su celular. Aunque no lo usara tanto. Si no le atendía era adrede.

Desistió luego de sentir una mano haciendo presión en su hombro.

Era Kanda furioso.

-Ahora sí, explícate.- Le volvería a golpear.

Convenía ser breve y conciso.

-Sabe que me gusta… la besé.- Lo escrutaron con la mirada, escéptico.

-¡Serás idiota!

-Ya se.

-Sabes que para ella eres solo su amigo.

-Si, ya se.

-Y que además le gusta Allen

-SI, YA SE.

-¡RETRASADO!

-¡BUENO EH!

-Te pagan.- Dijo ya más tranquilo.

-Sí, ya se…

-¿Qué vas a hacer?

-Arreglar las cosas. Tenemos que hablar-Dijo juntando sus pertenencias para irse.

-No lo arruines.

-Créeme, no me permitiré hacerlo- Dijo, intentando salir por la puerta pero chocándose con el marco.

-Mejor báñate, toma agua, y te presto algo para cambiarte mientras se te va el pedo que agarraste.

-Gracias.

-Y te llevo. O te van a chocar.

-Sos un buen amigo.

-Cállate. No lo hago por vos.

-Mentira, no solo por mí, en todo caso.


Lo había acercado en auto hasta lo de Lenalee.

-Te espero.

-No se cuanto tiempo voy a estar.

-Ya se.

-Ok, gracias.- Dijo encaminándose ya.

Había intentado buscar las palabras adecuadas para confrontar la situación. Sabía lo que buscaba. Pero le resultaba imposible prever la conversación. Resignado a enfrentarse con lo que venga toco el timbre.

Abrió Komui. Menos mal que fue él. Por un momento se le fue la respiración, tenía miedo de enfrentarla. De verla triste. Llorosa… Agradecía no haberla visto llorar ayer… no, esa madrugada.

-Lavi, ¿Qué te paso en la cara?

-¿Eh? ¡Ah! Mi mejilla, pues… Kanda. ¿Chico dulce no?

-Un encanto. Pasá, ya llamo a Lena. Se despertó temprano hoy. Parece que no llego muy tarde ayer.

-Eh, si…-Murmuro sabiéndose culpable.


La china tardo un poco en ir a verlo. Al llegar noto fácilmente ojeras bajo sus ojos. Le sonrió amable, saludándolo. Pero mantuvo distancia.

-Eh Lavi, ¿Qué te paso en la cara?

Dios, ¿Por qué todos le preguntaban lo mismo? Le alarmaba cada vez más el golpe que le dio su violento amigo.

-Nada importante, solo; creo que rete al espadachín o algo así.

Se rio un poco.

-Te estuve llamando, yo…

-A, si. Perdón, no andaba con el celular. Interrumpió nerviosa.

-Eh…lo pensé.- Mentía.

-Escucha-tomo valor.- Haz como que nada paso.

Titubeaba. Noto que iba a replicarle pero no le dejo.

-Tu intuías, creo; que me gustabas. Pero por algo nunca me había insinuado, ni nada. Sé que no me quieres así.

-Eso no es cierto, yo- No la dejo terminar.

-No mientas, enserio, no lo hagas. No tienes por qué sentir pena. – La leía como un libro, y por eso no iba a permitir que haga cosas por lástima.- Disfruto estar contigo y no necesito ser más que tu amigo para hacerlo. Y tú no quieres que sea más.

-¡No hables por mi!- Respondió finalmente más segura. Desconcertándolo.- No sabes lo que quiero.

-En realidad, si.

-Tal vez, podríamos salir.

-Tu "tal vez" confirma lo que pienso-

-¿Qué cosa?

-Que buscas como no lastimarme.

-No es eso.

-Niegalo. Niega que no tratas de evitarme más dolor a costa del tuyo y que me no me quieres más que a Allen. ¿Ves?, no lo haces.- La había dejado muda.

Más relajado se acerco y le acarició el rostro.

Llego a tropezones al punto que quería. Y ya no lidiaba con la peligrosa y tentadora alternativa de que Lenalee le propusiera estar juntos, aunque no lo quisiera.

-Perdón.

-No tienes de que disculparte.

-¿Cuando te diste cuenta de que… ya sabes, me gusta?

-Hace mucho lo sé. Es obvio en ambos.

-¿"Ambos"?- Interrogó su amiga.

-Dios.-Rio- Son igual de lelos. A ese enano también le gustas.

Un escalofrió la recorrió. El chico sonrió con ternura.

-¿Enserio?

-Siiii. JAJAJA.- Rió abrazándola, envolviéndola. Sin ver su rostro confundido. Desde allí le hablo bajito y tranquilamente.

-Escucha atentamente. Quiero verte feliz, alegre. Verte bien me ayuda. No te entristezcas por lo que siento, con los problemas que tengo los asuntos del corazón son lo de menos–bromeo provocando leves risas.- Yo te ayudare con el moyashi. Tu haz como que nada paso. En cambio vas a seguir como siempre, rozagante y despreocupada. Ya me encargare como viejo amigo de poner en banda a todo aquel que quiera alterar eso. Empezando por mi entre todos los idiotas que te rodeamos… con tu hermano eso si; ya no hay nada que hacer.-Cambió de tema. Aunque alcanzo a percibir un leve movimiento de cabeza afirmativo.


Siguieron un rato más juntos, hasta que la noto tranquila y se fue.

Sintió pena por Kanda al salir y notarlo aun afuera. Antes de enfrentarse con su seguro mal humor quiso avanzar con su compromiso.

Saco su celular. Joya del siglo XXI, que útil le resultaba esa cosa… y llamo a Allen.

Por los ruidos que escucho estaba masticando.

Qué raro, su amigo comiendo… de estar en un dibujito ya una gotita resbalaría por su frente.

-Conejo, ¿Cómo estás? Hermosa borrachera tenías ayer.

-Magullado, pero de pie por mi solito así que mejor.

-¿Qué pasa, por qué llamas?

-Me alegra que preguntes. Tengo un ultimátum para ti.

-Mh.- nuevamente la boca llena, ¿Qué comería? No, no debía distraerse…

-Presta atención y no te atragantes. Lento, confirmé de buena fuente que le gustas a Lenalee. ¿Cuándo vas a atacar tigre de bengala?

A continuación se escucho el ruido más raro de la historia que podría haber sido registrado por un móvil. Mezcla de ruidos guturales de sorpresa, confusión, risa y atragantación. Ahora tos.

-¿Tigre de Bengala? Todo por qué soy albino jajaja.

-Me alegra que no pidas explicaciones ante mi recomendación.

-Como que ya creo sabías.

-Muy perspicaz. Entonces, una recomendación enano.

-Escucho atentamente.

-No pierdas el tiempo. O te la van a robar. Y por sobre todo no la lastimes.

-De acuerdo. Aunque no hacía falta que lo digas.

-Mira, pasar por mi supervisión es comparable a pasar por la de Komui, y por mi ira es tal vez peor. Así que no lo olvides.

-De acuerdo. Gracias Lavi… ella te valora mucho.

-Y yo más a ella, tenlo presente.

-Adiós Conejo.

-Bye Bye.

Tut.

Rogaba que sea, asunto zanjado. Con suerte en uso días ya debería pasar algo entre ese par de inocentes. Sentía que se había sacado un peso de encima. Tanto tiempo había temido verlos. Ahora los empujaba a acercarse…

Al subir al auto increíblemente su colega no estaba enojada

¿Y?-Simplemente preguntó- ¿Algo que decir a tu favor?

-Ya. "Friendzoned" Dijo extendiendo un cartel imaginario en el aire con cara de retrasado. Soy el mejor… un amor; comenzó a bromear mientras Kanda sonreía de costado aliviado.


Rtas: A Lydia, me sorprende que te alegrara la escena Lavi x Lenalee; pero como veras en mi retorcida mente esa pareja no tenía futuro xD Siempre trate de respetar la imagen que me da la historia original de DGM y allí, aunque es bastante evidente el interés de mi hermoso y actualmente borrado Lavi, en su compañera exorcista, ésta chica siempre me pareció más cercana al pobrecillo Allen :3 por lo que siempre dije… ALGÚN DÍA MOYASHI, LE ESCUPIRAS EL ASADO AL CONEJO! xD

Fuera de tema, reviví! :O Ya me pasare por tu historia que debo buscar donde me quede u.u Veras comentarios cuando lo haga ;) jajajja