Otra nueva historia... Últimamente tengo más ideas que de costumbre.

Prefacio

Historias

Forks, Washington

13 de septiembre 2006

Isabella Marie Swan no quería levantarse de la cama y que todos empezaran con las felicitaciones por su décimo tercero cumpleaños, pero aún así, tuvo que levantarse. Se duchó rápidamente y se vistió con una simple camiseta blanca y unos vaqueros. Se sujetó el pelo hasta la cintura en una coleta. Cuando terminó de prepararse, bajó las escaleras deseando ser invisible. Cuando entró en la cocina, lugar en el que se encontraban sus padres y la familia Black, nadie se giró hacia ella. Era como si no la vieran. Bella estaba muy asombrada pero, cuando realmente se asustó, fue cuando vio que en el espejo del vestíbulo no estaba su reflejo…

Chicago, Illinois

25 de diciembre 2008

Edward Anthony Masen estaba sentado en el suelo, pegado al Cloud Gate, en Millenium Park. La verdad era que no estaba disfrutando mucho aquellas Navidades. No podía dejar que lo encontraran y le quitaran el anillo. Ese anillo con diamantes era de Elizabeth Masen, por mucho que ella ya no estuviera viva. Edward haría cualquier cosa por proteger ese anillo, incluso violar la promesa que había hecho dos años atrás. Y lo hizo. Ignoró la promesa que le hizo a su madre justo antes de que ella muriera. Edward corrió cuando los agresores lo vieron. Los dos ladrones casi se desmayaron al ver la mancha borrosa en la que se convirtió su víctima…

Biloxi, Mississippi

13 de agosto 2001

Mary Alice Brandon estaba sentada en la terraza de su casa, jugando con su padre, tranquilamente. Hacía mucho calor. Demasiado. Alice entró en la casa para beber un poco de agua fría. Si esperaba que dentro de la casa hiciera menos calor, estaba equivocada. Por un momento, Alice quiso ser una serpiente. Su profesora le había dicho que las serpientes podían controlar su temperatura. De repente, Alice sintió una sacudida, y se sintió caer. Cuando se recuperó, no sentía ni las manos ni los pies. Y veía peor. Intentó gritar, pero lo único que salió de su boca fue un siseo de serpiente…

Houston, Texas

19 de junio 2006

Jasper Whitlock estaba comiendo una hamburguesa tranquilamente cuando una mujer se acercó en su mesa. Su novia. María le sonrió y le dio un beso antes de sentarse en la silla que estaba enfrente de la suya. María empezó a hablar. Y no terminó. O al menos, esa era la sensación que tenía Jasper siempre. Jasper fue al baño en cuanto tuvo la oportunidad. Cuando consiguió el valor suficiente para volver, María siguió hablando. A Jasper le dolía tanto la cabeza que, sutilmente, le sugirió que se callara. Ella no le hacía caso y, al final y sin saber cómo, Jasper miró a María y le dijo que se callara. Y ella lo hizo sin protestar, como si estuviera obligada por algo. O por alguien…

Rochester, New York

25 de abril 2006

Rosalie Lilian Hale acababa de salir de casa de su amiga Vera después de una visita a ella y a su hermano de seis meses. Era el bebé más hermoso que había visto en la vida, con su oscuro pelo rizado y sus hoyuelos. A pesar de que la primavera ya había comenzado hacía frío, por lo que Rose llevaba una abrigo que su amiga le había prestado. Ya se lo devolvería en cuanto pudiera. Estaba caminando hacia su casa cuando los vio. Royce, su novio, y sus amigos. Vio que estaban borrachos, por lo que intentó que ellos no lo vieran, pero no lo pudo evitar. Y estaban tan borrachos que no eran conscientes de lo que hacían. Y le hicieron daño. Mucho daño. O al menos al principio, porque enseguida los hombres notaron algo en la chica. Y la dejaron, salieron corriendo. Pocos minutos después, Rosalie se levantó, sin ninguna marca en el cuerpo, y se marchó a su casa pensando sólo en venganza…

Tennessee

16 de enero 2006

Nada mejor que un buen pulso para descargarse. Eso es lo que pensaba Emmett McCarty cuando entró al bar al que solía ir casi siempre. Hacía tiempo que no iba, pues su padre lo había castigado sin salir cuando olió el tabaco y el alcohol en las ropas de su hijo. ¿Y cómo no iban a oler sus ropas si en cuanto se entraba en ese bar era lo primero que se notaba? Pero a él no le importaba el olor. Sólo le importaban los pulsos. Y ganar. Pero él nunca perdía. Siempre había pensado que los demás tenían muy poca fuerza. Demasiada poca para él. Él fue directo al hombre que organizaba todo. Y le dejaron que fuera con los que habían ganado mientras él no estaba. Y ganó. Pero uno de sus contrincantes se enfadó. Y le pegó. Emmett se enfadó y fue directo a él, y de un puñetazo lo tumbó. Un hombre se arrodilló al lado del hombre, y cuando comprobó el estado del herido se giró hacia Emmett asustado. Murmuró algo parecido a "no tiene pulso" y gritó. Y todos se giraron hacia Emmett. Había matado un hombre. Emmett salió corriendo de allí jurándose a sí mismo no volver a su casa…

Bull Run Mountains, Virginia

21 de enero 2010

Carlisle Cullen estaba sentado en su escritorio, como todos los días desde hacía ya unos siete años, cuando su padre murió. Tenía que esperar noticias. Hacía ya mucho tiempo que no recibían ninguna noticia sobre ninguna de esas personas con habilidades sobrenaturales. Estaba pensando en eso cuando su esposa y compañera de trabajo, Esme, entró en el despacho.

- Hay nuevas noticias-dijo la hermosa mujer de cabello color caramelo-. Han encontrado a seis chicos. Nuevos poderes. Estados diferentes, pero podemos encontrarlos. A todos.

- ¿Los habéis encontrado a todos?-preguntó Carlisle emocionado.

- Seis estados: Washington, Illinois, Mississippi, Texas, New York y Tennessee. Enseguida los encontraremos y los traeremos aquí.

- Genial.

Esme abandonó el despacho. Carlisle sonrió. Por fin tendría nuevos chicos a los que entrenar. Bueno, la verdad, él nunca había entrenado a nadie. Hacía más de siete años que no encontraban a nadie a quién entrenar. Pero ahora los habían encontrado. Y eran seis. Esos seis serían los mejores que habría. Porque él sabía cómo entrenarlos. Y lo haría, claro que lo haría.

¿Qué os ha parecido? Decidme algo, por favor.

Si os gusta esta historia y la continuo, sabed que iré alternando entre esta historia y "Verdadera esencia", es decir, un capítulo de una, luego otro de la otra.

Besos