Disclaimer: Lastimosamente Naruto no me pertenece y supongo que no lo hará nunca. Todo lo escrito aqui salio de mi imaginación, lo unico que le pertenece son los personajes y los nombres que hallen conocidos.

Notas de Autora al final, me gusta más ponerlas ahí, nos leemos al final, ¡disfruten la historia!

Intercambiando Almas

Por: Kabegami

Todo comenzó aquel primer día…

En un barrio acomodado de la ciudad se encontraba una casa de proporciones algo grandes para el habitual vivir, pero dado que todas las familias que vivían en esa área de la ciudad tenían ciertos privilegios podían darse ese tipo de lujos. La casa, pintada de un blanco inmaculado y con una imponente verja negra bordeándola es la casa de los Haruno, una de las familias más importantes de la ciudad pues la señora de la casa, Tsunade Haruno, es conocida como la doctora más importante de la ciudad; mientras que su esposo, Jiraiya Haruno es uno de los escritores más famosos de la región. Ambos tenían una hermosa hija, de nombre Sakura, quien es el orgullo de ambos. Poseía un cabello de un inusual color rosa que atraía la atención de inmediato, a la vez que unos encantadores ojos color jade que servían de espejo de su alma, la chica nació con un don nato para el piano y con una inteligencia excepcional. En resumen, el orgullo de cualquier padre.

Justo al lado de la casa de los Haruno se encontraba la casa de los Hyuuga, familia de renombre por ser dueña de una cadena de farmacias alrededor de distintos lugares del país del fuego. Hiashi Hyuuga –su propietario– vivía tranquilamente en la casa en compañía de su hija Hinata y su sobrino Neji. Lejos de tener una vida llena de lujos y ajetreada como seguramente habrían tenido en la capital, Hiashi había decidido que su hija y su sobrino crecerían en una ciudad apartada para evitar problemas y que ambos crecieran con lujos innecesarios. Más no podía evitar darte pequeños caprichos como el de vivir en un barrio de tanto renombre.

Frente a la casa de los Hyuuga y los Haruno se encontraba la casa de los Namikaze, en ella vive el famoso pintor Minato Namikaze junto a su esposa Kushina Uzumaki, famosa por sus programas de cocina en televisión por cable. Ambos tenían un par de hijos: Naruto e Ino, ambos reconocidos por tener personalidades sumamente extrovertidas, lo que los había posicionado rápidamente como las personas más populares de la pequeña ciudad.

Para terminar y sin quitarle importancia, se encontraba la casa de los Uchiha; en ella viven Itachi, Sasuke y Sai Uchiha. Lastimosamente, sus padres murieron un par de años atrás en un accidente de avión dejando al mayor de los tres –Itachi– a cargo de una de las empresas automotrices más importantes de la región.

Nuestra historia comienza en una soleada y calurosa mañana, una leve brisa mecía de forma perezosa las hojas de los arboles anunciando que el verano estaba pronto a acabar; y con esto, el final de las vacaciones de verano y el inicio del periodo escolar.

En una habitación se encontraba una chica durmiendo plácidamente, a su lado un reloj marcó las seis en punto de la mañana para empezar a repicar en un odioso ruido despertando a la dueña del cuarto.

Una mano emergió de entre el manojo de sabanas para darle un sonoro manotazo al ruidoso despertador, apagándolo en el acto –Demonios, siento que no dormí nada. Menos mal que ya es el último año de bachillerato –Sakura Haruno nunca había sido una persona muy madrugadora que digamos, su largo cabello rosa se extendía por sus hombros en una maraña propia de una buena noche de sueño, mientras que se levantaba pesadamente rumbo al baño mientras se tallaba fervientemente sus ojos jade en el trayecto.

–Sakura hija, ¿ya te despertaste? Tu papá te llevará al colegio así que por favor apresúrate –Se oyó la voz de su madre amortiguada por el sonido de la regadera

–Si mamá, ya salgo –Todavía con sueño, la chica salió del baño para poder sacar de su armario el uniforme del colegio. Miró con pereza la falda gris tableada que le llegaba a la rodilla mientras se ponía el polo blanco con el escudo del colegio estampado en el pecho. Gruño, nunca le había agradado el sobrio uniforme de la Konoha Academy, pero que podía hacer, sus padres habían insistido en mandarla a ese colegio. Se miró al espejo antes de salir para comprobar que su largo cabello rosa se encontrara en orden, para después tomar su mochila y bajar las escaleras a tomar su desayuno e ir por última vez, a su primer día de clases en la academia.

Al bajar, vio como a su madre sirviéndole unas tostadas a su padre mientras disponia otras para ella. Al verla, una sonrisa surcó su rostro y con voz amable la saludo:

–Bueno días Hija, ¿lista para tu último año en la academia? –Tsunade Haruno, una de las más respetadas doctoras de la ciudad era una mujer de entrada edad aunque no lo aparentaba, su largo cabello rubio platinado caía libremente en su espalda atado en dos colas mientras que sus profundos ojos café miraban a su hija con cariño

–Es mejor que comas rápido hija, tengo una reunión con mi editor a las ocho y media y tu colegio me queda de camino, así que puedo llevarte, pero solo si te apuras –El tono afable de su padre le saco una sonrisa, Jiraiya Haruno, un reconocido escritor de… bueno, no querrán saberlo… de más o menos la misma edad que Tsunade, llevaba su largo cabello blanco atado en una cola y una permanente sonrisa bonachona en el rostro.

–Claro Papá, ya acabo. Y si mamá, estoy feliz porque al fin ya se va a acabar –Respondió a sus progenitores con suavidad para después terminar sus tostadas y seguir a su padre hacia el garaje donde el carro de este aguardaba.

–Pero mira a quien tenemos aquí Hija, si son Hinata y Neji. Hola chicos, ¿se dirigen también al colegio? ¿Por qué no vienen con Sakura y conmigo? Pienso llevarla hoy y les puedo dar el aventón –Sakura miró hacia donde su padre hablaba para ver a los Hyuuga. Hinata, una chica tímida de un grado menos que el suyo, quien posee un largo cabello oscuro y unos ojos pálidos que hacían contraste con su pálida piel al lado de Neji –su primo– quien poseía los mismos ojos perla de su prima y el mismo tono de piel, a diferencia de que el cabello del chico era castaño y lo llevaba largo y amarrado en una coleta baja, ambos lo miraron con desconcierto para después asentir mientras se acercaban al auto del escritor –Buenos días Jiraiya-sama, Sakura-san –Saludaron ambos al estar enfrente de los Haruno

–Oh vamos chicos, pueden decirme solamente Jiraiya, no quiero formalismos ¿vale? Ahora súbanse que estoy algo limitado de tiempo –Y dicho esto, los tres jóvenes se subieron en el carro para partir hacia la Konoha Academy.

oOo

–Bueno chicos, llegamos. Espero que tengan un buen día, no llegues tarde luego Sakura. Adiós –Se despidió Jiraiya al dejarlos frente a un gran portón negro que rezaba "Konoha Academy" en lo alto, detrás de este, un imponente edificio se alzaba.

Sakura miró a sus dos acompañantes para reparar en la expresión de fastidio que adoraba el rostro del Hyuuga

–¿Y a ti que te pasa Hyuuga? –Sakura, a pesar de haber sido compañera de promoción de Neji durante más de cinco años, nunca había sido capaz de llevarse bien con "el genio Hyuuga", como sus demás compañeros de clase lo habían apodado

–Nada de tu incumbencia Haruno, y por favor dile a tu padre, que por muy amigo de mi tío que sea, se abstenga de hacer esta clase de invitaciones. El podrá ser amigo de mi tío, pero tú de mi no lo eres. Buenos días –Y se fue, dejando a Sakura con una expresión enojada y a una tímida Hinata con pena frente a las palabras de su primo –Di-disculpa Sakura-san, Neji suele ser así de cortante siempre, espero que lo perdones y muchas gracias por traernos –Sakura se disponía a responderle que no tenia porque excusar las groserías de su primo, cuando un estridente grito resonó a sus espaldas:

–¡SAKURA-CHAAAAAAN! –Suspiró cansada, aquel grito solo podía pertenecer a una persona. Dándose la vuelta lentamente pudo observar como un rubio se acercaba hacia ella con la mano en alto seguido de un par de pelinegros con expresión aburrida

–Hola Naruto, ¿sabes que no hace falta gritar verdad? –Rio levemente aunque por dentro estallara de ganas de aventarle un libro al gritón de su mejor amigo. Naruto Namikaze, un chico rubio que iba junto a Sakura y Neji al último año, un chico hiperactivo de intensos ojos azules y un cabello rubio que reflejaba la alegría que su portador siempre cargaba. Definitivamente, una persona única. –Hola Sasuke-kun, hola Sai –Terminó por saludar a los dos pelinegros que venían rezagados detrás del rubio; el mayor, Sasuke Uchiha, dueño de unos profundos ojos ónice, la saludo con una leve cabeceada, mientras que su hermano menor, Sai Uchiha –Casi parecido a su hermano, con excepción de que su piel era anormalmente pálida y siempre andaba con una sonrisa algo espeluznante por no decir falsa– la saludo dándole un afectuoso abrazo –Fea, es un gusto verte. Este verano casi no se te vio la cara, ¿estuviste muy ocupada con tus clases de piano? –Pregunto intrigado pues era bien sabido que Sakura Haruno en verano ofrecía clases de pianos a niños pequeños

–Oh si, este año decidí invertir más tiempo en eso, para que me sirviera como referencia para la universidad –Contesto complacida, aunque más por hacerlo por sus estudios lo hiciera por el placer de ver las sonrisas en los rostros de sus alumnos

Iban a seguir conversando, más el repiqueteo lejano del timbre les anuncio que su ultimo año en la Konoha Academy estaba por dar comienzo, con una sonrisa, Naruto tomo a Sakura y a Sasuke del brazo y los jaló rápidamente hacia la entrada.

–Es mejor que nos apresuremos, si no también llegaremos tarde Hyuuga-san –Hablo Sai mirando a la ojiperla que dio un bote en su lugar, ambos chicos asistían al quinto de bachiller junto a la hermana menor de Naruto

–S-si…

oOo

Al llegar al salón pudieron observar que la gran mayoría se encontraba en el ya, los tres miraron al final para comprobar complacidos que sus puestos seguían intactos. Se dirigieron para notar que cerca de estos se había sentado nada más y nada menos que…

–Hyuuga, ¿Qué se supone que haces aquí? –Preguntó Sasuke con hastío pues nunca le había agradado la forma en la que Neji trataba a su amiga

Neji, quien hasta ese momento se hallaba leyendo plácidamente un libro, alzo la mirada y le respondió mordazmente –No creas que todo el mundo gira en torno a ti Uchiha, simplemente llegué algo tarde por culpa de alguien y me toco tomar este puesto. No creas que salto de felicidad por eso –Aquella respuesta, más que calmar, caldeó aun más el humor de los presentes, en especial de cierta chica de pelos rosados

–Pues nadie te obliga Hyuuga, bien puedes sentarte afuera y sería mucho mejor. Y no digas que llegamos tarde porque nos trajo papá, te aseguro que si hubieras venido por tu cuenta aun estarías en camino –Las palabras de Sakura sorprendieron al rubio y su amigo, seguramente se habían perdido de algo

Neji se disponía a replicar cuando repentinamente un silencio se poso sobre el resto de la clase, anunciando que el profesor de la hora había llegado. Al ver que no podía seguir discutiendo con la chica, le lanzó una mirada fría para después voltear a ver al recién llegado profesor

–¡Yo! ¿Qué tal clase? ¿Tuvieron unas buenas vacaciones? Porque yo sí, me tome la molestia de escoger los problemas más difíciles para hacer de su ultimo año uno memorable en las matemáticas –Un suspiró recorrió a los presentes, típico del profesor Kakashi. El profesor era reconocido por su vagancia extrema pero temido por sus exámenes que hacían que más de uno perdiera la cordura a finales de semestre –Pero antes de eso me gustaría avisarles que a fin de mes haremos una excursión. Si, ya sé que no es propio que yo la supervise, pero se me pidió hacerlo pues todos los demás profesores tenían compromisos –Un murmullo de expectación se escucho antes de que el profesor pidiera silencio –Ahora bien, visitaremos un museo de historia para que aprendan de primera mano sobre algunas culturas y sus dioses, antes del miércoles me habrán de traer la hoja de autorización firmada ¿me han entendido? –Un sonoro ¡SI! Se escucho en respuesta– Perfecto, ahora a lo que nos concierne… ¡las matemáticas!

oOo

–¿Me puedes explicar cómo es eso que tu papá trajo al geniecito Hyuuga? –Soltó Naruto a la hora del receso, se encontraban junto a Sasuke debajo de uno de los arboles de los terrenos del colegio descansando un rato

–Pues así como lo oyes, sabes perfectamente que somos vecinos. Dio la casualidad que justo cuando mi papá me iba a traer nos topamos con él y con Hinata –Soltó un bufido antes de continuar– Sabes que Hinata no me cae mal, pero simplemente no paso a Neji, es simplemente insufrible

Naruto asintió con gravedad mientras que Sasuke rodaba los ojos a su lado. Ciertamente le molestaban las constantes peleas de la pelirrosa con el Hyuuga, y pensaba que con los años la madurez haría de las suyas y las calmaría, mas se equivoco cuando lo que ocurrió fue todo lo contrario y en vez de calmarlas las empeoró más.

–Entiendo cómo te sientes, tener al Hyuuga de vecino a de ser igual o peor que tener al Dobe de vecino. Imagínate tener que tenerlo de visita a las doce de la noche porque se encuentra aburrido. No lo soportarías –Aquello sacó una leve risita en la pelirrosa mientras que el rubio le lanzaba un cartón de jugo a su amigo

–¡Que estoy aquí Teme! Sé que tu vida sería bien miserable si no me tuvieras como vecino

–O más placentera

Sakura miró a sus dos mejores amigos con cariño, siempre peleaban por cualquier cosa como un par de niños pequeños, desde que los conoció a ambos al mudarse a la casa de enfrente entablaron una amistad que ha perdurado a través de los años y las diferencias. No sabía que haría sin ese par de niños grandes.

Miró su comida con detenimiento sin notar cuando un balón de futbol americano salió de la nada aterrizando en su comida y llenando la cara de la chica de esta

–¿Pero qué..?

–¡Ah lo siento!... a eres tu Haruno, entonces no lo siento –Aquella voz… levanto sus ojos para, efectivamente, ver que el causante de que ese día no comiera era precisamente la razón de sus enojos. Neji Hyuuga, quien además –y posiblemente para su desgracia también– es el titular del equipo de futbol de la academia, lo miraba con burla mientras se acercaba a recuperar el balón –Diablos, espero que el balón esté bien –Se burló más, llamando la atención del par de amigos que detuvieron su pelea en al acto al ver la aparición del vecino de la Haruno

–¿Se puede saber a qué juegas Hyuuga? ¿No ves que pudiste lastimar a alguien? –Espetó Sakura enojada mirando con odio al chico

–Pues juego futbol americano, y sobre lastimar a alguien… me preocuparía si se tratara de alguien más importante… pero dado que no lo es, me parece que no –Respondió con sorna causando enojo en los acompañantes de la chica

–¡Discúlpate Hyuuga! –Demandó Naruto poniéndose de pie para encarar al castaño

Neji en toda respuesta enarcó una de sus –misteriosamente– perfectas cejas para responderle con un escueto –No– y darse la vuelta para reunirse con el resto del equipo que lo esperaba en la entrada del campo

El rubio hizo amague de ir por él, mas Sasuke –claramente salvando el día, en la opinión de Sakura– lo detuvo alegando que había mejores maneras en las que perder el tiempo

–En serio, un día de estos me importara poco que sea el titular del equipo y que un mísero trofeo dependa de que tan lejos lance un balón y le partiré ambos brazos ¡dattebayo!

–El día que eso pase Dobe, me asegurare de filmarlo para mandarlo a las peores golpizas de Japón –Se burlo el pelinegro con sorna

Y así empezaba de nuevo otra de las tan regulares peleas entre Sasuke y Naruto, Sakura suspiró esta vez hastiada por la situación, de alguna manera el encuentro con el Hyuuga había logrado sacar lo peor de ella en aquel día

–Chicos iré adentro, dentro de poco suena el timbre y aun no he saludado a Ino –Anunció posponiendo momentáneamente el duelo de cartones de jugo que sus amigos habían armado

Ambos la miraron para después asentir y seguir en lo suyo –Ósea, ver que tan duro podía golpear un cartón de jugo la cabeza de Naruto, en opinión de Sasuke–

oOo

Sakura caminaba tranquilamente por los pasillos de quinto año, suspiró melancólica, dentro de poco menos de nueve meses se iría para siempre de aquella escuela y lo único que quedarían serian los recuerdos y momentos vividos en aquellos pasillos. Es una lástima que fuera así, pues de no haber estado tan ensimismada bien hubiera podido evitar que la puerta de un salón le diera de lleno el rostro.

–¡¿Pero qué…? –Exclamó enojada al sentir el agudo dolor extenderse por su rostro desde la punta de su nariz

–¡Frentona! ¡Mira que yo pensaba que ya te habías olvidado de mí! –Se detuvo un momento para observarla con más detenimiento– Sabes, deberías tener más cuidado, uno nunca sabe cuando alguien podría abrir una puerta de improviso –Le previno con voz seria

–Gracias Cerda, es muy amable viniendo de ti –Replico para después quitarse las manos del rostro y ver a su amiga de toda la vida, Ino Namikaze. La chica, de despampanante cuerpo y largo cabello rubio (mas no tan deslumbrante como el de su hermano Naruto), dueña de unos profundos ojos color cielo y prácticamente la chica más popular de toda la academia y por increíble que parezca, la mejor amiga de Sakura – ¿Qué tal va todo? –Preguntó mientras se sentaba en una de las bancas dispersadas por el pasillo, sin dejar de sobarse su adolorida nariz.

–Pues lo regular sabes, me toco con Hinata y Sai de nuevo –Soltó una risilla al nombrar al Uchiha– Sabes, ese Sai no se ve tan mal ¿sabes? Se ha puesto bastante guapo al pasar de los años –Aquello sorprendió en sobremanera a Sakura, pues Ino siempre solía interesarse en tipos que fueran cuando mucho, tres años mayor que ella (Un claro ejemplo fue su pasada obsesión con el mayor de los Uchiha, Itachi) aquello era un gran avance en su mejor amiga y no tardo en hacérselo saber. –Vaya Cerda, parece que estamos madurando. Ya te estás interesando por los de tu edad

–Y tu deberías interesarte más por los que te rodean ¿sabes? Desde que ese chico de intercambio… Gaara creo que se llamaba… se fue, no has vuelto a tener ningún otro tipo de contacto con el género masculino… ¡y ya ha pasado más de año y medio! –Exclamó, como si de una tragedia griega se tratara, mas eso no le impidió notar el semblante sombrío de su amiga al nombrar a su anterior amor

–Uhmmm… es mejor que me vaya Cerda, pronto va a sonar el timbre y no quiero llegar tarde a la clase de Anko-sensei, ya sabes cómo se pone –Y aunque ambas sabían que se trataba de una excusa barata para no seguir hablando del tema, como buenas amigas que son, decidieron dejarlo por la paz y seguir cada una en su rutina diaria –Nos vemos en la salida ¿vale? No quiero volver a toparme con el dolor de cabeza Hyuuga –Y antes de que su amiga pudiera preguntar porque la pelirrosa ya se había perdido en los pasillos rumbo a su salón.

oOo

A la salida, Naruto se encontraba silbando distraídamente en la entrada del colegio mientras esperaba a su hermana en compañía de sus mejores amigos, por alguna extraña razón Ino siempre tardaba más de lo normal al salir del colegio –Algo sumamente anormal, pues para él entre más lejos de la academia estuviera, mejor– Pensaba el rubio para sus adentros

–Tsk… tú hermana si demora Dobe, ¿por qué no la llamas y le dices que nos adelantamos? Muero de hambre y tengo que llegar a hacer el almuerzo –Se quejó Sasuke con hastío

–Porque es mi hermana y si llega sola a la casa tu no vas a tener que escuchar el sermón de una hora sobre "porque los hombres deben proteger a las mujeres" de mi madre, así que mejor cállate Teme –Replicó el rubio, aunque por dentro él también se encontraba en las mismas que su mejor amigo, suspiró frustrado, su hermana conseguía hacer lo imposible para muchos: acabar con su paciencia.

–¿Por qué no te adelantas tu Sasuke-kun, mientras yo acompaño a Naruto en lo que llega Ino? Así puedes llegar a hacer el almuerzo a tiempo –Propuso Sakura en un intento por calmar una posible pelea

Guardó silencio un rato meditándolo, aunque la idea le parecía sumamente atractiva –Y de hecho, así era– Por una parte –Extremadamente dentro de él– algo le decía que entre más tiempo pasara con la pelirosa mejor. Sacudió la cabeza desconcertado, últimamente esas ideas asaltaban mucho su mente y se preguntaba por qué. Luego tendría tiempo para meditarlo, pensó con aburrimiento.

–De acuerdo, hablamos luego –Se despidió con indiferencia mientras tomaba el rumbo hacia el barrio en el que todos habitaban

Luego de aproximadamente unos veinte minutos –Que a ambos les pareció los veinte minutos más largos y agonizantes de sus cortas vidas– se empezó a ver en las puertas del colegio la esbelta figura de la mentada Ino, en compañía del menor de los Uchiha y una tímida Hinata.

–Vieron, les dije que mi hermano nos esperaría –Habló con una gran sonrisa que se borró en el acto al ver las caras de hastío de los presentes– ¿Ay pero que les sucede? ¿Qué acaso no se alegran de verme?

–Ino… salimos hace una hora… UNA HORA… ¿y tienes el descaro de preguntarnos eso? –Naruto pocas veces perdía los papeles, y esta era una de esas memorables veces

–Ash… ¡se me había olvidado! Había quedado con Hinata y Sai de hacer un trabajo grupal después de clases y los tres nos íbamos a regresar juntos a la casa, yo ya le había avisado a mamá, por lo que no tenias porque preocuparte –Se excuso con una mueca de pena en el rostro

Sakura tuvo que cerrar los ojos y contar hasta mil antes de cometer un asesinato en plena luz del día –Aun eres joven… te queda mucha libertad por delante–Se repitió mentalmente para calmar las crecientes ganas de matar que habían nacido en ella.

–Es mejor que nos apresuremos, si es verdad eso muy seguramente mamá me va a mandar a lavar todos los platos por no avisar que llegaría tarde –Y dicho esto, el grupo se dispuso a ir hacia sus respectivas residencias, dando por acabado, el primer día escolar.


¡Hola queridas Lectoras del fandom! Me complace traerles lo que es la introducción de mi nueva historia con la pareja principal que es NejixSakura. También habrán otras parejas pero estas serán de menor relevancia y a lo largo de la historia podrán verlas.

Ahora bien, la idea de esta historia se me ocurrió de una película que vi hace como un mes por cable, me parecio muy tierna y decidí plasmarla en una historia del fandom, más no es exactamente igual, solo lo es el tema principal.

Algunas aclaraciones que deberían saber:

1. No actualizare muy seguido esta historia, pues tengo otras pendientes que pienso terminar antes de dedicarme por completo a esta, aun asi, no la dejare en el olvido.

2. Entre a la universidad (terrooor) por lo que mi tiempo aún es mas reducido =_= pero como dije, no se preocupen.

3. Estoy beteando una historia (Un Sasori x Sakura de una excelentisima autora) por lo que mi tiempo es aún más reducido xD.

Pero yo veré como me las apañare con esto, lo veo como un reto y ya lo empezé, asi que tenganme paciencia :)

Por cierto, la secuela de "Los Cuatro Guardianes" la empezaré a escribir en cuanto termine el primer de mis dos fics que están inconclusos, para que tengan una idea.

Sin más, espero que el comienzo de la historia sea de su agrado :)

Nos leemos en el final de "Los Cuatro Guardianes"!

Reviews, críticas constructivas y demás son bien recibidos :)

Kabegami