Capitulo 2: Celos, Problemas y un beso inesperado.

ACLARACION: *BLABLABLA* PENSAMIENTOS

—BLABLABLA —DIALOGOS

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Hiroshi: hola a todos, les habla Hiroshi, al parecer mi amiga Sunako se metió en un lio. ¡No temas Sunako-chan! Yo te salvare. *con un disfraz de héroe*

Yuki: ¿y que planeas hacer? * Muy confundido*

Hiroshi: seré su prometido *sonrisa de victoria*

Ranmaru: Tu ni siquiera eres humano *gotita estilo anime*

Kyohei: A demás yo soy su prometido *pose de superioridad*

Hiroshi: Pero yo soy su mejor amigo, así que soy el mejor para el puesto *mirada seria*

Ranmaru, Yuki y Takenaga: El tiene razón. *asintiendo con la cabeza*

Kyohei: ¿¡DE QUE LADO ESTÁN! *furioso*

Takenaga: De Hiroshi-kun *sonrisa burlona*

Kyohei: ¡Ustedes! *se ve a un Kyohei en la esquina haciendo circulitos, en estado de depresión*

Declaimer: Yamato nadeshiko shichi henge no me pertenece, sino a Hayakawa Tomoko-sama.

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La mañana en la mansión Nakahara comenzaba y con ello los problemas para nuestros protagonistas favoritos.

—Sunako-chan— llamó Yuki — ¡Sunako-chan!— repitió.

— ¡Ah!, Hiroshi-kun, he tenido una pesadilla—Sunako caminaba con la mirada sombría murmurando palabras a Hiroshi, aunque el no estaba realmente— la criatura brillante y yo éramos pareja, pero solo fue una pesadilla, ¿verdad? ¿Verdad? — Miro a Yuki en busca de respuestas, el pequeño rubio empezó a llorar y escapo de Sunako gritando ¡Tengo miedo! .

— ¿A que viene todo este ruido? — Kyohei se quito un mechón de cabello y bostezo, miro a Sunako y comprendió porque Yuki había huido de ella— Nakahara Sunako, ¿Qué pasa?

— ¡Ah! Muy brillante— La chica intento escapar, pero Kyohei la detuvo sosteniendo su mano con fuerza — ¡Suéltame!

— No hasta que me digas que te pasa— respondió el chico mirándola fijamente.

—Eso no te incumbe— se zafó del agarre y huyó hacia la cocina, Kyohei suspiró.

—La señorita Sunako no es muy afectiva, ¿verdad? — Tanaka apareció detrás de Kyohei asustándolo un poco—le sugiero una cita para que la señorita este satisfecha con usted.

— *¿Una cita?, ni hablar, no tengo idea de lo que es una cita*—pensó el chico algo nervioso— claro, una cita, muy buena idea Tanaka-san— contesto el chico con un tic nervioso, Tanaka sonrió y anoto algo en su libreta.

—Bien, cuando este listo me dice y lo acompaño a su cita para ver su progreso—comentó el señor Tanaka, marco el numero de la señorita dueña, Kyohei se puso tenso—Miss Nakahara, su sobrina tendrá una cita esta tarde, le enviare los resultados al anochecer— Miro a Kyohei, el chico entendió la indirecta.

—Bueno, le diré a Sunako y luego le aviso a donde vamos Tanaka-san—Kyohei corrió a la cocina, Tanaka sonrió.

—El plan esta funcionando a la perfección Miss Nakahara—murmuro, Takenaga; quien escucho todo sonrió con sorna.

La cocina era un desastre total, las ollas y platos estaban rotos y los servicios ensartados en la pared, la comida regada por el piso, en la pared se encontraba un Kyohei asustado por una Sunako endemoniada.

— ¡No quiero una cita! — Dijo con un tono sombrío— Menos después de que tu y yo nos b…be… ¡Ah! — De solo pensar en eso le hacia perder el control y el que sufría era Kyohei.

— ¿No te importa que tu tía te obligue a llevarte de compras o a alguna de sus elegantes fiestas? —dijo enfatizando la palabra elegante. Sunako se detuvo y el chico suspiro aliviado.

—…—Pensó en las fiestas de su tía y en la tortura de ir con la criatura brillante a un parque de diversiones, definitivamente la segunda opción era la mejor, al menos se divertiría—esta bien, pero si intentas algo… ¡Te mato! — dijo, alzando un cuchillo, el rostro de Kyohei se desencajo de horror.

—Tranquila Nakahara Sunako— Fue acorralado en una esquina y el temió lo peor, sin embargo, la voz de Tanaka interrumpió el intento de asesinato.

—Kyohei-sama, Sunako-sama ¿están bien? —El secretario de Miss Nakahara entro en la cocina y vio el desastre que había— ¿Que paso aquí? —pregunto sorprendido, Sunako y Kyohei se pusieron nerviosos.

—Bueno, nosotros estábamos…—Kyohei no tenia excusas para explicar el desastre de la cocina ni porque Sunako sostenía un cuchillo que apuntaba hacia el cuello del rubio.

—Le estaba enseñando a cocinar a la cri…digo a Kyohei, pero el es un desastre—Sunako rio escondiendo el cuchillo y tomando el brazo de Kyohei lo jalo hacia afuera—Yo preparare la comida, tu haces lo demás— Saco a los dos de la cocina y se puso a limpiar—*por poco y nos descubren*—Pensó la chica aliviada, pero había un problema: tendría una cita con la criatura brillante. En la sala los dos hombres estaban un poco sorprendidos.

—Sunako-sama tiene un carácter fuerte, ¿no es así? —dijo un poco choqueado.

—Así es, pero así me gusta—dijo pensando en lo divertida que era Sunako, tarde se dio cuenta de su error, había dicho algo que no debía— ¡No! Quiero decir…bueno…iré a prepararme— se excuso el rubio, huyo a su habitación.

— Kyohei-sama si esta enamorado después de todo—murmuro para si.

En su habitación, Kyohei se encontraba abrumado por sus pensamientos, el haberle dicho eso a Tanaka-san era un craso error, pero el no tenia la culpa, simplemente lo había dicho y ya. Se dio cuenta de que estaba jugando un juego bastante peligroso y que sus sentimientos se podrían ver afectados con la cercanía de la pelinegra.

—Esto esta mal, muy mal, yo no siento nada por Nakahara Sunako— cerro los ojos y se quedo dormido. Una voz lo obligo a abrir sus ojos, no sabia cuanto tiempo había pasado, miro a la persona que estaba observándolo, esos ojos violetas… ¡ojos violetas! ¡Sunako!

—Criatura brillante, el almuerzo esta servido—Sunako lo miraba fijamente, Kyohei se levanto rápidamente de la cama.

— ¡No me des esos sustos! —Exclamo nervioso, vio que Sunako empezaba a molestarse—eh…—suspiro y se tranquilizo—Bueno, a comer— se dirigió raudo al comedor, Sunako lo quedo mirando extrañada.

—La criatura brillante esta muy rara—Camino hacia el comedor suspirando, iba a ser un día terrible.

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— ¡Sunako-chan! — Noi entro sonriendo a la habitación de Sunako, llevaba unas cuantas bolsas en la mano, la pelinegra temió lo peor, de seguro los chicos le vinieron con el cuento de la "cita" con la criatura brillante— ¿ya estas lista?

—Si— contesto sin ganas, Noi la miro e hizo un mohín.

— ¡Definitivamente no! — Exclamó enfadada— ¡No iras vestida así! — Afirmo, viendo la cotidiana ropa deportiva y la capa que cubría su cuerpo y la mayor parte de su rostro—Usaras esto—dijo mostrándole lo que había en la bolsa.

— ¡No! — trato de huir, pero Noi estaba en la puerta.

— ¡S-u-n-a-k-o-c-h-a-n! — deletreo su nombre con una sonrisa siniestra en el rostro.

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— ¿creen que Sunako-chan esta bien? — pregunto Yuki al escuchar los gritos provenientes de la tenebrosa habitación.

—Pues yo temo por la vida de Noi-chan— comento Takenaga, caminando de un lado para otro.

—Yo quiero ver lo hermosa que quedara Sunako-chan— murmuro para si Ranmaru.

—Todos ustedes están exagerando— dijo fastidiado Kyohei.

—Buenos días, perdonen la interrupción— Ryuuichiro entro a la sala, Kyohei lo miro con molestia.

—*Lo que faltaba, otro idiota que viene a molestar*— Pensó el rubio cada vez más molesto.

— ¡Ah! Yasunari-san, ha venido en el momento perfecto— dijo Ranmaru— se sorprenderá al ver a Sunako-chan—Lo guio hasta un asiento.

— ¡Su…Sunako-chan esta lista! —Noi apareció sosteniéndose de las paredes algo cansada—valió la pena tanto trabajo— cayo de rodillas y Takenaga fue en su auxilio— ¡Sunako-chan, sal de ahí! — dijo en cuanto recupero el aliento.

— ¡esta bien! — contesto resignada, los chicos esperaban ansiosos la salida de Sunako, Kyohei trago saliva y el escritor se apresuro a escribir algo en su cuaderno.

— ¡Esto es estúpido!— Se quejo la chica, todos abrieron los ojos sorprendidos y…cayeron al estilo anime.

— ¡Sunako-chan, quítate esa capa! —Le reclamo Noi.

— ¡No quiero! — protesto, Tanaka contenía la risa.

—Sunako-sama, por favor hágalo por su tía— le pidió el secretario.

— ¡no! — Pero era demasiado tarde, Kyohei; aprovechando la oportunidad de que estaba distraída, le quito la capa y su cuerpo instantáneamente se paralizo. Sunako llevaba unos vaqueros, un peto color morado ajustado a su cintura y pechos, un delgado chaleco color beich, el cabello recogido en una media coleta; los labios pintados con un sensual brillo labial y las pestañas delineadas con un rímel negro, sujetaba una cartera. Altamente atractiva para los chicos, especialmente para Kyohei.

— ¡Sunako-chan, estas hermosa! —Dijo Ranmaru— Una vestimenta osada para una chica osada—dijo mirando de arriba para abajo a Sunako.

— ¡Kyohei di algo! — Comento Yuki.

—…—Miro a Sunako, la chica le quito la capa, pero Noi se la arrebato y la guardo en una bolsa.

—Sunako-sama, Kyohei-sama, es hora de irnos— Anuncio el secretario.

—Creo que tendré que venir otro día, Sunako-san—El escritor se acerco a Sunako—esta muy hermosa este día—le beso la mano bajo la atónita mirada de los chicos, la pelinegra estaba sorprendida, un pequeño sonrojo se diviso en su rostro, Kyohei lo noto.

— ¡Vámonos Sunako! —Kyohei jalo a la chica a la entrada.

— ¡Suerte Sunako-chan! —Dijo Noi, cuando se fueron, la chica sonrió burlona—Chicos, ¡vamos a seguirlos! — exclamo muy feliz.

—No creo que sea buena idea—dijo Yuki, pero fue arrastrado igualmente por los chicos.

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Llegaron al parque y Kyohei tuvo que comprar las entradas, mentalmente lloraba por su dinero perdido. Sunako, en tanto, estaba aterrada por tantas personas que la miraban y sobre todo porque se estaban acercando y ella no podía matarlos o Tanaka se lo diría a su tía y no quería problemas con ella.

—Señorita, ¿le gustaría tomar un helado conmigo? —le propuso coquetamente un chico pelinegro.

—Lo siento, pero estoy acompañada— se disculpo tratando de no mandar a volar a esa criatura brillante.

—Pero a su acompañante no le molestara si la invito—sonrió burlonamente.

—Ya la oíste, esfúmate— Lo miro amenazadoramente.

— ¡S…si! —Huyo despavorido y Kyohei se puso a reír.

—Criatura brillante, me siento observada—Se acerco un poco a Kyohei hasta rozar su brazo, el chico se estremeció, era como si una corriente eléctrica lo sacudiera haciéndole sentir cosquillas y una sensación placentera.

—Es tu imaginación Nakahara Sunako—Le susurro, entraron al parque y los dos estaban a punto de huir sino fuera por Tanaka.

—No creo poder aguantar esto, ¡Me voy! —La chica fue detenida por Kyohei.

—Recuerda que Tanaka esta aquí—mirando de reojo al secretario—Tenemos que perderlo de vista ¡Ya se, escondámonos en ese juego! —dijo señalando la montaña rusa.

—Lo que tu quieres es subirte a los juegos—le comento, en la cara del rubio estaba escrita la palabra "en el clavo".

—Entonces vamos—La jalo a la fila, los que estaban allí se quedaban mirando a la pareja embobada. Cuando llego su turno se subieron a la primera fila, Sunako protesto, pero Kyohei la calló diciendo que tenía que resistir. Pasaron por varios juegos, incluido la casa del terror, donde Sunako se divertido mucho y Kyohei se divertía porque las personas confundían a Sunako con los muñecos que asustaban. Competían y se reían juntos, cosa que notaron, no solo Tanaka y los chicos; que por cierto estaban espiándolos, sino que también las seguidoras de Takano.

— ¡No puede ser! Nakahara Sunako tiene una cita con Kyohei-kun! —Dijo una apuntando hacia la pareja.

— ¡Hay que estropear su cita! —dijeron al unísono. Cuando Sunako y Kyohei se subieron al barco fantasma, las chicas aprovecharon para sentarse detrás de Sunako y desabrocharle el cinturón, cuando el juego comenzó a moverse rápidamente, Sunako se cayó.

— ¡Sunako! —Exclamó Kyohei al ver a la chica caer, solo las habilidades de Sunako le permitieron salir ilesa del juego— ¿Estas bien? —Kyohei la sostuvo a tiempo de no caer, la chica estaba un poco mareada, pero nada más.

— ¡No puede ser, la esta abrazando! —Las chicas contemplaban furiosas la escena.

En el túnel del horror le cayó un hacha cerca, rasgándole el pantalón, en el pulpo volador casi le cae un tentáculo encima y en los carros chocones casi se electrocuta.

— ¡Son ellas! —Dijo Kyohei, cansado de ver tanto atentado contra la pelinegra.

—Estoy bien, no exageres—La chica le resto importancia porque así desarrollaría sus habilidades.

— ¡¿Y si te pasara algo? No me lo perdonaría…yo—Tomo los hombros de la chica, se acerco a ella—No voy a permitir que te hagan más daño—En cuanto se dio cuenta de lo que había dicho se apresuro a quitar sus manos—Lo digo porque tu tía me mataría si te pasara algo. Sunako se le quedo mirando fijamente, sus ojos brillaron, Kyohei se sonrojó.

— ¡Muy brillante! —Sunako no aguanto el sangrado nasal y corrió al baño.

— ¡Oye! — Trato de seguirla, pero sus seguidoras aprovecharon para lanzarse encima.

— ¡Tenemos que salvar a Kyohei! —dijo Yuki; los chicos estaban escondidos en un arbusto mientras Tanaka tomaba nota de cada cosa que hacían.

—Tanaka-san, ¿Qué esta haciendo? —pregunto Ranmaru.

—Estoy escribiendo lo que pasa en la cita para contárselo a Miss Nakahara—respondió tranquilamente. Los chicos temieron por lo que pudiera pasar, si la dueña de entera, seria el final de sus vidas.

— ¡Vamos a detenerlas! — Dijeron al unísono.

En el baño se encontraba Sunako tratando de calmar su hemorragia, ya estaba aguantado bastante el estar cerca de la criatura brillante, pero no sabría si lo podría hacer por más tiempo. Aunque tenia que admitir que se había divertido mucho con Kyo…el ser brillante.

— ¡Nakahara-san, eres carne Muerta! —Unas chicas seguidoras de Kyohei se abalanzaron contra Sunako, pero esta las esquivo a todas y huyo del baño.

— ¡No escaparás! — Sunako diviso a los chicos y sonrió, al fin estaba a salvo, pero una pequeña piedra le golpeo en la cabeza causándole un tambaleo, las chicas se lanzaron nuevamente, pero Kyohei llego a tiempo y salvo a Sunako.

— ¡Aléjense! —Dijo realmente furioso Kyohei— ¡Ya causaron demasiados problemas! —Las miro con unos ojos realmente fríos y amenazadores. La fans se alejaron llorando y gritando.

— ¡Sunako-chan! — Noi se acerco a la pelinegra y le reviso la herida, afortunadamente solo era una pequeña herida que arreglaría con una bandita curativa.

—Estoy bien, de verdad—Dijo, pero la cabeza le dio vueltas y se tuvo que sostener de Kyohei, agarrando su brazo, cosa que los demás malinterpretaron.

—Sentimos la interrupción, los dejaremos solos—Dijo Takenaga.

—Disfruten su cita—añadió Ranmaru.

— ¡Resiste Sunako-chan!—le animo Noi.

— ¡Esperen! —dijeron al unísono. El estomago de Kyohei gruño demandando comida.

—Prepare comida—Dijo Sunako ofreciéndole un obento, no lo miro a los ojos por lo que Kyohei suponía que estaba avergonzada, sonrió contento.

—Gracias por la comida— dijeron los chicos. Se sentaron a comer a la sombra de un árbol mientras contemplaban el día tan lindo que había.

—Tienes que admitir que la estamos pasando bien—le comento Kyohei.

— ¡Extraño a Hiroshi-kun!—murmuro ignorando al chico.

— ¡Presta atención a lo que te digo! — Le reclamo, Sunako le saco la lengua y empezaron a pelear.

— ¡Toma esto! —Sunako le lanzo un camarón frito y Kyohei se apresuro a atraparlo.

— ¡No uses los camarones para atacarme! — Kyohei lo pensó mejor, sonrió macabramente y le tiro un chocolate que había estado guardando, pero Sunako lo atrapo inmediatamente—Eres buena— Los chicos se divertían lanzándose cosas y discutiendo por todo, ignorando a todo y a todos, era como si solo existieran ellos dos. Terminaron agotados y decidieron que era hora de irse pues ya estaba anocheciendo, las luces de la noria se prendieron mostrando un espectáculo maravilloso, Kyohei miro de reojo a Sunako.

Se sentaron en la mesa del restaurante del parque todas las miradas se posaron en ellos nuevamente, Kyohei miraba con fastidio a todos y Sunako estaba distraída viendo una calavera de plástico en la tienda de regalos.

— ¡Quiero esa calavera! —Kyohei la contemplo, ¡era tan sencilla y divertida! Se paró y se dirigió a la tienda, Sunako lo siguió ya que no quería quedarse estando rodeada de tantas criaturas brillantes.

—Señor, deme esa calavera—dijo Kyohei, el señor; quien estaba embobado con Sunako, miro a Kyohei y en el ambiente una repentina tensión se sintió, Kyohei lo miro molesto y el señor enseguida le entrego la calavera, Sunako miro sorprendida al chico—Lo hago porque quiero compensarte por los problemas que te he causado— se adelanto el chico al ver la cara de la pelinegra.

— ¡Gracias! —Miro la calavera con devoción mientras Kyohei la miraba.

—Oye—Le susurro, la chica lo miro— ¿Qué tal si nos subimos? —dijo apuntando hacia la noria. La pelinegra asintió, de todos modos no pasaría nada.

— ¡Wow, se van a subir a la Noria, que romántico!—Noi abrazo a Takenaga y este se sonrojo—Nosotros también vamos.

—Vamos Yuki—dijo Ranmaru—disfrázate de chica para que no piensen mal—Ranmaru le puso una peluca.

— ¡No! —Yuki era arrastrado por Ranmaru hacia la Noria.

—Miss Nakahara, le aseguro que pronto habrá casamiento— Sonrió complacido y corto la comunicación.

En la noria se encontraban los chicos contemplando la ciudad, Kyohei miraba de reojo a Sunako, trataba de reprimir sus sentimientos, estaba confundido, nunca había tenido una cita ni nunca la había pasado tan bien con una chica, la verdad es que tenia que aceptar de una buena vez por todas que Sunako era un chica, su chica. ¡No! solo era un chica, solo le agradaba y ya, amaba su cocina, no a ella, ¡si! Eso era, no la quería a ella, solo a sus platos.

—Desearía que Hiroshi-kun pudiera ver esto—Dijo emocionada—Criatura brillante.

— ¿Qué pasa? —Espero algo ilusionado lo que iba a decir Sunako.

—Demasiado brillante—Le sangro la nariz, Kyohei se puso a su lado para pasarle su pañuelo, ella lo recibió y se limpio.

— ¿Qué ibas a decirme? —pregunto ansioso.

—La pasé bien…—Susurró, el rubio la escucho y sonrió contento, Sunako lo miro— ¡Estas demasiado cerca! —Le volvió el sangrado nasal.

—Nunca cambias—Rio divertido y rodeo a la chica con su brazo. Sunako estaba distraída viendo a un murciélago pasar así que no se dio cuenta. Cuando volteo se topo con el rostro muy cerca de Kyohei.

— ¿Qué crees que haces? —Lo miro molesta, Kyohei sonrió.

—Nada, solo miro la ventana— contesto haciéndose el desentendido.

—Entonces siéntate al frente—Le reclamo.

—Aquí veo mejor—Explico divertido por la expresión de Sunako, un repentino temblor hizo que Sunako cayera encima de Kyohei. La noria se había trancado.

—Es el momento perfecto—Dijo Noi emocionada.

—Noi-chan, deja de espiarlos— Takenaga tomo las manos de Noi.

—Takenaga-kun—Sus rostros se fueron acercando hasta que sus labios se fundieron en un tierno beso. Por otra parte se encontraba Yuki y Ranmaru.

—Te juro que te besaría si fueras mujer Yuki, de verdad que pareces una chica—Dijo Ranmaru viendo lo asustado que estaba Yuki.

— ¡Que cruel eres! Justo en esta situación—Se puso a llorar y a Ranmaru le salió una gota en la cabeza.

Sunako miro a Kyohei, la chica intento huir, pero el la atrapó en un abrazo.

—Demasiado brilla…—Kyohei le tapo los ojos.

—Así ya no es brillante, ¿verdad? —Le dijo, se estaba dejando llevar demasiado pronto—*solo esta vez, tan solo esta vez me dejare llevar*—pensó el chico.

— ¿Qué haces? — Sunako intento forcejear, pero el repentino beso de Kyohei la dejo helada…

En otro lugar, se encontraba el padre de Sunako conversando con la Tía de la chica.

—Así es, Sunako se casara con Kyohei—dijo emocionada.

— ¡No lo permitiré! Me iré a Japón ahora mismo—Corto la comunicación y salió de su oficina—Prepárate a morir, Takano Kyohei—Un tornado de fuego destruyo el edificio.

CONTINUARA…

Muchas gracias a todos por los comentarios y perdon por la demora.

Kyoehei: Te demoraste demasiado

Shion: lo se

Sunako: ¿porque me tengo que besar con la criatura brillante?

Shion: no fingas Sunako, los vi a ti y a Kyohei salir de un hotel

Kyo/Suna: o/o

Shion: ¿era verdad? O.o

Kyo/Suna: no, claro que no

Shion: Mentirosos ¬¬

Sunako: te dije que no era buena idea òwó

Kyohei: lo siento T.T

Shion: ¡que lindos! *-*

Kyo/suna: rara ¬¬

Shion: T.T !que groseros! los hare sufrir en el siguiente capi òWó

Kyo/suna: ¡noooooooooooo!