Bueno después de haber perdido el hilo total y completamente es hora de por fin vuelvan a ser adultos… ha y no sé si la gran mayoría tanto mujeres como hombres son tan o casi tan pervertidos como yo pero voy a dedicarles y cumplirles con el lemon que me venían pidiendo… sean comprensivos no soy bueno escribiendo lemon solo limes jajajaj Y PIDOS disculpas de antemano si termino escribiendo algo medio O mas bien Hentai… gracias
Matrimonio Consumado
"Yo soy tuya y tu eres mio
hasta que la muerte nos separe"
Las semanas pasaron de una forma que ninguno hubiera previsto, naruto hacia los varios reportes día tras día, detallando todo lo concerniente a la organización política, económica y militar; Sistema parlamentario, democracia, organización popular, desarrollo industrial, impuestos, incentivos a negocios pequeños, responsabilidad corporativa, subsidios, inversiones, bolsa de comercio, sistema de seguridad urbana, fuerzas armadas… armas… armas extrañas y confusas, sobre todo extrañas, utilizaban la pólvora que ellos utilizaban en los fuegos artificiales y los festivales, lo encerraban en capsulas tapadas con proyectiles, los cuales disparaban hasta docenas de ellos, cada soldados portaba entre una de estas armas capases de matar a docenas de personas con solo apretar un gatillo, personas comunes y corrientes , el sonido y su velocidad, era casi instantánea, no había forma de defenderse de eso al menos sin investigación previa… día tras día, moría y agonizaba de terribles dolores de cabeza, pasaba horas interminables buscando información que por cierto, está al alcance de cualquiera y cualquiera significaba cualquiera…. Cualquiera con una computadora, o como a él le decía, la caja mágica, que era diferente de la otra caja mágica que presentaba personitas adentro y mostraba todas las noticias recientes e incluso pasadas… tecnología era algo que a su aldea y su mundo le faltaba….
Muchas cosas habían pasado, el venerado como si fuera un dios y odiado como su contenedor, ahí también, no simplificaba las cosas, llamaba demasiado la atención, eso había dificultado su posición, y su misión, por suerte la abuela, es decir la 5ta Hokage, Tsunade-sama, había logrado en todo el tiempo transcurrido, que al parecer de naruto era demasiado, y dudaba del tiempo que le había dedicado, hacer un antídoto, después de todo la formula que habían usado en ellos era una botella de la reserva del sake , destilado personalmente por Tsunade-sama, ese sake junto con su mescla personal de chacra, era el responsable de su "eterna" juventud, en fin lo que ahora los hacía a ellos parecer de 13 y hinata de 16 es la cantidad que habían ingerido y lo adulterado que estaba, con la clara intención de matarlos… pero en vez de eso todo resulto al revés, y le permitió a pesar de todos los problemas y el trabajo que debería y debió hacer, pasaron momentos muy felices, y algunos vergonzosos, sobre todo vergonzosos….
Ahora volvamos con la actualidad, el rubio tenía un serio problema caminando frente a el…..
(advertencia aquí empieza el lemon … quedan advertidos, si usted es menor o un otaku no tan perver… no continue leyendo)
-NARUTO POV-
Me llamo naruto Uzumaqui namikaze, soy todo un hombre hecho y derecho pero aparento la edad de un crio de 13 años… estoy intentando terminar el décimo reporte en dos días, estoy cansado y fastidiado de todo, pero la mayor razón de mi frustración está caminando frente a mis ojos… hinata hyuuga toda una colegiala que comenzaba desarrollar un cuerpecito de mujer, o mejor dicho que ya desarrollo. Tiene unos preciosos ojos verdes perla, un pelo negro azulado, largo en melena, y una expresión de infantil felicidad que daba gusto verla. Se que le dije que tomáramos esto con calma pero los últimos días sus provocaciones van más allá de cualquier cosa… y aunque me diera pudor en un principio, no estoy hecho de cartón para ser indiferente a ella… sobre todo por el mar de hormonas que vuelve a ser un problema…
En casa Solo yo era algo pudoroso, pero mi esposa casi sin ningún pudor lleva días en ropas menores, cenando después de ducharse solo con una toalla, paseando con shorts cortos o minúsculas faldas, y a llegado al punto de pasar todo el día en Braguitas. En fin, el otro día… que un buen día, salí de la cocina rumbo a la sala de estar para ver algo la TV cuando escuché unas largas maldiciones, que salían de nuestro cuarto. Dando un portazo, ella salió de la habitación, y al verme se frenó un poco de su mal humor. -Oh, Naruto-kun, disculpa….¿Has visto mi falda de cuadros, la plisada?. -No, ¿por qué?. - -Porque Takimura-san -la delegada-, vendrá dentro de poco y quiero ponerme esa falda….¡y no la encuentro! (hinata siempre intentaba parecer más provocadora frente a la delegada como demostrándole que este era su territorio, y no voy a negar que no me molestaba es más me ponía feliz y contento el verla tan celosa) . Se fue al cuarto de baño a buscar en el cestón de la ropa sucia, pero antes de desaparecer de mi vista, por un segundo, miré a las apretaditas braguitas de dibujo de fresa que mi adorada hinata. Me dio la impresión de que iban a reventarle. Y en ese momento, lo vi: un bultito en ellas, prominente, que indicaba su intimidad sexual y su (parte femenina) en desarrollo. Ver ese bultito, sobresaliendo de sus braguitas, que parecían dos montañitas me dejó anonadado. Un brusco azoramiento recorrió mi cuerpo y antes de darme cuenta, estaba totalmente erecto bajo mis pantalones. No podía creerme que ese bultito pudiera provocarme semejante reacción. Me fui a ducharme a ver si intentaba tranquilizarme. Estuve tonteando un buen rato, y finalmente pude quitarme de la cabeza esa imagen tan obscena de aquel bultito. Creyéndome a salvo de tentaciones, proseguí mi vida sin problemas, pero al siguiente día, Hinata volvió a salir en braguitas de su cuarto, preguntando por cierta prenda que no estaba segura de tener. Yo me encontraba leyendo el periódico e informándome como de costumbre en la sala y no presté mucha atención, hasta que de refilón escuché a hinata decir "O que tonta soy, pero si lo deje en la sala, junto a la TV". Escuché unos pasos y hinata se presentó ante mí como la otra vez, solo con sus braguitas de dibujos de fresa. -Perdona Naruto-kun, es que ayer dejé aquí por accidente este top. -No pasa nada-dije, sin levantar la vista del periódico-. - - -Mmmmm…¿tan interesante es lo que lees?. Movida por la curiosidad, se acercó y echó una ojeada, mirando por encima de él. Sin darse cuenta, quedó enfrente de mí y de nuevo, ese bultito delantero asomó desafiante por sus braguitas. Mientras ella miraba las noticias yo la miraba y un instinto animal se despertó en mi interior. Aquella actitud de hinata me estaba desafiando a que me la devorara con glotonería, y la hiciera mía. Luego miré su cuerpo y me quedé embobado: su cintura estrecha, sus caderas, sus nalgas firmes y tersas, sus piernas, y la línea perfecta que dibujada su espalda me maravillaron por completo. En cuanto Hinata se fue me quedé clavado en el asiento, y como la otra vez, en un estado de excitación que hasta pasada una hora no pude bajar la erección que tenía.
La situación se hizo insoportable, y además, parecía que ella me provocaba, ya que a partir de entonces la veía a menudo solo con esas braguitas por la casa, siempre buscando una prenda que ó bien había olvidado donde estaba ó bien había perdido. Finalmente, llegué a mi límite, y me dije que, sin importar quien cayese, íbamos a consumar ese matrimonio. Pasaron tranquilamente dos semanas, tal vez más, hasta tener la ocasión adecuada. Nos dieron algunos días libres de la academia o colegio al que concurríamos. Así que, esa calurosa noche, tras desearle buenas noches, fingí acostarme y esperé oír los sonidos de su respiración dormitada. Sabía que tanto ella como yo dormíamos como un tronco, de modo que no me esperé visitas. Furtivamente decidí atacarla esa misma noche, mire y allí estaba, preciosa entre las blancas sábanas, con su carita de ángel perdida entre sueños preciosos, a juzgar por la sonrisa que esbozaba. Debía ir con mucho cuidado con la maniobra que tenía pensada. Cogí las esquinas de la colcha y las sábanas y poco a poco, con cuidado, comencé a tirar de ellas. Estuve un buen rato con ello hasta que finalmente quedó desnuda sobre la cama. Y, de nuevo, ese bultito, esa maravillosa vulva en desarrollo que me volvía loco. Lentamente me acerqué y olí su fragancia. Embriagador, afrodisíaco, excitante, dulzón…pura lujuria. El cuerpo de mi Hinata exudaba un olor de sexualidad natural que me atraía poderosamente. Desplacé mi mano sobre sus braguitas y comencé a tocarla, pasando los dedos de arriba abajo, recorriendo sus braguitas a lo largo. Me empalmé con rapidez, mientras por fin tenía entre los dedos ese bultito extraordinario, maravilloso, sensual. Podía sentir como se endurecía. Hinata no tardó en comenzar a gemir y removerse en la cama, presa de la excitación que yo le daba. Movido por el morbo, desplacé un poco sus braguitas y pude ver, en todo su esplendor, su virginal intimidad, un poco húmeda de mis caricias. Que belleza de chica, como me encantaba. Sus enormes pechos, aplastados contra su cuerpecito de diosa, eran bellísimos, coronados por unos pezones rosaditos, duros del placer que tenía. Me quedé embelesado mirándolos. Su cara se contraía de placer y sus gemidos me decían que casi iba a gozar. Por temor a no tengo la más pálida idea, después de todo no sé si era que necesitaba algo de confianza o si simplemente sabía que si lo hacía si no estaba bien, o quizás provocar que se despertase y me odiara por asaltarla de esa forma, me fui a la cama dejándola así. De momento me conformé, pero luego, ya iría a más. Aquello se convirtió en un vicio. Cada vez que podía esperaba a que se durmiera y la tocaba un poco, deleitándome con sus gemidos y jadeos. Estaba preso de un deseo todopoderoso de hacerle el amor a mi Hinata. Aterrado por la idea de ser descubierto, no podía ir a más como deseaba, y siempre me detenia antes de que ella despertara, un sentimiento de tristeza y frustración se apoderó de mí. Por lo menos podía deleitarme con la visión de su cara de placer y su cuerpo tembloroso al acariciarla y amarla. Si señores era un cobarde, musito mi mente.
Sin embargo, lejos de imaginarlo, pasó algo que lo cambió todo. Fue anoche, Hina-chan siempre ha tenido un miedo irracional a las tormentas, y coincidió que una muy fuerte estalló. Asustada se acostó junto a mí y pregunto. -¿Puedes abrasarme Naruto-kun?. -Sí claro. Ven conmigo. Se metió muerta de miedo. Cuando sonó un trueno se abrazó a mí y le aferré fuerte para consolarla. Entonces sentí un arrepentimiento de todas las veces que entré para tocarla, cuando de repente dijo: -¿Te gustó tocarme por las noches Danna-sama?. Me quedé helado. Mi Hina-chan lo sabía. ¡Lo sabía todo!. -¿Des-de cuá-ndo lo sab-es-? pregunté-. -Desde hace pocos días. Al principio creí que serían sueños nocturnos, pero siempre despertaba con la colcha y la sabana en el suelo y comencé a sospechar. -Lo siento mucho, hinata-chan. Yo…es que…no sé que decir-espeté, avergonzado-… -No hace falta…si a mí me gusta… Su respuesta me dejó atónito. Aquello sí que no me lo esperaba. Además lo dijo con una alegría tan infantil, sin malicia, que me dejó perplejo. -¿T-te gus-gus-ta-pregunté incrédulo-?. -Sí…me hace sentir tan bien…Llevo meses tratando de llamar tu atención y quizás pensé que solo necesitabas confianza en ti mismo por eso no me lance sobre ti…Sabes tocarme y me encanta…vuelve a hacerlo Naruto-kun…tócame como lo hacías antes…Además, llevo tus braguitas preferidas…-
Me las enseñó, y efectivamente, eran las famosas braguitas de dibujos de fresa. Su cuerpo junto al mío, semidesnudo, precioso, azoró mi alma. No iba a dejar la pasar la ocasión. Por fin, tras semanas de roses, podía darle todo lo que quería. Descorrí la sábana para quedar libres de pudores y sin más metí mano entre sus piernas por encima de sus braguitas y apresé entre mis dedos ese bultito objeto de mi deseo. Con mi dedo lo recorría de arriba abajo, notando como su clítoris se endurecía. Hinata cerró los ojos y se dejaba tocar. ¡Ni en mis más locos sueños hubiera imaginado esto!. Yo, tocando a mi hinata, y ella dejándose hacer. Su carita se relajaba, gemía dulcemente y sus labios entreabiertos se me antojaba probarlos. Acerqué mi cara a la suya y, con la mano que me quedaba libre en su mejilla, nos dimos el primer beso. Húmedo, tierno, cálido, sensual…una amalgama de sentimientos cruzo nuestros cuerpos. Su lengua jugaba con la mía, su cuerpo pedía a gritos que lo amasen, y allí estaba yo para hacerlo. La atraje hacia mí y continué con el masaje en su intimidad preciosa. Sus jadeos ya eran grandes y la sentí derretirse en mis manos. Mi preciosa Hina estaba rendida al amor que le entregaba y la iba a hacer sentir en el cielo, iba a dar lo mejor de mí para conseguirlo. Ya no pude reprimir las ganas y dejé de tocarla y besarla. -¿Es que ya no me quieres Naruto-kun?. Me dijo -Claro que sí, pero quiero hacer algo que siempre he querido y hasta ahora no podía. Te va a encantar. -¿Seguro?. -Seguro-contesté con firmeza-. Hice a mi Hina abrir bien las piernas. Me puse a la altura de sus braguitas, las desplacé a un lado y comencé a pasar mi lengua por su pequeña intimidad preciosa. A la primera lametada ella quedó impresionada. Su sabor no me decepcionó: dulzón como caramelo, ó quizá almizcle. Comencé a saborear su intimidad con fluidez y devoción, y ella, mimosa, disfrutaba de mi lengua mientras ponía sus manos en mi cabeza para decirme que siguiera mientras su pequeño cuerpo se retorcía de placer. -Aaaayyyy…sí Naru…sigue….uuummmm que rico, que rico….vamos Naruto…que bien…ay que gustito tengo…que gustitooooooooooooooo… Cada palabra me alentaba a continuar. No tardó en comenzar a humedecerse como vainilla, chorreando abundantemente sobre mi cara. Me bebí todos sus jugos como un poseso, enloquecido con el sabor de mi pequeña Hinata. Ni de niño, con los envases de ramen de edición limitada, era tan goloso. Mis manos, cansadas de sentir la tersura de las piernas de Hinata, subieron hasta sus tiernos pechos y los amasé, acogiendo sus pezones entre mis dedos. Luego los moví a todos lados y di pequeños tirones que provocaron pequeños gemidos que renovaban mis esfuerzos. Mi lengua buscaba penetrarla un poco, sin forzar su virginidad, para gozar más de ella. -AAAAAAH AAAAAAAAHHH…NARUTO QUE RICO…QUE BUENO ES NARU… ME GUSTA…ME ENCANTA…SIGUE NARU SIGUEEE…. -¿Ves como ibas a disfrutarlo-pregunté con malicia-?. -SÍ NARU…DAME MÁS…DAME GUSTITO… -Mmmmmm…que bien sabes…me encanta … eres preciosa Hinata…te adoro… -Naru…¡NARU!...SIENTO QUE ME…AAAAH AAAHHH… - -SÍIII NARUTOOOO… AAAAH AAAAH… OOOOOOHHH OOOHHH….¡OOOOOOOOOHHHHHHHHH!... Con un sonoro gritó, Hinata creo tuvo su primer orgasmo. Su cuerpo se relajó por completo en la cama, sin fuerzas, y su carita era la viva expresión del goce. Luego probé sus pezones, que resultaron ser néctar de dioses, y después me estuve besando con ella largo rato, abrazados tiernamente, intercambiando miradas de amor. Sus preciosos ojos perla parecían devorarme. De nuevo miré el bultito y vi como sus braguitas tenían un enorme borrón de humedad que me hizo reír de satisfacción. En ese instante me sentí en el cielo, con mi amantísima niña en mis brazos. -Naruto te quiero-me dijo, casi adormecida-…eres el mejor Esposo del mundo… -Yo también te quiero mi Hinata… - -Quiero devolverte el favor. Seguro que te gustará. Me hizo sentarme a los pies de la cama y ella se puso de rodillas enfrente de mí. De repente comprendí lo que iba a hacer. -¿Segura que quieres hacerlo?. -Sí, segura. Además, sé que lo disfrutarás de mí tanto como yo de ti. Con sus manitas tocó mi miembro y comenzó a darle besitos. Aaaaahhh que maravilla. Cuanta devoción en ella, con que mimo trataba mi pxxc. Me pajzxxba ligeramente mientras me lo besaba por todas partes. Me recliné un poco hacia atrás, sin echarme en la cama, y dejé que ella tomara el control. Sus ojitos tiernos me miraban extasiada, viendo como sus labios y sus manos me hacían disfrutar. Aparté un poco su pelo para que no la molestara y prosiguió con sus caricias en mi manubrio. Lancé un gemido de dolor entre dientes, debido a la erección tan fuerte que tenía por sus caricias. En una maniobra que me pilló por sorpresa, comenzó a pasar la lengua por mi intimidad como una profesional. Cuando la pasaba por el glande notaba que yo gemía más y comenzó a darle más lametadas en él. Tuve deseos de apresarla entre mis piernas, pero debía contenerme y dejar que ella hiciera lo que quisiese. Sus besos se hicieron más fuertes y sus manitas ya me estaban haciendo una terrible paj#"! que me provocaba roncos jadeos y perversas fantasías. Vi a hinata con mi miembro en su boca y me sentí como el desfallecer, pero aún así no podía dejar de gozarlo. -Aaaaah aaaaaaahh…vas a hacer que me corra Hinata…no puedo más… -Vamos Naruto-kun…yo también me beberé tus jugos…córrete…córrete sin miedo… -¿De verdad…quieres tragártelo?...aaaaaahhh… -Si tú disfrutaste con mis jugos, yo lo haré con los tuyos. - De nuevo mostró esa devoción y ternura que aun latía en ella, con esa inocencia que me excitaba. Ayudado por sus palabras, me dejé llevar, Hinata aceleró y abriendo su boca esperó que yo gozara. Con un ronco gemido, comencé a eyacular y con mucho esfuerzo abrí los ojos y la vi tragándose todos mis jugos. Un poco le quedó en la comisura de los labios, pero el resto se lo tragó como una glotona. -Mmmmmmmm…saladito-comentó-…pero muy rico Danna…¿podré beberme más leche tuya?. -Claro que sí. Cuando tú quieras. Se limpió su boca los restos tenía en sus labios y nos fuimos a dormir como dos amantes enamorados. Nunca pensé que hacer el amor con hinata me haría tan feliz. El olor de su cuerpo, tan pegado al mío, me llevó a un mundo de pasión y deseo que jamás había conocido, y perdido entre mis fantasías me dormí plácidamente. A la mañana siguiente fuimos nuestro cuarto al regresar del colegio , y se lo dije con mi cabeza entre sus piernas, preparándola .-Hinata…voy a hacerte el amor… -¿De veras, Danna?. -Sí. Ya estás preparada y bien mojadita, y yo también estoy a punto. – me puse en posición delante de ella, y cuando estaba por hacerlo mira en busca de su aprobación… Me miro a los ojos y con un aire de inocencia, la ultima que estaba a punto de barrer, me dijo-Por favor se gentil-, esas palabras junto con su carita de susto era demasiado estimulante tanto que aria perder el control a cualquiera, con toda mi fuerza de voluntad, comense a introducirme en su intimidad y al chocar con la barrera de su virginidad, me introduci todo de un solo golpe para no alargas de más la agonía de su sufrimiento, ella lanzo un gemido ahojado y pequeñas lágrimas de dolor comenzaron a salir, la bese y con una tanda de besos recogí cada una de sus lágrimas con mis labios, intente permanecer inmóvil para mitigar su dolor pero ella me indico que quería que empezará a moverme.
Comencé a moverme dentro de ella, a hacerle el amor, y ella cruzó sus brazos por mi nuca y ponía mi carita entre sus pechos. No tardó en pasar del dolor al placer y sus gemidos me decían que ya estaba disfrutándolo como nunca. Era el cenit del goce. Nunca había sentido algo similar, su intimidad apretada era simplemente maravillosa. Cada centímetro, cada milímetro de mi miembro era estrujado y retorcido por su maravillosa estrechez. Yo disfrutaba sintiendo su opresión alrededor de mi intimidad y de la calidez que emanaba de ella. Seguí haciéndola el amor y levantándola, la hice sentarse sobre mi regazo, con sus finas piernas alrededor de mi cintura y sus brazos en mi nuca. Sentí que tocaba el fondo de su interior, preciosa y no pude reprimir las ansias de poner mi mano y sentir como su intimidad se tragaba todo mi miembro. Que delicia de mujer, que pasión.
- -Aaaahh…te quiero Naruto….te amooooooooo…que rica ver#"…Uuuuuummm-se relamió-…ámame Naruto…hazme sentir más rico…más, máaaaaaaaaaaaaas… -Te quiero Hinata. Eres una Mujer preciosa y bellísima. Te amo. -Dame más…aaaaaaaaaahhh aaaaaaaahh aaaaaaahhh aaaaaaaaaaaahhh… -Oooooooohhh que bien me estrujas mi amor…que caliente eres princesa… -Naruto…voy a correrme…voy a correrme…aaaaaaaaah aahhh aaaaaaahhh… -Espera un poco…estoy casi a punto…espera…uuuuuuummm…uuuuumm uuummm…aaaaaah aaaah aaaaaahh aaahhhh…. Seguí bombeando dentro de ella un poco más hasta sentir que ya estaba a punto. Hinata pudo aguantar sus ganas y así pudimos gozar al unísono, tal como yo deseaba. -Ya…ahora cariño…córrete conmigo…goza conmigo amor… -Síiiiiiiiiii…me corro Danna me corro…..aaahhh aaaaaaaahh aaaaaaaahh AAAAAAAAAAAHH AAAAAAAAAAARRR RRRRRRRRRRRGHHHHHH… -TE QUIERO HINATA…TE QUIERO MUCHO…TE QUIEROOOOOOOOOO AAAAAAAAAAAAARRRRRRRRGGGHH…
Nunca imaginé que me duraría tanto la sensación de un orgasmo como al gozar con ella. La atraía hacía mí, la besaba, la amaba, acariciaba sus pezones y los mordisqueaba con mis dientes. Quedamos inmóviles un poco, hasta que nos echamos en la cama, agotados, bañados en sudor. - - -Naruto…ha sido precioso…te amo-y me besó profundamente-… -Yo también…Ahora somos un matrimonio con todas las de la ley... -Sí Danna, al fin somos marido y mujer, tu eres mio y yo soy tuya, en cuerpo y alma. Me sonrió y le dije que durmiéramos…
-FIN NARUTO POV-
-HInata Pov-
Desperté después de esa maravillosa noche de pasión que me chiquitín rubio me había dado, por fin esos miedos, dudas e inseguridades propias habían desaparecido, y naruto entendió que para que algo especial como nuestra primera vez, no hacían falta tantas preparaciones, lo único que era necesario que amor… amor entre los dos y pasión, propia de dos amantes, no importa el lugar, el momento ni el día o la hora, solo hace falta que estés con la persona que amas con todo tu corazón y estes segura de sus sentimientos hacia ti, solo eso hace falta para que no se convierta el algo pasajero o de momento y dure para siempre…
-Y bueno será mejor que guarde eso- se dijo mientras guardaba dos revistas una con el título "21 maneras de avivar a tu novio lento" y la otra que decía, "Cocina afrodisiaca volumen 1 y 2"
Se rio mientras oculto las revistas y dijo en vos alta –Bueno quisas solo necesitabas ese empujoncito naruto-kun- -jijijijij- ….
-Fin Hinata Pov-
Mientas Hinata regresaba a la cama junto con su dormilon rubio, se dio cuenta de algo y tomo una botella y dos vasos, el rubio despertaba apenas abriendo los ojos mientras recordaba cada una de las cosas pasadas la anterior noche, y adquiria un tono rojo fuego ante la mirada divertida de hinata…
-Na-ru-To-, dijo deletreando su nombre silaba por silaba con una vos terriblemente sensual… -Tsunade-sama nos envió ayer el antídoto y no lo hemos tomado-
Dijo mientras serbia un vaso para cada uno, -Por nosotros se escucharon dos voses en la habitación antes del brindis… antes de que un alarido de terror pronunciado por la vos de naruto inundara el susodicho lugar…
-HINATAAAAAAAA!- se escucho mientras el rubio mantenía desmayada a la ojiperla en sus brazos…
Bueno primero que nada no me maten soy coreano ajjaja no enserio voy a ponerme las pilas y a seguir y terminar un par de mis historias… y segundo la posta no sabia como carajos segirla y darle algo de coerencia, pero déjenme decirle que después de esto ambos vuelven a ser adultos y las cosas serán casi como al principio… segundo quiero agradecir a trigo-sama y a otras personas que no recuerto al momento de escribir esto mañana leo bien lo revirws y añado sus nombres pero enserio gracias por sus comentarios tan alentadores… amigo trigo-sama mañana leo tus historias y le dejo una critica constructiva tal cual me la pedistes… saludosa todos y espero que les guste este LEMON-continuacion espero que no sea un fiasgo porque es mi primera ves o quisas segunda escribiendo algo parecido… solo soy bueno con el hecchi saludos espero sus comentarios de como estuvo este cap cortito