Por fin, aqui esta el epilogo de esta historia... la verdad he disfrutado haciendola, sobre todo por sus comentarios, creanme que en saber que les gusta lo que hago me hace sentir halagada y feliz...

por eso MUCHAS GRACIAS a todas las chicas que se tomaron el tiempo de leer, que sigueron a Bella y a Ed en esta aventura algo rara :)

Gracias a quienes agregaron esta historia a sus favoritos, o a esta, su humilde seguidora en autores. GRACIAS por los reviews que hacen inmensamente feliz a la Simi :B

en fin gracias gracias por su tiempo... ya saben que la Simi los lleva en su corazon

ahora si... disfruten y hasta la proxima

*Personajes de S.M*... la historia que hoy llega a su finale definitivo es mia.

Epilogo

2 años después…

EPOV

-Papito… ¿Rónde esta el veztiro rozita que me compo tia Ali?- mi hija Elisabeth me pregunto arrugando su naricita, un gesto tan "Bella", mientras sus ojitos vagaban por la inmensidad de su closet, cortesía de sus locas tías, mis queridas hermanas, Rosalie y Alice

-Creo…- dije cuando comencé a buscar desesperadamente ese pequeño pedacito de tela rosa, que mi hija había decidido, que era su nuevo vestido favorito del momento.- creo que está sucio corazón.- gire mi rostro para ver a mi pequeñita haciendo un mohín adorable.

-Pedo noo.- los ojos de mi hija se comenzaron a llenar de lágrimas. ¡Diablos no puedo soportar verla llorar!… ¿Ahoda que me voy a poned papito?- me miro a los ojos con un puchero en sus cara, mientras el labio inferior le temblaba por estar a punto del llanto.

-No llores mi amor.- dije cuando me acerque y la tome en mis brazos.-Que te parece si te pones el vestido azul que te dio la abuela Renee. Ese también te gusta mucho ¿Recuerdas?- le propuse a mi hermosa hija mientras pasaba una consoladora mano por su pequeña espalda. Ella tenía los brazos alrededor de mi cuello, mientras enterraba su carita en el hueco debajo de mi barbilla.

-¡Ziiiiiiiii Papito!.- Chillo Elisabeth de alegría, con sus grandes ojos chocolate iguales a los de su madre.- Con eze tamien me veo bonita ¿Vedad?- Mi hija siempre me tenia impresionado con sus hermosas expresiones, era tan parecida a su madre, pero a la vez, es tan Elisabeth, tan única, y realmente adorable.

-No mi amor.- le dije serio mientras negaba con mi cabeza.- Te ves realmente hermosa.- en mi cara se instalo una sonrisa bobalicona.

-Te amo Papito.- me dijo dándome un beso tronado en la mejilla, para después abrazarme fuerte. No pude evitar sonreír como idiota ante eso.

-¿Mucho o poquito?- le dije moviéndole mis cejas hacia arriba. Adoraba picar a mi hija.

-Mucho, mucho papito.- me dijo entre risas.- Edes el papito más bonito, guapo, intedigente, madavillozo, lo mázimo, el dey del todo el muno, me taes loca, el incleidble, medo medo, papucho….¿Cual me falta papito?- solté una carcajada mientras ella enumeraba con sus deditos las palabras.

-¿Inigualable?-le pregunte entre risas. Desde que nación, siempre le repetía palabras así. Bella decía que la estoy aleccionando para que me diga "los 20", que son palabras que reflejan admiración y amor. Pero para mi hija y para mí es como un juego, porque siempre le enseño una palabra nueva, que se suma a la lista. Lista que crecerá hasta juntar los 20.

-Inidualable papito.- soltó mas risas, a las que yo me uní después. Adoro a esta niña con toda mi alma y mi ser.

-Y yo te amo Lizzibell.- le dije dándole un cariñoso beso en la coronilla.-Mucho mucho.- agregue mientras la mecía tiernamente.-Pero tenemos que apurarnos, que no podemos llegar tarde a la ceremonia, hermosa.- mi hija comenzó a reírse mientras me apretaba mas fuerte con sus bracitos, para después prácticamente saltar al suelo y comenzar una enloquecida búsqueda de su vestido azul.

Es la ceremonia de titulación de mi Bella. Ella ya está en la escuela, para todas esas cosas y firmas, que se tienen que hacer antes del evento, por eso me toco la tarea de vestir a nuestra hija. Aunque no puedo quejarme, siempre disfruto de nuestros momentos a solas.

Después de la entrega de papeles, habrá una pequeña recepción. Afortunadamente Alice ya se encargo de llevarse el vestido de mi Bella. Rose y Emmett pasaran por mis suegros, Charlie y Renee. Y mis padres nos alcanzaran allá.

Yo me vestí con un sencillo traje negro. Y me dispuse a esperar a pequeñita aparecer, y es que a pesar de tener apenas dos años, es autosuficiente, perspicaz, inteligente y con una capacidad de razonamiento envidiable. Y ahí estaba ella, viéndose completamente adorable con ese vestidito azul, sus rizos castaños, sus brillantes e inteligentes ojos chocolate y sus mejillas con un hermoso rubor.

-¿Lista lindura?- pregunte mientras aseguraba el cinturón de seguridad de su asiento.

-Dista papito.- dijo mi bebe con un asentimiento.- Ya quiedo ved a mi mami.- me dijo con una exuberante sonrisa.

-También yo quiero ver a mami.- le sonreí de vuelta, mientras nos encaminábamos hacia la ceremonia y ver a "mami"

BPOV

Por fin, después de un gran esfuerzo por terminar la escuela, estoy a unos minutos de titularme…. Y después de tener a Elisabeth y casarme con Edward, el realizarme profesionalmente es un plus a mi maravillosa vida.

Seis meses después de casarnos, regrese a la universidad, Edward, mi maravilloso, hermoso, increíble, sexy y delicioso marido, siempre me ha motivado para realizarme como mujer, para ser mejor persona.

La verdad estaba muy ansiosa… y es que por alguna extraña razón, mis compañeros me propusieron para dar el gran discurso de despedida. Cosa que de verdad me ha tenido de los nervios, por días. Jamás he sido buena para actuar en público, ni hablar, ni nada que me haga ser el centro de atención.

Mis nervios se calmaron un poco, en cuanto vi cruzar por la puerta a mi flamante marido, con mi hermosa hija de la mano. El viéndose maravillosamente delicioso y apetecible con ese traje negro, que marca sus anchos y fuertes hombros, además que el color contrasta de una manera hermosa con su piel, haciendo que esas esmeraldas de sus ojos brillen. Y qué decir de mi hija, que se ve completamente hermosa, con su piel blanca, y sus cabellos castaños, cayéndole en rizos por sus hombros.

-Señoras y Señores por favor denle un fuerte aplauso a la alumna Isabella Cullen Swan, quien dará el discurso de despedida de su generación.- comento la maestra McGregor, mientras yo me dirigía al estrado.

¡Solo no te caigas Bella!…. ¡Y no te quedes callada!…. ¡Y por el amor a todo lo sagrado no te vayas a desmayar!

Me grite a mí misma mentalmente, mientras me acercaba al micrófono y recordaba cómo era la función básica de inhalar y exhalar.

-Buenas noches….- inspire aire para comenzar mi discurso…. ¡MIERDA!

-Buenas noches autoridades educativas, compañeros y familiares que se encuentras aquí reunidos.- aclare mi garganta.- Saben, he pasado unos días bastantes malos queriendo escribir un grandioso discurso, para no defraudar a mis queridos compañeros aquí presentes.- sonreír muy a mi pesar, cuando vi a mis dos amigos de la escuela Grace y a Julian, levantando sus pulgares hacia mi.- Lo cierto es que nunca he sido muy buena oradora.- se oyeron risillas disimuladas.- Tampoco tengo talento de escritora, y jamás he tenido éxito en motivar a las masas.- se oyeron risas mas fuertes… y carcajadas de mis cuñados y mi marido.- Pero permítanme decirles algo que si se.- suspire y sonreír al ver a mi hija parada en los hombros de Emmett.- Se lo que es tener sueños imposibles, y escuchar a todo el mundo diciendo que no existe tal cosa para ti… Y saben que, esa gente tenía razón….Sin embargo, encontré algo muchísimo mejor, como el hecho de estar aquí, parada frente a ustedes.- pase mi vista donde estaban sentados mis compañeros de generación.- Así que en lo que sea que hagan, pongan su mejor esfuerzo, incluso si todo lo que están haciendo es perseguir un arco iris sin final. Tal vez nunca lleguen al final de él, pero a lo largo del camino encontrarán gente que va a significar el mundo para ustedes.- mi mirada se dirigió a mi marido y a mi hija entre la audiencia.- Y van a hacer recuerdos que los mantendrán calientes incluso en las noches más frías.- aclare mi garganta nuevamente.- ¡Hey! Que se jodan, que si hemos alcanzando este arcoíris….Gracias a todos por venir…. – Estallaron aplausos y silbidos en el salón, pero yo solo fui consciente de esos ojos verde intenso que hacen temblar a mis piernas.

Después de toda la ronda de felicitaciones y fotos, estamos en la ceremonia de graduación… Afortunadamente mi querida cuñada Alice, me había traído un hermoso vestido Azul marino, ahorrándome el viaje a casa…. En la mesa estaba sentada la gente más importante en mi vida… Mis padres Charlie y Renee, quienes estaban teniendo serios problemas para contener el llanto, mis suegros Esme y Carlisle, y mis cuñados, hermanos y mejores amigos, Alice y Jasper, y Rosalie y Emmett. Rose quien en brazos tenia al pequeño Emmett de solo 6 meses de edad. Y los más importantes Edward y mi hija Elisabeth….

-Familia quiero proponer un brindis.- dijo Edward poniéndose de pie, mientras llamaba la atención de todos en la mensa.- Por los arcoíris inalcanzables, las malas palabras, el verdadero amor, el buen sexo, y la nueva vena oradora en la familia, Bella.- Edward levanto su copa, seguido de todos nosotros.

-Salud.- dijimos todos en voz alta para después estallar en risas.

-Yo también quiero proponer un brindis.- dije poniéndome de pie y aclarándome la garganta.- Por el papá más sexy y caliente que será padre nuevamente dentro de aproximadamente ocho meses y medio.- dije entre risas siendo seguida por un coro al unisonó de "Salud" de todos los presentes…

Bueno de casi todos, pues mí querido Edward tenía los ojos muy abiertos por la sorpresa…

-Hermano, eres potente.- Emmett estallo a carcajadas mientras le daba palmadas en la espalda a Edward para que reaccionara…

En un momento estaba de pie, alzando mi copa para brindar, y al segundo estaba en los brazos cálidos de Edward…. No puede evitar que una oleada de pasión me recorriera el cuerpo, este hombre siempre provocaba eso en mí.

-Cuando creo que no podrías hacerme más feliz de lo que me haces.- me susurro al oído con su voz pesada por la emoción.- siempre te las arreglas para sorprenderme Bella.- me agarro la barbilla para poder clavar su mirada en mi.- Te amo Bells

-Y cuando creo que yo no podría amarte más de lo que te amo.- dije al tiempo que le daba un suave beso en los labios.-Resulta que abres la boca, diciendo cosas como esas, y me tienes a tu merced.- me reí para después ponerme seria mientras me perdía en su ardiente mirada.- Te amo Edward…

-Yo tamién te amo papito.- nos grito Elisabeth desde la silla donde permanecía sentada, haciendo que todos en la mesa estallaran en risas…

Yo sé que mi hija también está completamente afectada por ese hombre llamado Edward "el hermoso" Cullen, alias su papito, o mi Ed… el mejor padre, esposo, amigo, amante que podría haberle pedido a la vida….

Y como decía….Tal vez hace unos años, mis sueños no involucraban el estar sentada aquí, ahora, con una hija y un esposo… pero no me podría haber pasado algo mejor… tal vez y solo tal vez para que las cosas salgan bien, tienen que ir mal….

Porque ¡Vamos! Quien iba a decir que ser un bicho raro de la genética, sufriendo un embarazo espontaneo, regresando a eso que literalmente se traduce a "pueblo chico infierno grande", me iba a conducir directamente a EL….

Directo a la vida, a la felicidad, al amor, al buen sexo, a Edward…

FINALE!

GRACIAS, y por ultima vez sean buenos con la Simi y dejenle saber que les parece...

la Simi los quiere y los lleva en su corazon :D