GARDEROBE GAKUEN

"Formando señoritas hoy y siempre"

Capítulo 11.

- "¿Cómo está?

- "Se encuentra estable, le he aplicado un medicamento pero si el dolor no cede, tendremos que llevarle a un hospital"

- "¿Qué es lo que pasó?"

- "En cuanto despierte lo averiguaremos"

- "Pero ayer se encontraba perfectamente bien... Si algo le pasara a Natsuki, yo..."

- "Calma Miss Maria, Natsuki-kun estará bien"

- "Pero, ¿qué es lo que tiene?"

¿Qué me pasó? Me duele todo, siento como si me hubieran atropellado, no puedo moverme, no puedo despertar. Esta no es mi cama, el colchón es tan incómodo como el de la enfermería, lo sé porque he estado aquí demasiadas veces últimamente. No es que estuviera enferma, pero estos días he recurrido mucho a este lugar ya que la situación se ha tornado intolerante. Los dos últimos meses han sido una verdadera pesadilla, todo Garderobe es sinónimo de horror para mí.

Entre Nao y Kanzaki han hecho de mi vida un tormentoso purgatorio, he expiado todos mis pecados de una vida en el breve lapso del tiempo que he convivido con ellos. No puedo creer que esté deseando una vida con Saeko tan afanosamente, en vez de la que llevaba antes. Esta situación es como la que pasé en Tokio cuando irrumpí en la relación de Akane con el sensei, sí, el principio de mi fin. Un lío de faldas, así fue como mi padre me mandó con la tía para componer mis malas conductas. Por golpear al profesor de Tokio gakuen fui expulsada y enviada al correccional, digo a Garderobe.

Ya recuerdo, ayer fue un día de pesadilla también, Nao estaba en lo correcto, Kanzaki no tardaría en hacer algún movimiento desesperado para tenerme y casi logra que me muera el día de hoy. Esto es demasiado para mí, alguien, cualquiera, ¡sáquenme de Garderobe!

- "¿Natsuki-kun?" - Dulce voz femenina, esa tiene que ser Yohko-sensei - "¿Estás despierta?"

- "Sen-sei..."

- "Parece que el dolor ha cedido, el antiespasmódico hizo su efecto a tiempo"

- "¿Cómo llegué hasta aquí?"

- "Sugiura-sensei te cargó en cuanto comenzaste a pegar de gritos"

- "Es verdad..."

- "¿Desde cuándo tienes molestias?"

- "¿Molestias?"

- "Dudo mucho que el dolor que tuviste hoy haya aparecido de la nada, ¿cuándo surgieron las molestias?" - Desde que entré a Garderobe... No.

- "Hace exactamente dos meses"

- "¡Dos meses! ¿Por qué no habías dicho nada?"

- "Pensé que era un dolor estomacal debido al estrés"

"¿Desde cuándo eres médico?"

- "Mamá tomaba muchos antiácidos durante sus ensayos, decía que la presión le daba dolor de estómago"

- "Ya veo, aunque lamento informarte que lo tuyo no es una gastritis, sino una colitis"

- "Gran diferencia, mamá decía padecer eso también"

- "Dudo mucho que la mamá de Natsuki-kun hubiese pegado de gritos a la mitad de una obra y tuviera que ser llevada de emergencia a un hospital"

- "¡Qué vergüenza!" - Y delante de Tomoe...

- "Entiendo que la presión que llevas a cuestas es mucha, supongo que ha sido una mala idea obligarte a hacer algo en contra de tu naturaleza"

- "¿Voy a morir?"

- "Lo dudo mucho"

- "Es una pena"

- "Natsuki-kun es muy dramática"

- "¿Cómo soporta el estar encerrada todo el ciclo escolar en esta prisión sensei?"

- "Esta no es una prisión Natsuki-kun, es un colegio, es un trabajo"

- "¡Vaya trabajo!"

- "Descansa Natsuki-kun, nadie te molestará aquí, son órdenes de Maria-sama"

- "¿Nadie?" - Dije con demasiada emoción, realmente necesito un tiempo a solas.

- "Absolutamente, creo que unos días de descanso serán suficientes en lo que Maria-sama toma una decisión con tu caso"

- "No hay nada qué pensar, seguiré con lo acordado"

- "Natsuki"

- "¿Sí?"

- "Si necesitas hablar con alguien recuerda que no sólo soy una doctora, sino también una muy buena terapista" - Cuando la sensei vio mi expresión prosiguió algo irritada - "No esa clase de terapistas que visitabas en tus excursiones a Shinjuku"

- "Ah" - Lástima.

- "Vendré en una hora para asegurarme de que estés bien, si me necesitas agita los brazos con rudeza"

- "Que agite los brazos..."

- "Hay cámaras en todo Garderobe, ¿no sabías?" - O sea, ¡qué! - "Recuerda que Maria-sama nos está viendo"

Debí imaginarme, lo supuse desde un inicio, sabía que me espiaban pero no creí capaz a la tía de realizar la peor conspiración de la faz de la Tierra. Claro, cómo más iba ella a saber en dónde guardamos Nao y yo los teléfonos, la pornografía, la laptop y todo contacto con el mundo fuera de Garderobe. Se lo dije a Nao, hay cámaras en Garderobe, ¡Ja! Y me llamó paranoica, esperen a que se lo cuente... Un momento, parece que he llegado a un estado de iluminación o quizás sea tanto medicamento que me ha elevado a un nivel más espiritual. Ya recuerdo, ayer empezó todo este desmadre, después de la clase de arreglo floral. Aunque Nao y yo no tomamos juntas la clase, ella me esperó hasta que terminó.

- "Yuuki-san, qué sorpresa" - Saludó Reito a Nao no muy feliz.

- "Hey Kanzaki, he venido para llevar a Kuga a su ensayo, con eso de que ya está cerca el festival de verano"

"- ¡Por supuesto, la obra de mi Shizuru-chan!" - Siento punzadas en la barriga al escuchar eso.

- "Andando, no quiero hacer esperar a nadie" - Dije mientras jalaba del brazo a Nao rumbo al teatro.

- "Veo que Kuga-san se encuentra muy ansioso por ensayar con mi princesa" - Una vez más que oiga la palabra princesa y le parto la cara - "¿A Kuga-san le gusta el teatro?"

- "Sí" - Contesté con sequedad.

- "¡Oh! ¿Regional o gaijin?"

- "Ambos"

- "Supongo que gustas también de los grandes espectáculos, como lo son los de Broadway"

- "Hn" - ¿A dónde quieres llegar?

- "¡Soberbio! Cuando era niño mis papás me llevaron a ver La Bella y la Bestia, no sabes cuánto lloré" - Definitivamente, gay - "Aún lloro" - Muy joto y muy pendejo para llorar por una estupidez.

- "¿Viajaste a Broadway?"

- "Papá era corredor de la bolsa y mamá quería que estudiara ballet con un renombrado maestro de Nueva York"

Acto seguido, Reito comenzó a realizar una serie de brincos bien putescos, al mismo tiempo que golpeaba un pie con el otro en el aire, dijo algo de que era un movimiento llamado batería o no se qué, para finalmente rematar con una cabriola. En cuanto su demostración artística terminó no supe si reír, llorar o salir huyendo, afortunadamente Fujino se apareció de la nada y regañó a Reito por retrasarnos al ensayo.

Durante la obra, le propuse a Fujino que ensayáramos la quinta parte, en donde Rhett violaba a Scarlett, a lo que Shizuru respondió que por razones obvias, tal escena había sido removida. Maldita censura. Finalmente practicamos la última escena, pero Ahn Lu insistió en que mis movimientos eran demasiado torpes en la parte del baile, yo respondí que era innecesario continuar teniendo más sesiones de vals. Pero qué creen, Reito no perdió la oportunidad para entrometerse en la discusión y finalmente se salió con la suya, dijo que haría una demostración. Inicialmente pensé, este cabrón va a bailar con Fujino delante de mis ojos para seguirme molestando, pero no, él tenía un plan totalmente diferente al que pasó por mi mente. Reito me jaló del brazo, me tomó de la cintura y me incursionó en el mundo de la danza tan magistralmente, que ni siquiera tuve la oportunidad de pisarle los pies.

Las féminas presentes quedaron alucinadas ante semejante demostración, mi prometida bien gracias y Fujino se quedó en una esquina con una expresión tan imperturbable, que sentí deseos de pegarle un tiro a la distancia. En ese preciso instante descubrí que soy alérgica a los hombres y mucho más si son homosexuales, un plus si le agregamos a la lista ser un Kanzaki. Me empezó a doler la barriga pero lo ignoré, supuse que el berrinche interno que llevaba me estaba pudriendo las entrañas y no estaba del todo equivocada.

Lo siguiente simplemente me sacó de quicio, Ahn Lu metió su cuchara y de mala fe, sugirió que lo más propio era que Reito me supliera en la obra ya que él era el prometido de Shizuru. Las opiniones se dividieron, después de todo el tiempo ya estaba muy metido. Pero la opinión que yo deseaba escuchar, la única que quería oír aún si todas votaban a favor de Reito, era la de ella, Shizuru. Fujino ni siquiera comentó, no dijo nada, sólo se limitó a estar ahí cual objeto decorativo sin hablar ni moverse.

- "¿Qué opinas Shizuru?" - Le preguntó directamente la oneesama - "¿No piensas que sería mejor que Reito-kun fuera tu pareja?"

- "No lo sé oneesama, si tú consideras que Reito-kun tiene la facultad de memorizar los diálogos del personaje principal de la obra en el poco tiempo que nos queda, por mí va bien"

- "¡Te has vuelto loca!" - Protesté, no podía seguir escuchando más - "¿Piensas que este pelmazo podría suplirme?"

- "Kuga-san, Reito-kun está calificado para interpretar al personaje de Rhett tanto o más que tú, según mi criterio" - Respondió la oneesama de Garderobe cual experta directora.

- "Tus habilidades como Kaichou no te hacen capaz de meterte en un asunto como lo es una obra teatral" - Alegué.

- "Con todo respeto Natsuki-kun, esto no es una obra sino una actividad escolar para el festival de verano" - La odio - "Y aunque lo dudes, ser Kaichou me da toda la autoridad para hacer y deshacer en todas las actividades escolares de Garderobe, ¿entendiste?"

- "¡Eres una perra!"

- "Pide disculpas Natsuki-kun, ante todo, soy una dama" - El rostro de Ahn Lu se iluminó con la sonrisa más macabra que he visto en toda mi vida.

- "¡Que me lleve el diablo!"

- "Ahn Lu, Kuga-san, no es necesario que lleguemos a estos extremos" - Irrumpió en nuestra discusión el todopoderoso Reito-sama - "Comprendo la molestia de Kuga-san, yo actuaría igual si fuera él" - ¡Ja! Defendido por el enemigo, como les gusta humillarme a este par.

- "Reito-kun, como Kaichou no puedo tolerar que conductas como las de Natsuki se presenten en Garderobe" - Se me plantó declarando lo siguiente - "Quedas expulsado de la obra"

- "¡Qué! - O sea, ¿qué? - "¡No puedes hacerme eso!"

- "Puedo y lo haré" - Sentenció la muy perra, esta mujer hace que Tomoe sea un dechado de virtudes a comparación - "Sólo le pregunté a Shizuru si estaba de acuerdo con mi decisión para saber si estaría cómoda con Reito-kun, pero al observar tus indecentes conductas he llegado a la conclusión de que tú nunca serás el caballero que se necesita para el colegio" - Esta pinche vieja habló como si tuviera ingerencia sobre la dirección de la escuela, no como la simple presidenta escolar que era.

- "Garderobe es punto y aparte, la obra es otro boleto, ¿verdad Shizuru?" - Tenía que saber, quería que ella dijera 'sí estoy de tu lado, a pesar de todo yo te apoyo', pero no. Shizuru no dijo esta boca es mía, ni siquiera tuvo los ovarios para verme a la cara.

- "Shizuru no tiene nada más que ver contigo, retírate Natsuki"

Y claro que me fui, hecha la madre, con una cólera infernal, una irritación sólo equiparable con la que un grano en el trasero puede causar, si le pusiera nombre al forúnculo, con seguridad se llamaría Ahn Lu. Nao me siguió en cuanto puse un pie fuera del teatro, caminamos en silencio, ella sabía bien que un berrinche de esos me hacía llorar, no por tristeza sino por impotencia. La impotencia de ser incapaz de pelearte a golpes con un grupo de imbéciles buenos para nada.

Nos sentamos a la orilla de la alberca del plantel por largo tiempo, Nao simplemente se dedicó a estar a mi lado sin hacer mayor comentario. Lo único que hizo fue darme un pañuelo cuando calculó que me había calmado y me ayudó a levantarme. Cuando llegamos al cuarto, devolví el estómago con ganas, ella se quedó conmigo hasta que las arcadas desaparecieron. Tal vez no sea tan mala idea casarme con Nao, después de todo, es buena compañera.

Al día siguiente la noticia de que no formaba parte de la obra había sido diseminada peor que una enfermedad epidémica, ¿quién fue la autora de tal información? Pues mi segunda peor pesadilla, Marguerite Tomoe. Quien me recibió con una sonrisa cínica, acompañada de sus guaruras y comenzó nuevamente a jorobar. Me sentía tan mal que ni siquiera le presté atención, ni siquiera la miré y para cuando me di cuenta había perdido el sentido y desperté en este lugar.

- "¡Ah! Estás despierta"

- "Sensei, ¿cuánto tiempo llevo aquí?"

- "Las clases han de haber concluido ya, si es lo que te interesa saber" - Y los ensayos se deben estar llevando a cabo en este instante.

- "Ya" - Mientras yo estoy aquí convaleciente, ese par de villanos deben estar muy satisfechos por haberme sacado de la jugada de sucia manera.

- "¿Estás lista para hablar?"

- "¿Doy el tipo de ser comunicativa?"

- "Siempre hay una primera vez" - Me acarició el cabello y continuó - "¿Esto va por lo de la obra?"

- "No quiero hablar de eso"

- "Me enteré por ahí que Ahn Lu te expulsó, dijo algo de que no eres disciplinada"

- "Ahn Lu es una zorra"

- "Y tiene la razón, sin embargo esto no va por tu lépera lengua, sino por Shizuru, ¿no?"

- "No sé de qué habla" - Dije mientras le daba la espalda, la sóla mención de ese nombre me provocaba cólicos.

- "Me imaginaba que por ahí iba el asunto" - Desde aquí se escuchaba claramente cómo se reía - "Natsuki-kun, debes entender que Ahn Lu sólo protege a su hermana menor"

- "Me importa un comino el sistema sour"

- "Pero Shizuru parece sí importarte, para recluirte en la enfermería..."

- "¡No me estoy recluyendo!" - Me incorporé de golpe, no debí hacerlo, me dolió hasta respirar.

- "¿Todavía te duele?" - Preguntó consternada la sensei - "Estás mucho peor de lo que pensé, será mejor sacarte de Garderobe" - Eso sería bueno.

- "Estoy bien"

- "Tranquila Natsuki, no tienes por qué fingir, descansa, mañana decidimos lo tuyo"

Sagisawa-sensei apagó las luces y me dio las buenas noches, dijo que estaría haciendo guardia en la habitación contigua. En cuanto calculé que se había alejado lo suficiente, me levanté de la cama, me puse mi uniforme y salí de la enfermería. Me dolía el cuerpo, me sentía mareada, tenía muchas náuseas; pero no podía quedarme así por mucho tiempo. Tenía que verlo, sacarme la imagen de la cabeza; quería ver a Shizuru.

En cuanto llegué al teatro de Garderobe, me acerqué cautelosa tras bambalinas. Afortunadamente las chicas de vestuario no se encontraban, aparentemente sólo estaban ensayando algunos personajes del reparto. A la distancia pude observar a Ahn Lu con Reito, quien trataba de memorizarse mis líneas de golpe. Busqué a Shizuru por todas partes, pero no la encontré ahí, sino...

- "Kuga-han" - ¡Aght! - "Se supone deberías estar en la enfermería"

- "¡Shizuru!"

- "Supe que te pusiste mal esta mañana"

- "No es la gran cosa"

- "Quise ir a verte pero sensei no me dejó entrar" - ¿Querías verme? - "Estaba preocupada" - ¡Oh!

- "No pasa nada, sólo fue un mareo" - Shizuru posó una de sus manos sobre mi rostro - "Tu rostro se ve muy pálido..."

- "Estoy bien" - Dije mortificada mientras retiraba su mano de mi cara.

- "Vamos a la enfermería, no deberías estar aquí" - Claro, me quieres lejos tú también - "Sabía que esto pasaría tarde o temprano"

- "¿Esto?" - Se refiere a lo de Reito o qué.

- "Ha sido culpa mía" - Nuevamente Shizuru hablaba para sí misma, aunque lo hacía mientras caminábamos fuera del teatro escolar.

- "No tienes por qué llevarme con la sensei"

- "Claro, Natsuki es todo un hombre" - Sonó misteriosamente irónica, aunque no supe bien por qué - "Lo has hecho muy bien solo, andando Kuga, no tengo toda la noche"

- "Seguro mamá"

- "Alto ahí" - La mosca en la sopa - "¿A dónde crees que vas Shizuru?"

- "Oneesama, llevo a Kuga-han a la enfermería, ¿acaso está mal?"

- "Si tanta es tu consternación por Natsuki-kun yo misma me encargo de que llegue sano y salvo"

- "Que me coja Reito antes..." - Dije sin pensar.

- "¡Hola Kuga-san! ¿Te sientes mejor?" - Este cabrón...

- "Al parecer no te sientes tan mal como se dice" - Insistió la kaichou en joderme la vida.

- "Todavía no me has derrotado Ahn Lu"

- "¿Tú crees que esto va por ti? ¡Qué arrogante eres!" - Con una mueca la oneesama prosiguió - "Mi deber es proteger a Shizuru de personas como tú"

- "A ver, a ver, define personas como yo"

- "No me obligues Natsuki"

- "¡Oneesama!"

- "Vete Shizuru, esto es entre Natsuki y yo"

- "¡Qué demonios pasa contigo! ¿Qué mal te he hecho para que me tengas tanto odio?" - Cuestioné a la kaichou de Garderobe.

- "No eres normal" - ¿Eh?

- "¡Oneesama, Natsuki, deténganse ya! ¿No ves que está enfermo?" - Al fin, Shizuru se puso de mi lado.

- "Enfermo está pero de la cabeza"

- "¡Ya estuvo bueno de ofensas! ¡Qué coños te ocurre!" - Exigí una explicación, que el pésimo estado en el que se encontraba mi estómago, al menos tuviera una razón para estar así.

- "Kuga nos ha mentido a todos"

- "¿De qué hablas?" - Intervino por vez primera Kanzaki, no es posible que Ahn Lu...

- "Kuga Natsuki es en realidad la hija bastarda de Kuga Harumaru" - Lo dijo, qué mala.

- "¿Hija?" - Repitió Reito pasmado, se lo merece - "Es decir que Kuga-san es..."

- "Una mujer" - Complementó Ahn Lu - "Y puedo probarlo"

En ese momento de manera instintiva me llevé las manos al cuerpo, digo, por si le cruzó la idea a la kaichou de realizar una exposición de mi anatomía ante los presentes. Ahn Lu tomó medidas mucho más sutiles, del bolsillo de su falda sacó mi identificación escolar antigua. ¿De dónde la sacó? No tengo la menor idea, pero roló por todos ellos.

- "¿De dónde has sacado eso?" - Pregunté indignada.

- "Ser kaichou me da acceso a información que un estudiante normal no posee" - Sonrió con malicia - "¿Ves Shizuru? Todo fue para salvarte de esta anormal" - Anormal tu madre por haberte parido, pinche zorra...

- "Kuga-san no es un hombre..." - Acéptalo Reito, lo nuestro jamás hubiese funcionado - "Pero... yo..."

- "Oneesama..."

No pude escuchar lo que Shizuru dijo, después de lo de anormal tuve un mareo, náuseas y finalmente vomité sobre Ahn Lu. Acto seguido perdí el sentido y no supe más de mí sino hasta mucho después, en una habitación que no pertenecía a la de la enfermería, con una doctora que no era Sagisawa y con una compañía que no veía desde hacía dos meses.

- "¿Saeko?"

- "Buenos días Natsuki"

- "¿Dónde estoy?"

- "En el hospital de Fuuka, fuiste ingresada de emergencia y has dormido dos días"

- "¿Qué pasó?"

- "Según tu tía, vomitaste sangre sobre tu kaichou y fuiste trasladada al hospital general"

- "¿En serio?" - Dije sonriente, cómo pude perderme esa escena.

- "Yuuki-san me habló, vine en el primer vuelo a Japón" - Nao, seguro ella grabó la escena o de perdida me la contará, ¿dónde está? - "Cuando lo supe casi me da un infarto"

- "No pasa nada mamá, estoy bien"

- "¿Bien? ¿Te has visto en un espejo?" - Aquí viene el sermón materno, inserten música de drama para resaltar la escena - "Estás toda pálida, hecha un palo y se te está cayendo el pelo" - Eso, sí me preocupó.

- "Verás que pronto me recupero y regresaré a la escuela"

- "¡De ninguna manera!" - Subió el tono de voz Saeko - "No volverás a ese infierno mientras viva, jamás debí conciliar tan descabellada idea"

- "Pero madre..."

- "Todo ha sido culpa mía, jamás debí dejarte ahí, debí llevarte conmigo en cuanto me enteré de lo que estaba ocurriendo en ese lugar"

- "¿No volveré a Garderobe?"

- "¡Jamás!"

- "¿Dónde iré entonces?"

- "Na..."

En ese momento fuimos interrumpidas por la doctora, quien le pidió a mamá que se retirara para que me realizaran unas pruebas. Mamá se despidió diciéndome que estaría en el pasillo con Nao en lo que me practicaban la endoscopía. ¿Endoscopía? Pues esa cosa resulta ser un procedimiento en el que te ven el fondo del estómago por medio de una cámara microscópica. ¿Sonó bonito? Pues déjenme contarles que es un fastidio, te anestesian la boca de manera que no puedes hablar de tan entumida que te queda, la sensación desagradable de haber violado tu garganta es única y además le toman fotos a tu podrido estómago.

En cuanto los estudios terminaron la doctora pidió hablar con Saeko en privado, en ese preciso instante se apareció Nao quien ni tarda ni perezosa, se ofreció para acompañarme en lo que ellas conversaban. Nao se veía todavía más puta que de costumbre, tenía una minifalda que enseñaba hasta las amígdalas, un top señido para mostras sus miserias y un extravagante peinado en su cabellera roja. En pocas palabras, lista para matar.

- "¿Se supone que estás de mujer?" - Comencé a jorobar, aunque a duras penas y podía pronunciar palabra.

- "Sólo para tus ojos mi buen Kuga"

- "¿A cuánto la hora?"

- "No sé, tal vez por hablar como retardada te haga el favor de a nada"

- "Vete al diablo"

- "Sí que armaste un alboroto en Garderobe"

- "¿Dónde demonios estamos?"

- "El hospital de Fuuka, muy muy lejos de Garderobe"

- "¿Se preocuparon?"

- "¡Oh sí! No se hablaba de otra cosa"

- "Cuéntame"

- "En cuanto perdiste el sentido hubo una espectación tremenda para sacarte del colegio, Sugiura me sacó de mi cama casi a rastras para acompañarles"

- "¿Y Ahn Lu qué dijo?"

- "Cielos, estaba ahí cuando llegué" - Se sonrió con malicia - "La manchaste de sangre, estaba llorando aunque no sé si del susto o del coraje"

- "Me alegro, se portó muy cabrona"

- "Lo sé"

- "Supongo que a estas horas todo Garderobe lo sabe"

- "No lo saben"

- "No comprendo"

- "Parece que Miss Maria intervino y prohibió que se divulgara la noticia de que no éramos varones" - Vaya con la tía, defendiendo su secreto hasta el final - "Incluso hubo un ultimátum para Ahn Lu por haber hurtado tu identificación escolar" - De su bolsa Nao sacó mi tarjeta y me la entregó - "Ten, no la pierdas de nuevo"

- "Gracias" - Respondí mientras miraba mi sonriente rostro de la fotografía.

- "Nadie más lo sabe, tranquila" - Realmente si lo saben poco me importa, pero...

- "¿En verdad debería?"

- "No sé que opina tu noviecita, ella es punto y aparte" - Nao revolvió mis cabellos y prosiguió con su extraña conducta de motivación personal - "Anímate Kuga, verás que todo estará mejor a partir de ahora"

- "¿Por qué?"

- "Escuché de tu mamá que no volveremos a Garderobe mientras viva, nos alquilará una casa en Fuuka en lo que acaban las vacaciones de verano y después nos inscribirá en otro colegio"

- "¿Eso dijo?" - ¿Qué estará pensando Saeko ahora?

- "Me pidió que cuidara de ti"

Poco después entró Saeko al cuarto, le pidió a Nao que saliera un momento para que tuviésemos una plática de madre a hija. Por el tono, el rostro y su expresión corporal, pensé que me iba a dar malas noticias; fue todo lo contrario. Saeko comenzó a llorar, dijo que la doctora prácticamente le echó la culpa de mi situación y que se sentía responsable de todas mis desgracias. Es en este momento donde se supone que, como toda buena hija, debería haber dicho 'no te preocupes mamá, no ha sido culpa tuya'. Pero como yo no era una buena hija, no lo hice, es más, usé la situación para ponerme en ventaja delante de Saeko.

El chantaje, herramienta magistral que todos podemos usar pero que las mujeres hemos perfeccionado a través de la historia de la humanidad. No es quizás la manera más digna que existe, pero sí que te salva de hasta las situaciones más bochornosas. El consejo es el siguiente, cuando se encuentren en desgracia, sientan que los dioses se han olvidado de ustedes y finalmente sólo deseen que un rayo les parta, nada mejor que un suceso dramático para ponerte en ventaja y darte la victoria. Así es, con este evento conseguí romper mi compromiso, negociar mi educación en el extranjero, una vida lejos de Saeko y algunas cosas más. Saeko dijo que cuando me recuperara discutiríamos el tema de nuevo y tomaría una decisión.

¡Ah, por cierto! La doctora dijo que mi estómago se encontraba lleno de unas manchas blanquecinas que asemejan cicatrices, supone que mis jugos gástricos han carcomido el fondo de mi estómago durante muchos años y éste ha hecho un buen trabajo en aguantar el mal estado. En conclusión, tengo el estómago de una mujer de cincuenta.

Semanas después

- "Vamos Kuga, te prometo que será divertido"

- "Nao sabes que odio esas tonterías"

- "Pero tienes qué venir a este, te juro que no te arrepentirás"

- "Estoy en media hora"

Saeko volvió a Inglaterra para terminar con sus compromisos laborales, dijo que se retiraría del mundo de la farándula de manera temporal, pero iniciaría un proyecto con Juliet en Hong Kong. No sé que traman esas dos pero supongo que al no poderse convertir en consuegras al menos tienen la idea de seguirse frecuentando como socias. Tal y como dije antes, el compromiso se rompió, Nao y yo somos libres de nuevo, actualmente vivimos en Fuuka. Saeko rentó una casa para que viviéramos tranquilamente en lo que nuestras madres venían por nosotras. Ambas decidieron enviarnos a estudiar a Londres, pero con maestros privados en lo que perfeccionábamos el idioma. Estando ahí nos rentarían un departamento, tendríamos la vida personal que nos diera la gana, siempre y cuando no causáramos escándalos. Saeko decidió que me presentaría ante la prensa algún día, pero no ahora, bien por ella.

En lo que inicia mi nueva vida, permanezco en Fuuka para terminar mi terapia, aunque ya no tengo mareos y los dolores han desaparecido, sigo bajo el estricto cuidado de una enfermera particular. Aquí en Fuuka he vivido una vida de lo más simple y aburrida como nunca antes en mi existencia. A espaldas de Saeko compré una motocicleta para moverme más rápido en el pueblo o de plano dar un paseo por las afueras cuando el tedio me carcome. En estos días ha habido un evento al que todos los pueblerinos han acudido sin demoro, el Hime Matsuri. Una estúpida feria de pueblo que lamentablemente parece ser la actividad más emocionante del lugar.

Al no tener nada mejor que hacer Nao me ha convencido para asistir, me ha llamado al móvil mientras daba mi recorrido nocturno en la Ducati. Reluctantemente decidí dirigirme para allá, en cuanto llegué al sitio todos voltearon a verme, ¿será por mi indumentaria o es que jamás han visto una mujer en una motocicleta estos aldeanos?

- "Kuga, tu mamá dijo que no armaras escándalos"

- "No me tengo la culpa de que la gente se espante por mi aspecto"

- "No sé, ese traje entallado para mí es demasiado revelador" - Haciendo clara referencia a mi traje de motociclista.

- "¿Qué querías?" - Protesté - "¿Qué venga vestida como tú?" - Nao vestía una yukata verde manzana, un tocado muy propio que hasta dirías que era gente decente.

- "Buenas noches Kuga-san" - Esa voz la conozco...

- "¡Kanzaki!"

- "Me alegro que te encuentres con bien, todos hemos estado muy preocupados por ti"

- "Estoy bien" - Dije casi tartamudeando, que ver a Reito después de lo de 'aquello' no era algo que me esperara - "¿Qué haces aquí?" - Pregunté sin ninguna cortesía.

- "He venido con Nao-chan al matsuri"

- "¿Nao-chan?" - Miré de reojo a la susodicha, quien tenía una mirada tan inocente la muy zorra...

- "¿No te dije que he estado saliendo con Kanzaki-san?" - Respondió Nao a mi pregunta. No Nao, me has estado ocultando muchas cosas últimamente - "Pero no perdamos tiempo, vamos Kuga tenemos que divertirnos"

- "Hn" - Con este par lo dudo.

Pero si creyeron que sólo gocé de la presencia de Reito en esta feria de pueblo se equivocan, ya que siendo esta la celebración rural más importante de Fuuka, todo Garderobe se veía por doquier. Naturalmente al verme, muchas de mis ex condiscípulas me reconocieron, pero al ver mi apariencia y mis formas demasiado marcadas en el traje, dudaron si era el Kuga de Garderobe. Las que no perdieron tiempo en saludarme fueron Aoi-san y Chie, quien no paró de jorobarme en cuanto me vio.

- "¿Dónde está Mai?" - Pregunté, supongo que ya va siendo hora de que mi amiga la tetona se vaya enterando de la verdad.

- "Está trabajando" - Contestó Harada.

- "¿En serio?"

- "Sí, Mai tiene que trabajar duro para pagarle algún día a sus patrones"

- "Oh, ¿dónde está?"

- "En un karaoke, podemos ir después si gustas"

- "Tal vez"

- "¿No vas a preguntar?" - Sonrió burlesca la sinvergüenza de Chie.

- "¿Por quién?" - Fingí demencia, que ya sabía para dónde iba la condenada.

- "Pues por tu amada Shizuru ¿o acaso quieres saber de Ahn Lu?"

- "A esa ni me la menciones"

- "Creo que los papás de Fujino-san la enviaron de regreso a Kioto" - Comentó Aoi.

- "¿Es eso cierto Reito?" - Preguntó Nao al maricotas.

- "No tengo la menor idea Nao-chan"

- "Desde el fin de curso que no nos reuníamos" - Continuó Chie - "¿Competimos?"

- "No voy a participar en estos jueguitos de feria barata"

- "Deja la amargura para tu mamá Kuga, andando"

A rastras, Nao me llevó hacia un puesto de kingyo sukui e insistió en que Kanzaki y yo compitiéramos. Al final perdí, pero no fui la única que compitió, Chie también quiso impresionar a Aoi-san pero no pudo contra Reito. Finalmente terminamos en un puesto de takoyaki para reponer las fuerzas perdidas.

- "Ha sido divertido" - Comentó Reito, quien visto desde afuera seguro lucía como el bendito entre las mujeres - "¿Qué les parece si terminamos en un paseo en bote?"

- "Me parece buena idea Kanzaki-san" - Opinó Chie, quien se veía demasiado sonriente esta noche.

- "¿Hay un lago en este lugar?" - Pregunté.

- "Sí pero tú no vas en mi bote Kuga, ve con Chie" - Gracias amiga.

- "¡Oh no! Aoi y yo iremos solas"

Y esa es la historia de como mis mejores amigas de Garderobe me dejaron atrás para fajar en un bote de festival de pueblo. Malvadas, pero ni crean que iré con ellas al estúpido karaoke, al carajo con esta estúpida feria, me parece que hay un programa de chicas en bikini por la televisión.

- "Ara" - Ara, no puede ser - "¡Pero qué coincidencia!"

- "¡Fujino!"

- "Juraría que en mi colegio había un joven casi idéntico llamado Kuga-han" - Esta mujer - "¿De casualidad no serán hermanos?"

- "Deja de hacerte pata Fujino, sabes que soy yo"

- "Kuga-han, buenas noches"

- "Buenas noches Fujino"

Por un momento me sentí cohibida, puesto que Fujino me vio de arriba a abajo con una mirada medio siniestra. Shizuru usaba un ropaje muy similar al de Garderobe cuando impartía su clase de té, aunque la tela se ve mucho más fina. El cabello de Fujino se encontraba recogido y se veía que se había maquillado de manera discreta, en conclusión estaba bien buena la mujer. Intenté iniciar una conversación pero no supe entender si Fujino estaba dispuesta a tomarme en serio o venía a burlarse de mí, así que mejor me mantuve callada, dejándole la iniciativa a mi ex mentora.

- "Te ves pálida" - Fujino frunció en ceño mientras me examinaba minuciosamente.

- "Es por la dieta que estoy llevando" - Respondí, mientras Shizuru tomaba un mechón de mi cabello entre sus manos.

- "Natsuki"

- "¿Has venido a burlarte de mí?"

- "Me ofendes, he venido porque te vi muy sola aquí en el lago"

- "¿Sería muy ofensivo para ti si das un paseo conmigo?" - Pregunté mientras le señalaba un bote.

Shizuru no respondió, simplemente me tomó del brazo y caminamos rumbo a la barca para dar el famoso paseo por el lago de la feria. Remé hasta que la gente en la orilla, no pudiese vernos y que los paseantes en los demás botes, tampoco pudieran molestarnos. Me detuve para finalmente lanzarle la pregunta que quería hacerle a Shizuru desde que la vi.

- "Shizuru..." - Comencé, pero pronto fui interrumpida por la misma Fujino, quien parecía no querer tocar el tema.

- "Yuuki-han se ve mucho mejor con una yukata" - Y llevándose a Reito lejos de ti, se ve excelente - "¿Sabías que son novios?"

- "No tenía la menor idea, Nao no suele hablar mucho últimamente de su vida"

- "¿Por qué Natsuki no usa una yukata?"

- "¿Acaso alguna vez me viste en un traje ceremonial en Garderobe?"

- "Sólo tuve la oportunidad de ver a Natsuki-kun, a Natsuki-chan jamás la conocí" - Pedrada.

- "No vuelvas a decirme Natsuki-chan, me siento retardada" - Exhalé un suspiro y continué - "Shizuru..."

- "Vaya que nos has pegado un gran susto" - Me interrumpió Fujino en tono solemne - "Mira que Ahn Lu-oneesama casi se desmaya de la impresión" - Me alegro - "Yo estaba asustada"

- "No fue nada serio"

- "Debiste confiar en tu oneesama" - ¿Se está burlando? - "Fue mucha presión para ti sola"

- "¡Cómo coños pensabas que iba a contarte algo como eso, si te estaba haciendo la corte!"

- "El lenguaje soez de Natsuki se ve peor ahora que antes"

- "Me importa un demonio como me vea"

- "Natsuki, ¿sabías que por tu culpa tuve un dilema existencial?" - Aquí viene, Fujino reclamará hasta cansarse - "Jamás en toda mi vida había sentido dudas de mi sexualidad hasta que te conocí" - Sí, viene todo el discurso heterosexual que tanto detesto - "Es decir, no me la podía creer"

- "Supéralo Fujino, ya sabes la verdad y no hice nada que mancillara tu reputación, ya te casarás para olvidar todo esto"

- "Natsuki idiota, no entiendes nada"

- "Me imagino"

- "Cuando te presentaste como Natsuki-kun te odié como nunca" - ¿Y ahora? - "Sentirme atraida por un hombre se me hizo repugnante"

En mi claro momento de estupidez no supe qué responder, es más, no había carburado en mi pequeño cerebro lo que acababa de oír. ¿Le parecí repugnante como hombre? ¿Entendí bien? No, no, debo haber escuchado mal, es mi imaginación o la anemia, es más, probablemente todo esto sea parte de una alucinación. Lo más seguro es que yo no esté aquí, seguramente me quedé dormida viendo la tele en la sala y estoy soñando. Pero como no soy masoquista saldré de este hipnótico trance en el que me he visto envuelta, golpearé mi cabeza tan fuerte con el remo que despertaré de la fantasía en un instante.

- "¿Natsuki te has vuelto loca?" - Ouch, no estoy soñando.

- "Dijiste que..." - El amor duele - "...los hombres te disgustan"

- "Si Natsuki me hubiese dicho antes que sólo se estaba haciendo pasar por un hombre para complacer a su tía la historia hubiese sido muy diferente"

- "¡Pero cómo carajos me iba yo a imaginar algo así!" - Grité furiosa - "¡Se suponía que eras una típica niña mimada de colegio católico a quien fui a pervertir!" - ¿Dónde quedaron las vírgenes?

- "De no ser por Saeko-san digo, la mamá de Natsuki..."

- "¡Espera! ¿Qué tiene que ver Saeko en este asunto?" - Un momento - "¿Cómo demonios sabes tú que Saeko es mi madre?"

- "Por accidente escuché la plática que tuvieron cuando recién llegó a Garderobe" - Accidente - "Así me enteré que Natsuki era una mujer"

- "¡Y si lo sabías desde el principio por qué hiciste tanto drama en todo este tiempo!"

- "Estaba celosa, supe que Nao y tú estaban comprometidas" - Pinche Shizuru - "Yo también soy una mujer, tengo derecho a ser irracional de vez en cuando" - Lo fuiste durante los últimos tres meses.

- "Entonces no te sorprendiste para nada cuando Ahn Lu..."

- "Por supuesto que no, si Natsuki no se hubiese desmayado lo habría escuchado"

- "Escuchado qué" - Cuestioné de mala gana.

- "Cuando le dije a mi oneesama que estaba enterada de tu identidad" - Escucharlo ahora no me hace feliz - "Por cierto, Natsuki se ve mucho mejor con el cabello suelto"

- "¡Shizuru enfoca!"

- "Ikezu, sólo intento hacerte un cumplido" - Cumplido la manga, me crucé de brazos y tiré mi rostro para otro lado indignada - "¿Estás enojada?"

- "Me siento como una perfecta idiota" - Idiota era poco - "Me la he pasado tratando de engañar a todo el mundo para descubrir que sólo me he engañado a mí misma"

Continué con mi letanía para mi deleite y goce personal, promulgué palabras con dolo para continuar con mi momento de masoquismo, castigándome cada vez más en cada oración. Por estar hablando sola ni siquiera me di cuenta cuándo Fujino acortó la distancia entre nosotras para tirarme del cierre de mi traje con fuerza, en dirección a ella. Cuando me tuvo a un pelo de distancia, Shizuru masculló que me callara y me besó. Mi dulce e inocente oneesama a quien consideraba más pura que Maria-sama, me demostró que el recato es una de las tantas conductas que con los años han desaparecido. El beso no tuvo nada de inocencia, fue como el que yo deseaba darle desde que la vi, desde que la besé por vez primera. Ahora me pregunto, ¿con quién fregados practicó Fujino en todo este tiempo? Porque obviamente con el maricotas de Reito no fue.

- "¿Mejor?" - No supe si esta pregunta fue para saber si me había calmado o si para saber si me había gustado su manera de besarme.

- "No..." - Atiné a decir, Shizuru no se lo pensó dos veces y continuó.

- "Ya párale Natsuki, vas a dejar sin aire a esa pobre chica" - Gritó Chie desde su barca.

- "¡Pero qué atrevida eres Kuga! Hay niños en la feria y tú con tus espectáculos al aire libre" - Coño, hasta Nao nos vio.

- "¿Se pueden callar las dos? Están arruinando el momento"

- "Shizuru-chan, ¿te parece si vamos todos juntos al karaoke?" - Preguntó el todopoderoso Reito-sama.

- "¿Natsuki?" - Imploró con un rostro angelical Shizuru, que si no hubiese sido por lo de hace tan sólo unos minutos, hubiese caído en su juego.

- "Hn" - Gruñí, aceptando la propuesta del maricotas.

Pues todos fuimos al famoso karaoke, en donde una contrariada Mai me reprendió por haberle mentido durante el semestre completo. Aún así le pidió permiso a su jefe para estar con nosotros en el privado que Reito pagó para cantar. Ahí la princesa del karaoke, o sea Mai, nos amenizó la velada con su dulce voz y sus tetas danzarinas. Shizuru se pasó toda la noche pellizcándome cada que me veía morboseando a mi amiga.

Pasado un tiempo, me despedí de todos para llevar a Shizuru a su casa, puesto que ya era muy tarde para que estuviera en la calle. Salimos del local y caminamos sin ningún rumbo en particular por unos minutos, ninguna dispuesta a despedirse de la otra. Hasta que ya no aguanté más y decidí ser yo quien hablara.

- "Supongo que este es el adiós"

- "¿Acaso ya es tiempo de que Natsuki se vaya al extranjero?"

- "Aún no he sido avisada por Saeko" - Respondí mientras tronaba mis dedos nerviosa.

- "El compromiso con Reito se rompió, ¿sabías eso?"

- "Eso no es impedimento para que te consigan un mejor prospecto"

- "He hablado con mis padres"

- "Sobre qué"

- "Sobre ti"

- "Ah" - ¿Ah? - "QUE"

- "Espera tengo una llamada" - Shizuru contestó su teléfono - "¿Papá? Sí, estamos en camino" - Todavía un poco aturdida por lo anterior, no alcancé a prestar atención al diálogo que Shizuru sostuvo con su padre - "El chofer viene por mí Natsuki, ¿me acompañas a esperarlo?"

- "¿Les hablaste de mí?"

- "Por supuesto, mamá es fan de Saeko-dono, ¿no te había dicho?" - No, me dijiste que tú eras la fan, jamás oí nada sobre tu mamá - "En cuanto regresé a Kioto les hablé sobre ti y de Saeko-san"

- "No comprendo a qué viene esto" - Y tampoco me da buena espina.

- "Mis papás dijeron que querían conocerte y de ser posible a Saeko-san"

- "Eso significa que..."

- "Te están esperando"

- "¡Pero Saeko no está aquí!"

- "Pero vendrá, ¿no es así?" - Diabla - "En lo que ella viene por ti, mi madre estará conmigo unos días en Fuuka, papá viajará mañana a Kioto porque no puede quedarse más tiempo"

- "Entonces estaremos juntas"

- "Hasta que la mamá de Natsuki venga a Fuuka" - Repito, ¿dónde quedó mi virginal oneesama? - "Ahí está el chofer, lista?" - No.

Obviamente no fui a conocer a los padres con la vestimenta que traía puesta, quedé con Shizuru en desayunar con ellos para que su papá me entrevistara, digo me conociera. Tal y como Shizuru, dijo, su madre era muy fan de Saeko, en cuanto me vio se quedó boquiabierta, dijo que era la réplica de Saeko cuando era más joven. En cuanto pasamos a la mesa me bombardeó con preguntas sobre mi concepción, sobre mi progenitor, en este momento Shizuru le pidió discresión a su mamá, aunque yo le dije que no había ningún problema en el tema.

El padre de Shizuru dijo que conocía a Harumaru, mi progenitor, había tenido la oportunidad de tener tratos con él en alguna ocasión. Papá Fujino mencionó que Harumaru tenía el mal hábito de tronarse los dedos cuando estaba impaciente o nervioso, ¿lo habrá dicho por mí? Entre muchas cosas, el tema de mi salida del país para estudiar en Londres, salió a colación. Por alguna extraña razón, los padres de Shizuru estaban encantados con todas las tonterías que Saeko planeó para mí a futuro.

Casi al mediodía me despedí de los Fujino y prometí que en cuanto Saeko esté nuevamente en Japón, se las presentaría formalmente. Shizuru se despidió de mí y quedamos en salir en la tarde, después de todo, era la mejor amiga de Shizuru, ¿qué más podía pasar? Ah, créanme, ¡qué no pasó! Los días pasaron rápido y Saeko regresó por Nao y por mí, como prometí le presenté a la mamá de Shizuru a Saeko-dono, quien se puso a las órdenes de los Fujino en cuanto puso un pie en su humilde mansión. Me despedí de Shizuru y pensé que no volvería a verla, hasta que el curso escolar en el City of London School for Girls dio inicio.

- "Ara, qué sorpresa"

- "¡Shizuru!" - Grité entre el gentío a las puertas del colegio - "¿Qué haces aquí?"

- "Ikezu, Natsuki prometió escribirme y no recibí ni un sólo correo" - Errr - "Estaba tan preocupada" - No me digas - "Así que decidí inscribirme al mismo colegio para saber de ella"

- "No tenía la menor idea de que hablaras inglés"

- "Querida Natsuki, una dama de Garderobe domina al menos tres idiomas, ¿no sabías?" - Pero tú no eres una dama.

- "Fujino, parece que no has venido sola" - Masculló Nao quien se encontraba frente a nosotras.

- "¡Qué gusto en verles Nao-chan, Natsuki-kun!" - Kanzaki - "Sabía que cambiar de aires me caería de perlas"

- "¡Qué demonios haces aquí se supone que entrarías a la universidad" - Espeté.

- "Por supuesto, la universidad se encuentra a tan sólo una cuadra, ¿no es maravilloso?"

- "Gahhh" - En ese curso escolar fui internada tres veces en el hospital.


N/A: Finalmente concluyo este fic con un larguísimo episodio para justificar la espera, si llegaste hasta el final leyéndolo completo te felicito, ¡qué huevos los tuyos! Muchas gracias por haberlo leído y espero verles pronto... ¿Qué no había empezado otro? Demonios, tengo que buscarme otro hobbie... Ja ne!

Matsuri: Festival, feria.

Kingyo sukui: Atrapar al pez dorado. Típico juego de feria japonesa en donde se intenta capturar un pez dorado (kingyo) en un aro de papel (poi)

Takoyaki: Bola de harina de trigo con pulpo (yummy), alimento típico de Kansai, aunque se le ve en todos los animes.