Hola, hace tiempo borré este fanfic, porque lo tenía mal escrito, utilicé mal la raya del diágolo, y bueno quería arreglarlo y de nuevo lo subo hoy.

Es un Femslash Hermione x Cho, espero que os guste.

Disclaimer: todos los personajes y lugares pertenecen a la grandísima JK, yo sólo los tomé prestados :D

Quiero fotografiarte

"Cho es aficionada a la fotografía, Hermione ha dejado de tenerle manía, la morena le propone algo a su nueva amiga."

CAPÍTULO 1

Por sugerencia de un estudiante de Hufflepuff, se organizó un concurso de fotografía en Hogwarts. Entre otros, Cho Chang decidió participar, mostrándose como una buena fotógrafa, sorprendiendo a todo el mundo, especialmente a cierta leona.

—No sabía que te gustaba la fotografía, Cho.

—Hay muchas cosas de mí que aún no sabes, Hermione Granger. —Le sonrió con picardía y la castaña bajó la mirada ligeramente ruborizada.

Hacía ya un tiempo que habían enterrado el hacha de guerra, después de mucho tiempo sin tragarla, Hermione había decidido hacer caso a Harry y darle una oportunidad a la ravenclaw. Así había descubierto que Cho no sólo sabía mirarse a sí misma cuando caminaba, o salir airosa en sus exámenes, también era capaz de mantener interesantes conversaciones, y cada día que la trataba, Cho Chang la intrigaba más.

—Oye Hermione, ¿por qué no dejas que te haga unas fotos?, soy buena con la cámara, en serio.

—¿Fotos?, ¿a mí?, ¿no pensarás utilizarlas para el concurso ¿verdad?

—No, no, claro que no… son para ti, pero me apetece hacértelas —Se puso a contemplarla con atención, acercando un poco más su cara a la de la castaña, que empezó a notar cierto calor en sus mejillas—. Creo que podría hacerte fotos fantásticas.

—¿A mí?

—Sí —afirmó con resolución—. Eres fotogénica.

—Uy, ¿y eso cómo lo sabes?

—Lo sé, me bastó verte en los artículos de Rita Skeeter… —bromeó la morena.

—Buf, menudas pruebas —Su gesto mudó en un instante y se echó a reír—, vale Cho, tú ganas, me dejo hacer fotos si antes me convences de que eres tan buena. —Le sonrió.

—Eso está hecho.

Ambas estaban mirándose, sin palabras, sólo sonrisas en sus labios, hasta que Ron interrumpió su silencio compartido.

—¿Qué hacéis chicas?, te estaba buscando Hermione.

—No me digas, ¿algún problema académico?

—¿Cómo lo adivinaste?

—Un buen día cambiaré de amigos, que lo sepas. —Fingió indignación y le dedicó una última mirada a Cho, que la miraba con cierto aire ¿seductor?, no, la gryffindor debía alucinar. Miró a Ron, que caminaba delante de ella y se volvió hacia Cho de nuevo, pero la ravenclaw ya no estaba allí. Sí, definitivamente Cho Chang la intrigaba, cada día un poco más.

Al día siguiente, viernes, Cho llevó a Hermione a un aula que había pedido especialmente para las fotografías. Debido al concurso, algunos alumnos hacían la misma petición y los profesores habían accedido, no se veían capaces de coartar la vena creadora de sus discípulos.

—Mira, he traído algunas fotos, échales un vistazo, y dime que opinas, en confianza.

—A ver.

Eran fotos en blanco y negro, mostraban a una mujer medio desnuda, que ocultaba zonas de su cuerpo con telas blancas, Hermione estaba impresionada por la belleza de las mismas.

—Son… muy hermosas… parece una diosa. —Mirando con los ojos como platos.

—La chica era mona, pero el talento lo puse yo ¿eh?

—Pero… son semi desnudos, no sabía que hacías este tipo de fotos. —La castaña acababa de caer en la cuenta, Cho había fotografiado a chicas con muy poca ropa, y no entendía el porqué, de pronto se puso un poco nerviosa.

—Son fotos de estudio, se las hice porque necesitaba un book para una agencia de modelos, éramos... amigas, así que le hice el favor.

Hermione se sintió aliviada con su respuesta y Cho lo advirtió.

—Pues si la chica era la mitad de hermosa que se ve en ellas, seguro que le dieron el trabajo.

—¿Eso es un piropo hacia mi arte? —preguntó animada.

—Tú sabrás —contestó siguiéndole el juego.

—¿Quieres que te hagas unas fotos como ésas?

—¿Qué?, ¿fotos medio desnuda?, creo que no. —Se ruborizó de inmediato.

—Mujer, son fotos artísticas, de buen gusto, ya las has visto.

—Sí, sí, pero no… no me veo de esa manera… que yo no soy modelo ni nada parecido, yo no soy guapa. —Soltó una risita nerviosa, a juego con sus mejillas sonrojadas.

—No eres fea Hermione, ¿te miras al espejo?... además, cualquiera puede posar como modelo, es cuestión de relajarse y dejarse llevar.

—Mira, justo lo que no se me da nada bien. —Se rió nerviosa.

—Estás toda tensa Hermione… un buen masaje y listo, ven, siéntate aquí.

—No, de verdad… si estoy así todos los días, no te preocupes por mí.

—Ay señor, cuanto me vas a costar de criar… entonces ¿rechazas un masaje dado por estas manos divinas?, mira que más de una las ha elogiado.

—"¿Pero es que va por ahí masajeando chicas?" no, no, en serio… mejor que no.

—Vale, como quieras, pero ¿tampoco me vas a dejar que te haga las fotos?

—Bueno… si no son como ésas…

—¿Entonces como estas sí? —Le enseñó un desnudo integral a color.

—¡¡Cho!!

—Perdona —dijo entre risas—, es que me lo has puesto fácil. Ésta sí fue para un concurso, el tema era el cuerpo humano… no te enfades Hermione...

—Si no me enfado "me ruborizo, me pongo nerviosa, que es muy distinto, pero ¿por qué?" —Miraba el suelo tratando de ocultar sus mejillas sonrojadas, pero Cho las había visto y se apiadó de ella.

Cho Chang llevaba un tiempo fijándose en Hermione Granger, aunque la leona no lo había advertido demasiado, y una de las cosas que más le gustaban de la castaña era su facilidad para ruborizarse, como le estaba pasando ahora, su timidez siempre la desarmaba.