¡MILES DE DISCULPAS!

La espera fue larga, muy larga... de verdad estoy apenada con todos ustedes, pero como ven no me olvide de la historia. Pude organizarme en hacerme un tiempo para poder concluir este proyecto que empece con ayuda de mi hermana. Hemos pasado tiempos muy difíciles, aún ahora las cosas estas muy complicadas para nosotras pero estamos con todos los ánimos, en especial yo para seguir y concluir esta historia.

¡Agradecemos cada uno de sus mensajes! por favor continúen hasta el final con nosotras... y disfruten de esta nuevo y esperado capitulo.

Nanako Echizen

Después de la sorpresa Ryoma caminaba con Nanako del brazo, habría un momento para conversar del tema secreto, ahora en solitario se dedicaba a escuchar las disparatadas incidencias Que Paso en El viaje de regreso a casa.

¿Por que no avisaste que llegabas -? Le Pregunto Ryoma mientras ambos caminaban hacia la casa Nanako sonreía mirando el paisaje y saludando a los sirvientes- Nanako ... -

¿No conoces el termino sorpresa? - Le dijo entre risas, a lo que el joven le respondió con una mirada incrédula- oh vamos está bien hermanito, llegue sin avisar porque tenia mucha prisa en visitar a mi futura emperatriz- dijo entusiasmada

Este se detuvo en seco y le hablo lo más bajo posible- ¿Cómo es que te has enterado de eso? Se supone que era secreto, el consejo lo dijo…- termino susurrando

No hay nada que ocultar para mí, soy tu hermana- le dijo indignada- mamá me contó y te juro Ryoma que después del viajecito que me mandaste hacer, no hay noticia más feliz para mí-

El joven heredero frunció los labios- te quiero mucho y todo lo que deseo para ti es lo mejor- le dijo mientras le acomodaba el saco con la insignia del imperio del Fénix- Sakuno es una admirable y bella señorita- eso ya lo sé, pensó Ryoma -estoy segura que podrás tener una vida feliz al lado de ella- le sonrió- no te digo más porque eso ya depende de ti- este asintió- además nadie puede pasar desapercibida a Sakuno por mucho tiempo…- causando la media sonrisa de su hermano menor- ¡Es cierto!- aseguro Nanako entre risas- aunque no lo creas tu joven prometida es muy popular, ella tiene ese encanto único-

Ryoma se tensó un poco al pensar que si quizás, solo si tal vez el encontrara la manera de disolver su compromiso, Sakuno no tendría problemas en conseguir un rápido compromiso-

Pero por ahora no te preocupes, ella es tu prometida y nadie cambiara eso- concluyo Nanako

¿Es que acaso sabe más de la cuenta?- se preguntó Ryoma observando la reacción de su hermana.

¡Señorita Nanako!- exclamaron desde la entrada de la casa.

Los jóvenes se miraron sonrientes y apuraron el paso- Hotaru!- Nanako soltó el brazo de su hermano y corrió al encuentro de ella.

Ambas mujeres se abrazaron con fuerza- ¡te extrañe tanto!- exclamo la joven

¡Oh por el Fénix bendito! - dijo Hotaru abrumada-Usted es una dama de alcurnia no debería viajar por tanto tiempo fuera de su reino.

Sabes que mi profesión me lo permite, Hotaru- le dijo sonriente- es lo que me encanta hacer ayudar ser doctora.

Perdón por el retraso- dijo Ryoma mientras llevaba al lado de ellas- como verás tenemos una visita sorpresa-

Hotaru sonrió a ambos-¡y vaya que sorpresa!-

Debe de estar cansada- Nanako asintió- pasemos, los demás jóvenes nos deben de estar esperando-

Al entrar a la casa los criados le daban la bienvenida a Nanako- por favor coloca un plato más para la señorita Nanako- dijo Hotaru a uno de los sirvientes-

Llegaron Al salón principal en donde seguro estaba el resto del grupo. Los guardas al verlos dieron el anuncio- el joven príncipe heredero ha llegado acompañado por la princesa Nanako Echizen del reino del Oeste-

Ambos entraron e hicieron unas pequeñas venias- todos se sorprendieron al ver a la recién llegada.

¡Nanako! – exclamaron las jóvenes acercándose a ella.

Es bueno verlos a todos de nuevo- dijo Nanako sonriente mientras hacia una venia-

Ryoga se acercó a su hermana y la envolvió en un fuerte abrazo- pequeñuela, te has perdido por mucho tiempo así ¿cómo puedo cuidar de ti?- le pregunto en medio de un tierno abrazo.

Ya no soy una pequeñuela…-le dijo con tono de réplica y gracia-

Cada de los jóvenes de la guardia y Kintaro se acercaron a saludarla, unos más efusivos que otros.

Luego Nanako se encontró con la mirada más cálida de todas las personas que en sus viajes había podido conocer, su joven princesa y amiga… Sakuno Ryusaki

Has regresado…- le dijo suavemente mientras le tomaba las manos, hizo una venia y las beso- mi querida Nanako-

Nanako se sorprendió, todos lo hicieron. La abrazo, ambas lo hicieron- pequeña princesa, perdóname por demorar tanto.

Se separaron y sonrieron- no vuelvas a irte por tanto tiempo- le dijo Sakuno, Ryoma la miraba atentamente y noto que estaba con los ojos llenos de lágrimas.

Es un momento de mucha felicidad para todos- dijo Hotaru mientras entraba- luego del almuerzo todos podemos escuchar las tantas historias que Nanako nos traerá-

Todos rieron y caminaron juntos al comedor.

Aquella tarde fue la más memorable de todas, con una buena y amena plática, risas, brindis.

Al terminar todos pasaron al saloncillo para escuchar los acontecimientos del viaje de Nanako.

Todos le preguntaban y se asombraban por los lugares que solo ella podía conocer, sin necesitar ni un permiso. Ryoma escuchaba con un sentimiento de orgullo a su hermana mayor, aquella que renuncio a su título de princesa para poder realizar una tarea humanitaria y dedicación.

Mientras la veía Ryoma recordó el día en que Nanako, les informo a su padre de su elección, el acabada de cumplir los doce años…

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Ryoma se encontraba sentado en el piso apoyado en la pared que daba justo a una gran ventana que iluminaba perfectamente todo el salón de la biblioteca, leer exactamente en ese lugar le parecía muy agradable, así se ocultaba de su meloso hermano mayor Ryoga y de su muy escandaloso amigo Momoshiro.

Hacia unas semanas que habían vuelto de su entrenamiento con el emperador Touya, ellos eran parte ya de la tan ilustre Guardia Imperial. Al principio se molestó mucho que por que aún no cumplía la edad necesaria para pertenecer a este seleccionado grupo de jóvenes, la mayoría de jóvenes del imperio morían por ser integrantes y sus conocidos dentro de los reinos también. Ryoga y sus amigos de los otros reinos, como el príncipe Tezuka, Syusuke compartían este honor.

Suspiro y cerro por un momento el libro que estaba leyendo y recordó Los primeros meses después de la partida de su hermano había sido difícil acostumbrarse, no quedaría solo en ese enorme palacio definitivamente no, pero los sirvientes y sus padres lo atosigaban de mimos y él no era precisamente muy receptivo a ese tipo de tratos.

Escribir cartas a su amiga la princesa del reino del Fuego, Sakuno Ryusaki se había vuelvo su mayor pasatiempo, hacia casi un año ya se había ido a vivir a uno de los pueblos interinos del reino de su padre el gran rey Yano a causa de una extraña enfermedad que por más que preguntaba a sus mayores nadie sabía responderle con precisión por que la precaución de alejarla del clima de la capital, simplemente no lo comprendía, parecía que todos se habían confabulado para alejarlo más de una dolorosa verdad, dolorosa porque así lo veía a través de los ojos de su princesa.

No le quedaba más que vivir su vida resignado, esperando las cartas de Sakuno o alguna visita, fue así que en su lugar secreto pudo llegar a escuchar un grito- ¡He dicho claramente que no!- era la voz de su padre, no había duda de eso; observo la puerta de la habitación continúa y se acercó sigilosamente para no ser descubierto se apoyó lo más que pudo.

Padre, mi Rey… te amo más de lo que puedas imaginar, mi familia y mi pueblo… los amo sinceramente – decía su joven y hermana Nanako ella era cuatro años mayor de una belleza única muy alegre y junto con Sakuno y su madre las únicas mujeres importantes en su vida- pero… no concibo mi vida a esto, necesito hacer más… sé que puedo hacerlo pero no con mi condición de princesa… necesito padre prescindir de todos mis títulos y privilegios para hacerlo- Ryoma un tanto asustado abrió la puerta lentamente- padre por favor dame tu permiso y bendición…- su querida hermana tenía una mirada completamente nueva para él.

Su padre que también estaba frente a ella se restregó la cara con ambas manos, se le notaba desesperado y como era de esperarse noto la presencia del menor de sus hijos.

Nanako miro detrás de ella – Ryoma…-

Hermana… ¿también quieres irte como Sakuno?-

Esto desencajo a ambos mayores –continuaremos esta conversación luego- dijo Nanjiroh retirándose.

Nanako vio con pena como su padre huía otra vez de una decisión que ella había tomado- hermanito… - se acercó a Ryoma y lo tomo de la mano y se sentaron en el piso alfombrado de la habitación- sabes que Sakuno está muy enferma, es por eso que ella se fue para curarse y estar fuerte no? – le pregunto

Ryoma dudo un poco –aun me cuesta entender los motivos, solo sé que ella tiene que estar bien… sin fiebres y sana- respondió mirando al piso.

Yo quiero ayudarla a ella y muchas otras personas que como Sakuno están mal- le dijo mientras levantaba su rostro – es por eso que… necesito irme a estudiar para convertirme en una buena doctora- le confeso a su hermano- volveré para ayudar a todos y en especial a nuestra princesa-

El pequeño príncipe escucho atento, asintió y la abrazo fuerte – Prométeme que no me olvidarás y volverás pronto…- Nanako sorprendida correspondió el abrazo fuertemente.

Lo haré hermanito- le dijo mientras besaba su cabeza – ¿me ayudarás a convencer a papá?- le pregunto.

¡Claro que sí!- respondió abrazándola más fuerte- hermana…serás la mejor doctora-

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Los años habían pasado y había cumplido su promesa, regreso siendo una gran doctora que aun cumpliendo sus estudios siempre viajaba para ir investigando nuevas medicinas y tratamientos, su familia completa estaba orgulloso de ella.

Ryoma no podía dejar de escuchar atento cada una de sus palabras describiendo los lugares en donde estuvo, personas con que conoció y pudo ayudar, no cabía duda su hermana había vuelto.

Ver a todos disfrutando el momento le hacía sentir una paz y un sentido de protección hacia cada uno de ellos en especial hacia Sakuno, no sabía con exactitud ese nuevo sentimiento hacia ella, simplemente quería verla sonriente, alegre, llena de vida.

-mantente siempre así Sakuno…- le decía Ryoma en su mente mientras la veía, tan concentrado estaba observándola que no noto cuando su hermana lo veía.

-¡Vaya resumen!- exclamo Ryoga perezoso – Nanako estoy seguro que te estas evitando detalles, prométenos que mañana nos lo contaras- le dijo mientras se acercaba a Ryoma y se apoyaba en el sacándolo de su ensoñación.

Los chicos asintieron entusiastas- si, por favor Nanako- dije Sakura- nosotras estamos entusiasmadas con tu relato ¿cierto chicas?- pregunto al grupo de señoritas.

-¡Eres nuestra heroína!- exclamo Tomoka

Nanako rio ante ese comentario- no se preocupen les terminaré de contar todo.

-¿con lujo de detalles? – pregunto Ann entusiasta

-Hey niñas no se emocionen tanto… démosle un respiro- dijo Tezuka divertido.

Momoshiro, Oishi y Eiji rieron.

- A mí me interesa mucho saber acerca de la geografía de las demás naciones-dijo Inui

- A ti te interesa saber todo- menciono Kaidoh en broma, haciendo que todos en la habitación rieran

- de eso no hay duda – agrego Kawamura entre risas.

-Bueno habrá muchas cosas que definitivamente les contaré- dijo Nanako sonriente- y no te preocupes Inui, especialmente para ti traje unos libros que te serán de mucha ayuda- este le sonrió agradecido.

Ha sido una noche esplendida – dijo Sakuno levantándose, acto con el cual todos varones de la sala se levantaron- me voy retirando a descansar-

Sakuno te acompaño- dijo Tomoyo levantándose de su lugar.

Buenas noches a todos- dijeron ambas chicas casi al mismo tiempo.

Me detengo a observar a mi prometida, una joven frágil y noble joven que nada se imagina del pasado que tengo, la observo detenidamente y me siento culpable y como si el destino quisiera marcarme más ella voltea hacia mí, me mira y sonríe cálidamente.

"No lo merezco" me digo a mi mismo con rabia mientras le devuelvo la sonrisa y menos ahora que el regreso de mi hermana representa aun ahora un latiente lazo con mi pasado.

Los demás vuelven a sus conversaciones y yo vuelvo a mi lugar sin dejar de pensar si es que realmente estoy tomando las mejores decisiones.

Ryoma- en medio de mis cavilaciones no me doy cuenta en el momento que mi hermana me estaba llamando, levanto el rostro para notar que ya todos se han ido y solo quedamos ella los dos en la sala- se acaban de ir…- me dice mientras fija su mirada en mí.

Nanako… no sé qué estoy haciendo…- digo mientras me tallo el rostro con ambas manos- sea lo que fuera que tengas por decirme… no es correcto… no lo es…-

Mi hermana posa su mano en mi hombro – harás lo correcto…-

A veces lo correcto no es siempre lo más importante- menciono levantando el rostro- ¿lo entiendes? - le digo casi en suplica.

Sea lo que sea que elijas… yo te apoyaré, solo se prudente…- me dice y sé a qué se refiere. Asiento y mientras sujeto su mano me levanto.

Has llegado de un largo viaje y debes de descansar… - ella asiente- mañana en el momento correcto hablaremos con toda tranquilidad-

Está bien… - posa su mano en mi brazo y ambos nos encaminamos al segundo nivel, la acompaño hasta el ingreso de la zona de dormitorios de las señoritas- buenas noches Ryoma…- me dice mientras que con una última sonrisa se despide y dijere a su habitación.

Buenas noches… - le digo y me dirijo a mi habitación, al llegar la luz tenue del ambiente me relaja un poco , me quito el saco y lo dejo en una silla cercana, no estoy con las energías para llamar a la servidumbre y que me asistan, me acerco a la cama y apenas logro quitarme las botas y me recuesto con la cabeza más pesada que nunca por todo lo que temo estoy por enterarme y el camino que aunque quiera o no tendré que seguir.

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Me quedo algo corto, lo siento. En los próximos días iré subiendo los demás capítulos... les adelanto que falta poco para que todo este más claro y sea menos doloroso.

Nuevamente les agradecemos su apoyo.