Lo que sube…tiene que pasar

.

.

.

Entro al enorme y lujoso edificio, era tarde, las calles de Londres estaban nevadas y muy frías, estaba exhausta, trabajo todo el día y necesitaba descansar, había demasiados asuntos sin resolver en el ministerio, aunque todo estaba relativamente tranquilo, por primera vez en mucho tiempo el mundo mágico era un lugar seguro.

.

—Buenas noches Jaime—saludo cordialmente al portero un hombre alto y agradable.

.

—Que tenga una buena noche, Srta. Granger—contestó el hombre esbozando una cálida sonrisa.

.

La castaña correspondió el gesto y se dirigió a los elevadores. Llegó al vestíbulo el cual se encontraba totalmente vació, algo normal a esa hora, esperó el elevador, piso 10,9,8, ansiaba tomar un baño caliente, 7, 6,5, y un Martini frió, 4,3, 2, se abrieron las puertas, un hombre mayor salió, parecía apurado, la chica no recordaba que fuese su vecino, aunque la verdad no conocía mucho a los demás habitantes del edificio, pasó al elevador y presionó el botón del piso 25, las puertas estaban apunto de cerrarse cuando algo, mejor dicho alguien las detuvo con el brazo, y por ellas entró un joven rubio, que después de presionar el botón del piso 27 se ubicó en la esquina contraria que la castaña, quedando frente a esta, parecía no notar la presencia de la chica, se recargo en el barandal lateral y volteo hacia la puerta.

.

La chica bufo de aburrimiento, fijo la vista en el rubio y lo evaluó, era alto unos 15 cm mas que ella, de cuerpo atlético, aunque escondido en un elegante esmoquin negro, del cual traía abierto el saco y los 3 primero botones de la blanca camisa desabrochados, se veía tan sexy, de pronto en aquel pequeño lugar empezó hacer un sofocante calor, la chica mordió su labio inferior de forma compulsiva. El rubio sonrió con autosuficiencia, había cachado a la joven por los espejos de la puerta observarlo de una forma indecorosa, algo que no era raro, las chicas caían rendidas ante sus encantos, pero nunca lo pensó de esa chica en particular, la perfecta Hermione Granger, "no era tan perfecta"...

.

El joven volteó a ver a la castaña y le dedicó una sonrisa picara, Hermione se sorprendió al darse cuenta quien era el apuesto rubio e inmediatamente le invadió una terrible vergüenza que tiño sus mejillas de un color carmesí, al percatarse por una señal del rubio que había sido cachada infraganti viéndolo descaradamente, que tonta se sentía, todo el elevador eran espejos grises que reflejaban claramente su apenada cara y la divertida expresión de Draco Malfoy...

.

El elevador marco el 4to piso y las puertas se abrieron, la joven aprovecho la interrupción para dirigir la vista a la pared del elevador, lo que no sirvió de mucho, ya que claramente podía ver el reflejo de Draco y su "sexy atuendo", una mujer de edad avanzada entró al lugar, quedando en medio de los jóvenes.

.

—Buenas noches chicos— dijo de despedida la mujer tan solo dos piso arriba al salir del elevador.

.

—Buenas noches— contestó Draco arrastrando las palabras como de costumbre pero de forma cortes. Hermione solo sonrió.

.

Al cerrarse las puertas el silenció e incomodidad volvió a reinar en el elevador, aunque esta ultima solo era sentida por la castaña, ya que el rubio parecía tranquilo y sereno.

.

El único sonido que se escuchaba en el reducido lugar era la canción de fondo del elevador, inconscientemente la chica cerró los ojos y comenzó a tararear la conocida letra de la canción, era tal su nerviosismo. El chico enchanzó su burlona sonrisa, vaya así que la Srt. Granger estaba nerviosa, eso era muy interesante. Aprovecho el despiste de la castaña para evaluarla con descaro, se fijo en su cabello igual que siempre, era un caso perdido, su rostro estaba sereno con los ojos cerrados, sus facciones eran delicadas y sus labios bien proporcionados se movían entonando la canción, bajo la vista para toparse con su delicado cuello blanco, una delicia, llevaba una blusa blanca algo ajustada bien abrochada hasta el inicio del pecho, una verdadera pena, aunque eso daba rienda suelta a su imaginación, trago saliva, sentía la boca seca, siguió su recorrido, pasando por las marcadas curvas de la chica, la falda ejecutiva gris resaltaba su escultural figura y daba un sugerente panorama de las largas piernas...

.

El elevador se abrió de nuevo en el piso 9, por el pasó una pequeña de unos 10 años, lo que recordó a Draco que se encontraba en un lugar publico y las ideas que le pasaban por la cabeza sobre la castaña eran demasiado subidas de tono, Hermione abrió los ojos para ver al nuevo pasajero del elevador, era una niña pelirroja, pecosita y con anteojos, le recordaba a la pequeña de los Weasley, bueno aunque Ginny ya no era una niña, ahora era una mujer adulta, madre de familia y aurora, nada mas y nada menos que la señora Potter, ella y Harry llevaban 3 años de casados y tenían un pequeño llamado James...

.

—Disculpe ¿me podría dar la hora? — una vocecita aguda sacó a Mione de sus pensamientos, la pequeña niña se dirigía a Malfoy, el cual sonrió de lado, un acto criminal que lo hacia lucir aun mas sexy, y miró su reloj.

.

—11:50 pequeña...algo tarde para estar fuera de la cama— las palabras de Draco tomaran desprevenida a Granger, eran solo un regaño para una niña que no se había ido a dormir, pero dichas de esa forma tenían un doble significado, que hizo sonrojar a la castaña, la niña sonrió inocentemente y salió del elevador en el piso 16.

.

Draco volteó a ver a Hermione, esta se veía algo agitada parecía que le faltaba el aire, respiraba entrecortadamente, lo que la hacia lucir irresistible, sabía que era una mala idea, como se había percatado ese era un lugar inapropiado, pero eso que importaba, a él que le importaba, no era muy respetuoso de las reglas que digamos, y eso era lo que lo desconcertaba de la castaña que estaba a su lado, ella si tendría problemas con eso, aunque eso se podría "arreglar".

.

Iban en el piso 17 cuando Draco se acerco peligrosamente a Mione, empezó a silbar una tonada desconocida por la castaña, y esta se alertó ante la cercanía del rubio.

.

Sentía su aliento en la nuca, un olor dulzón y varonil invadió sus fosas nasales, y rosaba su codo, todo era demasiado incomodo, en un intento de poner distancia la chica se balanceo hacia el frente, dándole la espalda al blondo, el joven aprovecho para evaluar la única parte de la chica que le falto la ultima vez, la espalda y baja, en esto estaba el joven Malfoy cuando Hermione fijo la vista en el espejo de enfrente, consternándose con lo que vio, que descaró de tipo, su sangre Granger y su valentía de ex-Grifindor la alentaron a voltearse y encarar al ex-Slytherin, pero no estaba preparada para lo que encontró.

.

Malfoy sonreía de forma picara, tenía las manos en los bolsillos del pantalón, y su cabello estaba despeinado y lleno por sexys gotas de sudor, parecía que la situación lo divertía.

.

—Hermione... —siseó lenta y sugerentemente el rubio, la castaña estaba petrificada por la sorpresa, jamás la había llamado por su nombre, siempre había sido "la sangre sucia, impura" etcétera, pero lo que mas la desconcertó no fue lo que dijo sino como lo dijo...

.

El pulso de la chica se aceleró, sentía que le faltaba el aire y el calor se hizo aun mas insoportable, el rubio no estaba en mejores condiciones. Draco se inclinó un poco hacia la castaña invadiendo su espacio personal, sentía el calor que emanaba de la chica, olía la fragancia suave de su perfume "lavanda", y podía ver sus sensuales labios, que lo invitaban a probarlos. Lentamente acercó su rostro al de la chica, tanto que compartían el oxigeno, y en un impulso la besó, agarrando a la chica desprevenida, Hermione quiso poner resistencia, por lo menos una parte de ella quería separarse del blondo, colocó sus manos en el pecho de este e intento golpearlo, a lo que el chico respondió tomándola de la cintura y atrayéndola mas hacia él, el beso se fue haciendo cada vez mas exigente, las manos de las castañas ya no golpeaban al chico ahora rendidas preferían tomarlo fuerte del saco y así profundizar el beso.

.

Nunca se lo hubiera imaginado terminar en un elevador besándose con nada mas y nada menos que con Hermione Granger la chocante sabelotodo ex-grifindor, mejor amiga de Potter y la comadreja Weasley, y "sangre sucia", y lo que mas lo sorprendió fue estarlo disfrutando...si la estaba pasando en grande, sentía una extraña sensación que recorría su columna vertebral, iba mas a ya del simple deseo por una chica, era algo que lo estaba quemando vivo y sabía que la única forma de salvarse era sentirla en todo su esplendor.

.

Se separó un poco de la chica para ver su reacción, Mione se encontraba con los ojos cerrados y respiraba agitadamente, lo sorprendió gratamente el darse cuenta que ella también estaba disfrutando "ese beso", cuando noto que aun lo sostenía fuertemente de la chaqueta del traje.

.

La chica abrió lentamente los ojos, topándose con unas grisáceas orbes, era estúpido de su parte no separarse de él, pero su propio cuerpo opinaba lo contrario, quería su cercanía y pedía mas...mas.

.

El elevador iba en el piso 21, lo que les daba solo 4 pisos mas a los chicos, y de esto se percató cierto rubio, así que sin mas demora se acerco a la chica, pero ahora prefirió probar su blanco cuello, lo beso delicadamente, lo que hizo suspirar involuntariamente a Mione, después la besó de nuevo en los labios ya enrojecidos, este beso era mas enérgico, un dulce beso no era lo que querían, ambos deseaban mas el uno del otro, Hermione se abalanzo mas sobre Draco, haciendo a este toparse con la pared del elevador, y provocando que involuntariamente presionara el botón de emergencia, el aparato se detuvo bruscamente tirándolos al suelo, cayendo Mione encima del blondo.

.

Hermione se removió adolorida, se había golpeado, aunque no había sido mucho gracias a Draco que ahora estaba debajo de ella, se alarmó al ver que el chico no se movia o decía algo, así que se propuso pararse para dejarlo levantarse, pero una fuerte mano se lo impidió, volteó para encontrarse con un sonriente Draco Malfoy...

.

— ¿A donde con tanta prisa? — preguntó de manera picara el rubio, Mione se tranquilizó al parecer estaba bien, intento enderezarse de nuevo pero solo logró bajarse del chico y quedar a su lado, lo que aprovecho Malfoy para colocarse encima suyo, con lo brazos como soporte a los costados de la cabeza de la chica para no aplastarla.

.

Eso era mas de lo que la castaña podía soportar, Dios como había terminado en esta situación con unos de los que fuera de sus peores enemigos, Draco Malfoy el hurón, insoportablemente pretensioso y casi mortifago, debía salir de ese embrollo de una manera inteligente, tenía que sacar fuerza de voluntad quien sabe de donde y escapar de ese elevador lo antes posible, se removió intentado encontrar una ruta de escape de debajo del rubio, pero solo consiguió que este se acercara mas a ella.

.

—Ma-l-fo-y—tartamudeo en un intento de negociar su libertad—no-o pue-do-o res-pi-rar—eso era media verdad, aunque su falta de aire no se debía al ligero aplaston, el joven pareció ceder un poco al levantarse, pero no lo hizo por completo, aun tenía el cuerpo entre las piernas de la chica.

.

De pronto algo inesperado pasó. Las puertas del elevador se abrieron, y por ellas se asomó la cabeza de un hombre.

.

— ¿Estan bien?.. —preguntó el hombre.

.

Draco se enderezó por completo, estaba totalmente descompuesto, su camisa se habia arrugado y se encontraba desfajado, le tendió la mano a la chica la cual la aceptó indecisa, Mione se levantó con cuidado, precavida de traer todo en su lugar, después voltearon a ver al hombre que irrumpió en el elevador, era Max el conserje del edificio, seguro después de percatarse de la llamada de emergencia del elevador corrió haber que había sucedido, y se encontró con esa comprometedora escena.

.

—Estamos bien...parece que algo anda mal con el elevador— Dijo Draco a ver que el hombre se había quedado anonadado.

.

—Si...eso pasa a veces— comentó Max—deberían tomar el otro..

.

Hermione que se había mantenido al margen se fijo por primera vez en un buen rato en el piso en que estaban "25", ella no tenía necesidad de usar el otro elevador, ese era el piso de su departamento, salió del elevador seguida por Draco, mientras Max entraba al elevador y se ponía a checar su funcionamiento.

.

—Bueno este es mi piso… —musitó la castaña—...buenas noches Malfoy.

.

El rubio no contesto nada parecía totalmente indiferente a las palabras de la chica, Mione bufo y se dio la vuelta para dirigirse a su departamento.

.

— ¡Espera Granger! — le grito Draco, ella se detuvo en seco, sintió como se acercaba hasta tenerlo en su espalda. —Recuerda "todo lo que sube...tiene que pasar"—le susurró el blondo en el odio, haciendo que se le erizara el vello de la nuca.

.

—No hoy Malfoy—sentenció Hermione mientras se iba a su departamento, sin voltear la vista atrás, y así dejó a Draco Malfoy parado en medio del pasillo.

.

El joven Malfoy regresó a esperar el otro elevador, vaya que fría resulto Granger, después de todo seguía siendo la misma que en Hogwarts, entró al elevador y presiono el botón del numero 27, el elevador le pareció mucho mas grande ahora que él era su único ocupante...

.

Mione se encontraba recargada en la puerta cerrada de su apartamento, ¿había hecho lo correcto?, si Malfoy había sido un cretino, idiota y narcisista en el colegio, pero ahora parecía distinto, no se iba a engañar, Malfoy no había cambiado mucho, aunque físicamente si, no sabia si también era distinta su forma de pensar, aunque después de que derrotaran a Voldemort las clases sociales entre los magos pasaron a ser historia vieja, todavía había magos que creían en la pureza de la sangre y esas tonterías, pero por lo que había escuchando la familia Malfoy se acoplaba de forma difícil a esta situación, Lucius estaba en Azkaban mientras Narcisa tenía que lidiar con los problemas financieros de la familia y Draco...era aunque suene irónico un auror, ese era un punto a su favor, un buen punto.

.

La castaña salió corriendo de su apartamento, cerró de un portazo y se dirigió al elevador, el cual tardaba mucho en bajar, así que decidió correr a las escaleras de emergencia, subió los dos pisos deprisa como si la vida se le fuera en ello, tal vez ya era demasiado tarde... llego al piso 27 y abrió la puerta de golpe, se quedó agachada tratando de recuperar el aliento cuando escucho pasos que se acercaban a ella. Levanto la vista para toparse con el rubio, el cual se encontraba consternado con la repentina aparición de la castaña, y después sonrió al ver en el estado en el que se encontraba.

.

— ¿Donde es el incendio? —preguntó divertido, Mione se enderezó, sus ojos destilaban el fuego de la decisión, camino hasta donde estaba el rubio y se colocó enfrente de él.

.

El joven Malfoy se sorprendió de la actitud de la castaña, quedando totalmente inmóvil ante su cercanía, y Hermione sonrió al ver la reacción del chico, colocó su mano en la el pecho del blondo y lo acarició.

—Malfoy, "todo lo que sube...tiene que pasar"—le susurro en el oído, y después lo besó en los labios, el rubio correspondió el beso, que se hizo cada vez mas exigente, entre beso y beso, la ex-grifindor y el ex-slytherin entraron el departamento de este ultimo y se perdieron por el pasillo..."ya que lo sube... tiene que pasar".


Fin...