"Esto es una pesadilla" – susurró para sí misma mientras se veía en el espejo intentando recoger con un ganchito el rebelde mechón de cabello que cubría parte de su frente. Parpadeó un par de veces antes de sentirse tonta por preocuparse por su aspecto y revolver su cabello con sus manos – "Sólo es una estúpida cita con un estúpido joven de ridículos cabellos naranjas y sonrisa seductora" – abrió sus ojos con asombro y apoyó su frente en la mesa. Aquella cita le estaba costando la friolera suma de 12 millones de yenes (adiós vacaciones en Inglaterra) y ella solo pensaba en la sonrisa de aquel idiota pelinaranjo – "Esto es grave, Rukia, si ni-sama se entera en que gasté el dinero…"

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KARAKURA HIGH SCHOOL HOST CLUB

By: Maryeli

Cap6: "Festival de Otoño"

Con cariño para: Hino senpai, Canela26, Alice Peaches, Hinamori Hitsugaya, Wuakayaka, Haibara 20, Nessie Black 10, GeRiTal Chan, Bloody Shooter… etooo…¿Aún están ahí?

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"EL HOST CLUB INVITA A LS ESTUDIANTES DE LA PREPARATORIA KARAKURA A SU TRADICIONAL BAILE DE OTOÑO, QUE SE DESARROLLARÁ COMO CIERRE DE LAS ACTIVIDADES DEL FESTIVAL DE OTOÑO DE NUESTRA ADORADA PREPARATORIA"

(Para más información visite nuestras instalaciones)

Aquel lunes amaneció con ese aviso colocado en las paredes y periódicos murales de todas las aulas de la preparatoria. El muchacho de ojos esmeralda suspiró y aceleró el paso. Empezaba a fastidiarle el uniforme blanco del club que contrastaba muchísimo con el uniforme gris de la preparatoria. Para sorpresa de su reciente club de fans desvió el camino y se alejó por el corredor, simplemente no estaba de humor para entrar a clases y optó por "matar" el tiempo en la biblioteca. El cielo estaba nublado y gris y el viento hacia caer las marchitas hojas de los árboles. En su mente deseó que pronto fuera invierno para que todo estuviera cubierto de nieve. Oyó risas y desvió la mirada, a varios metros de él un grupo de jovencitas caminaban a pasos apurados llevando una serie de cajas, probablemente eran integrantes de algún club y estarían por armar su stand en el patio de la preparatoria. Se alegró de que no se percataran de su presencia y estaba decidido a continuar su camino cuando divisó a una muchacha con los cabellos sujetos en un curioso moño y con mucha cautela empezó a seguirla.

La persecución fue algo complicada por el gran número de estudiantes de diferentes clubes que se movilizaban de un lado a otro armando sus stands, aún cuando deseaba pasar desapercibido no pudo evitar llamar la atención por culpa del uniforme perdiendo de vista por un instante a Momo. Tras eludir a varias jovencitas y uno que otro tipo raro, logró dar con ella: estaba de pie observando muy atenta a través de una puerta entreabierta. Por alguna extraña razón decidió ocultarse y logró distinguir, en medio del bullicio proveniente del patio, las dulces notas de un piano. Por un momento creyó que se trataba del "canto de sirena" de Yumichikka, pero quien tocaba tenía un nivel superior. La música se detuvo y vio a Momo entrar en el salón, apresuró el paso y la oyó decir algunas palabras a modo de disculpa mientras hacia una venia y miraba atenta con un leve sonrojo en sus mejillas al hombre sentado frente al piano. Toushiro jamás olvidaría la forma en que Momo llamó a ese hombre: "Aizen-sama".

En el vivero del Host Club:

El recién armado Suikinkutsu emitía una armoniosa melodía. Ishida se encontraba de pie a un lado junto a un hombre robusto de aspecto amigable, concretando una transacción bancaria.

- "Ya puede verificar su cuenta, Ushoda-san"

- "No lo considero necesario, Ishida-kun, su familia tiene una reputación respetable, espero que no haya otro problema pues reparar de nuevo el Suikinkutsu sería una tarea imposible, incluso para mi"

- "No se preocupe, Ushoda-san, ya hemos tomado las medidas de seguridad pertinentes".

Ishida hizo una venia y acompañó al artesano a la salida. Yumichikka y Kaien tomaban el té en silencio cuando cierta pequeña pelirosa hizo su entrada triunfal desde el aire, bajando por la escalera de un helicóptero.

- "Tendré que separar otra cita con mi estilista" – Yumichikka empezó a buscar un número en su móvil.

- "¿Puedes separar una para mí también?" – Dijo Kaien, sacudiendo su cabello en donde se habían incrustado varias hojas marchitas.

El helicóptero empezó a alejarse y Yachiru brincó a los brazos de Yumichikka.

- "¿Cómo te fue en tu cita, Yumi-kun?"

- "Pues…" – Yumichikka recordó como la joven de Lobelia que lo compró en la subasta lo llevó a una reunión familiar en donde se cansó de repetir que no era el novio de la susodicha a todos los presentes, desde sobrinos hasta tatarabuelos – "Estuvo bastante aburrida"

- "¿En serio?" – Yachiru hizo un puchero – "¿Y a ti, Kai-Kai?"

- "A mi no me fue tan mal" – Kaien recordó con una media sonrisa a la joven, también de la academia Lobelia que los llevó en un viaje a una isla turística donde los trataron como a reyes – "Solo que al final me tocó huir porque mi cita intentó embriagarme para que me casara con ella".

Yachiru y Yumichikka parpadearon sorprendidos.

- "Al menos tu no tuviste que escuchar la sonora risa de Cirucci Sanderwicci durante un día entero" – El presidente del Host Club hacía su ingreso – "Vaya que el Suikinkutsu quedo muy bien".

- "Por supuesto" – Ishida se detuvo a su lado y ajustó sus gafas con satisfacción – "Contraté al mejor artesano"

- "Y el más caro" – Intervino Kaien entre tosidos, obteniendo la mirada de desaprobación de Ishida.

- "Ya que estás tan hablador, Kaien, tendrías la gentileza de decirnos, ¿En dónde está Ichigo?" – Preguntó Uryuu, bastante serio.

- "El no vendrá, esta resfriado".

- "Recuérdale a tu hermano que hoy es la fiesta, y la tradición es q…"

Unos gritos provenientes de la entrada desviaron la atención de los presentes.

- "¿ACASO ESTAS SORDO? ¡SI NO VAS A ENTRAR QUITATE DEL CAMINO, ENANO!" – Gritó la muchacha de coletas.

- "¡A QUIEN LE DICES ENANO, MEDIO METRO!" – Respondió el joven de blanca cabellera con una vena resaltando en su frente.

- "¡PUES A TI ENANO, ENANO, ENANO, ENANO, ENANO!"

- "¡CÁLLATE! ¡CÁLLATE! ¡CÁLLATE! ¡CÁLLATE!"

Uryuu carraspeó, y volvió a carraspear, sin obtener resultados, entonces tomó el libro de citas.

- "Sarugaki, Hitsugaya, si no guardan silencio tendré que considerar esto como una cita"

Ambos jóvenes enmudecieron de inmediato pero se miraron enfurecidos.

- "Me alegra que la calma regresara" – Dejando el libro nuevamente en el pedestal de madera tallada – "Como decía, esta noche los integrantes del Host Club abrirán la fiesta de Otoño con el tradicional baile, ya envié las invitaciones a sus parejas, y sus trajes llegarán dos horas antes"

- "Uryuu, siempre tan precavido" – Comentó Shinji – "Les sugiero que aprovechen la tarde para sesiones de masajes los que están muy estresados" – Lanzando una mirada de reojo a Toshiro y Hiyori – "Y que vayan a un estilista los que están despeinados" – Mirando con una media sonrisa a Kaien y Yumichikka – "Esta es la noche del Host Club y nada debe echarla a perder".

10 horas después…

El vivero estaba bellamente decorado e iluminado y como por arte de magia, a través del techo de cristal se podía ver un hermoso cielo bañado de brillantes estrellas.

- "Simplemente hermoso" – Susurró una joven de misteriosos ojos lila.

- "Hola" – Se acercó a ella un joven de cabellos oscuros – "Soy Kaien Kurosaki, mi hermano está algo indispuesto así que te acompañaré esta noche"

- "Oh, ya veo" – la joven no pudo pasar por alto el gran parecido que tenían ambos jóvenes – "Soy Kuchiki Rukia" – Buscando algo en su bolso – "Recibí una invitación…"

- "Y se supone que tu acompañante sería yo" – Se oyó una voz algo ronca. Rukia levantó la mirada y sus ojos se cruzaron con otros color avellana.

- "No creí que llegarías, te veías tan enfermo, hermanito" – Comentó Kaien con tono burlón.

- "No era nada que unos antigripales no pudieran controlar, claro que el cerco eléctrico alrededor de mi puerta fue algo inesperado, hermanito".

- "Solo fue una precaución para que nadie interrumpiera tu descanso" – Respondió Kaien, poniendo carita de yo no fui.

- "No te preocupes, al final logré salir y no adivinas a quien encontré" – Señalando hacia la entrada principal por donde una joven de oscura cabellera hacía su ingreso – "Miyako-san casualmente vino a preguntar porque no había recibido su invitación para el festival".

- "Eso es imposible, yo mismo envié las invitaciones personalmente" – Exclamó Uryuu, indignado – "Kaien ve por Miyako-san que ya es hora de abrir el baile, y tu, Kurosaki, tienes tres citas pendientes para mañana" – Entregándole un sobre a Ichigo – "Es mejor que vayamos hacia la pista de baile".

La orquesta empezó a tocar las primeras notas e Ichigo se apresuró a tomar a una confundida Rukia del brazo.

- "¿Qué es eso de las citas pendientes?"

- "Hablaremos luego, por ahora, solo bailemos".

Rukia abrió la boca para insistir con la pregunta pero la cerró de inmediato. Ichigo la había sujetado por la cintura y ahora trataba de seguirle el ritmo en la pista de baile. A unos metros distinguió a la joven que siguió en día de la catastrófica subasta, estaba bailando con un muchacho de blanca cabellera que tenía una expresión gélida en el rostro, hacia el otro lado, un joven alto y rubio bailaba con una joven de cabellos oscuros, muy maquillada que no dejaba de reír (y su risa era por demás escandalosa), unos pasos más allá una muchacha bajita de cabellera rosa, la animadora de la subasta, bailaba alegre con un hombre alto con pinta de matón, las parejas giraron y por un instante vio claramente como la pareja del joven con gafas – una muchacha bastante esbelta de larga cabellera naranja – miraba fijamente a Ichigo… aquella miraba no le gustó para nada.

La pieza terminó en medio de aplausos y pronto la pista se llenó de parejas que bailaban animadas. Una de ellas se escabulló hacia una salida que daba al Suikinkutsu.

- "Explícame que fue eso de las citas pendientes" - Preguntó Rukia, molesta, sin saber porqué.

- "Ya estoy mejor, gracias" – Respondió Ichigo, con sarcasmo – "Supuse que te preocuparías por mi ya que me caí de un puente por salvar tu ridículo bolso de colección de Chappy"

- "¡No es ridículo! ¡Es un bolso de colección limitada!"

Ichigo bufó fastidiado. De todas sus citas aquella fue la más atípica y tortuosa. Prácticamente se la pasaron discutiendo por todo.

- "Mejor olvidemos eso" – Replicó resignado, sentía que la fiebre le estaba volviendo a subir – "Si quieres que te explique como funciona el Host Club deberás escucharme en silencio y guardar tus preguntas para el final"

- "Pero…" – Al ver la mirada de súplica de Ichigo – "Esta bien"

- "Verás, el Host Club es…"

En la Biblioteca de la Preparatoria….

Borró con tanta fuerza que un agujero apareció en medio de la hoja. Fastidiada y mascullando algo ininteligible arrancó la pagina del cuaderno y la hizo una bolita que arrojó con furia a un papelero repleto de varias bolitas de papel similares. Apoyó la frente en la mesa.

- "¿Qué haces aquí? Todos están en la fiesta, mono" – Murmuró un joven rubio mientras se acomodaba en el asiento delante de la joven.

- "Cállate, calvo ridículo" – Sin levantar la cabeza – "Tengo que terminar esta tarea adicional o reprobaré el curso".

- "Además de salvaje y mal hablada eres tonta… que gran problema" – Comentó burlonamente el presidente del Host Club.

- "Largo de aquí, calvo estúpido" – La muchacha se levantó de su asiento y le arrojó un libro que el joven esquivó con mucha facilidad.

- "Fallaste" – Sonrió de oreja a oreja, pero solo un instante, pues se sorprendió al ver a la muchacha con el uniforme femenino de la preparatoria.

- "Ya deja de mirarme de ese modo, calvo pervertido" – Hiyori le arrojó otro libro y esta vez le impactó de lleno en la cara.

- "No soy un pervertido, mono salvaje" – Llevándose las manos a su injuriado rostro – "Y por si no lo has notado tengo al menos tres pies de cabello, no estoy calvo"

Hiyori bufó irritada, se sentó e intentó retomar sus deberes.

- "Si quieres puedo ayudarte con eso" – Le propuso Shinji, después de varios minutos de silencio.

- "Mejor regrésate al baile, ahí todo el mundo te prestará atención, calvo"

- "Yo creo que aquí es más divertido que en el baile" – Susurró sobre el hombro de la chica.

Hiyori sintió como un escalofrío le recorría la espalda. ¿En qué momento se había acercado tanto? Así que hizo lo primero que se le vino a la mente, lo golpeó con su puño.

- "Ouch… ¿Por qué rayos hiciste eso?" – Se quejó Shinji, alejándose unos pasos.

- "¡Haz lo que quieras pero mantente lejos de mi!" – Gritó Hiyori.

Shinji ladeó la cabeza y lentamente regresó al lugar delante de la joven y tomó asiento. Por alguna misteriosa razón, aquella noche le pareció definitivamente diferente a cualquier otra.

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¿CONTINUARÁ?

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:P