¡Hola! ¡Sobreviví! ¡Genial!, bueno, este es el capitulo final de esta parte del fic, agradezco a cada una de las personas que se tomo el tiempo para leer esta locura, y sobre mentira no hay engaño, esta parte no tiene un final feliz, así que espero salir con vida, jejejeje, piensen que debo salir viva, o de lo contrario quien coordinara el final de reto.

De nuevo agradezco el tiempo que le dedicaron a esta historia y los reviews que le dejaron a esta su humilde servidora, sin más me despido.

Karu-suna: Gracias por tu comentario, me alegra que la historia haya sido de tu agrado y espero no decepcionarte con el final.

Kalhisto azula: Lamento la tardanza, andaba metida en el reto, al que te invito cordialmente, solo visita mi profile para más información. Me alegra que el capitulo te haya gustado y espero que el final no te decepcione.

Lintu: WAAAAAAAAAAA, eres de las pocas que no ha intentado matarme y entendió la esencia de este capitulo, ahora puedo morir tranquila, gracias T.T. jajaja, es verdad, la esencia de Madara es maligna y no podía hacer menos que esto para demostrar su superioridad, y pues, todo esto fue el resultado del plan de Tobi, quien de principio a fin manejo la relación de estos dos para salir con una victoria redonda, es una pena, gracias por tu review y espero que el ultimo capitulo te agrade.

Gldxz: Pues…gracias por dejarme con vida solo para leer el final de la historia…creo. Lamento que las cosas hayan resultado así, pero Madara tenía que dejar claro que era Malo con M de Maldito. Gracias por tu comentario, me sube el animo (y me da miedo) espero el final sea de tu agrado.

LaRousSeidy: jajaja, ¡GRACIAS SAINT SEIYA! ¡POR ESO LOS AMO!, jajajaja, No te preocupes prima hermana, me alegra que me dejaras un review, los valoro mucho y lo sabes. Cuídate mucho y estamos en contacto.

Daiia: Pues….¡LO LAMENTOOOOOOOOOO!!!!!!!, no quería romperte el corazón, pero Madara es terriblemente malo, no podía hacer menos que esto, si no lo hacia dejaba de ser él maloso de la historia, realmente no quería ser cruel, pero la historia me lo ordeno, BUAAAAAAAAAAAAAAAAA. Gracias por tu comentario y espero el capitulo final de esta parte del fic te agrade.

Deltaporsiempre: jejejeje, gracias por visitar mis fics, es un honor tenerte por aquí, lamento que el capitulo sea tan triste, pero así es la historia y no hay mas. Te agradezco el comentario y espero que el final no te decepcione.


Al Final.

Abrió los ojos con pesar, la luz del sol llegaba hasta el claro donde se encontraba, anunciando lo avanzado de la mañana. La cabeza le daba vueltas y su cuerpo pesaba más de lo normal, pero lo que realmente le tenía ofuscado era el dolor de su pecho. Suspiro profundamente sintiendo una fuerte punzada en el corazón, -vaya, increíble, hasta respirar dolía- ¿Qué se supone que le esperaba a partir de ahora?- llevo su mano hasta su frente enredando sus dedos en su negra cabellera. Después de matar a su clan pensó que no tendría peor noche que esa, ¡ja! ¡Que equivocado estaba!

Enredo su otra mano en su pelo apoyando ambos codos en las rodillas, jalo con fuerza las negras hebras mientras sus ojos se llenaban de lágrimas, su garganta dolía por la enorme cantidad de sollozos que intento ahogar sin mucho éxito. Todo la noche fue igual, toda la noche llorando como un niño desamparado -¡patético! realmente patético- si alguien le llegase a ver en esas condiciones no reconocería al gran Uchiha Itachi, aunque realmente no había nada que reconocer. Esa noche perdió la única luz que le quedaba, ¡que ingenuo había sido al pensar que podía tener un poco de felicidad en medio de toda la porquería que era su vida!, de creer que alguien podría quererlo por lo que era -¡mentira! ¡Para lo único que lo buscaban era para matarlo, para usarlo como arma o para vengarse! - así era con el mundo, así era con Sasuke, así era con Deidara.

Después del enfrentamiento con Madara se dirigió a la cueva lo mas rápido que pudo, pero usar el Susano lo dejo débil y su avance fue mas bien lento. Cuando llego, lo primero en hacer fue dirigirse a la habitación del rubio, no quería aceptarlo pero las palabras de Madara calaron muy hondo en su corazón, aumentando su inseguridad. Al estar cerca de su destino la sangre se congelo en las venas deteniendo su corazón, ruidos extraños acompañados de gemidos ahogados salían del cuarto. Un miedo amargo le lleno el pecho instándolo a salir, con paso tembloroso se acerco a la puerta, apretó la perilla recargando su frente en la madera, la giro con sigilo y abrió la puerta con cuidado conteniendo la respiración.

Lo que vio lo dejo catatónico, Deidara estaba arrodillado junto a la cama, sus manos se aferraban al colchón y su rostro estaba enterrado entre las sabanas ahogando sus gemidos. Detrás de el estaba otro que no pudo identificar por el estado de su mente, este lo sostenía de las caderas arremetiendo contra él con fiereza, recostándose sobre la espalda del rubio para susurrarle quien sabe que cosas. El sopor fue pronto reemplazado por la ira - ¡mataría a ese bastardo por atreverse a tocar a Deidara! – activo su sharingan y a punto estuvo de volver a usar el sussano cuando Deidara levanto el rostro dando claridad a sus palabras.

-…aaah..si…por..fa...favor….hazlo….arg…asi…ahhh…no….

Toda su furia se esfumo como el aire y de pronto sintió como su corazón era atravesado por algo y roto en mil pedazos. Retrocedió incrédulo sin ser capaz de entender lo que sucedía, ni mucho menos de soportar el dolor al enfrentarse a esta verdad, las palabras de Tobi resonaron en su mente como un maldito taladro. "venganza", Deidara lo había aceptado solo para vengarse. Los gemidos del artista pronto hicieron coro con los de su….

Lagrimas empeñaron su vista. ¿Qué importancia tenia ahora con quien estaba?, eso no quitaba el hecho de haber sido…engañado. No soportando mas ese cuadro comenzó a alejarse trastabillando de tal forma que tuvo que sostenerse de la pared para no caer, su mente reproducía cada fino detalle de ese maldito momento. Salió de la cueva para llegar al claro a un costado de la entrada. No supo cuando empezó a llorar, mordió sus labios buscando acallar sus sollozos, recargo su espalda sobre la roca deslizándose hasta quedar sentado. ¡No podía con esto!, ya era demasiado. Su pecho comenzó a agitarse producto de los espasmos, escondió el rostro entre sus palmas y lloro, lloro de forma descontrolada por segunda vez en su vida, realmente, ¿Qué otra cosa podía hacer?

No supo cuando se quedo dormido, pero la idea de llorar era sentirse mejor, al menos eso había escuchado, ahora comprobaba que también era una mentira. Se mantuvo en silencio unos instantes - ¡quería irse, alejarse de ese maldito lugar, correr, terminar con todo de una vez!- pero no podía, aun le quedaba Sasuke. Se levanto como pudo y camino hacia el rio para acicalarse un poco, lavo su cara para borrar todo rastro de lágrimas, sus ojos estaban hinchados así que realizo un genjutzo para ocultarlo. Madara no estaba cerca pero activo su sharingan, ahora más que nunca tenia que mantener la mascara y necesitaba de toda su fuerza para enfrentarse a él.


Dentro de la cueva, Deidara intentaba asimilar lo ocurrido, hace poco había despertado, aunque a lo que tuvo no pudo llamarse un sueño reparador, hacia poco que Itachi se había ido, el bastardo se aseguro de mantenerlo consiente mientras lo……Un nudo se formo en su garganta al recordar. Respiro tratando de calmarse, estaba cansado de llorar como una niñita. Totalmente hastiado hizo amago de levantarse pero apenas lo intento su cuerpo reclamo con fuertes punzadas de dolor que le arrancaron un lastimero gemido acompañado de una maldición. Se quedo quieto por unos minutos antes de intentarlo de nuevo. Se levanto como pudo pero sus piernas flaquearon y casi lo tiran al piso.

-¡estúpido! - Siseo molesto.

No podía creer su incapacidad para mantenerse en pie.

Haciendo acopio de todas sus fuerzas no solo se levanto, sino que camino hasta el baño; sentía sus piernas temblar como vil gelatina, todo a su alrededor daba vueltas. Al llegar al baño abrió el grifo buscando que la baja temperatura del agua mitigara el dolor. Las frías gotas estremecieron su cuerpo, apoyo una de sus manos y su frente en la pared mientras pequeños cristales caían de sus ojos, cayo lentamente de rodillas sintiéndose derrotado, ligeros sollozos escaparon de su boca, se sentía sucio, humillado, ese bastardo hiso lo que le vino en gana con su cuerpo y él no pudo evitarlo, ni siquiera suplicando.

-Maldición – susurro - ¡maldición! ¡MALDICION! – grito golpeando la pared con el brazo.

Se sentía un maldito inútil, un fracasado. Comenzó a llorar por la impotencia, no podía creer lo que paso; suplicó, cuando el Uchiha le pregunto si quería que se detuviera le dijo que si, que por favor lo hiciera, que así no quería que fueran las cosas, pero no le hizo caso, continuo humillándolo, diciendo una y otra vez que tomaría lo único valioso que tenia, que después de eso una basura seria mas importante que él, que ya no sería digno de nada, solo sería un lindo juguete para la diversión de los demás. Comenzó a lavar su cuerpo con ahincó, sentía asco, asco de si mismo por ser tan crédulo y débil, especialmente por que en algún momento, creyó ser importante para el Uchiha.

Perdió la noción del tiempo y solo el entumecimiento de su cuerpo lo obligo a salir de la ducha. Con la toalla se cubrió hasta la nariz, ocultando su cuerpo. Se acerco al espejo, la imagen que este le devolvió era patética, su cara estaba excesivamente pálida, sus ojos hinchados; bajo la tela revelando un labio lastimado, varios moretones y heridas se esparcían a lo largo de su pecho y cuello, sus costados estaban en las mismas condiciones y…mas abajo….dolía, dolía como no sabia que podía doler, el hecho de caminar le significaba una tortura. Regreso a la habitación por ropa limpia y no queriendo ver las sabanas manchadas con su propia sangre entro de nuevo al baño. Se vistió con cuidado de no lastimarse, puso gotas y coloco unas compresas frías sobre sus ojos para disminuir la hinchazón. Al salir del sanitario ya no tenia los ojos rojos y la inflamación disminuyo considerablemente, recogió su capa y dinero para salir de ahí, no quería permanecer un segundo más en ese lugar.


Después de arreglarse se vio en la necesidad de regresar, no tenía opción. Respiro profundamente caminado como si nada pasara. Al traspasar el umbral de la cueva su corazón dio un doloroso vuelco, caminando muy lentamente hacia la salida venia Deidara; cuando el rubio se dio cuenta de su presencia paro en seco abriendo ligeramente la boca. Sus miradas se encontraron y el mundo dejo de existir, lo único que se podía ver en los ojos de cada uno era la incertidumbre ¿Qué era lo que esperaban del otro?

Itachi afilo la mirada enfocando al rubio con desprecio, seguramente lo único que esperaba el artista era la oportunidad para burlarse de él, no iba a darle esa satisfacción. ¡Si!, lo reconocía, se equivoco, Deidara era tan ruin como los demás, alguien capaz de engañar. Toda la honestidad que creyó ver y amar era una mentira, y todo lo que vivió a su lado era parte de un plan para vengarse por haber despreciado su maldito arte, su promesa era el punto final. El artista jamás quiso estar con él, seguramente sentía asco cada vez que lo besaba, quien sabe en quien o en que pensaba cuando aceptaba sus caricias, pero si lastimarlo era lo que quería, le demostraría que poco le importaba lo que hiciera con su vida.

El moreno recupero su estado de indiferencia, sin desear verlo mas paso a su lado ignorándolo por completo, camino a su habitación para encerrarse en ese desolado lugar. Todo el dolor y desesperación eran mas de lo que podía soportar, no era más que un simple humano entrenado para matar, para mantenerse en las sombras, lejos de toda esperanza. Deslizo su espalda por la puerta dejándose caer hasta quedar sentando en el frio suelo y con solo un pensamiento en la mente.

-Sasuke, date prisa por favor.


Juraría que escucho algo romperse tras la partida de Itachi, tal vez era su corazón o quizá la pequeña esperanza de que todo fuera una pesadilla. Se apoyo en la pared para no caer, en el fondo aun mantenía el deseo de que todo fuera mentira y aunque no quisiera admitirlo, lo único que deseaba con todas sus fuerzas era un abrazo por parte del moreno, si solo lo hubiese abrazado en vez de irse….le perdonaría sin importar lo que hiso o dijo durante esa maldita noche, solo quería sentirse nuevamente a salvo en sus brazos, a salvo y necesitado por alguien mas, porque eso significaba que todas las palabras que susurro a su oído mientras lo tomaba no eran mas que mentira; pero no lo hiso, ¡el maldito bastardo lo dejo solo! Itachi simplemente lo dejo solo porque ya no le servía, solo lo uso para divertirse un rato.

La opresión en su pecho creció al grado de hacerse insoportable, el nudo en su garganta dolía y sus ojos se cristalizaron nuevamente. Salió trastabillando de la cueva, la esplendorosa luz del sol lo encegueció momentáneamente, el día era realmente magnifico, sin embargo para él era el mas sombrío de toda su vida. Avanzo rio abajo alejándose lo más posible de la cueva. A una distancia considerable se detuvo cansado. Se sentía usado por el Uchiha, como un paño que una vez sucio se tira a la basura. No pudo evitar que lagrimas de amargura descendieran por sus mejillas mientras caía de rodillas apoyando sus brazos sobre una roca, escondiendo su rostro entre ellos. Seguía sin creer lo sucedido, sin reconocer a Itachi, pero era cierto, fue un juguete para el Uchiha y ahora que obtuvo lo que quiso ya no valía nada, como siempre fue desde que lo conoció. Limpio su rostro con el torso de la mano.

-Hm ¡maldita sea! – dijo con una triste sonrisa al comprobar lo estúpido que fue.

Por mas que quisiera no podía dejar de llorar, siguió contemplando el correr del agua mientas las lagrimas seguían escapando de sus ojos. Se quedo así un tiempo considerable, cuando por fin reacción apretó los puños con fuerza, su mirada se torno dura y fría, dando claros atisbos de un brillo de rencor.

-No Itachi – siseo con desprecio – no me humillaras más.

Levanto su rostro distorsionado por la ira.

-¡juro que lo pagaras! ¡No descansare hasta verte humillado! ¡Me importa poco el precio a pagar, pero esto no se queda así!