Estés dónde estés, te encontraré


Prólogo

Sufrimiento, desesperación, dolor y definitivamente amor. Tanto sentimientos negativos y el único que me aporta algo de paz es aquel que he perdido.

Cierro los ojos y veo el principio de mi estado, el comienzo de todo mi dolor. "Bella está muerta, Bella no volverá y yo no he podido hacer nada por rescatarla de todo esto"

Me muerdo los labios con fuerza y evitó soltar un gemido de dolor, pero mi garganta no me responde y ejerce su voluntad. Tiemblo y me llevo las manos a la boca, quiero dejar de sufrir, quiero dejar de gritar de espanto y sobretodo quiero que todas esas imágenes desaparezcan de mi mente abatida. No quiero nada pero a la vez quiero todo.

No soporto esta asquerosa existencia vacía, no soporto verme en este estado, pero es que tampoco puedo evitarlo y sinceramente no quiero cambiar. Solo deseo que todo vuelva a ser como antes, como al principio de todo, en donde mi única preocupación era permanecer a su lado. El sentir su agradable aroma que me volvía loco, el sentir su piel contra la mía helada y sobretodo el saborear sus maravillosos labios.

¡En que estado tan deplorable me encuentro!, no tengo ni fuerzas para salir, ni siquiera para comer, es más llevo muchos días probando escasamente la comida, ya que nada tiene sentido y nada volverá a ser como antes. Ni siquiera el amor de mi hija consigue alegrarme el día, sé que debería comportarme de otra forma con ella, pero es que...

Me recuerda tanto a Bella.

Mis manos se dirigen hacía mi rostro y vuelvo a gemir con frustración. Quiero desahogarme como si fuera un humano más, quiero llorar y deshidratarme por culpa de mi llanto, pero sonrió con ironía al pensar que mi naturaleza vampirica no me permite esa acción tan mortal y llena de auténtica agonía.

¿Por qué no me fui yo en vez de ella?, ¿por qué la alejaron de mi lado y ahora me dejan en la más completa oscuridad?, es que acaso ya nada tiene importancia en este asqueroso mundo.

Agarro con fuerza mi butaca y la coloco enfrente de la ventana de nuestra cabaña y ahí me dejo envolver por la oscuridad de la noche, ahí me dejo abandonar por mis recuerdos y mis instintos mil veces más elevados que cualquier humano, no captan la esencia del cielo estrellado, no captan la magia del momento y se vuelven ciegos ante el milagro.

Una franja verde cubre el cielo estrellado por completo.

Continuará.

Bueno, es una introducción bastante corta pero básica para poder empezar con las ideas que tengo con mi nueva historia. Os puedo asegurar que habrá mucho romance, pero también dolor y misterios, pero sobretodo el milagro de esa esperanza muerta.

Y si, Bella está muerta.

Un saludo enorme y muchas gracias por pasarse a leerla.