Bueno. Este es el ultimo oneshot de esta colección. Tenía que cerrarla, porque tengo otra que me consume mas tiempo. Y otras cosas también XD.
Pero bueno. Este va dedicado a la autora, y querida amiga SkuAg. Es un Taimishirou y, sus palabras, es su nuevo favorito de esas parejas. O algo así.
¡Que lo disfrutes, Sku!
Ah, un aviso. And I can't stress this enough. ESTO ES PARA ADULTOS. HAY SITUACIONES QUE BORDEAN LO MUY EXPLICITO. EN SERIO. GO AWAY KIDDIES, THIS IS NOT FOR YOU.
NOT. FOR. YOU.
Ahora, mis amigos adultos, proceed.
Disclaimer: Digimon no me pertenece.
xix. 三人組/ san'ningumi (trío)
rating: MA/NC-17
personajes: Taichi/Mimi/Koushirou
"Un… ¿trío?"
Mimi se removió nerviosamente en el sofá, mirando como su adorado novio procesaba su petición.
Oh, debió haber seguido sus instintos y rehusado la ayuda de Sora. En serio, ¿qué podría la pelirroja saber de tríos? Ambos, ella y Yamato eran las personas más posesivas en el mundo; no dejarían que alguien más tocara al otro. Claramente, la relación de sus amigos era, eh, bien apasionada, siempre en llamas, tanto que no necesitaban nada extra para avivarla… o esa impresión daba. Pero bueno, Mimi estaba segura que había más en la relación de Yamato y Sora que lo que ellos dejaban ver; tras puertas cerradas.
Como sea, eso no significaba que su propia relación fuera aburrida o que no tuviera pasión, pero… claro, seguramente eran solo las alocadas ideas occidentales que había adquirido durante su estadía en Estados Unidos, Taichi era bueno, por el amor de Dios—¡era excelente! Pero Mimi en serio necesitaba probar esto… como rascarse una picazón. Una vez lo hiciera, la idea se iría… eso esperaba.
Taichi parpadeó repetidamente, y luego frotó su rostro con sus manos, empujando su cabello hacia atrás; sus manos siguieron su camino hasta descansar sobre su cuello. Suspiró, mirando el techo, quizás buscando algo, la respuesta ¿quizás? Y finalmente, sus ojos color chocolate se enfocaron en ella.
"¿Un trío? Estás segura que esto es… ¿lo que quieres ahora?"
Mimi mordió su labio inferior, preocupada por la confusión y la consternación que reflejaba el rostro del moreno. "Si…"
Taichi suspiró de nuevo, y le dio una mirada de arrepentimiento. "¿Hice algo para…?"
"¡No! No, no, no. ¡No! No hiciste nada malo, de hecho, ¡has hecho todo bien! No eres tu…"
Oh, Dios, ¿por qué se sentía como un rompimiento?
"Entonces, ¿por qué…?"
Mimi permaneció en silencio por un momento, meditando su respuesta pues sabía que él merecía honestidad. "Supongo… Me dio curiosidad."
"¿Eh?"
"¿Recuerdas la fiesta del fin de semana pasado? Bueno, cuando fui al baño, me topé con… unas chicas—ellas estaban besándose y había un chico con ellas y entonces, obviamente ellos no sabían que yo estaba ahí, porque ellos… ellos—ellos se desvistieron y… bueno, tú sabes…"
Taichi asintió, dándole a entender que entendía, aunque su expresión aún era una de confusión.
"Me puso a pensar, ¿sabes? ¿Cómo sería hacer eso… cómo se sentiría? Lo pensé, incluso imaginé lo que sería, pero ninguna de las situaciones lograba tener sentido en mi cabeza; tu, otra chica, y yo. Traté de imaginar a esta chica, y las únicos rostros que venían a mi mente eran los de Sora, Miyako… diablos, ¡incluso Hikari!"
Ante eso, Taichi se alejó de ella como si le quemara, luciendo nauseabundo.
"Pero siempre se siente mal. Sora jamás lo haría, jamás le haría eso a Yamato. Miyako es muy inocente aun, y ella tampoco le haría eso a Ken. Y no creo que sea necesario explicar por qué Hikari está fuera de todo."
Una pausa; Mimi no estaba segura si era por el beneficio de él o el de ella.
"Entonces pensé, ¿por qué tiene que ser otra chica? ¿Por qué no un chico?
Su explicación termina con eso, dejando que Taichi llegara a la inevitable conclusión por su cuenta. Y siendo el tipo listo que era, Taichi comprende la situación bastante rápido, y volvió a frotar su rostro para espantar el shock.
"Yo… bueno, tu… me sorprendiste con esto, Mimi, pero… si es lo que quieres—y mientras no sea permanente…"
Con un chillido de emoción, Mimi saltó de su lugar en el sofá y se lanzó a sus brazos, abrazándolo fuertemente. "¡Oh, gracias! ¡Gracias, gracias, gracias! Y prometo que es solo una vez, solo para satisfacer mi curiosidad."
Él sonrió un poco, devolviendo el abrazo mientras la acomodaba mejor en su regazo. "Y, eh, ¿a quién tienes en mente?
Mimi se ruborizó, pero respondió con firmeza, "Koushirou."
.
Al final, la idea no fue tan mala.
Lo único que tenías que hacer era dejarla guiar, dejarlo seguir el ritmo de ella. Era fácil, y estuviste tentado, más de una vez, a pretender que él no estaba ahí, pero entonces rozabas piel que es demasiado áspera para ser la de tu novia y recordabas de la tercera persona participando en el momento. Las primeras veces que ocurrió eso, tu sorpresa fue tal, y la de él también, que su sincronía se perdió, pero tu persististe y ella lo alentó a seguir y todo estuvo bien nuevamente.
Mimi estaba mirándote, sus brazos te rodeaban, pasando por debajo de los tuyos mientras se aferraba a tus hombros casi dolorosamente. Su rostro estaba ruborizado y sudoroso, toda ella estaba sudorosa; su respiración era agitada y sus gemidos enviaban pequeñas descargas de placer por tu cuerpo y directo a tu entrepierna. Todo era increíblemente sexy y excitante y tú solo podías aferrarte a sus caderas y empujar más rápido. Ella seguía haciendo esos pequeños sonidos que nunca lograban escapar de sus labios y el sonido que hacía la piel al ponerse en contacto con piel… estabas cerca.
Ella rodeó tu cintura con sus piernas, o lo intentó, y sabías que estaba cerca, pero entonces una mano que no es de ella, que es tuya, se deslizó entre sus cuerpos y la estaba tocando, a ella y a ti también, y sus rápidos movimientos los envió a ambos fuera de control y sobre el precipicio. Vagamente, a lo lejos, lo escuchaste gemir al llegar al clímax detrás de Mimi pero la verdad era que poco te importaba. Todo lo que sentías era a ella; sus brazos aferrándose a ti, sus uñas enterrándose en tu piel, sus piernas rodeando tu cintura y su interior pulsado a tu alrededor, apretando oh tan maravillosamente.
Cuando lograste bajar de tu euforia, colapsaste sobre Mimi, y ella colapsó sobre Koushirou, y cuando él soltó un quejido en protesta, sentiste una fuerte ola de posesión y, rodeando la cintura de tu novia, te dejaste rodar hacia la izquierda, lejos de él.
Trataste de ignorarlo, con Mimi presionada firmemente contra tu pecho, y te alejaste, lo más posible sin caer de la cama. Aun así, tus brazos la apretaron más contra tu cuerpo, asegurándote de que aun estuvieran unidos.
Y de repente sentiste enojado, furioso, pero, te diste cuenta, que por las razones equivocadas. Quisiste enfocar tu ira en el hecho que otro hombre, tu amigo, se atrevió a tocar a tu novia. Quisiste eso, sentir la ira ante el hecho que tuviste que compartir a tu mujer con otro hombre en una de las situaciones más íntimas.
Pero no pudiste. Así que, en lugar de eso, te enfureciste contigo, el saber que disfrutaste. Y mucho si eras honesto.
Mirando de reojo al tipo medio dormido a tu lado (tu amigo de infancia), decidiste entonces superarlo. Después de todo, solo sería una vez y nada más.
Fin.
Siempre iba a ser algo corto. La verdad, que no acostumbro a escribir cosas de este tono. En español. En inglés si me van bien, pero en español, como que me suena sucio XD
Pero, eso.
Sku, ¿espero que lo hayas disfrutado?
Aun cuando lo tuyo no es esto :P I tried.