Título: Le Finale
Género: Drama
Personajes/Pareja: Hal Mello
Fandom: Death Note
Advertencias: Spoilers del final de la serie
Disclaimer: Death Note no es mío, pertence a Ohba y Obata
Comentarios: Eah, ni yo sé que me fumé cuando salió este engendro, bue, da igual. Ojalá les guste y lo encuentren comprensible porque yo creo que me salió bien complicado de leer.


Le Finale

Nunca nadie tuvo un sueño aquí, pero no importa de todos modos. No eran más que un grupo de personas perdidas y sin dirección segura. Mello y Near eran el ejemplo más claro. Ambos tan ajenos, tan apartados del mundo, tan secretamente desorientados.

Perdidos.

O al menos esa era la perspectiva de Hal, alguien que jugaba desde afuera. Mera observadora, enlace por voluntad propia que era capaz de darse cuenta cuando estaba siendo utilizada. Algo que claramente tenía pensado cuando acabó en la misma cama que Mello, por supuesto.

¿Por qué gastar el tiempo así?

Estaba claro que la respuesta no la tenía en su cabeza, que lo que la unía a Mello no era para nada amor. De hecho, sospechaba que ese lugar lo rellenaba otra persona de la cual Mello no le había dado conocimiento. Se dio cuenta cuando él comenzó a clamar por un nombre que no era el suyo.

¿Y qué estaban haciendo¿A qué clase de juego extraño estaban jugando?

Seguramente Near ya se había dado cuenta de todo y si, efectivamente, lo hizo… no parecía dar señal alguna de ello. Aquello la incomodaba y aliviaba al mismo tiempo, no podía dejar de sentirse tan débil.

Un paso en falso y estás perdido.

El celular suena dentro de su bolsillo. Es él quien llama, él siempre utilizándola y ella siempre dejándose estar. La charla no dura mucho y cuando esta a punto de colgar, él dice algo y ella siente la espalda helársele hasta los huesos.

"Parece que soy el único que puede hacerlo". La voz de Mello, firme a través del teléfono, parece indicar una despedida. "La última vez…", es el único pensamiento que se cruza por su mente. Se muerde el labio, coge el abrigo y se dirige al trabajo.

Varias horas, tazas de café y malos ratos después, cuando escoltaba a Takada fuera de la limosina, se produce un disturbio. Y allí es cuando lo ve de nuevo.

"Debe irse de aquí, Señora Takada, por favor suba a la moto", grita Mello, montado en su moto y Takada obedece. El vehículo parte dejando una larga nube de humo atrás. Se acabó, no hay más.

El final. The end. Se finito. Le finale.

Y eso es todo, no hubo despedida romántica en una estación de tren, ni beso apasionado a la luz del atardecer ni su nariz entre sus ojos ni sus manos en sus orejas. De hecho, fue un final más bien rápido.

Y es cuando estamos perdidos de nuevo.