Por fin!!! Lo logre, estoy muy emocionada porque logre terminar una historia y sobre todo esta que cuando empece a escribirla me dio miedo pues es muy dificil adaptar una historia y mas cuando se que hay personas que lo hacen estupendamente. En fin, espero sea de su agrado y no los vaya a defraudar...por fitas dejen sus comentarios así sabre que tal estuve. Ya no los entretengo y adelante.

22. El comienzo de algo nuevo. Segunda Parte

Pasaron varios días y Harry estaba en la misma situación, no había mejorado nada. Ginny por supuesto no se separo ni un momento de él, dormía muy poco y ya que solo Hermione y Draco sabían de su estado, ellos se encargaban de ver que comiera y descansara un poco, solo lo que ella permitía. El rubio ya había sido aceptado por los Weasley, y se daba vueltas seguido por el hospital para ver como seguía "El cuatro ojos" como lo seguía llamando, aunque ya no lo hacía despectivamente y darle un poco de apoyo a su amiga.

Despues de aproximadamente seis días, Draco llegaba al hospital por la tarde, entró a la habitación y para no variar Ginny, estaba sentada en un sillón a lado de la cama, tomando la mano del inconciente Harry y hablándole…

-Harry, mi amor, tienes que despertar…ya no aguanto que estés así, te espera una noticia tan grande…vamos a tener un…

-Ejem, ejem- carraspeó Draco, interrumpiendo a la chica.

-Oh! Draco, eres tu…-dijo cuando volteo hacia la puerta. Se veía tan demacrada y ojerosa- que haces aquí?

-Vengo a reemplazarte…tienes que comer y dormir un poco.

-No, no hace falta, yo…yo estoy tan fresca- y se estiro abriendo los brazos.

-Mentirosa!...mira, te duermes en el sofá, y yo lo vigilo, solo no me pidas que le tome la mano y le hable al oído cosas románticas- y con su comentario le robo una sonrisa a Ginny.

-Esta bien…tu ganas, me voy a dormir un poco, me despiertas en una hora, no tengo tanto sueño…-y se fue recostando en el sofá-…solo una pequeña siesta- y no pasaron más de dos minutos…-no sabes cuanto te…-bostezó-auhh!...agradezco…todo…auhh! esto.- cuando por fin se durmió.

Draco se levanto y le echo una cobija, regresó a su lugar, saco un libro de un bolso que llevaba colgado y se puso a leer. Pasó una hora, todo seguía igual, iba a despertar a Ginny, pero decidió dejarla un rato más, pasaron dos, tres, cuatro horas…ya era de noche, tenía la vista cansada de tanto leer, se froto los ojos, pero tenía tanto que estudiar para un caso nuevo que le habían dado.

-Que…haces…tu…a…aquí?- Draco se sobresaltó, aventó el libro para darse cuenta que Harry tenía un ojo abierto, observándolo.

-Yo…yo estoy cubriendo a Ginny…pero tengo que avisarle al sanador, que venga a revisarte…

-No! Espera…donde esta Ginny?

-Ahí en el sofá- y le señalo a la chica. Harry giró su cabeza con mucho trabajo y se quejo, pues le causo dolor- No se ha querido ir desde que llegaste, y la cubrimos entre todos, Hermione, Ron, su mamá…aunque debo decir que es tan testaruda que solo lo permite por unas cuantas horas.

El ojiverde esbozó una sonrisa-…supongo que debo darte las gracias…por no haberme matado teniendo la oportunidad de hacerlo…

-Mira, tal vez esta sea la única vez que escuches lo que te voy a decir…así que pon mucha atención, yo ya me di cuenta que Ginny te ama y que nunca me querrá de la misma forma, y se que tu la harás feliz, así que me conformó con tener su amistad…claro si tu estas de acuerdo…

Harry asintió con la cabeza- cuanto tiempo llevo aquí?

-Una semana…estuviste muy grave, ahora déjame llamar al sanador…en verdad me da gusto que ya estés bien…

-Gracias, pero antes de llamar al sanador…puedes despertar a Ginny?

-Claro- el chico se levantó y empezó a mover a la chica- Ginny? Despierta!-pero no se despertaba- anda, Harry reacciono…- abrió los ojos.

-Que?

-Que Harry despertó…

Ginny se levanto de golpe, se acercó a la cama y por fin encontró esos ojos verdes…

-Hola!- dijo Harry con la voz muy débil.

-Mi amor! Por fin…Draco que haces ahí parado? Ve por el sanador Smith!

Draco sonrió y salió de la habitación.

-Sabía que ibas a despertar, pero porque tardaste tanto?

-Estoy muy a gusto aquí- sonrío- tengo a la sanadora más hermosa cuidándome, que más puedo pedir?

-Que chistoso! Pero estuviste muy mal, tuve tanto miedo…pero ahora ya nada nos separará…

-Lo se…sácame de aquí, si?

-No que estas muy bien aquí?

-Si, pero esta cama es muy chica para…

-Señor Potter, le esta insinuando algo a su sanadora?

-Pues, solo si usted quiere?

-Bueno, creo que mi esposo no se dará cuenta…- y lo beso, tiernamente.

-Eso espero- y le dio otro beso- auch! Me duele mucho la cabeza- y se llevo las manos al lugar de su dolor.

-Claro, es normal…despues de semejante maldición que te echó ese maldito, pero te pondrás bien, ahora lo importante es que te cuides y sigas las instrucciones de tus sanadores…Harry hay algo que tengo que decirte…

-Dime

-Draco te salvo la vida…y yo he decidido darle la oportunidad de ser amigos…

-y como es que Malfoy me salvo la vida?

-Supo de la maldición y te dono sangre…fue un experimento que hicimos…

-Quienes?

-Pues Draco, Hermione, mi jefe y otro sanador que tu no conoces…pero todo se dio gracias a Draco…

-Entonces tendré que darle las gracias de nuevo…y no te preocupes por lo de ser amigos de nuevo…ya hable con él y se que es sincero…ya no me molesta…

-Eres maravilloso Harry!- el chico acarició el rostro de Ginny y no pudo dejar de notar que se veía muy demacrada.

-Luces mal, te sientes bien?- le pregunto.

-Si, pero tengo que hacerte otra confesión…-y la chica se acercó más a su esposo, no sabía como dar semejante noticia, así que decidió lo más directo- Vamos a ser papas!

Harry abrió los ojos tanto que parecía que se le iban a salir, sonrió, pasaron unos segundos y habló- En verdad?- y la chica movió la cabeza afirmativamente, con una gran sonrisa en los labios y con los ojos llorosos- Desde cuando?

-Desde cuando estoy embarazada?

-Si

-Creo que fue la vez del departamento, la primera…me entere un día antes de la reconciliación…

-y por que no me dijiste cuando hablamos en el ministerio?

-Te lo iba a decir cuando regresaras de la misión…pero eso ya no importa, lo importante es que tendremos un bebé…tuyo y mió…estas feliz?

-No sabes cuanto…creo que era lo único que nos faltaba…-levanto su mano, para atraer el rostro de su esposa, la tomo del cuello y la beso- Te amo!- y le dio otro beso.

-Te amo Harry!- lo volvió a besar pero ahora fue largo y apasionado, y los dos derramaban lagrimas de felicidad.

En eso entraron el sanador Smith, Hermione y Draco.

-Siento interrumpirlos- dijo la voz gruesa del jefe de Ginny- pero tenemos que revisar a Harry.

-Esta bien- dijo Ginny sonrojada- pero yo lo veo muy bien…

-Sanador…ya me quiero ir a mi casa…-dijo Harry cuando se acercó el sanador a revisarlo.

-Lo se, pero tenemos que revisarte porque puedes recaer…- ahora fue Hermione la que habló.

-Amiga…como estas?- pregunto el chico haciendo caso omiso a su comentario.

-Yo bien, pero tu aun estas débil y aunque estés de muy buen humor tienes que cuidarte.

-Si mamá- dijo sarcásticamente- Draco?

-Aquí estoy- dijo el chico acercándose un poco, pues estaba recargado en la pared a lado de la puerta.

-Quiero darte de nuevo las gracias, Ginny me contó que me salvaste la vida…

-No fui solo yo, todos pusieron un granito…

-Aun así, gracias- y le extendió la mano, en un gesto de agradecimiento, pero también haciendo las pases. Draco también hizo lo mismo, pero ya no habló.- Quiero que sepas que eres bienvenido a la casa, y que si el tiempo lo permite…a lo mejor también podamos ser…ser…- le costaba decirlo, por mas seguro que estaba-…amigos…

-Claro, por que no?

Ginny estaba más que feliz, su esposo estaba casi recuperado, tendrían a su bebé y por fin no habría enemistades entre Harry y Draco…ella sabía cuanto le hacía falta al rubio pertenecer a una familia, tener amigos, sentirse querido.

Y Harry se veía tan bien, feliz, con otros aires, ahora que ya no tenía rencor y que su vida por fin empezaba a retomarse de nuevo.

Pasaron otros dos días en el hospital hasta que dieron de alta a Harry, ya que Ginny y demás sanadores, no querían que volviera a recaer. Llegaron a su departamento y la pareja se volvió a instalar rápidamente.

-Por favor quiero que te acuestes…y no que te vayas a estar pasando por toda la casa- le dijo Ginny en actitud mandona, pero con mucho cariño.

-Oye!- y la jalo, recostándola sobre él- si quieres que permanezca aquí tienes que estar conmigo- le dijo mientras le besaba el cuello, y le acariciaba las caderas.

-Umm, pues tendré que hacer un gran sacrificio- y lo ataco a besos.

Harry contesto los besos con desesperación, tenía tanto que no estaban juntos, pero Ginny frenó la velocidad, lo recostó con calma y se sentó frente a él- Creo que no te puedes agitar demasiado todavía, así que déjamelo hoy a mi…-se soltó el cabello y con tremenda gracia se quito la blusa, se paso las manos por la espalda y se desabrocho el sostén dejando al descubierto sus pechos, Harry no tardó en apoderarse de ellos, mientras que ella se acercaba para besarlo, de repente se levantaba un poco para que su esposo pudiera deleitarse con sus senos, los besaba y succionaba el pezón de la chica, para estas alturas ya los dos soltaban gemidos. Harry alzó los brazos y su esposa entendió…le saco su playera y dejo al descubierto el torso marcado, que ella empezó a besar, quería ir lento, quería disfrutar al máximo de tanto placer, así que se dispuso a besarlo todo, cada rincón…su pecho, hombros, cuello, cadera, subió de nuevo a su pecho para morder ligeramente sus pezones, con la lengua recorrió todo el centro del abdomen, paso el ombligo y se detuvo en el pubis, alzo la cara y vió a Harry disfrutando como tal vez nunca lo había hecho, él la miro y con la vista le insinuó que podía continuar…le quito los boxers y se dispuso a hacer su trabajo…-Oh! Ginny…- despues de unos minutos de sexo oral se levanto para que su esposo la contemplara quitarse lo que le quedaba de ropa y lo hizo lenta y sensualmente, cuando terminó se acercó cual gatita y se sentó sobre él, empezando a mover sus caderas con ritmo…

Minutos más tarde yacían en la cama desnudos y con la respiración entre cortada…

-No puedo creer lo que hiciste!- le dijo Harry con Ginny recostada sobre su pecho.

-Sólo contigo soy capaz de hacer esto y más…- le dijo sensualmente y dándole un pequeño beso.

-Te amo Ginny!

-Y yo a ti- le contestó.

Despues de cinco meses…

Harry había vuelto a su trabajo como fotógrafo muggle, pero también seguía trabajando para el ministerio…aunque con la detención de Snape habían terminado con los mortífagos declarados, y solo se encargaban de hacer investigaciones y asegurarse que no hubiera más levantamientos.

Ginny ya con una panza de casi siete meses seguía trabajando pues se había negado rotundamente a dejar de hacerlo, tenía ya su plaza, así que ya era una sanadora residente…solo iba a trabajar un mes más…ya que aun no tenía nada para el bebé, ni siquiera tenía un cuarto para su hijo y eso realmente le preocupaba. Harry pasaba todos los días por ella, pues no quería que viajara sola, ya que no podía transportarse por medios mágicos y tenia que hacerlo a lo muggle.

-Hola Amor!- le dijo Harry entrando al despacho de su esposa.

-Como estas?- le pregunto levantándose con dificultad, poniendo su mano en su cóccix para sostenerse.

Harry se acercó para besarla, se separaron y él tomo el bolso de su esposa y le paso el sueter para que se lo pusiera.

-Harry estas loco! Pero si hace mucho calor…

-Calor? Pero si afuera esta lloviendo…mírame, estoy sudando- y le jalo la mano para que le tocara la frente.

-Rayos! Se me olvido…las hormonas…pero aun así quiero que te lo pongas, solo para salir…no quiero que enfermes…

-Esta bien…pero voy a necesitar aire acondicionado en la casa…

Salieron del hospital y llegaron a su casa, Harry había contratado a Dobby para ayudar en los deberes del hogar y Ginny acepto gustosa porque quería disfrutar plenamente el poco tiempo que tenía para estar con su esposo.

Cenaron, charlando de su trabajo y de los planes que tenían pendientes.

-Quiero que en tu día libre nos dediquemos a buscar una nueva casa…este apartamento ya no nos servirá…-le dijo Harry.

-Si, ya lo había pensado…pero yo quería que el día libre no la pasáramos echados en la cama…y bueno no me molestaría que hiciéramos otras cositas…-le contesto seductoramente.

-Esta bien, pero entonces quiero que adelantes tu maternidad…y compremos todo lo que falta y bueno…veamos lo de la casa…te parece?- le pregunto con miedo ya que el humor de Ginny en los últimos meses no era muy bueno.

-OK, no hay problema, de todas formas ya me canso horrores y quiero pasar mas tiempo contigo…

-De verdad?- pregunto sorprendido.

-Claro que si, por que te sorprende?

-Pues es que a veces eres muy obstinada y como habías dicho que no dejarías de trabajar hasta el octavo mes…

-Oh! Ven acá Potter- con el dedo índice lo llamo.

El se levanto de la silla y se acercó, se arrodillo frente a ella- Sabes que me encanta cuando te pones de coqueta?

-Si, lo se…por eso lo hago y te amo- lo besó- ahora llévame a la cama.

-Por supuesto, pero tendrás que caminar, porque ya no te aguanto…auch!-recibió un golpe.

Pasaron dos semanas…Ginny ya había dejado de trabajar y Harry solo tenía que ir un par de horas en la mañana, ese día tenían cita con el sanador obstetra, así que despues de que Harry regresó del trabajo, paso por Ginny.

-Amor! Ya llegue…

-Ya voy…solo me visto…-grito desde el cuarto

-Todavía no estas lista?

-Es que no se que ponerme…

Harry entro a la habitación y estaba echa un desastre…ropa tirada por todos lados, zapatos fuera del closet.

-Solo vamos a tu consulta…no vamos a un desfile de modas…

-Jaja, es que no ves, estoy tan gorda que nada se me ve bien…

-Tu te ves bien con todo…y no estas gorda, solo tienes una pancita- y se acercó sigilosamente para abrazarla por detrás-…y en esa pancita tienes un bebé, que crece y se alimenta de ti…cuando él nazca recuperarás tu figura…es más te pondrás mejor…porque tendrás tremendas te…bueno tu sabes…además te traje algo…

-Si? Que?- pregunto no muy convencida con el discurso de su esposo.

-ahora lo veras…accio regalos- dijo apuntando la varita hacia la puerta. Llegaron volando varias bolsas de las que dan cuando vas de compras a las tiendas muggles. Harry las tomo y saco mucha ropa.

-Y eso?

-Privilegios de fotógrafo muggle…me la regalaron…

-Es hermosa, y además es de maternidad!- dijo emocionada Ginny.

-Bueno, es que esa ropa que compraste en el callejón Diagon no es muy bonita…sin ofender claro…

-Lo se! Esta preciosa, mira estos pantalones…están acampanados- se los puso emocionada- y no me aprietan…oh! Mira esta blusa- dijo tomándola de la cama- no puedo creer que las brujas no hagan ropa así…

-Bueno, no importa…ahora vístete porque ya tenemos que irnos o llegaremos tarde…

-Gracias mi amor…no se que haría sin ti…

Llegaron un poco retrasados a la cita, pero por ser Ginny no se la cancelaron…el sanador los recibió y pasaron a una sala para obscultarla.

-Me acaba de llegar un aparato que usan los muggles para ver al bebe dentro del vientre, quisieran ser los primeros?- les pregunto el hombre.

-Seguro- dijeron los dos al mismo tiempo, pues les emocionaba ver a su bebe antes de que naciera.

-Claro que yo le hice algunos ajustes- y les cerró el ojo- y pueden ver el color de sus ojos, su cabello, el sexo…bueno eso ya se podía saber…

-Pero no queremos saber que es…-dijo Harry muy seguro.

-Yo si quiero…-dijo Ginny

Y los dos se miraron.

-Bueno, empecemos y luego deciden, vale?- les pregunto el sanador

-Esta bien- contestaron de nuevo juntos.

Ginny se recostó en la camita, se descubrió el vientre y el sanador saco un tubo.

-Esto esta frío- le dijo apretando el tubo y dejando caer suficiente gel en la panza de la chica.

-Uy! Si que esta frío.

En seguida le puso un aparato alargado y la imagen apareció en una pantalla.

-Bien…aquí esta…su bebé!

Harry tomo la mano de Ginny y se miraron muy emocionados, de hecho tenían los ojos acuosos.

-Miren, su cabello es…negro, ahora veamos si esta despierto para ver sus ojos…

-Mira Harry, tiene tu nariz…

-y tus ojos…-dijo el sanador interrumpiendo.

-Parece que tenemos a un autentico Potter- dijo Ginny sonriendo.

-Esperen…-dijo el sanador moviendo el aparato frenéticamente alrededor del vientre de Ginny.

-Que pasa?...algo esta mal?- pregunto preocupado Harry.

-No, pero parece que al menos que su bebe tenga cuatro brazos…tenemos dos bebés…

-Que!!- pregunto Ginny y Harry sintió de pronto un mareo.

-Si, tenemos dos bebes…y este es…pelirrojo!- grito emocionado el sanador.

-Wow! creo que no ganaste del todo eh?- le dijo Ginny a Harry que estaba como perdido- ey! No te da gusto?

-Claro que si, es solo que me sorprendió…yo solo esperaba uno…

-Bueno, mejor así no tendré que pasar por otro embarazo…- y le acaricio la mejilla a su esposo- solo dos, recuerdas?

-Por supuesto, es perfecto…y sus ojos de que color son?- pregunto ya emocionado también.

-Son…verdes también…miren- y señalo la pantalla- quieren una foto?

-Por favor!- dijo ya con lagrimas rodando por sus mejillas Ginny.

El sanador les entrego la foto mágica, pero les dijo que debido al embarazo doble de Ginny, el parto se adelantaría un poco, así que saliendo de ahí fueron inmediatamente a buscar una casa, ya que ese pendiente se había convertido en urgente y las cunitas y demás cosas, también eran necesarias ya que solo disponían de un par de semanas.

-La segunda casa era hermosa!- le decía Ginny a Harry mientras cenaban en un restaurante, pues su esposo la había invitado a cenar para celebrar junto a sus dos amigos Ron y Hermione.

-Si, pero la tercera era tan grande…-contestaba Harry.

-Y…por cual se decidirán?- pregunto Ron

-Pues no se…también me gusto la grande…pero la segunda esta cerca del parque y podríamos llevar a los niños a dar una vuelta o a caminar o a andar en esas cosas que usan los muggles…

-Esta bien, me convenciste…compraremos la que te gusto, aunque no es tan grande como la otra, pero a lo mejor si la arreglamos mágicamente…

-Claro Harry! Como no se te ocurrió antes- dijo Hermione que miro nerviosa a su esposo.

-Y a ustedes que les pasa?- interrogo Ginny a su hermano y cuñada.

-Emm…pues…la verdad los íbamos a llamar para contarles…pero como llamaron antes…

-Ya digan por favor!- dijo Harry intrigado.

-Hermione esta embarazada!- grito por fin Ron

-Nos enteramos hoy en la mañana- dijo ahora la castaña- así que muy pronto sus hijos tendrán un compañerito de juegos.

-FELICIDADES!- dijeron Harry y Ginny al mismo tiempo levantándose de sus asientos para abrazar a sus amigos.

Cenaron muy felices, charlaron y despues de un rato se fueron a sus respectivas casas.

Ginny se estaba desvistiendo cuando entro Harry.

-Oye, no te pongas tu pijama…se me acaba de ocurrir algo…-saco del cajón del buró una cámara fotográfica.-…déjame tomarte una foto, si?

-No, claro que no…sabes que no me gustan…

-Por favor, no quieres tener un recuerdo de tu embarazo, anda…tengo una idea…por favor…solo será para ti y para mi…

-Oh! Esta bien, pero deja de mirarme así…- Harry tenía esa mirada que la hacía perder.

-Gracias preciosa…ahora quítate la ropa…

-Que?

-Por favor…

-Estas loco…-pero esta vez hablo sonriendo y se empezó a quitar la ropa tan sensualmente como su panza se lo permitió. Cuando por fin quedo desnuda, una lluvia de flashes empezó y Harry le decía como acomodarse, le tomo como treinta fotos, y despues de eso hicieron el amor.

Al amanecer estaban los dos abrazados, Harry despertó y se levanto sigilosamente para no despertar a Ginny, entró a la cocina y revelo las fotos, despues preparo el desayuno y se lo llevó a la cama.

Ginny estaba despertando cuando Harry entro con la bandeja en las manos.

-Harry! Preparaste el desayuno?

-Si, y otra cosita…mira…-y le dio la foto.

-Es preciosa! Mira que bien me veo…eres bueno Potter!

-Lo se, tenemos que enmarcarla…realmente es buena…

-Deberías de hacer una de esas exposiciones que hacen…ay!- se llevo la mano al vientre.

-Que pasa?

-Me dio una…contracción!

-Ginny! Es hora?

-Creo que si…

-Pues vistete en lo que yo hago tu maleta…

-Si- se levanto rápido y empezó a vestirse, en diez minutos ya estaban en el hospital.

Cuando Ginny entro a la sala de labor, Harry se encargó de llamar a Ron para que les avisara a los demás.

Y no tardaron el llegar más que cinco minutos. La sala de espera estaba llena de pelirrojos: el señor y la señora Weasley, los gemelos, Bill y Ron con Hermione.

-Harry, estas nervioso?- le pregunto su amigo.

-Claro que estoy nervioso, pero se que todo saldrá bien, se adelantaron un poco pero mis hijos estaran bien no?

-Exacto!

Despues de tres horas de espera salió el sanador.

-Harry, puedes pasar con Ginny…

-Estan bien?- pregunto preocupado.

-Si, los tres estan bien, pero los bebes tendran que estar unos días aquí, les daremos unas pociones para que suban un poco de peso, pero en general estan bien…

-Gracias, voy con ellos….

Cuando entro a la habitación vió a Ginny en la cama, se veía tan hermosa y cargaba a sus dos bebés, los miraba y despues los besaba, alzó la mirada y vio parado observandolos a su esposo.

-Harry…ven a conocer a tus hijos- dijo muy bajito.

-Son varones?- hablo acercandose a su nueva familia.

-No, saluda a tu hijo- y le arrimó al bebé de pelo negro- y ahora saluda a tu hija- y le enseño a la bebé pelirroja.

-Mis bebés…son tan hermosos- pero de pronto se dio cuenta de algo muy importante-…no tenemos nombres aun…

-Lo se, te parece si escogemos ahora?

-Claro…- y tomo a su hija para que Ginny descansara un poco-…me gusta Emma, a ti no?

-Oh! Emma es lindo, pero no te gusta más Abigail?

-No! Abigail Potter? Que tal…Emma Potter?- pero despues se contesto a si mismo- No, tampoco.

-Bueno y para este precioso bebé que por cierto fue el mayor…Harry, como tu!

-No, de ninguna manera…ya con el Potter tienen suficiente, que tal Ben?

-Me gusta…hola Benjamín Potter!- dijo tomando la manita de su bebé.

-Ahora solo queda esta preciosura…

-Sara!- dijo de pronto la chica.

-Si, Sara Potter y nada de ponerle dos nombres, nunca los usas, ok?

-Perfecto, me parece genial…Harry?- dijo cambiando el tono de su voz, a uno más serio.

-Dime- dijo sin quitarle la vista a su hija, era igual a su madre, pero con el color de sus ojos.

-Mírame…-le dijo casi en suplica. El chico levanto la vista hacia su radiante esposa-…quiero que sepas que este es el día más feliz de mi vida, porque tenemos estos hermosos bebés…porque estas a mi lado a pesar de todo lo que pasamos…porque me hiciste entender que cuando realmente amas a alguien puedes perdonar cualquier cosa y porque te amo, aunque ahora tendrás que compartir mi amor con mis bodoquitos…

-Lo se y no me importa…yo también te amo y amo a Sara y a Ben…y yo me haré cargo de que toda esta felicidad que sentimos ahora se alargue por el resto de nuestras vidas.

FIN

Nota: Que tal estuvo? Bueno o horrible? Pues se estan tardando, dejen su review y sean sinceros...estuvo largo no? Bueno sigan mi otro fic, que parece va para largo todavía. Besos. cEcy