Capitulo VII- Primera parte

Hermione se subio al coche sin notar la mirada de preocupacion de Harry, tampoco dijo nada cuando él le dijo si preferia que ensediera la radio o que la dejara apagada, tan solo puso su vista en la ventana y no presto atencion a nada mas que no fuera ver sin observar.

Lo que había ocurrido en la iglesia había encendido una luz roja en su cabeza. Su mente había reaccionado de una manera no prevista, no en su plan, y ahora se sentia frente a un campo minado, ansiosa y temerosa de cruzar al otro lado, donde aguradaba algo oscuresido delante de una cegante luz.

La fragil mentira sobre la que había construido su independiente vida cayó bajo el peso de una esperanza que se veia cada segundo mas y mas peridida; cayó tropesandose con sus propios pies y se destruyo en el suelo sin remedio ni explicacion y la dejo enfrentarse cara a cara con la cosa a la que mas temia: el deseo aun vivo de ser recordada. Nadie olvida las promesas no cumplidas, mucho menos juramentos dichos aunque hayan sido rotos. Todo se queda dentro, grabandose y amoldandose a la persona e influyendo en su persepcion de quienes le rodean. ¿Que se suponia que Hermione haria con la nueva promesa de amistad que Harry había propuesto sin hablar? Acaso dejar que todo fluyera de nuevo, como si el pasado no fuera de ella sino de otra persona, y volver a las charlas de los tres mejores amigos. ¿Podria hacerlo? Cierto era que algo se rompio entre ellos aquella tarde, en que Harry repitio hasta el cansancio no recordar el amor que tantas veces le había demostrado, y que nada era lo suficientemente poderoso para enmendarlo. Y aun asi, había algo, algo en su interior que le rogaba no desentenderse de Harry como lo había hecho dos años atras: que debia comprender que todo lo que fuera comun y con razon había dejado de aplicar en él desde que tenia un año de edad.

Se volteo hacia Harry, quien manejaba con los dedos tamboriliando en el volante. Sus labios se movian un poco en un ritmo imperseptible, evitando silvar, pues a ella le fastidiaba que lo hiciera. Siempre le había molestado que... Los ojos de Hermione se abriron de sorpresa.

- ¿Porque no silvas?- pregunto.

- Crei que te molestaba.

- Si, pero se supone que tu no sabes eso.

- Te dije el otro dia que recorde algunas cosas, nada de lo que tubimos, claro, pero recorde que una vez me dijiste que dejara de silvar. Tu sabes, con esa voz que tienes de mandona.

- Recordar te es imposible, Harry.- El inclino su rostro un poco al lado, dejandole saber que la escuchaba. Ella apreto tus labios un poco para evitar soltar las palabras tan atipicas que ultimamente salian de su boca a la sola mencion de la palabra 'recuerdo'.- Pero...¿mandona? Disculpeme señor Potter, pero yo nunca he sido mandona, tan solo pido cortes y educadamente lo que quiero que otros hagan- respondio en broma.

- Si, claro, dicelo a Ron. Hasta nos decias a que hora dormir, ¿quien hace esas cosas a sus amigos?

- Los amigos que se preocupan por sus amigos.

- Pues parecias mas bien una prefecta, de hecho lo eras, hasta podrias ser peor que McGonagall si te lo propusieras.

- Gracias- contesto Hermione y Harry puso los ojos en blanco y murmuro algo como " cerebritos, no saben entender el sarcasmo por completo".- ¿Dijiste algo, Harry? No te entendi.

- Dije que no te puedo superar ni en cien intentos- aseguro Harry de inmediato.

- Eso pense- respondio Hermione suprimiendo una leve risa.

- Lo vez, intimidas con solo dos palabras. Voldemort habria muerto con solo cinco minutos en tu presencia.

-Si, claro, y Merlin se convirtio en Squib en su lecho de muerte.

- ¿Siempre has sido asi de burlesca o es la edad la que lo saca en ti?

- ¿Insinuas a caso que soy vieja?

- No, tan solo te recorde que los años no pasan en vano.

- Pues no te hubieras molestado.

- No te enfades, 'Mione. Tan solo quiero hacerte reir.

- Pues no deberias.

- ¿Que sucede?- le tomo de la barbilla y la obligo a verlo a los ojos

¿Podria hacelo? ¿Podia en verdad pretender que ya no lo amaba?

- No sucede nada, y ponle atencion al camino.

- Llegamos hace unos cinco minutos.

- Ahh...pues...Gracias, me siento mejor, puedes regresar al ensayo.

- ¿Ves a lo que me refiero cuando digo que eres mandona? ¿Que tal si yo me quiero quedar a descansar tambien?

- Pues.. haslo, es tu casa despues de todo.

Ambos salieron del auto y entraron a la casa. Hermione evitaba ver a Harry a los ojos y Harry tan solo la veia divido entre la diversion y la confucion.

- Ire a recostarme.- anuncio Hermione en cuanto llego al pie de las escaleras.

- Yo tambien.

- ¿Que?

- Estoy cansado- explico con inocencia.

- Entonces yo ire a la terrasa.

- Ahora que lo mencionas, tengo ganas de un poco de sol.

- Me gustaria estar sola.

- La belleza de la naturaleza siempre hay que compartirla, no debes de ser tan egoista.

- Pero me gustaria pensar en silencio.

- Pues yo no dire ni una palabra.

- Me gustaria estar sola con la soledad, si es que me entiendes.

- Puesdes estar sola con Harry, ¿para que quieres a Soledad?

- Dime, Harry- murmuro Hermione, rechinando los dientes. Harry dio unos pasa hacia atras.- ¿Eres bufon o te haces?

- ¿Bufon? ¿Ese no es un personaje de Batman?

- AHHHHH. Tan solo ve a algun lugar donde no este yo, ¿quieres?

- Me gustaria que me voltearan a ver cuando me hablan.- dijo Harry con seriedad.- Claro, que si le estas diciendo a la perchera que te deje sola, por mi no hay problema, es solo que los objetos inanimados no tienen vida.

- Pero que genio.- murmuro Hermione por lo bajo.- Has lo que quieras, yo ire a la terrasa.

- A la terrasa sera.- entono Harry.

Hermione se sento en una silla y Harry en otra frente a ella. La castaña puso su mirada sobre los setos, Harry tan solo la veia a ella. Asi duraron por unos minutos hasta que Hermione no aguanto mas.

- Ya deja de mirarme, pareces un niño, Harry.

- Tu deja de pensar tanto, pareces una ansiana, Hermione.

- No eres chistoso.

- Y porque escondes tu risa entonces.

- No es risa es una mueca de desagrado.

- Claro.

Ambos callaron. Por dios, penso Hermione. Su corazon estaba en maraton, y eso con tan solo saber que el estaba ahi, pues no se atrevia a verlo a los ojos. Sentia que si lo hacia el lo podria ver todo, estaba segura de que lo haria. Podria ver que en esos momentos todas sus emociones estaban a la superficie y que todas estaban centradas en el. Y el muy despeinado aun no le quitaba la vista de encima.

- Soy legilimens.- fue el casual comenario de Harry.

- ¡¿Que?!- exclamo Hermione.

- Era una broma, calma.

- Deberias de pasar menos tiempo con Ron.

- Cierto, y perderme de la divercion ahora que tendremos que burlarnos de Richard. No, hay que aprobechar, despues de todo no siempre se casa un imposible.

- ¿Que quieres decir?

- Richard siempre decia que nunca diria los votos, ahora nos burlamos de él porque le van a echar la soga al cuello. Despues nos burlaremos de el por alguna otra razon.

- Si, claro- murmuro Hermione.- Imaginate como de lindo se lo pasaran ellos cuando tu te cases.

- ¿Yo?

- Si, ¿la misteriosa chica de la que no hablas no enciende una pequeña luz en tu cabeza?

- Cierto.- dijo Harry, su rostro adoptando repentinamente el tono serio que Hermione había visto antes de el depliegue de una mente descuidada de comediante que Harry había mostrado de gala al llegar a la casa.

Hermione lo observo, ahora que el había volteado su cara al laberinto de setos, y se reprimio de soltar un "Vamos, hombre, tan amargado y aun no te casas", pero se dio cuenta que en la cargada atmosfera que ahora los cubria no había ni una particula de hilaridad. Una sonrisa asalto su mente por pensar en la espontanea osadia que la había tomado para llevarla a querer soltar semejante declaracion. Si, una sonrisa bastante mordas. porque al fin se había dado cuenta que amaba a Harry. No..., al fin se había querido dar cuanta que amaba a Harry cuando Harry, era obvio, tenia en sus manos un boleto de tren que iba en direccion opuesta al que ella había abordado. No regresarian los recuerdos, mucho menos se enmendarian promesas, no recuperaria el tierno y romatico beso de buenas noches, ni los sabados en los que el cocinaba y tan solo comian hotcakes pues eso era lo unico que a el le encantaba cocinar. Todo ella tendria que guardarlo, por mas que el hacerlo le sonara como una bofetada en la cara. Pero, se aseguro a si misma, ya lo había hecho una vez, la segunda no seria dificil.

- ¿Sabias que intente contactarte?- pregunto Harry, rompiendo su linea de pensamientos.

- ¿Lo hiciste?- cuestiono Hermione, tratando de safarse de la sensacion amarga en la que sus ultimos pensamientos la habían dejado atascada.

- Mis lechuzas regresaban con mis cartas aun cerradas. Tu direccion es clasificada confidencial y la universidad a la atiendes tiene miembros bastante hermeticos. Te has convertido en un fastasma ante mis ojos.- dijo con media sonrisa.

- ¿Tan importante? Nunca lo supe.- Todo eso le resultaba extraño... de la facultad de leyes magicas lo esperaba, pero nunca supo que Cho mantenia la direccion de ambas en estado confidencial ni mucho menos habia visto a alguna lechuza que no fuera la escolar, la suya propia o la de los padres de Cho.

- Supuse que no lo sabrias. Si, es importante.

- Entonces dilo.- dijo Hermione.

Recostado totalmente en la recargadera de su silla, Harry extendio una mano que dejo sobre la mesa en donde sus dedos tamborileaban la superficie. La otra mano llego a su barbilla como gesto al parecer inconsiente. No la miraba, es mas, todo indicaba a que no queria poner sus ojos en ella. Hermione observo como su ceja derecha intentaba fruncirse del mismo modo en el que su compañera, del mismo color negro, lo había hecho pero sin lograrlo: lo que fuera que Harry estaba preparandole era importante. La espalda de la castaña se enderezo mas de lo que ya estaba mientras ella esperaba por el remedio del suspenso.

- Me converti en auror despues de recuperar los años que perdi de mi educacion, en tiempo record pero fue necesario. Consegui la suficiente influencia para... escavar de ciertas personas informacion valiosa mientras intentaba recrear el matrimonio del cual tu no me dijiste mas que no fuera el hecho de que existio...-

- Sabes que...-

- No me interrumpas, por favor. Tan solo hay unas cuantas personas que conocian la verdadera direccion del la investigacion, hay muchas que ayudaron sin tener causa otra mas que verse bajo la influenza de mas de tres gotas de potente Veritaserum. Draco Malfoy se convirtio mi mejor amigo durante los minutos que estuve con el en Azkaban.- dijo poniendo el toque ironico de su voz en el bufido que escapo por su sonrisa.

: FLASHBACK:

Harry asintio con su cabeza ante la muda interrogante de su jefe. El hombre volvio la vista a los docuementos que le habían sido entregados por el moreno y siguio leyendo tan sorprendido como si Voldemort mismo hubiese regresado de entre los muertos para convertir el planeta en un mundo de tinieblas giratorio. Harry se revolvio un poco en su silla cuando el hombre se llevo la mano a rascar el punto exacto donde su cabeza resguardaba un peluquin en gesto pensativo, casi inconsiente, cuando tenia ante si una decision en sumacia dificil y tracendental.

El moreno sabia que su propuesta era de todo menos tactil, y que tan solo bastaria una voz cobarde para hecharlo todo a perder. Por eso precisamente que había decidido llevarle su "teoria" al director del departamento de Aurores en vez de su jefe de escuadron. No deseaba que muchos se involucraran, asi seria mas posible mantener acallado el asunto. Tampoco se le antojaba tener que contar sus razones tantas veces como el rango del oficial subiera si comenzara por su jefe de escuadron. Pero sobre todo, Harry no queria verle la cara al Ministro antes de necesario y su jefe lo haria por el si se convecia lo suficiente como para seguirle el juego a Harry apoyando el caso que en esos momentos tenia en sus asperas manos.

- Esto es inesperado, Sr. Potter- dijo al fin el hombre, viendo el documento con con las cejas tan juntas que parecian una sola.- Toda la evidencia es vaga, al igual que sus motivos, que ademas son personales, y resultaria una perdida de tiempo si Malfoy no tiene la informacion o, que de tenerla, tache de equivocadas las investigaciones que a venido haciendo usted. Y aun asi, usted sabe que no esta aqui como auror, esto es un caso independiente.

- Lo se. Me sostiene el saber que a Draco Malfoy se le dio pase directo a Azkaban. Sin preguntas o juicio. Asi que sin importar que saque de esto, con todo respeto y como usted ya dijo, usted tan solo perderia tiempo. Yo en cambio estaria perdiendo no solo eso sino reputacion, credibilidad, y hasta los ingredientes de la pocion que yo mismo proporcionare.

Observo como el director sopesaba lo dicho con interes. Poco era la tolerancia entre los dos. Harry porque sabia ya de las accion que el hombre a veces hacia 'debajo del agua'. El director simplemente odiaba que Harry Potter acaparara la camara cada vez que a él le era tiempo de llenar paginas frontales de periodicos. Aun y a pesar de eso, Harry estaba dispueso a pedirle algo por primera vez en su carrera de auror. Cierto era que el director había apoyado varias de las ideas que Harry había aportado en juntas generales y vice versa, pero de ahi a que uno le pidiera algo directamente al otro había sido hasta hacia unos cuantos minutos un hecho sin proyecto y con bastantes apuestas entre los nobatos de cada escuadron. Vio como los ojos redondos y pequeños del hombre leian la conclusion... Si las puertas de Azkaban se le abririan o tendria que abrirlas, lo sabria entonces.

El director bajo la vista y leyo esa pequeña oracion que era clave en todo el repote. -¿Un sueño, Potter? ¡Vio esto en un sueño! Traigame una profecia, hasta un centauro, y puede que el Minstro se lo trangue, pero un sueño es simplemente patetico.

La mandibula de Harry se volvio rigida, antes de responder.- Tiene ahi los registros del hospital. Cho Chang recibio solo hechizos de nivel basico, ni siquiera un stupefy fue dirigido a ella.

- Gregory Crabbe y Vincent Goyle formaban parte de ese ataque, Potter, ¿que hay de esperar mas que hechizos sencillos?

- Hermione Grange asecino a la esposa de de Crabbe, razon mas que suficiente para motivarlo a torturar no solo a Granger sino a cualquiera en su zona mas inmediata. Le recuerdo que los crucio eran los favoritos de ese par, y es extraño que no los utilisaran ese dia.

- Señor Potter, se ha informado bien- Harry entrecerro los ojos, con el gesto facial del hombre al decir eso, sabia identificar bien una burla ante su ignorancia de aquel pasado.- Pero aun asi no tiene razon valida para su peticion, me temo que tendre que negarsela.

- Señor Miousep, sin ofender, pero haria esto sin o con su aprovacion, aunque con ella me resultaria mas facil. Si se niega, encontrare a Cho Chang de alguna manera, no lo dude que sera facil, pero con su apoyo, imaginese el pretigio del departamento de Aurores si todo esto resulta para bien... sin importar que fuese un caso independiente.

Fabian Miosep le observo furioso, abrio al boca varias veces para pronto cerrarla. Harry estaba seguro que un millon de insultos murieron en los pocos instantes que su jefe tardo en responder con el tono mas prosaico que pudo lograr. - Le pedire al Ministro que apruebe su peticion: media hora.

- Gracias- musito, Harry, levantandose del duro asiento frente al escirtorio del director, sin poder ocultar una sonrisa complacida, y se dispuso a salir pensando que alguien acaba de perder 1.000 galleones en su escuadron... el joven cuñado de Miousep

- Escuche, Potter, ambos sabemos que para usted estos asuntos- dijo levantando la carpeta ahora cerrada- son bastantes personales.

- Lo son.- repondio este, volviendo a ocupar su asiento.

- Por lo tanto entiende que sera mejor enviar a alguien mas a Azkaban.

- En contraste con mis despliegues en el capo de batalla, sé como comportarme en un interrogatorio.

- No lo dudo, Potter, pero estamos hablando de un Malfoy, quien a pesar de ser preso sigue siendo un Malfoy- dijo el hombre con cara de circumstancias. Harry no movio ni un musculo, a pesar de que sus adentros le gritaban que se levantara y le metiera al maldito director del departamente de Aurores su ridiculo peluquin en la boca.

- Oh, eso. Estoy seguro de que sabre darle la vista buena a ese detalle.

El hombre delante de el sonrio sin abrir los labios. Una sonrisa cinica y algo borde. Harry sabia que era lo que el hombre trataba de hacer, queria ir el mismo y machacar a Malfoy con preguntas "que harian bien al mundo magico"... y a su condenada reputacion tambien. Pero, esta vez, Harry tenia sus propias preguntas que no dejaria abandonadas por mas que el reflector de sol sentado frente a el le dijera que su temperamento podia hacer menos gratificante la estadia de Malfoy en Azkaban. El muy cretino.

- Claro, señor Potter. Si consigue algo ya veremos que habra que hacer con las relaciones internacionales que necesitara de respaldo - Una inclinasion rapida de cabeza y Harry se levanto de su asiento y se dirigio a la puerta.

- Dicen que Malfoy se volvio loco mucho antes de pisar Azkaban, Potter, demaciada muerte causó con solo diecinueve años entonces- la voz lo detuvo con una mano en la puerta a punto de cerrarse.

- Lo mismo escuche yo- repondio al tiempo que cerraba la puerta de un tiron. Mañana a primera hora estaria llegando a Azkaban, y con suerte no terminaria empapado al hacerlo. Esperaba que Malfoy fuera calentando sus cuerdas vocales, lo necesitaria.

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La gelida estructura de piedra soltaba un sedoso olor a moho, especialmente en esa capsula cerrada que contaba solo con un par de sillas y una mesa de madera cuyas esquinas mostraban los primeros asomos de astillas podridas. Solo tres antorchas alumbraban el circular espacio que era la sala de interrogacion; una de cinco en Azkaban. Todo a su alrededor le recordaba a los video juegos de terror en los que su primo era tan torpe, y en donde siempre, por alguna razons, había una prueba en una cueva oscura y humeda.

Harry estaba sentado en una silla, frente a la mesa y con una vista VIP de la puerta. Por quinteaba vez llevo su mano al bolsillo interior de su abrigo y tento, menos que imagino, el pequeño contenedor que resguardaba lo que en los proximos momentos seria su mas valiosa arma despues de su varita: suero de la verdad. Inclusive sobre la tela podia sentir lo frio de la pocion. Conjuro un vaso con jugo de calabaza y lo dejo frente a el sobre la mesa. Malfoy llegaria pronto.

La barrera de magia la contrullo por instinto cuando, con tardansa de moda, Malfoy llego flanqueado por dos dementores que lo abentaron en la silla y fueron a guardar la entrada de la puerta con prisa que revelo su desagrado ante la magia de Harry. La silla se tambaleo un poco antes de que Malfoy pudiera sentarse como mejor le parecio, con la caeza baja. Al parecer un Malfoy no tiene tantos privilegios en este hotel de menos cuatro estrellas, penso Harry. El cabello de Malfoy eran paja tieza, sucia y algo esponjada, con demaciados nudos para contarlos; las sombras colgantes de sus ojos contaban de noches sin sueño, y dias con escaso acobijo; las ropas marrones le quedaban olgadas a su cuerpo delgado que algun dia presumio de fuerza completa y destresa desafiante en batalla; y esa sonrisa, esa que sin importar la situcion Harry siempre había visto portar confiansa y orgullo ahora era una silueta malformada en sus labios. Sin embargo eran los agrios gestos que iniciaron al verle los que le decian que lo reconocia a pesar de posar la vista en el por solo unos segundos; por mas delgado que fuera el hilo de memoria o racioncinio, Malfoy sabia quien era, y posiblemente que queria.

- Malfoy, tanto tiempo sin verte- expreso Harry sin sentimiento, arrastrando la taza con jugo de calabaza por la mesa hasta dejarla frente a Malfoy.

Malfoy la observo, como si no supiera que hacer con ella.

- Ire al grano Malfoy...

- Potter...- la palabra había sido un suspiro imaginario, y los labios de Malfoy poco se movieron.

- Malfoy.

- Deberas ofrecerme algo mas que jugo de calabaza si quieres algo de mi - su voz era ronca y oxidada, su cabeza un poco menos baja, y sus ojos dirigidos al suelo parecian cerrados en la perpectiva de Harry.

- No eres tu el que pone las reglas, Malfoy.

- Tu sabes que si.

- Tengo Veritaserum conmigo.

- Puedo resistirme, aun soy capaz - esto Harry lo esperaba, y había previsto de antemano algo mas... eficaz.

- Veras, Malfoy- dijo mientras extraia de su abrigo un delgado contenedor de cristal con una pocion clara.- Supongo que como esta pequeña isla esta fuera del rango geografico permitido para las lechuzas de El Profeta, tu estas algo retrasado en noticias. Esta pocion es diez veces mas potente que el Veritaserum normal, tu sabes, el mundo magico florece y progresa con cada caida de un Lord Tenebroso. Nada nuevo, cosas de evolucion y supervivencia, nada contra los internos aqui.- dijo tan casualmente que al mismo le sorprendio su soberbia.- Si bebes esto, puedo arreglar que un par de tus cinco guardias deje tu celda- dijo derramando una gita del suero en el jugo de calabaza- talvez hasta le demos el dia libre de vez en cuando a otro- otra gota.- Y quien sabe, escuche que la comida escasea por estas aguas- una tercera- ¿Que dices? ¿Tienes sed?

El labio superior de Malfoy se presiono contra el inferior por unos segundos antes de que las comisuras de ambos se levantaran levemente y formaran un eco muy lejano de lo que hubiese sido su marca de desprecio. Hasta ese entonces, en ningun momento había visto a Harry a los ojos directamente, su mirada tenia una imprecion siniestra y no parecia poder enfocar muy bien algun objeto bajo la luz de las antorchas. Pero en ese momento lo hizo, a Harry se le fue permitido ver los ojos de Malfoy, y estaba seguro que nunca olvidaria ese momento. Pudo ver un desbaneciente espectro de odio, rencor y hasta el debil brillo del dolor; pero despues de la sorpesa al notar la ausencia de aquel brillo grisaseo que siempre lograban convenserle de que Malfoy era peligroso, pudo ver como una corriente de interes fresco y olvidado se levantaba en esos ojos para extenderse rapidamente al rostro entero. Harry consiguio observarlo sin inmutarse antes de que Malfoy tomara la taza con un bufido.

- Mas vale que seas original, Potter, y sepas seguir adelante con ese torpe pero util lado slytherin que te has sacado de la manga.- dijo y bebio.- Desearas no haberme buscado si no lo haces, maldito bastardo.- dijo sombriamente.

- Seguro, Malfoy- contesto Harry, y solo cuando vio a Malfoy por completo bajo el efecto de la pocion comenzo a preguntar.- Dime tu nombre y tu edad.

- Draco Lucius Malfoy. veintidos años.

- ¿Cuando te uniste a Voldemort?

- Despues de mi graduacion de Hogwarts.

- Hablame de tu vida como mortifago. Se directo, ni quiero detalles nefastos.

- Fue facil llegar hasta el circulo mas cercano al señor Tenebroso despues de que gracias a un Imperio logra tener a mis pies al mismisimo Ministro de Magia. Era participe de los ataques mas importantes y el señor Tenebroso confiaba en mi mas que en los otros, inclusive mas que mi padre. - dijo con un orgulloso entuciasmo.

- ¿Tenian mortifagos infiltrados en nuestro lado?

- Si.

- ¿Quienes?

- Joseph Kiens, jefe por aquel entonces del departamenteo de el uso indebido de la magia. Snape, miembro de la Orden del Fenix. Cho Chang, amiga de Granger y un archivo andante de tu vida.

La mano de Harry se formo en un puño. Desde que había comenzado la investigacion, que al principio era solo una reconstruccion con hechos sin emociones de las cosas que habia pasado con Hermione, le parecio sorprendente que Cho Chang fuese amiga cercana de ambos. Todos a quienes había interrogado habían hablado de alguna u otra forma de la amistad de Hermione y Cho. A pesar de eso, nunca penso que hubiese otra motivacion mas que cariño por parte de Cho hasta hacia poco de un mes, cuando en un sueño, la había visto frente a él con tunica de mortifago, apuntandole con la varita y diciendo cosas que el no escuchaba en el sueño. Despues de la muerte de Sirius no había vuelto a confiar en sueños como este, pero la realidad era que Voldemort ya no estaba en el mundo para manipular su mente como tambien era cierto que al lado de Cho, en el sueño, había estado Draco Malfoy mofandose de el con la misma satisfaccion que mostraba Cho.

Se convencio de que no era nada serio, dicendose a si mismo que la investigacion se le estaba subiendo demaciado a la cabeza. Sin embargo encontro que habia pequeños detalles en los informes que poco a poco fueron creando nuevos aspectos y no le dejaban safarse de la duda. No encontro mejor candidato que Malfoy para disipar cualquier error o malentendido, despues de todo ellos dos fueron los unicos que le sobrevivieron a Voldemort... inconcientes ambos, pero sobrevivientes al fin al cabo.

- ¿Que informacion recibieron sobre mi?

- Todo. Sabiamos todo lo que hacias, del negocio que manejabas en los suburbios, y sobre tu relacion con Granger- contesto Malfoy con una sonrisa burlona. Harry puso presion en su mandibula, tratando de controlar el instinto de partirle la sonrisa a Malfoy con un buen puñetaso.

- ¿Que tanto sabian acerca de mi relacion?

- Lo necesario: casados en secreto, viviendo bajo un potente encantamiento Fidelius, ambos aurores. Despues, nos enteramos de que tu esposa, Granger, estaba embarazada. - Harry se apremio a hacer la proxima pregunta entre rechinantes dientes y la mandibula presionada por el coraje.

- ¿Que hizo Voldemort con la informacion?

- Mi señor no deseaba tener a dos Potter en un mismo mundo. No estaba en los planes, ademas de que el crio seria una abobinacion para los sangre pura. Ambos padres sangre impura. Se nos ordeno deshacernos de Granger.- explico Malfoy con estusiasmo.- Lo planeamos por semanas, se acordo usar un antiguo ritual: Morti escense. Priva al ser humano de la vida tanto fisica como del alma lentamente. Granger, sin embargo, no dejo su casa por casi un mes y medio, y nuestro señor se volvia impaciente; hasta que por fin un dia Granger salio a visitar el negosio. Yo cambie mi apariencia con un hechizo glamour, y adopte el nombre de Jack Owen. Llegue a la joyeria y con ayuda de nuestro infiltrado, Chang, derribe los hechizos de proteccion antes de que ella llegara.

Sali de la joyeria con Cho, y fuimos a un cafe. Granger no tardo en aparecerse. Pense que me había descubierto cuando me pregunto si nos conociamos, pero con una buena salsa de mentiras y sonrisas no tardo en olvidar relacionar mi falsa identidad con la autentica, es demaciado confiada tu mujersita, Potter- murmuro por lo bajo.- La atacamos en la joyeria, dejamos al frente a Cho para que impidiera la entrada, restaurando las barreras de proteccion, pero se entretubo al momento de pretender nuestro supuesto ataque en ella y los aurores entraron- siguio explicando Malfoy, adoptando un tono molesto.

Era presisamente eso lo que había hecho a Harry creer que algo extraño saltaba del sueño. Nunca se le ocurrio observar los records de hospitales antes del sueño, pero cuando al fin lo hizo, vio que Cho Chang, justamente en ese dia del ataque, resibio tan solo hechizos paralizantes. Los mortifagos no tenian piedad con los "otros": aquellas personas que se interpinian en el camino de cualquier objetivo o de casualidad se encontraban acompañandolo. Cho, a pesar de esto, había salido con lesiones casi pateticas. Esto no hizo mas que indicarle a Harry que algo arrastraba el historial de amistades de Cho Chang. Algo, talvez, parecido a la marca tenebrosa. No necesitaba escuchar la proxima parte de la historia de Malfoy, se la habian contado ya.

- ¿Que tan cercana estaba Chang a Voldemort?

- Lo suficiente para no cruzar la linea profecional- dijo Malfoy con un bufido.- Proporcionaba bastante informacion, sus dotes de comunicacion la llevaron muy lejos- dijo con una risa baja y sombria.

Algo no encajaba, algo se perdia entre las verdades que el veritaserum sacaba de Malfoy y que simplemente no le permitia a Harry creer de lleno todo lo que se le había dicho.

- ¿Porque?

- Porque al señor Oscuro no le parecia meterse con quien ya habia estado con la mitad de su ejercito mortifago, Potter. - Esto hubiese sacado una imparable risa, hubiesen estado en diferente sitio y circumstancias, pero dentro de esa capsula cellada y en la palpable y silenciosa atmosfera de inestable furia no hizo mas que sacar un gruñido ronco y frustado en Harry.

- ¿Porque Chang se unio a Voldemort?

- No lo se.

- Claro que lo sabes Malfoy. Dime.

- No lo se, Potter.

- ¿Como fue que Voldemort la contacto al principio para unirse?

- Potter, tan solo un hijo de mortifago puede ser llamado a unirse. Cho Chang se ofrecio por voluntad propia.

- ¿Que?- exclamo Harry, una solida inclredulidad asaltando la furia incial que había creado Malfoy.

- Ella llego, temblorosa y sabiendo lo insignificante que era ante lo ojos de mi Señor y ofrecio aportar informacion a cambio de que fuera utilisada en tu contra. Deviste ver su cara, Potter, cuando mi señor acepto ayudarla, en verdad se mostraba deseosa de acabarte.

- Ella no tiene la marca tenebrosa.

- Astuto detalle que mi señor no olvido ¿no crees?- claro, penso Harry, sin la marca nunca sospecharian de ella. Nadie nunca se molesto en siquiera mostrar desconfiansa en Chang, quien estuvo siempre al lado de Hermione.

Había algo que tenia que preguntar, algo que había pensado muchas veces antes de que Malfoy llegara y que no aguantaba mas retenido.

- ¿Que paso exactamente la noche en que murio Voldmeort?

La cara de Malfoy se morfo en una mezcla de muecas y ojos furiosos, un gruñido profundo salio de su graganta y por un segundo Harry penso que se negaria responder. Pasado unos momentos respondio entre dientes con un susurro que le costo a Harry escuchar, pero que despues de inclinarse un poco logro entender.

- Mi señor espero a que llegaras y nos mantuvo a Bellatrix, Chang y a mi cerca de el.

- ¿A Chang tambien? ¿Que hacia ella ahi?

- El duelo lo debio de ganar mi señor y no un incompetente sangresucia como tu- mascullo Malfoy. Claro, penso Harry, entonces Chang mostraria sus verdaderas tendencias. Harry solto un bufido a la arrogancia de Voldemort, y a la admiracion ciega de Malfoy, que muy lejos ciertamente no le habia llevado.

- ¿Que paso entonces?

- Llegaste tu, claro. Bellatrix se puso en tu camino, pero no duro mucho. Despues te volteaste a nosotros; debiste ver tu estupida cara al ver a Chang a mi lado. Mi señor me dejo batirme contigo- Malfoy siguo hablando sobre su duelo y como estuvo a punto de "acabar con su insignificante vida" antes de que Voldemort se impacientara y sacara su varita para finalizar el asunto de una vez por todas, pero a Harry todo le resultaba extraño, ajeno. No recordaba nada de eso y no lo recordaria. Nisiquiera se creia capaz de ser tan poderoso como Malfoy lo describia con bastante desprecio.- Mi señor entonces comenzo a batirse contigo, y lo hicieron por mucho tiempo. El era superior a ti, mucho muy superior, pero tu continuabas recuperandote y levantandote cuando yo pensaba mi señor te mandaria el Avada final. Engañaste a mi señor y le mandaste un hechizo oscuro, en parsel, y el cayo muerto- dijo Malfoy devastado.- ¡Los mataste, Potter! ¡Tu, hijo de puta, mataste a mi señor!- grito furioso. En medio de su furia se levanto he hizo por ir hacia Harry con las manos extendidas y dispuestas a dañar. Ambos dementores pronto lo restringieron al otro lado de la mesa y lo sostuvieron de pie. El efecto fue instantaneo. Hary vio como los dementores difrustaban el contacto con la piel humana, como si eso hiciera su poder sobre Malfoy mucho mas eficaz, mas desalojador de felicidad.

- Sueltenlo- ordeno, y los dementores se alejaron para retomar su antiguo puesto a los costados de la unica puerta en la camara.

Malfoy mantenia su mirada furisosa en el, aunque su rostro estaba echado a un lado, manteniendo en su vision periferica a los guardianes oscuros.

Harry le respondio con el mismo enojo y frustacion. Si, sabia que había matado a Voldmeort, eso no era lo que le interesaba.

- ¿Que ocurrio despues?

Malfoy dejo escapar una risa lenta y siniestra, al fin dejando ver bastante bien que años de mortifago y en azkaban le había hecho mas que desgaste a su mente.

- Fue Chang, sabes Potter. Ella fue la que tomo venganza, y una bastante adecuada, por tu impertinencia contra nuestro Señor. Aunque huyo luego.

- ¿Que hizo?

- No lo recordaras, Potter, pero ella lo hizo y se lo agradecere hasta que me seque en este hoyo del infierno. Ella lo hizo, Potter. Fue ella quien te desarmo y te apunto con tu propia varita. ¿Lo recuerdas Potter?- la retorica no pudo ser mas acida.

- Dime que hizo.- los dementores se agitaban, viendo como la proteccion de Harry, que antes habia protegido tanto a si mismo como a Malfoy, se volvia debil.

- Fue ella- contesto Malfoy- Fue mejor que matarte, Potter.

- ¡No! Dumbledore dijo que fui yo quien...-Harry se callo entonces, bajando la vista, viendo sus manos que se aferraban tensas al borde la mesa.

- ¿Confundido, Potter?

: Fin del FLASHBACK:

- Cuando sali de ahi no sabia que hacer, la declaracion de Malfoy tenia peso, pero ni en un millon de años el peso suficiente; resultaba inverosimil llevar a Cho frente a la corte sin evidencia mucho mas solida. Te busque, queria advertirte, pero ya sabes como resulto eso y despues supe de la boda por medio de Richard y supuse... Hermione, ¿estas bien?

El asentiemiento de cabeza por parte de esta fue casi mecanico, pero la palides de la piel y el la incomprencion frenetica en sus ojos que se habian quedado quietos demostraban totalmente lo contrario. Hary se levanto para ir a su lado cuando un elfo domestico aparecio en la puerta.

- Señor, la señorita Chang espera en la puerta, señor.- Sus miradas se fueron al elfo de imediato y con la misma rapides se volvieron a mirarse entre si.

- Hazla pasar y dirigela hacia nosotros.- contesto Harry, dejando mostrara un poco de sorpresa en un su postura que se paralizo durante un par de segundos ante las palabras del elfo, aun si alejar los ojos de los de Hermione.

Harry se arrodillo frente a ella ,sus manos ea los costados de la silla, hablo rapidamente y en voz baja, sabiendo que Cho no tardaria en reunirce con ellos. - Tienes que ayudarme, Hermione.- ella nego con la cabeza y quizo levantarse.- No, escuchame, porfavor. Todos creen que malfoy esta loco, nada que venga de el les resulta valido, pero si...

- No. Quiero saber porque lo hizo, Harry. Ya.

- Espera.- Harry la detuvo de nuevo, tomando sus dos manos. - Si logramos que confiese, me asegurare de saber porque.

- No puedo, no se fingir- negaba con la cabeza rapidamente, parpadeando con la msima velocidad para no dejar salir nada de sus ojos, ni unasala lagrima. Aun asi le resultaba dificil.- Me conoce demaciado.

- Eso no importa.- le dijo, rodenado sus mejillas con ambas manos.- Hazlo.- y ella asintio con la cabeza sin percatarse que el se acercaba despacio.

- Hola.- Harry se levanto lentargico ante el inespeado saludo, Hermione dio un respingo en su silla. - Hermione, pude llegar antes de la boda, ¿no es genial?

Cho se acerco a Hermione, ignorando por completo la presencia de Harry, quein pocoa poco se fue acercando a suantiguo asiento, sin alejar la mirada de ambas chicas.

- Hola, Cho.- saludo el, inexprecibo ante el desagrado que su aludida iradiaba hacia el.

- Harry, ¿que tal?- y con una sonrisa no muy genuina se disculpo a si misma por ignorarle, auqnue seguramente hubiese seguido haciendolo si el no hubiese murmurado palabra.

- Crei que la Universidad no te dejaria venir.- dijo Hermione. Parecia estancada ente la molestia y la confusion. Se esta esforzando, penso Harry y le sonrio a la castaña a pesar de que esta no le miraba. Gesto que no paso desaercibido por el tercer par de ojos en la terraza.

- No lo hicieron, pero tuve listo el traslador tan ponto lei tu carta.- dijo, lanzandole una rapida mirada a Harry.

- Oh, ¿te preocupe?

- Algo, pero queria venir, te lo dije.

- Si, me lo dijiste.

- ¿Preocuparse porque?- inquirio Harry, y Cho le mando una mirada que claamente lo mandaba a meterse con sus propios asuntos.

- Solo un par de incobenientes por aqui, Harry. - respondio Hermione, sonriendole. Por alguna razon fingir le estaba costando muy poco, y Harry parecia estar captando su idea, pues de nuevo se fue acercando a ella.

- Nada que no se pudiera manejar, no debiste molestarte en todo ese papeleo para el traslador, Cho.

- Queria venir, solo estar aqui por si algo andaba mal.

- Todo esta bien.- dijo Hermione, mirandola a los ojos. Desde su lugar, a espaldas de la puerta de crital, Cho pudo ver como los dedos de Harry rosaron levemente la mano de Hermione, mano que pronto se also un poco para buscar mas contacto.

Queria fuertemente cree que nada de lo que Malfoy habia dicho era verdad, en un principio habia empezado a buscar algo que le contradijera, algo por mas pequeño que fue que indicara al menos una leve contradiccion a lo que Harry le contaba. Pero parecia estarle pidiendo manzanas a un rosal, y al fin quedo hambrienta de preguntas. La primera de todas ¿como habia sido tal estupida? ¿Como habia dejado que pequeños detalles pasaran sin ser vistos? ¿Porque a Malfoy y a los demas mortifagos les habia dado el suficiente tiempo de matar a su hijo? El mismo Harry habia dicho que la barreras se habian levantado en la joyeria tan pronto él intento entrar- barreras identicas a las que él habia puesto y de las que solo Cho y Hermione sabian. Despues de deshechas, solo alguien con conocimiento podia reinstalarlas de identica manera... y en fin, ese era solo el principio, no queria seguir develando las manipulaciones de Cho. Antes de eso queria saber que la motivaba, que pudo haber hecho para que su amiga, su mejor amiga, creara una doble vida con el unico objeto de inflingir pena y dolor, detrullendo sueños que Hermione habia luchado por sostener.

Le sostuvo la mirada a Cho, y estaba segura de que le estaba sonriendo, sentir el apoyo de Harry le facilitaba las cosas. Ningun amor se devanece en dos segundos ni en dos dias, no uno que ha sido solido. No el amor romantico, ni el amor fraternal, ni el de amistad, y Hermione sentia lo que iba a hacer. Porque delante de ella estaba la persona en la que se habia sostenido inumerables veces. Y tambien estaba la que a sus espaldas se convertia en todo lo contrario que frente a a ella se decia ser. Antes le habia creido, antes la habia defendido; y en ese momento le creeria, la escucharia, pero defender ya no. Deseaba que le dijeran algo que no queria escuchar.

- No parece bien- respondio Cho, su voz tomando un tono oscuro.- ¿Que haces aqui Harry?

- Sere padrino, remplasare a Neville.

Cho sonrio.- Que coincidencia que Hermione vaya a ser madrina.- el solo se limito a sonreirle.- ¿Puedo hablar contigo, Hermione?

- Claro.- dijo, pero no se levanto, nisiquiera cuando Cho señalo claramente que deberian entrar a la casa.

- Bien- dijo Cho- ¿Que haces con el?- dijo señalando a Harry.

- Charlabamos.

- No me quieras hacer pasar como estupida, Hermione. Entre y el estaba a punto de besarte, y ahora misma esta tratando de tomarte la mano.

- Somo amigos de nuevo, Cho.- respondio con simplesa Hermione, pero la respuesta poco le gusto a Cho.

- ¿Amigos? Se que te es facil perdonar, pero ¿acaso no recuerdas lo que el te hizo?

- Con detalle.

- ¿Entonces que haces aceptandolo de nuevo en tu vida? No se lo merece.

Harry dio un paso al frente, pero esta vez fue Hermione quien se encargo de detenerlo a el, y tomandolo de la mano se levanto de la sulla.

- ¿Recuerdas lo que me dijiste? Cuando yo regrese aquel dia y te conte todo lo que habia pasado con Harry, ¿recuedas todo lo que dijimos, Cho?

- Claro que si.- contesto Cho frunciendo el cejo.- Por eso mismo es que no entiendo que ocurre.

- Yo tambien recuerdo. ahora recuerdo claramente algo que me dijiste.

Cho la observo expectante mientras Harry le estrechaba la mano con fuerza.

- Te pregunte porque seria que el lo habia hecho, pues yo no veia razon alguna. Estaba tan segura de que el no haria algo como eso.-Harry le apreto un poco mas la mano, y ella le dirigio una fugas sonrisa.- Y tu me miraste a los ojos, y con tanta conviccion me dijiste, " Nunca sabre porque lo hico, pero queria safase de algo y olvidarlo sonaba como la mejor excusa."

- Si, eso lo dije- se le veia en el rostro que sus pensamientos corrian rapidos, calculando a donde llevaria todo eso.

- No pude evitar creerte, y a pesar de todas las razones que habia, yo lo tome personal. Crei que el ya no me amaba, y me quizo olvidar. No sabes cuanto los desprecie por eso.- Ahora ella le respondio el apretujon de mano a el. Debia ser honesta, debia desplegar bien su defensa y razonamiento para que Cho pudiera saber de que estaba ahablando y no la evadiera eficazmente. - Pero, dime... ¿Era eso lo que buscabas cierto?

Era un pregunta que solo tentaba, y Cho apenas y mostro reaccion a ella. Aunque reconocible era la poscision que Hermione y Harry habia adoptado. Cho se mantuvo parada en el mismo lugar donde se habia quedao cuando entro, el cabello meciendose de vez en cuando con la leve briza, un brazoal castado y el otro en el bolsilla de su pantalon.

- Si, creo que si- respondio al fin.- El no te merece.- esto dicho como rasonable justificacion.

Hermione asintio, eso era de esperarse y no habia nada recriminante en que Cho la hubiese convencido de que Harry habia querido olvidarla, aunque de alguna manera eso ahora le resultaba absurdo. Miro al suelo unos segundo antes de levantar la mirada de nuevo.

- No recuerdo que me odiaras tanto, Cho.- dijo Harry.

- No recuedas un sin fin de cosas y por eso es que no me agradas mucho.- dijo, sus gesto delantando cuan molesta se encontraba a pesar de que ella parecia no querar demostrar nada que no fuese indiferencia.

- Hermione me ha perdonado, ¿porque no lo harias tu?

Cho bufo burlesca. - ¿De que se trata en realidad todo esto? ¿Que ocurre Hermione?

El tono de indigidad y las exasperadas miradas de Cho terminaron por sacar a Hermione del quebradiso manto de placidez que la habia cubierto por escasos momentos. Harry se dio cuenta pero no con el tiempo suficiente para detenerla y cuando intento parar sus intenciones ella ya estaba a mitad de camino de encontrar a Cho.- ¿A donde estabas? ¿A donde te fuiste el mismo dia que la guerra acabo?

Cho observo a su amiga son sorpresa el arrebato de Hermione, atacando cuando ella menos lo habia esperado, y tardo unos segundo en responder.- Te lo dije hace mucho, estaba en el Ministerio, Jack regesaria ese mismo dia del funeral de su madre.

- Jack Owen, fue tu novio ¿no? Al que conociste en la joyeria.- pregunto Hermione.

- El mismo.

- ¿Que le paso a Jack, Cho?

Cho parecia no poder decidirse, pero aun asi respondio rapidamente.- Murio, en el ataque a Coeatbridge. Nunca regreso.- dijo, su tono apagado.

¿Cuanto se necesita practicar para mentir con tal conviccion? ¿Cuantos años de engaño?¿ Y cuan grado de buen jucio es necesario para escoger a los que fuesen presas perfectas de trucos y mentiras? Penso Hermione, mas que nada exasperada ante el despliegue de Cho en el cual iguales eran el nivel de fluides para la insinceridad y la descarada voluntad de mantener su charada. Estaba casi completamente convencida de que Cho era culpable de todo lo que Harry habia dicho, de todo lo que Draco Malfoy habia descubierto, y aun asi, en una parte pequeña de su mente, amiga, y no enemiga, era la palabra que su cerebro aun conectaba con la joven que tenia enfrente.

- Todos sabemos que Azkaban se acerca a la muerte, pero no hay que ser tan drasticos, Cho.- dijo Harry detras de Hermione. Cho inmediatamente volvio su vista a el.

-¿Que?- pregunto, observando a Harry como si este hubiese dejado de razonar debidamente.

- ¿Jack nunca te dijo su nombre real? Hable con él el otro dia y...-

- Oh, por Merlin, estas loco, Potter. Jack murio hace dos años en aquel ataque, el ultimo de los mortifagos.

- ¿Que? En el mundo magico hay fantasmas de todo tipo, Cho- respondio Harry, encogiendose de hombros con toda tranqulidad. Cho se encamino hacia el, pasando a Hermione.

- ¿Enserio? ¿Acaso ese hechizo que te echaste para quitarte la memoria se llevo todo tu sentido comun? Ya parece que los recuerdos no son los unico que se fundieron hace ya tiempo en esa cabeza.

- Tu sabrias mas de eso- respondio Hary atravez de una firme mandibula.- pemiteme repetir la pregunta. Cho, ¿acaso ese hechizo que me echaste para quitarme la memoria tambien era para dejarme sin sentido comun?- y añadio- ¿Usaste tanta magia en mi que el hechizo para confundir a Malfoy fue tan debil? Tanta voluntad y al final, en el ultimo paso de un plan perfecto, dejaste un cabo suelto.- dijo Harry con un tono seco.

TYTYTYTYTY

Pues ahi lo tienen, despues de una ausencia bastante larga al fin el septimo capitulo.. jaja.. y no es el final aun. Una amiga me recomendo dejarlo en esta parte, aumenta el suspenso me dio a entender, a pesar de que yo pensaba no hacerlo. Ahora digan, gracias amiga de Aryen. Jajajaja. No se preocupen, el proximo capitulo, al igual que el final, llegara pronto... dificil de creer pero ya todo esta planeado, solo falta que mis dedos se pongan a trabajar.

Y me harian muy feliz si en lo que llegan los demas capitulo ustedes me dejan uno que otro comentario sobre lo que piensan de la historia .

Una enorme disculpa por cada error ortogafico. Deje en manos de mi primo la instalacion del Word y el, muy falto de memoria girs, olvido poner la aplicacion en espanol. Para cuando lo supe el ya habia destruido el CD ...

Pero bueno.. pronto los corregire.. tendre que pedir favores.

Espero que les haya gustado el capi!!