Algo Básico

Capítulo II

Sin Arruinar Momentos

Esos ojos lila que siempre lo miraban con timidez y ternura, ahora le lanzaban fuertes oleadas de frialdad y tal vez con una pizca de furia. Realmente, Ritsuka, había tratada de actuar lo más normal que alguien en su posición lo hubiera hecho… atinando únicamente a decirle un "Hola" y dirigirse sin más preámbulos hasta su pupitre donde se sumergió en su mundo tratando de ignorar que el centro de este estaba unos pasos delante de él.

- ¿Estás bien? – le preguntó Yuiko con timidez tratando de buscar la mirada del chico.

- Si – contestó cortantemente observando por la ventana una antena de comunicaciones que se alcanzaba a ver a la distancia - ¿Tan obvio es esto? – pensó apretando fuertemente la mandíbula - ¿Tan obvio es que me afecta su presencia…¡Demonios!

Yuiko miró perpleja a Soubi quien ya se encontraba en el escritorio rodeado de varias alumnas.

- Genial – murmuró.

- ¿No sabías de esto, Ritsuka-san? – inquirió Yayoi acercando un poco su asiento hasta sus amigos.

- ¡Yayoi-san! No seas metiche…

- ¡Sólo preguntaba!

- Neh… está bien – musitó Ritsuka aún sin mirarlos – En realidad no sabía…

- No creo que Soubi-san te lo hubiera querido ocultar – abogó a favor del adulto recibiendo por fin la mirada de Ritsuka - ¿O si?

- No lo sé, no me importa…

- ¿Por qué no le preguntas que pasó? – dijo Yayoi notando que Soubi miraba fijamente a Ritsuka.

- No, claro que no – dijo dejando caer su cabeza en el respaldo de la silla mirando detenidamente el techo – Si él no me quiso decírmelo por voluntad propia… no lo obligaré…

- Ritsuka-kun… - murmuró Yuiko profundamente preocupada.

A lo largo de la relación de ambos, ella había sido testigo de cómo afectaba en la vida cotidiana del chico, cambiando su estado de ánimo en un dos por tres… volviéndolo incluso una persona altamente voluble de la cual jamás sabrías su reacción. Miró nuevamente a Soubi, se despedía de la maestra mientras un grupito de chicas le rogaba que diera la clase libre… cosa que no era tan descabellada puesto que habían perdido ya parte significativa de esta.

- ¡Si¡Profesor¡Clase libre! – exclamó Yuiko con ojos suplicantes - ¿Si?

- Bueno… supongo que por ser la primera clase está bien…

Ritsuka se encogió de hombro al escuchar esa voz que le pertenecía en tantas formas, escondió su rostro entre sus brazos sobre el escritorio entrecerrando los ojos...

- No quiero oírlo – pensó – En realidad no quiero…

- ¿Aoyagi-san¿Te sientes bien? – inquirió una chica rubia levantando el flequillo del chico con total confianza – Te ves pálido.

Yuiko y Yayoi percibieron de inmediato el desacuerdo de Soubi ante la confianza de la chica con Ritsuka. Al parecer tendrían muchos nuevos problemas en su relación para los cuales, tal vez, no estaban preparados.

- ¿Quieres que te acompañe a la enfermería? – la chica se había arrodillado a un costado tratando de acomodar los mechones rebeldes que intentaban cubrir los ojos lila a toda costa.

- Puedo ir solo – dijo Ritsuka incorporándose tan bruscamente que hizo tambalear a la chica – Perdón…

- No te preocupes, Aoyagi-san – murmuró la rubia con las mejilla sonrojadas - ¡Profesor¿Puede ir Aoyagi-san a la enfermería? No se siente bien…

- Claro – respondió mirando el rostro pálido del chico.

Y como era de esperarse, pasó de largo tratando de ignorarlo por completo, con la mirada fija en la perilla de la puerta aunque a cada paso pareciera que se alejaba un poco más. Cerró fuertemente los ojos y al abrirlos se mareó levemente, apresurando el paso, más por instinto que en busca de alivio, y salió lo más rápido que pudo del salón. Tras cerrar se dejó caer a un costado de la puerta tratando de tomar aire y calmarse un poco ¿Qué le sucedía?

Caminó acompasadamente por el pasillo, escuchando con efecto altamente sonoro cada ruido que provenía de los salones vecinos… el sonido de la tiza sobre el pizarrón, el borrador, los lápices al escribir, las páginas al ser agitadas por el viento… voces…

- Aoyagi-san… - el escuchar su nombre lo hizo girarse bruscamente mientras todo se movía lentamente y sus ojos empezaban a nublarse, pero como siempre, aparentando estar bien.

Su mirada alcanzó a contemplar un fuerte tono verde y cayó perdiendo por completo las fuerzas, inconciente.


En medio de la oscuridad una intensa luz amarilla brillaba al fondo…

- ¿Dónde estoy? – pensó revolviendo su cabello.

Intentó moverse, pero al pareciera que hubiera corrido kilómetros enteros pues sentía el cuerpo pesado y cansado. Abrió lentamente los ojos sintiendo una fuerte punzada en estos al recibir directamente los rayos del sol.

- ¡Ahhuch…! – se quejó cubriendo su rostro con ambas manos.

Rápidamente la luz fue cubierta y ahora todo permanecía en una agradable sombra; contrariado abrió lentamente los ojos observando un lugar algo conocido, la enfermería del colegio.

- Tarde más en traerte que en que despertaras – dijo una voz desde un rincón.

Realmente estaba confundido, notó como permanecía a oscuras… miró las ventanas cubiertas por las cortinas y se detuvo en ese pequeño detalle.

- Las cerré porque te lastimaban – dijo nuevamente la misma voz.

- ¿Quién es? – preguntó sentándose con algo de cansancio.

- Ikari Karin, tercero A…

El chico por fin pudo enfocar al dueño de esa voz, captando a primera instancia toda su atención el color intensamente verde de sus ojos…

- El hijo del director – pensó recordando haberlo visto fumar en la azotea – Gracias… por traerme…

- Te veías mal… desde lejos lo pude notar – se justificó rápidamente – Tuve que preguntar…

- Ya veo… uh… ¿Cómo sabías mi nombre?

- ¿Aoyagi Ritsuka? – murmuró con una leve sonrisa – Por mi padre… le fue enviado tu expediente aparte de los demás por demostrar un comportamiento algo diferente…

- Ya veo… así que el director me "estudió".

- Si lo quieres poner así… aunque te diré que no recibió el mío simplemente porque no tenía nada nuevo que mostrarle mi expediente…

Ritsuka sonrío disimuladamente ante el comentario mientras analizaba detenidamente al chico, topándose con que este tenía varias banditas en el rostro.

- ¿Te has caído?

- No, tuve una pelea con un chico – respondió tranquilamente – Me mandaron a la enfermería y luego tengo que subir a la dirección…

- ¿Te castigarán?

- El ser el hijo del director no es tan bueno como todos piensan, por el contrario, mis castigos son mas largos o pesados, todo para no demostrar ningún favoritismo hacia mi.

- Ya veo… ¿Y el otro chico?

- En el salón, a él no le ha pasado nada… sus amigos lo ayudaron y yo terminé peor.

- Entonces lo que dicen es cierto…

- En realidad no, pero todos piensan eso y me provocan…

Ritsuka observó el pequeño reloj rojo que yacía sobre una mesa y dio un largo suspiro.

- Aún no termina la clase de Artes…

- ¿Ya conoces al nuevo profesor, Agatsuma-san?

- Si – respondió con desgano mientras sentía como ese coraje dormido despertaba poco a poco.

- No entiendo porque mi padre ha aceptado a alguien como él en la escuela…

- ¿Uh¿Qué quieres decir?

- ¿Recomendado por Ritsu-sensei? Ese tío nunca trae nada bueno… pero pareciera como si le hubiera lavado el cerebro a mi padre…

- ¿Ritsu-sensei? – repitió recordando haber visto o escuchado ese nombre antes - ¿Quién es?

- Es normal que no lo sepas… pero no te ayuda en nada saberlo sino eres parte de ello.

La puerta se abrió sobresaltando a ambos chicos, Karin se asomó levemente sintiéndose profundamente incómodo frente a los ojos zafiro que se acercaban rápidamente hacia ellos.

- ¿Qué pasó? – preguntó con un dejo de enojo en su voz tratando de no abalanzarse sobre Ritsuka a ver si se encontraba bien o si ese chico le había hecho algo.

- Me desmayé en el pasillo y Ikari-san me trajo a la enfermería – se apresuró a contestar Ritsuka – Es todo.

Soubi miró de soslayo al chico mientras intentaba relajarse un poco.

- ¿Le digo a la enfermera que llame a los padres de Aoyagi-san? – preguntó Ikari mientras empezaba a retirarse.

- No es necesario, lo haré yo mismo – dijo Soubi – De todas formas, gracias…

- No hay de que, nos vemos…

Y ahora estaban simplemente ellos dos, en completa soledad sin nada que decir… Soubi miraba a Ritsuka mientras este último estrujaba con fuerza el borde de la suave sábana que lo cubría.

- ¿Te sientes mejor? – preguntó el adulto aproximándose un poco.

- Si…

- ¿No has tomado nada?

- No, acabo de despertar…

- Me preocupe cuando empezaste a tardar…

- Estoy bien – dijo fría y cortantemente, intentando que esa frase se aplicara en la mayor cantidad posible de sentidos.

Silencio.

Soubi se sentó junto a Ritsuka, esperando tal vez que este se alejara bruscamente… pero sin embargo permaneció en el mismo lugar.

- No busqué la manera de decírtelo… no quería arruinar ningún momento…

- ¿Y así va a ser siempre¿Jamás vas a querer arruinar ningún momento y por eso me ocultarás las cosas? – por primera ves le reclamaba sin gritarle o levantar la voz, cosa que le preocupó realmente.

- Puedes castigarme…

- Sabes que no haré eso.

Los delgados dedos del adulto acariciaron el cabello de Ritsuka, rozando, también, con suavidad sus mejillas… quitándoles ese tono pálido para ser adornadas por uno rojizo. El chico lo miró con timidez, era la primera ves en el día que lo miraría a los ojos… sabía lo peligroso que podía ser aquello, pues siempre terminaba sumergido en la profundidad de estos…

Soubi se acercó lentamente hasta el rostro de su Sacrifice, lucía realmente tierno con las mejillas ruborizadas y los ojos entrecerrados, presa de los nervios.

- Te amo, Ritsuka…

Nuevamente ese sentimiento de que todo estaba bien, con un simple beso de Soubi todo parecía aclararse y brindarle la mejor oportunidad que hubiera imaginado, y es que por más que le doliera aceptarlo… pero en los brazos de él podía sentirse protegido y amado, desechando por completo su nombre… "Loveless". Rodeo tímidamente su cuello, acercándolo más a él… necesitaba sentirlo cerca, no sabía porque, pero las lágrimas empezaban a brotar sin razón aparente… enredó sus dedos en el rubio cabello acariciando suavemente la nuca del adulto…

- Todo está bien… - le susurró al oído mientras lo acogía en un fuerte abrazo – Ritsuka…

Pero lo que ambos ignoraban, era la intromisión de una tercera persona que los observaba con la puerta entreabierta.


Los chicos caminaban a prisa y hablaban animadamente de cómo les había ido en el día, aunque en casi todas las conversaciones de las chicas… estaba el nuevo profesor de Artes que arrancaba suspiros con tan solo su recuerdo. Ritsuka lucía algo incómodo mientras bajaba las escaleras junto con sus amigos, rodeados de chicas de segundo grado que no paraban de hablar de lo hermoso de los ojos zafiro… de si tendría novia o si era casado…

- No precisamente novia – pensó malhumorado mientras se abría paso bruscamente entre la gente.

- ¡Ritsuka-kun¡Espéranos! – exclamó Yuiko mientras jalaba a Yayoi para que no se atrasara.

Prácticamente, llegaron hasta la salida, siendo llevados por la corriente de estudiantes que parecía una enorme cascada con una fuerza impresionante para arrastrarte a donde fuera. Yuiko y Yayoi respiraban agitadamente mientras dejaban sus espaldas descansar en la pared…

- ¡Que horror! No recordaba que fuéramos tantos estudiantes… - se quejó Yayoi acomodando sus lentes – ¿Así es siempre… o peor aún… así será siempre?

- No te garantizo nada – dijo Ritsuka divertido con la escena – Bueno, me voy…

- ¿No esperarás a Soubi-san?

- Algo así… - respondió mientras su rostro se teñía de un suave tono rojo - ¡Nos vemos mañana!

- ¡Adiós, Ritsuka-kun!

- ¡Adiós, Ritsuka-san!

- ¡Adiós!

- ¿Y ahora que tramará? – preguntó Yuiko sin entender.

- No sé… pero supongo que no pueden irse juntos de la escuela o todos sospecharían…

- Lo bueno es que creo que nadie recuerda que Soubi-san venía casi siempre por Ritsuka-kun…

- Es una gran ventaja… en fin… ¿Quieres ir por un helado, Yuiko-san?

- ¡Si¡Vamos! n.n


Ritsuka se mecía suavemente sobre sus pies mientras aguardaba bajo el árbol de un parque cercano, miraba con insistencia el reloj de su celular pero a la ves cuidando de no verse demasiado ansioso. Sus ojos se iluminaron de inmediato al ver al adulto que se acercaba cargando un delgado portafolio café.

- ¿Y… a dónde quieres ir? – preguntó revolviendo el suave cabello oscuro - ¿Quieres que te lleve a tu casa o quieres venir conmigo?

- ¿A dónde vas? – preguntó con una sonrisa aferrándose al brazo del chico.

- ¿A dónde quieres que vayamos?

- No sé…

- ¿Es una cita? – preguntó emprendiendo el paso.

- ¡Soubi! – exclamó colorado cubriendo su rostro con la manga del saco del rubio – No lo digas tan alto…

- ¿Entonces lo es?

- Si… creo que si…

- Bien… vamos a almorzar a algún lugar bonito ¿Te parece?

- Si…

Y se alejaron, nuevamente ignorando que eran observados desde la distancia con cierta curiosidad, tal vez para examinar la mejor manera de separarlos…

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¡Tuve Revies hermosos! T.T Gracias, gracias y más gracias¡Los adoro! T.T

Zedfer: Juju yo tampoco me quejaría del profesor XDDD De hecho estaría bastante feliz y dando brinquitos por todos lados XDD... El hijo del director... uhm... pues a ver que te parece este cap :)

Nireya: Que bueno que te gustó la idea n.n jeje igual a mi XD yo y mi mente macabra y pervertida ¬¬... ¿Realmente te gusta como escribo? T.T Que lindap, nunca me dicen cosas por el estilo u.u'...

Danny¡Aquí está la continuación¡Disfrútala:D

Yuu Kleiyu¡No desesperes! Poco a poquito n.n Aquí tienes nuevo cap...

Zahia-vlc¿Qué sabías? o.O... uhm... me tienes intrigada ¬¬... q bonito q pienses q es bonito (juju nóteste que parece trabalenguas XDDD)

Elsa Agabo¿Fué el primer fic de Loveless que leiste? Ojalá no te defraude u.u... de paso te recomiendo todos los que están en fanfiction n.n! Sobre Soubi... juju... no sé, lo pensaré... lo prefiero de complaciente XDDDDD jaja ntc... ya veremos como va con la historia!

AsNekon¿5 capítulos? Uhhh estás en lo mejorsito... waaa me atonto cuando pienso en ese anime... realmente me encanta, es mi favorito de favoritos¿La Universidad? No te preocupes, no te presiones... si necesitas tiempo para pensar, tómatelo... te recomiendo los examenes de aptitudes y cosas así, la verdad si ayudan :)... pero sobre todo... NO TE PRESIONES... con tranquilidad mejor :)

Pauli-chan: T.T... Niniap... me has hecho inmesamiente feliz... gracias de verdad por tu review, andaba con los ánimos por los suelos y gracias a ese mensajito en el correo se me subieron las ganas... y mira, ya escribí otro cap :) ¡Gracias! Espero no defraudarte :)

darkangelloveless: Ñam... Ritsuka perdiendo sus orejitas con Soubi... juju... no sé... tal vez... suena muy tentador... pero como ya dije... veamos como va conla historia... n.n!

Espero que este cap igual me dejen sus reviews, saben que son muy valiosos para mi... me animan a continuar escribiendo :) y eso que en esta semana pensé en de plano dejar de hacerlo y dedicarme al violín u.u...

¡Reviews! ¡Reviews! ¡Reviews!

Esperando que se haya comprendido el punto... me retiro :) ¡Saluditos!

Helena V.