Hiiix! XD Hey, lamento mucho haber hecho el capi anterior tan corto, pero no tenia ganas de escribir, nop, para nada ¬¬Uu Y es que estaba dentro de un síndrome de Paranoia increible o.o ¬¬ que maldicion, xq rayos tndra q ser asi? u.u

Y... ¡Buenas noticias! ¡Alabada sea la luz que ilumina mi foquito en mi habitación! XD La inspiracion volvio a mi nOn Gracias a Green Day y la fabulosa canción 'Boulevard of Broken Dreams' T-T como adoro esa cancion. Y al fabuloso grupo My Chemical Romance nOn todo gracias a Su-chan y su afan XD

En fin n.n Espero que todos esten bien y les adelanto que ya tengo otro fic (otro kuramaxHiei para variar) y que cuando termine alguno de estos lo publicare n.nUu es que nunca termino de actualizar! T-T Bueno, creo que ya no hay nada más que decir... huim, creo q no n.n

Dedicado a Valsed, gomen amia, pero ese dia ya tenia q irme y ademas no tenia ganas de hablar con nadie, ya t conte xq n.nU almenos alguien se interesa p; a Mayumi Minamino AMIAAA! T-T a los anios, pues yo noi estoy en vaks utiles... o.o no c muy bien q es eso, supongo q es cuando no haces nada en dos o tres meses nOn. Uh, tengo q contarte tantas cosas pero... NO TNGO SALDO T-T ESTUPIDO CELULAR! a mi one-san Rika-chan n.n POR FIN YA HICE LOS BANNERS nOn espero q t gusten xp t prometo q hare otros y los de sukisyo y q no me tardare tanto n.nUu a promise is a promise... I think that is evil XD y claro, a mi sensei Rurouni Andrea T-T gracias x comprenderme y leerme cuando tngo problemas, eres unica sensei T-T awe Lady Yaoi Yuri... ¬¬ eres mala! T-T Cómo se le puede obligar a una nieta a conocer a alguien x la fuerza! ¬¬ xp VIVA LA VENGANZA! Q no es buena pero q bien se siente XDDD

Y ya comienzo XD (es vdd, mis N.A son muy largas ¬¬)

cap 5. No me perteneces

"¡Bien hecho, Jaganshi!"

Habían comenzado las olimpiadas del colegio (N.A: No se si se realizará en otros países, pero al menos aki, en Perú, se realizan cada año y son competencias similares a las de las verdaderas olimpiadas. Espero que puedan entenderlo un poco mejor :p) y ya estaban los mejores atletas (XD) del curso compitiendo. Por supuesto, Hiei había ganado todas las competencias de atletismo en cuanto a carreras y saltos se trataba. Kurama prefería sólo anotarse en el basket, baseball y cosas así. Pero, para su desgracia, la carrera de 1.200m era obligatoria, era como un cross, correr todo el maldito campo de atletismo. Cómo odiaba el zorro las carreras. No porque no fuese ágil, sino porque...

"Minamino, por aquí!"

"Sonríe, Minamino!"

Odiaba la maldita sesión fotográfica previa a toda actividad. Odiaba a todas las chicas que se arremolinaban a su alrededor. Por instantes odiaba su propia belleza. Pero... Oh... No, no podía hacer eso. De pronto recordaba a su madre y todo se hacía más fácil de aguantar. Las fotos se volvían simples disgustos. Las chicas ya empezaban a ser agradables...

Y luego la venta de esas fotos por contrabando. Ya no le sorprendía ver una foto suya detrás del cuaderno de alguna muchacha, por ejemplo. Pero le agobiaba. Cuánto deseaba que le dejasen en paz...

De la nada, volteó para escapar un momento de aquellas pequeñas molestias y encontró a Hiei, con una toalla sobre los hombros y bebiendo de una botella de agua. El mundo se hizo nada y ahí sólo importaba Hiei, que dejaba la botella en un pequeño banco y dejaba escapar un resoplido. Miró de reojo y terminó de voltear al percibir la mirada esmeralda del pelirrojo. Como que le chocó un poco, porque dejó caer la toalla y Kurama se rió disimuladamente. Hiei gruñó, recogió la toalla y le dio la espalda. ¿Qué se habría creído? Hn.

"La carrera de mil doscientos metros planos está apunto de comenzar. Por favor, todos los participantes acercarse al área de partida"

Un extraño tic jaló la mejilla derecha de Kurama y se acercó al área de partida.

"¿Apostamos?" dijo una voz a su costado.

Kurama sonrió.

"Como si quisiera limpiar baños de nuevo" respondió Kurama mirando al chico de cabello negro a su costado.

"Hagámoslo más interesante entonces" propuso Hiei sonriendo "El que pierda..."

"En sus marcas"

"¿El que pierda...? ¿Qué, Hiei?"

"Listos"

Hiei sonrió.

"Te lo diré cuando acabemos la carrera"

Un disparo anunció el comienzo de la carrera, por supuesto, con Hiei a la cabeza. Kurama, resignado a lo que fuera la apuesra y le seguía en velocidad pero desgraciadamente no era tan ágil.

Hiei ganaría, Hiei ganaría... Sí, ya estabna a poca distancia de la meta, Oh diablos...

Pero...

"Mi apuesta es, quien gana, invita al perdedor un litro de helado"

"¿eh?" Hiei dio un pasos atrás, por lo cual, Kurama ganó incluso sin darse cuenta.

Y los aplausos, las risa, el escándalo, la euforia se hizo alrededor de Kurama cuando él ni siquiera se había dado cuenta muy bien de qué diablos había pasado. Hiei lo miraba sonriente, satisfecho, entre las personas que lo felicitaban.

Kurama se acercó a Hiei negando con la cabeza.

"Tramposo"

"¿Qué esperabas?"

Desde las gradas, dos ojos rojos, como los de Hiei miraban a los dos chicos con terror. ¿Por qué? ¿Por qué su hermano estaba en compañía de ese hombre? ¿Por qué?

Se acercó presurosa hacia su hermano, seguro era una confusión, de todos los lugares del mundo...

"Hermano" Hiei volteó fastidiado. Kurama se quedó paralizado. ¡Mierda! ¡Era Yukina! ¡Era la voz de Yukina! ¡Oh, Dios! ¿¡Qué rayos iba a hacer ahora'! ¡No, no, no, no, no! Volteó, y, tratando de parecer normal, dio con los ojos carmesí de la hermana de su amante (N.A: jooo, que raro suena eso XD)

Lo sabía pensó Yukina cuando dio con los ojos verdes de Kurama. Hiei no entendía por qué por ahí todos se habían callado ni por qué Yukina parecía tenerle miedo a Kurama, si nunca lo había visto.

"Kurama, ella es mi hermana Yukina" dijo sin mucha ceremonia "Yukina, él es Kurama"

Ambos se quedaron sin saber qué decir. Kurama sólo atinó a forzar una sonrisa y Yukina a hacer una mueca de reverencia.

Bien, todo iba bien. Al parecer Yukina no iba a hablar. Kurama se sintió más aliviado, porque no habína gritos de '¿Por qué estás con él?' ni cosas por el estilo.

"¿Para qué viniste? preguntó Hiei mirando a Yukina.

"Es que... es que yo..." aún no lograba de salir del shock la pobre, y buscaba las palabras adecuadas para no parecer extrañada, exaltada u horrorizada "vine a... animarte..."

"Bien, no funcionó, perdí" puntualizó Hiei "Ahora, si eres tan amable de retirarte..."

"¡Hiei1"

"¿Qué?" eso pareció más un gruñido que otra cosa.

Yukina tenía la respiración agitada. ¡Ese maldito hombre! ¡Maldito caradura! ¿¡Cómo se había atrevido'! ¡Sonreirle como si nada! ¡Maldito idiota asesino!

"Yo... ¿a dónde vas?"

"No lo sé" respondió Hiei de mala gana "¿Por qué?"

Yukina bajó la mirada.

"Iré a casa"

"De acuerdo. Nos vemos entonces"

Hiei dio media vuelta y siguió su camino junto a Kurama como si nada hubiese pasado. Yukina se les quedó mirando, entre preocupada, aterrorizada y triste.

"¿Qué sucede, Yukina-san?"

"Kazuma..." ella simplemente atinó a llorar en los brazos de su, ahora, novio. Kazuma Kuwabara.

Hiei miró de reojo a Kurama. ¿Desde cuándo era tan pensativo y se comportaba como si estuviese nervioso?

.-¡Ey! -llamó Hiei al zorro, deteniéndose.

.-¿Huh?

Hiei jaló uno de los mechones rojos de Kurama y lo besó, sorpresivamente. Tanto, que Kurama tardó un poco en reaccionar y devolver el beso.

.-¿A qué vino eso?

Hiei lo miró detenidamente.

.-No lo sé.

.-.-.-.-.-.-.-.-

Hiei bostezó. La verdad era que estar sentados bajo un árbol en pleno recreo y que el Zorro se la pasara leyendo no era su idea de diversión. Le miró de reojo. Pero Kurama no parecía que estuviese leyendo. Bien. No si el maldito libro estaba al revés y miras hacia el cielo. Parecía demasiado pensativo. Más que de costumbre.

"Estúpido..." llamó Hiei.

"¿Hm?"

"Sí, lo acabo de comprobar. De todas las personas que he conocido, el más patético en respuestas eres tú"

Kurama sonrió.

"¿Pues qué sucede?"

"Veamos... ¿Desde cuándo eres tan insufriblemente reflexivo? ¿Te parece fascinante examinar cada nube que pasa por el cielo? ¿O simplemente pensar en la nada te ayuda a encontrar paz interior?"

Kurama parpadeó un par de veces antes de responder.

"Estaba pensando en lo difícil que es dejar de ser amigo de una persona"

"¿Por qué?"

"Pues... Porque en sí los amigos es algo muy fundamental en la vida de las personas"

"Patético..."

"Puedes tomarlo como quieras, Hiei" dijo Kurama sonriendo "Es más. ¿Por qué no me das tu concepto de amistad?"

"¿Para qué querría nadie saber eso?"

"Oh vamos... Yo quiero saberlo"

Hiei le miró unos segundos. Torció una sonrisa.

"¿Quieres decir que tengo que decírtelo sólo porque seas tú?"

"En una manera muy corta de decirlo... así es"

Hiei resopló.

"Pues... no tengo un concepto de amistad. Nunca he tenido amigos. Nunca he necesitado de amigos. Pero... ahora es diferente"

Los ojos de Kurama empezaron a brillar. ¿Qué trataba de decir Hiei? El chico de cabello negro no lo estaba mirando a los ojos, además... sus mejillas estaban... ¿rojas?

"Quiero decir que..."

"¡Oigan, cuidado!" Urameshi Yuusuke corrió a toda velocidad para tratar de coger el balón de fútbol que cayó en la cabeza de Hiei, quien se había puesto de pie, furioso por la interrupción.

"Tú, maldito infeliz" masculló, cuando el chico se acercó a pedirle que le devolviera el balón.

"Oye, viejo. Lo siento. ¿Me lo das?"

"Oh… ¡Lo quieres?"

"¡Claro que lo quiero" dijo Yuusuke levantando una ceja. ¡Qué tipo tan raro!

"Ahí…" dijo extendiendo el brazo, pero luego sonrió y lo alargó, tomando impulso "¡Va!"

Y el balón fue arrojado con mucha fuerza, muy muy muy lejos de Yuusuke.

"¡Estás loco, viejo!" dijo molesto, y fue corriendo en busca del balón.

Hiei resopló.

"¿Ves? Normalmente eso haría a cualquiera. Por eso digo que no quiero amigos ni los necesito"

El timbre de fin de recreo retumbó en el área del patio. Yuusuke había desaparecido. Kuwabara corría para llegar al salón. Botan hacía lo mismo. Pero ni Hiei ni Kurama parecieron inmutarse.

"Entonces… ¿qué soy yo, Hiei?" preguntó Kurama con un dejo de… ¿tristeza? "Sólo un amante, objeto sexual o diversión del momento"

"Bueno… a eso quería llegar" dijo Hiei evitando la mirada de Kurama, sonrojándose "Yo… no lo entiendo muy bien… Pero quería decirte que…"

"¡El recreo acabó hace cinco minutos!" gritó una chica de cabello café, corto "Ustedes dos! Sí, ustedes bajo el árbol! ¿¡Qué rayos están esperando!"

"Que cierres la maldita boca y te largues" murmuró Hiei mientras Kurama se reía disimuladamente y pasó de largo a la estudiante de año inferior y se dirigió con Hiei al aula.

.-.-.-.-.-.-.-.-.-

"Hermano…" empezó Yukina con voz suave y a la vez cautelosa "Eh… ¿Qué tal… te fue hoy en… la escuela?"

"Qué te importa" respondió Hiei con indiferencia. Aunque luego se sintió algo culpable "Quiero decir… ¿a qué viene tanto interés?"

"Oh… No, nada" dijo Yukina rápidamente, mirando a su hermano de reojo. Se mordió el labio inferior. "Dime… ¿cuál es tu relación con Kurama?"

Hiei volteó, muy molesto.

"¿Por qué te importa? Es más, dime en este mismo momento por qué te interesa tanto el zorro. ¿Es tu novio? ¿Tu amante? ¿Trabajas para él? ¿Por qué tanto interés?"

Yukina lo miró afligida y Hiei supo que nuevamente había cometido un error. No tenía paciencia.

"Hiei… Kurama… es un tipo muy peligroso"

"¿Cómo demonios lo sabes?" preguntó Hiei mirándolo con furia "¿Por qué demonios me estás diciendo algo que no sabes? ¡No lo conoces!"

"Talvez lo conozco mucho mejor que tú…" dijo Yukina en voz baja y salió corriendo de la casa.

Hiei la miró algo consternado.

Ella no podía conocer a Kurama.

Kurama ya se lo hubiera dicho.

Exacto. Y él confiaba en Kurama.

"Mi hermana… cada vez está peor" dijo Hiei con un resoplido y subió a su habitación rápidamente.

.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.

Ambos estaban acostados en una cama, con las sábanas revueltas y mirando el techo. Las ventanas estaban abiertas y la brisa nocturna penetraba en la habitación de aquellos fogosos amantes, ahora relajados y momentáneamente felices.

Kurama atrajo más hacia sí al pequeño de cabellos negros. Le besó en la frente y lo rodeó con el brazo.

"Me haces sentir sobreprotegido" dijo Hiei refugiándose en el pecho del pelirrojo.

"Talvez eso es lo que hago" dijo Kurama sonriendo.

"Hn…"

Pasaron unos minutos de silencio, mientras Kurama se decidía a decir aquello que tanto ansiaba.

"Hiei…"

"¿Hn?"

"Si éstos fueran los últimos minutos de tu vida…? ¿Qué dirías que fue mejor?"

"Respecto a qué?"

"Hm… En general" dijo Kurama sonriendo, ansioso.

"Hm…" Hiei miró al techo pensativamente "Si éstos fueran mis últimos minutos no haría una cosa tan estúpida como ponerme a pensar en algo como eso"

"¿Entonces?" preguntó Kurama desconcertado.

"Haría una sola cosa" dijo Hiei sonriendo.

"¿Qué?"

"Esto" Hiei se levantó un poco, para ponerse sobre Kurama y acerca su rostro al del pelirrojo, y besarlo de una manera distinta, como notó el Zorro. No era sólo un beso de pasión, lujuria… Era… Se sentí algo más… Estaba cargado de sentimiento y pasión, y responder fue lo más maravilloso que abría podido suceder aquella noche. Y Hiei lo sintió, ya sabía que ya no había vuelta a atrás. Él era 'esa' persona. Sí. La persona especial. Y aquella nueva sensación que recorría su ser… Era la primera vez que sentía eso.

Y para Kurama… Era algo tan desconocido. Tan sublime… tan delicioso… Tan maravilloso… Estaba enamorado del enano puntiagudo. Con aquel beso lo había comprobado. ¿Los sentimientos de Hiei serían iguales a los suyos?

Se separaron mutuamente, con la respiración agitada.

"Eso haría" dijo Hiei puntualizando y volviendo a su lugar en le pecho de Kurama.

"Desearía que en realidad te quedaran pocos minutos de vida" bromeó Kurama.

"¿Ah sí?"

"Claro. Así disfrutaría de ese maravilloso beso de nuevo"

Hiei se ruborizó ante el comentario y notó que a Kurama le pasaba lo mismo, pero prefirió no decir nada y limitarse a besarle en el cuello.

"Pero no lo son" dijo sonriendo "Y si quieres otro beso, tendrás que aprender a ganártelo"

"Oh… eso fue cruel, Hiei" reprochó Kurama en modo de broma.

"Lo arreglaré entonces" dijo Hiei, y volvió a otorgarle aquel beso, disfrutando realmente sólo con el hecho de complacer a su amante.

"Bueno, se acabó por hoy" dijo Hiei.

Kurama lo abrazó y lo atrajo más hacia sí.

"¿Sabes qué es lo que más triste me pone, Hiei?"

"¿Eh?" Hiei se quedó en blanco. ¿A qué venía todo eso?

"Que no me perteneces" dijo en voz baja y sonriendo con tristeza.

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.

Holaaas! N.n qué les pareció? Creo que este capi estuvo un pokito mas largo :p Weno, la inspiración, ustedes saben XDDD Uf, no saben lo que se me ha hecho el mundo ahora ¬¬U Es un poco duro ahora, al menos para mi u.u me psana tantas cosas… Y lo más irónico es que esas cosas malas que me pasan m ayudan a escribir n.n Cuando me siento contenta… No me dan ganas de escribir o.o sí, soy rara, pero en fin n.nU

Espero que les haya gustado. Y pues, de todas fromas, al amar se tiene que sufrir, es la ley de la vida. Pero no estoy muy segura de que Hiei y Kurama sean muy felices precisamente. u.u

Por favor, no me maten, recuerden que es simplemente un fic y que si me matan no podre seguir escribiendo y ademas… Aun no han terminado de leer y existen los finales inesperados n.nU

Bueno, espero sus reviews! nOn

Gracias por leer!