Bien pues he aquí mi intento de fic espero que lo disfruten y que lo encuentren lo suficientemente interesante como para pedir el segundo capitulo, algunas aclaraciones necesarias en este fic Milo es el caballero dorado favorito de todo el santuario (me imagino que al menos esto si les gusto al menos a la gran cantidad de milomaniacas que existen y que yo me incluyo entre ellas) debido en gran parte a que es el más joven de todos los dorados, en mi historia Milo solo tiene 17 años, por lo cual también es el favorito del resto de los caballeros dorados.

El guión – lo uso para los diálogos y para los pensamientos, bueno espero que les guste al menos lo suficiente como para pedir el segundo capitulo y por favor dejen reviews aunque solo sea para amenazarme de muerte OK? y si tienen alguna sugerencia que me pueda ayudar a mejorarlo será bien recibida.

Capitulo Uno.-Un deseo Mal Sano lo Comienza Todo.

Los últimos rayos del sol tocaban el frente de cada una de las doce casas dándole a cada una un matiz dorado idéntico y a la vez totalmente diferente entre si tanto como los caballeros en custodia para cada una. Si........ Doce caballeros dorados para doce casas todos muy poderosos, todos muy imponentes, todos sumamente atractivos totalmente diferentes a cualquier otro caballero del Santuario. Si porque en un caballero dorado más que en cualquier otro la personalidad no es algo básico sino más bien es algo vital.

Si atractivos todos pero ninguno como él, ninguno como su caballero aquél que noche a noche le robaba el sueño con sus ávidas y ardientes caricias, como aquél que le exigía la entrega total de su cuerpo y de su voluntad, aquél cuya sola visión de su cuerpo desnudo provocaba una explosión de calor a lo largo del suyo, un calor tan intenso e incontrolable que calentaba su fría y vacía cama pero en especial su alma solitaria todo esto sin importar que tan distantes pudieran ser los demás a su alrededor o que tan indiferente lo crean. Irónico o no? Él que desde que se convirtiera en caballero siempre ha estado rodeado de personas, compañeros del santuario o alumnos pero siempre solo. Si definitivamente el daba calor a su alma aunque solo fuera en sus sueños, en sus ilusiones, en sus pensamientos y ningún otro caballero dorado o de cualquier otro rango podía igualársele.

No, no al caballero que ahora yacía desnudo, inconsciente e indefenso sobre la cama. Cierto que la forma en que consiguió tener a dicho caballero en tal situación no correspondía ni al honor ni al rango de caballero, pero acaso no era esto último lo que le impedía tenerlo libremente, lo que impedía abrirle su corazón, dejar a su espíritu expresar con toda sinceridad sus sentimientos, ofrecerle un vida juntos en la que lo enamoraría permanentemente con suaves caricias, palabras dulces dichas en susurros sobre su oído para que él y nadie más que él fuera dueño de las mismas, si, en esa vida juntos el lo llevaría poco a poco a adentrarse en los juegos del amor, sin necesidad de ocultarse o aún peor de recurrir a malas artes específicamente a la magia oculta prohibida y despreciada por los dioses desde tiempos inmemorables.

Pero ¿A quién trataba de engañar? ¿A el mismo? Si tal vez se engañaba, se engañaba y lo sabía, sabía perfectamente que no era solo el rango y el honor lo que lo detenía, era más bien el temor el miedo al rechazo, a su rechazo porque si el tuviera la seguridad una esperanza firme de que Milo correspondería a su amor, a su pasión ya podrían todos irse para el infierno y así el no tendría que hacer esto, pero desgraciadamente no era así después de todo Milo a sus diecisiete años es casi un niño, un niño con poderes inigualables de los que bien podía dar testimonio él, Si Milo es un niño un niño obligado a llevar la vida de un hombre, de un guerrero, de un ejecutor, la vida del asesino del santuario, de un hombre que no corresponde a la persona que Milo es realmente.

-Ahhhh-un gemido casi inaudible rompe con los pensamientos del caballero que contemplaba en silencio el ocaso, y que ahora vuelve su mirada hacia la cama del caballero regente de la octava casa,Esta despertando, finalmente ha recuperado la conciencia ha llegado la hora la hora de que sea míose dice así mismo el caballero, más para convencerse, para afirmar en su mente que su decisión es la correcta.

El caballero camina despacio, sin prisas después de todo tiene toda la noche por delante y miles de caricias, de besos y abrazos para él, para su Milo, se inclina a su lado, Milo aún esta débil muy débil pero poco a poco su respiración se vuelve más fuerte, lo mira parpadear con fuerza seguramente para aclarar por completo su vista y con ternura aparta de su rostro los mechones azules de su cabello mientras sus miradas se encuentran.

-¡¡Tuu!!-exclama sorprendido Milo aún semiinconsciente. -¡Hola Milo!-exclama el otro caballero sonriendo con satisfacción debido a que Milo lo reconoció por un momento temió que no lo hiciera -¿Qué esta pasando?,.......¿Donde estoy?,......¿Que haces tu aquí?,¿Qué hago yo aquí? Y ¿Por qué no recuerdo nada y me siento así?- -Calma Milo, son demasiadas preguntas para contestarlas todas de una sola vez- -Bien lo que esta pasando lo entenderás muy pronto, ¿Dónde estamos? Estamos en la octava casa, la casa del escorpión, TU CASA, ¿Qué hago yo aquí?, pues..... estoy a punto de DISFRUTAR DE LA PERSONA QUE MAS DESEO, ¿Qué haces tu aquí?, bueno, pues TU ERES ESA PERSONA, ¿--por qué te sientes así?, seguramente es por la PÓCIMA QUE TE DI- así de manera burlona remarcando ciertas frases contesta el caballero a cada una de las preguntas de Milo, eso sin dejar de mirarlo de forma ardiente recorriendo con la punta de sus dedos el contorno de su cuerpo desnudo desde la cintura hasta su rostro.

-¡¿Qué?! ¿De que hablas?, ¿Cómo te atreves a tocarme?-responde entre sorprendido e incrédulo el caballero del escorpión -Pero Milo aún no te has dado cuenta- -¿Cuenta de qué?- casi grito un cada vez más irritado Milo -Solo.........Mírate-

Milo haciendo caso a la sugerencia del otro caballero mira hacia su cuerpo y descubre que se encuentra completamente desnudo y si antes estaba irritado, ahora ya es rabia, una rabia enorme ante tal insulto es lo que siente, pero aún su rabia no es lo suficientemente fuerte para interferir con su juicio, ¿Cómo? Y ¿Por qué? Son las preguntas que resuenan una y otra vez dentro de la mente del caballero de la octava casa, ¿Cómo es que no percibió que se hallaba desnudo con el anterior toque del caballero?, ¿Por qué no percibió su cosmos al acercarse? Y sobre todo ¿Como es que no se dio cuenta de que alguien lo desnudaba?.

Rojo de rabia y de........... Vergüenza en especial de esta última al percatarse de la lasciva mirada del otro caballero, trata de levantarse de la cama para castigar su atrevimiento, para castigar a aquel que se ha atrevido a entrar en una de las doce casas, a su casa y desnudar a uno de los caballeros dorados, a él. Este último pensamiento no solo incomoda sino que intimida un poco al caballero del escorpión, sensación que aumenta todavía más cuando su cuerpo no le responde y es solo en su mente donde se forma la imagen de el mismo levantándose, por un momento, Milo no de crédito a su situación, a todo lo que le esta pasando.

-No te esfuerces, ahora estas por completo a mi merced y puedo hacer contigo lo que yo quiera- -así- responde Milo tratando de dar a su voz su habitual toque de cinismo y seguridad -Claro..... y es tanto lo que quiero hacer contigo que aún la noche entera no me bastara- -¡¡MALDITO!!!-el grito de Milo debe haber resonado hasta el mismísimo olimpo-Acaso piensas de verdad que eres capaz de controlarme a MI, el caballero de la octava casa y protegido de escorpión-respondió un enojadísimo Milo no solo por lo incomodo de su situación sino también por el toque de burla con el que el caballero expresara esta última frase-Para liberarme solo tengo que elevar un poco mi cosmo, y así ni tu ni diez caballeros más podrían detenerme- -Me muero por verte intentarlo- y de nuevo el mismo tono burlón -Pues ya que insistes- contesta el escorpión con igual o mayor burla en su voz-déjame mostrarte y darte una lección que no olvidaras nunca...Prepárate por que voy a sorprenderte-

Así Milo comienza en llamar y encender a su cosmo al máximo, poco a poco regula su respiración hasta que esta alcanza una tranquilidad absoluta, relaja todos sus músculo y sus nervios alejando así cualquier tensión que pudiera nublar su concentración en el proceso, también aleja de su mente todo pensamiento que no se relacione con la energía de su cosmo y los puntos de contacto necesarios para elevarlo más allá del séptimo sentido. Al principio y de una manera muy tenue un aura dorado rodea al caballero, pero de pronto Milo lo siente algo esta mal, muy mal; siente su cosmo en el interior de su mente, de su espíritu y de su cuerpo pero le parece tan lejano como dormido, como si de pronto su cosmo, su propio cosmo fuera ajeno a su voluntad y sin comprender porque en lo profundo de su corazón empieza a tener Miedo.

-Y bien Milo, estoy esperando esa gran explosión de poder que me prometiste, ¿Qué pasa?, de pronto te noto un poco pálido-

Milo abre sus ojos y trata de reunir toda la energía que le sea posible controlar para encarar al intruso.

-¿Qué fue lo que me hiciste?, ¿Por qué no puedo controlar mi cosmo?- -Tan pronto lo olvidaste, te dije que si no fuera por tu rango como caballero dorado no habría tenido que hacer uso de las malas artes, de la magia. -¡¡¿Qué?!!- -Tengo una amiga, una buena amiga que conoce los secretos de la magia relacionados con los guardianes de los dioses desde la era del mito, ella quería vengarse no de ti, pero si de dos personas muy cercanas, dos personas cuyos sentimientos por ti son tan profundos que sentirán la que va a pasar contigo en carne viva, justo como si les pasara a ellos- -¿De qué rayos hablas?, ¿Quiénes son esas personas?, ¿Qué relación pueden tener conmigo?, ¿Y qué es lo que quieres hacer conmigo?-

Al mirarlo así inquieto, desconcertado y al escuchar su última pregunta el otro caballero no puede más que sonreírle con ternura Si a pesar de su poder y su rango como caballero dorado aún conserva algo en su interior que la mayoría de nosotros ya no, UN CORAZON PURO, su espíritu es inocente, claro y libre de la malicia, de la saña, de la vanidad y la soberbia, por eso no me extraña que ni Saga ni.......

-¡¡Oye!! , ¡¡Contéstame!!- le grita Milo enfadado interrumpiendo sus pensamientos, a lo cual solo sonríe nuevamente retomándolos antes de acercarse aún más al indefenso escorpión Si por eso es que ninguno de esos dos caballeros dorados han tenido valor para hablarle claramente sobre lo que sienten por él

CONTINUARA????