Advertencia: Todos los personajes de esta historia son propiedad de J. K. Rowling. Esto fue escrito solo por diversión y no fue hecho con fines de lucro.

Hola, sé que algunas personas esperaban que esto fuera una continuación de Grabado a fuego, pero no es así. Estoy devanándome el cerebro para ver como continúo esa historia, pero en fin, aún no se me ocurre nada… Por el momento, les dejo esta historia, es nuevamente un Snape-Tonks, aunque un poco diferente al anterior. Espero sus comentarios sobre este capítulo (¡si quieren agregar ideas para la segunda parte de Grabado a fuego también serán bien recibidos!).

La auror Nymphadora Tonks quiere unirse a las filas de lord Voldemort, pero sus intenciones son tan negras como las del mortífago con el que debe casarse para ingresar a este grupo…

Matrimonio por ¿conveniencia?

Capítulo I: La boda

Todos los mortífagos la miraban atentamente. La ceremonia estaba a punto de comenzar. Ella caminó decidida y se colocó delante de Lord Voldemort.

El señor Oscuro estaba sentado en un trono negro a un nivel más alto del salón en el que ella se encontraba. La miraba atentamente y sintió como se adentraba en su mente. Ella cerró su mente a tiempo para dejar que viera únicamente el rencor que sentía por Dumbledore… Él sonrió. Ella iba a serle útil si conseguía manejar su ira de la forma que le conviniera… pero debía estar seguro de que no era una trampa…

--------------------- Flashback ---------------------

Unos meses atrás, la chica había llegado hasta un pueblo durante un ataque mortífago y sin previo aviso los había ayudado a quemar el lugar. Al terminar, exigió verlo. Fue llevada hasta un bosque, en este lugar él había aparecido y la había visto por primera vez. La joven era atractiva, tenía una cabellera verde que rivalizaba con los colores del lugar en que se encontraban y sus ojos eran azules y muy intensos. Lo supo inmediatamente, era una metamorfomaga. Sintió que alguien se acercaba a sus espaldas y decía:

- ¡No puedo creer que mi estúpida sobrina llegara hasta aquí! – era Bellatrix Lestrange. Dirigiéndose a su señor murmuró – es una sangre mezclada…

- Eres realmente valiente al intentar buscarme, siendo una sangre mezclada…

- No soy la única en este lugar… ¡yo solo sigo mis instintos! – había dicho Tonks – solo con ustedes podré vengarme…

- ¿Quieres vengarte?, ¿de quién? – preguntó Lord Voldemort.

- De Albus Dumbledore, ¡él tiene la culpa de todo! Por su ineptitud murieron mi madre y mi primo.

------------------- Fin del flashback -------------------

La ceremonia de iniciación de la chica comenzaría en cualquier momento. Ella estaba bastante excitada por lo que iba a suceder. Ninguno de los presentes podían ver su cara, llevaba puesta una careta blanca, al terminar la iniciación debería cambiarla por una negra y… no había vuelta atrás.

Lord Voldemort la miraba atentamente. Sabía que algo no estaba bien. Ella estaba nerviosa, pero sentía que la ceremonia no era su única razón. Algo más estaba influyendo en la chica. Una idea cruzó su mente…

- Debes saber que entre los mortífagos no hay mujeres… a excepción de Bellatrix que está casada con un mortífago. – dijo el señor oscuro con voz siseante. – La única manera de que formes parte de nuestro grupo es que pases por una prueba…

Nadie había mencionado una prueba hasta ese momento. Algo no estaba saliendo como lo había planeado. No iba a poder unirse a los mortífagos esa noche…

- No hay ningún problema, sé que pasaré cualquier prueba que me asigne, poderoso señor – dijo la chica con voz decidida. No podía dejar que supieran el temor que tenía…

- He decidido que para ser parte nuestra debes ser probada primero… No es una prueba cualquiera, serás evaluada por uno de mis mortífagos más allegados en todos los aspectos de tu vida. ¿No adivinas lo que tendrás que hacer… para ser como Bellatrix?

Ella lo comprendió en ese momento. Iba a casarla con un mortífago.

- Deberé casarme con un mortífago… - no era una pregunta, más bien era una afirmación. - ¿Quién será mi marido?

- Veo que aceptas tu suerte… eso me gusta – dijo lord Voldemort. – Veamos quién te conviene…

Los mortífagos que observaban la situación se movían nerviosamente. Unos pensaban en lo joven y hermosa que era la chica, otros meditaban acerca de los placeres sensuales que vivirían con ella si eran los elegidos, otros, más ambiciosos, soñaban con ser ellos solo por ser considerados "uno de sus allegados".

Solo uno de los mortífagos se planteaba la situación de otra manera: Severus Snape. Nymphadora Tonks, había sido una miembro de la Orden del Fénix, una de sus compañeras en la lucha contra Lord Voldemort. Siempre supo que él era parte de las razones que la llevaron a dejar el grupo. Su separación sucedió luego de la muerte de su primo Sirius Black, el enemigo de toda la vida de Snape. Tras la muerte de su primo, Tonks se volvió completamente introvertida. Analizaba una y otra vez lo sucedido en el ministerio y eso la llevó a la conclusión de que alguien los había traicionado, no quiso escuchar razones, había decidido que el traidor era él. Dumbledore había intentado convencerla, pero ella no había dado su brazo a torcer… Snape odiaba a su primo y de haber podido lo habría matado con sus propias manos (¡y eso no era del todo falso!). Conclusión: él tenía que haberlo traicionado.

Se presentó a hablar con Albus Dumbledore acerca de sus sospechas, pero el director dio todo su apoyo a Severus Snape. Luego de esta reunión ella salió de Hogwarts a toda velocidad sin volver la vista atrás.

Pero estos pensamientos no le indicaban al profesor de pociones lo que había sucedido durante ese tiempo para que ella intentara unirse al bando del señor Oscuro. Algo más debió suceder… Toda la Orden del Fénix había sufrido la partida de la joven, los Weasley estaban muy encariñados con ella, los niños la querían mucho, Remus era un muy buen amigo suyo, Dumbledore sentía que le había fallado y él… él no sabía que pensar. De todas maneras, ese no era el momento de cavilaciones, debía actuar para evitarle a la chica las posibles calamidades a las que se vería sometida.

Uno de los mortífagos se adelanto y dijo:

- Señor, si cree que puedo serle de ayuda en esta tarea, estoy a su disposición.

Snape reconoció esa voz, era Lucius Malfoy. Desde la muerte de su esposa Narcisa, su apetito sexual se había desbocado y buscaba constantemente víctimas para sus ritos sadomasoquistas. No podía permitir que ella cayera en sus manos, ella no… era casi una niña.

- No creo que ahora que tu hijo está de vacaciones y recuperándose de la muerte de su madre, sea conveniente que le lleves otras mujer a su casa, máxime que es su prima… - Snape dijo estas palabras para que fueran escuchadas por todos los presentes. El Lord pareció valorar su intervención y como consecuencia se dirigió a él directamente.

- Estoy seguro de que eres uno de los más fieles servidores que tengo, ¿estarías dispuesto a sacrificarte por mi?

El aludido hincó una rodilla en tierra y respondió:

- Señor usted sabe que haré lo que desee que haga si está en mis manos hacerlo. – tomó aliento para continuar y dijo – lo único que deseo es servirle mi señor. – no era posible, pero parecía que él sería el elegido para casarse con la chica…

Bien pensado era lo mejor que podía ocurrirle a ella. Sabía que el resto de los presentes estarían felices de tener la oportunidad de tener a esa sensual joven en sus camas, pero también sospechaba el tipo de situaciones que tendría que soportar si alguno lo conseguía…

- Bien, tendrás que casarte con ella. – dijo con voz cansada. – la ceremonia tendrá lugar en este mismo momento.

Ella no podía creer lo que escuchaba, esa voz… ella la conocía… la iban a casar con el traidor, el hombre que estaba al lado del mal desde que se inició esta guerra… A lo mejor era lo más conveniente… así podría averiguar mejor todo lo referente al profesor de pociones de Hogwarts…

- No quiero esperar… - dijo la joven dando un paso al frente.

La ceremonia se celebró sin más dilaciones. Los contrayentes se colocaron de rodillas ante su señor. Ella debía colocar su mano derecha sobre la marca tenebrosa del brazo izquierdo del profesor de pociones. Ambos debían usar una daga negra para hacerse un corte en la muñeca y luego, juntar sus heridas para que la sangre de ambos se mezclara a lo largo de algunos minutos.

Lord Voldemort pronunció todas las palabras necesarias para que la ceremonia se pudiera considerar legal, de hecho al terminar el rito de la sangre un humo blanco surgió de sus muñecas, se convirtió en un pergamino y desapareció. Ambos sabían lo que significaba, ese pergamino era su contrato matrimonial y al desaparecer de los lares del señor oscuro, había sido trasladado hasta el Ministerio de Magia, específicamente al Departamento de contratos mágicos, subsección de matrimonios…

Eso era increíble, Severus Snape se había casado con una joven llamada Nymphadora Tonks. La ceremonia era completamente legal, por lo que estaban unidos para bien o para mal; pero debido al lugar donde se encontraban lo más seguro es que fuera para mal…

Lord Voldemort estaba muy contento, creía que el rencor de esa chica iba a ayudarle a descubrir muchos detalles acerca de la Orden del Fénix y que en combinación con su espía iba a lograr sacar lo mejor (¿o lo peor?) de ella.

Luego de la boda, Voldemort ordenó que se brindara por el servicio que la pareja prestaría a su señor y porque la pareja diera al lado oscuro, en el futuro, otros mortífagos…

Se le comunicó a la chica que su evaluación se llevaría a cabo a lo largo de ese año, de ser aprobada todo seguiría igual, de ser reprobada moriría…

Al terminar la "celebración" suscitada a raíz del matrimonio de Snape con esa chica, los mortífagos se retiraron uno a uno. Algunos de ellos tenían habitaciones en el mismo castillo del señor oscuro, ese era el caso de Bellatrix Lestrange y su marido, que debido a su fuga de Azkaban no contaban con una casa a la cual retirarse, otros en su condición tenían también la suerte de vivir en el castillo de lord Voldemort. Otros como Lucius Malfoy tenían dinero suficiente para tener varios escondites a los cuales retirarse. Severus Snape, vivía en ese castillo durante la época de vacaciones que era precisamente en la que se encontraban, por lo tanto debía quedarse en ese lugar. El problema se presentaría en la época escolar, para ese momento tenía que regresar a Hogwarts… esto presentaba un problema, pues no podía llevar a la chica a ese lugar, todos los mortífagos estaban de acuerdo con esto. Si ella había dejado la Orden del Fénix, Dumbledore iba a sospechar si era trasladada al colegio…

Este era un problema que deberían resolver a su tiempo…

En el siguiente capítulo, se expondrán las razones de Snape y de Tonks para llevar a cabo este matrimonio.

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