¡VOLVÍ n0n! Ne apoco creyeron que ya no iba a actualizar n.nUU, Gomen por no actualizar cuando dije TT.TT, hubo algunos inconvenientes u.u

Espero hayan pasado una feliz navidad n---n, yo les deseo un feliz año nuevo Ne n0n

Bueno como sabrán Shaman King no me pertenece TT.TT ni mucho menos Ranma ½ TT0TT, pero Ren es MÍO¡¡¡¡WUAJAJAJAJAJAJAJAJAJA n0n¡¡¡SÓLO MÍO ñ—ñ!

HOROXREN, YHOXANNA

Advertencia de LEMMON: HoroxRen

CAPITULO DIECIOCHO: LA OBVIA SOLUCION

12:45 AM

-.-¡Hoto-Horo mi amor n0n!- exclamo emocionada Asuka mientras se le colgaba del cuello.

-.-Suéltame que estoy ocupado- lucho el ainu

-.-No quiero n—n- dijo emocionada, estrechándolo cada vez mas fuerte.

Horo-Horo suspiro hastiado ya dispuesto a darse por vencido, lastimosamente su hermana no estaba cerca, porque había salido con Lyserg al pueblo mas cercano en busca de pistas que les ayudaran a terminar con la maldición de Jusenkyo…

-.-Te quiero tanto- comento Asuka pegándose insistentemente al cuerpo contrario.

…y él debería estar haciendo lo mismo, mas Asuka no lo dejaba irse, a penas y podía moverse.

-.-¬¬ si claro- ironizo el ainu

Apenas y se conocían, por no hablar de la actitud totalmente caprichosa de la joven, Horo-Horo suspiro, en verdad quería retirar los brazos de ella, cosa que no parecía ser posible a menos de que usara la fuerza, y él nunca haría eso.

-.-TT.TT

Apunto estuvo de rendirse, aunque reacciono al sentir la presencia de Ren. Inevitablemente sus ojos buscaron el lugar exacto en que el shaman chino se encontraba.

Él venia entrando al hotel, y al pasar a un lado del ainu lo miro de reojo y sin mucho interés, siguiendo con su camino, subiendo por las escaleras hasta que ya no se vio.

El ainu parpadeo curioso al notar Ren traía algo en su mano, claro que no alcanzo a ver que era. Claro que se extraño mas al ver que el Tao ni se inmuto al verlo, antes lograba ver una chispa de molestia en esos ojos dorados, pero ahora ni eso.

"¿Qué le pasa o.o?"

Se pregunto mentalmente antes de escuchar a Asuka.

-.-Él se parece mucho a tu novia Ren o.o-comento

-.-Ah si n.nUU, se parecen mucho.

-.-¿Son hermanos oO?-

-.-Algo así n-nUUU-

Asuka sonrió un poco mas, volviendo a abrazar a su apreciado joven en una actitud graciosamente infantil que hizo suspirar cansado al ainu.

Aunque casi de inmediato Horo-Horo sonrió, una de sus brillantes ideas surgió en cuanto vio entrar a Chocolove.

Esa sonrisa maléfica se expandió por sus labios antes de tomar suavemente a Asuka por los hombros, alejándola levemente. Ella sonrió en respuesta, completamente complacida por tan delicada acción.

-.-¿Recuerdas que me dijiste que tu "monita" Josefina había escapado?- pregunto Horo-Horo, consiguiendo que la muchacha asintiera sin entender, en consecuencia el peliazul sonrió mas- ¿ves al moreno de halla?

Indico, logrando que Asuka girara y volviera a asentir.

-.-Bueno pues, él sabe donde esta Josefina ñ—ñ

Lo siguiente que se vio fue como Asuka cogía lo primero que encontró a la mano, ósea un asiento de madera, con el que comenzó a perseguir a Chocolove por todo el Lobby

-.-¡DEVUELVEME A MI JOSEFINA¡¡DEVUELVEMELA!

-.-¡Anda pue', yo no tengo nada TT0TT!

En verdad debería sentir algo de lastima u.u….pero mas tarde, ahora quería hablar con Ren.

Subió las escaleras saltando de dos en dos, hasta que diviso el pasillo de las habitaciones, no tuvo que buscar mucho al shaman, pues este salía junto con su hermana.

Jun sonreía melancólicamente, manteniendo con delicadeza una rosa entre sus manos, su mirada siempre fija en Ren, quien parecía igual de indiferente,

A esa distancia podía escuchar claramente lo que decían, pero no le sirvió de mucho, ya que ellos estaban hablando en chino.

Las ultimas palabras neutras de Ren consiguieron la sonrisa de su hermana, la cual luego de despedirse salio junto con Lee Brouce Long.

El ainu se hizo a un lado cuando ella pasó junto a él, sonriendo con amabilidad antes de bajar por las escaleras.

Por un momento Horo-Horo la observo detenidamente, y luego miro a Ren, él lucia algo…en realidad no sabía como describirlo, nunca lo había visto así.

Aunque casi de inmediato pudo hacerse una idea, la única persona que el Tao tenía era a su hermana, y ahora cabía la posibilidad de que la perdiera.

Frunció el ceño, Ren no era el único que perdería algo importante si la maldición no era eliminada, a él tampoco le gustaba la posibilidad de dejar sola a Pilika.

-.-Hola RenTado- dijo en cuanto comenzó a acercarse

-.-Hola Hoto-Hoto- saludo sin ganas

-.-¿Y Bason?- pregunto Horo-Horo al notar la falta del espíritu acompañante, reviso con la mirada por si estaba cerca.

-.-Esta con Manta- respondió Ren- Dijo que lo necesitaba para que le ayudara con los lugares que él no alcanzaba a ver.

-.-¿Y porque no fuiste con ellos?- dijo divertido, al imaginar a Manta con el enorme espíritu.

-.-No quería

Finalizo de manera cortante, dándole la espalda al peliazul para comenzar a caminar, ningún sitio en especial, con tal de distraerse un poco.

-.-¡espera!-

Siendo Horo-Horo el que lo detuvo en cuando lo tomo del brazo, obligándolo a girar para quedar frente a frente.

-.-¿Qué te pasa?- pregunto al ver la vacía mirada dorada.

-.-Nada

Y con un movimiento seco Ren se libro del agarre, dándole de nuevo la espalda. Dio unos cuantos pasos lejos del ainu antes de que un golpe de poder espiritual casi lo tumbara.

Molesto giro hacia el peliazul, este le sonreía teniendo posesionada la pequeña estatuilla con la que le había atacado.

-.-Hn

Eso fue suficiente como para que sacara su cuchilla, y a pesar de no tener a Bason cerca no dudo en atacar.

Horo-Horo sonrió al ver que el otro estaba dispuesto a aceptar su reto, aunque lo primero que hizo fue salir corriendo escaleras abajo con toda la intención de salir del hotel.

No porque le importase mucho que los demás huéspedes vieran algo "inusual", Anna era el problema, si llegaban a destruir algo de ese lujoso lugar les cobrarían una barbaridad, algo que la sacerdotisa no toleraría.

-.-¿Hermano a donde vas!- exclamo Pilika en cuanto entro al hotel, viendo a su hermano bajar a toda prisa - ¡Anna quiere una reunión en dos horas!

-.-¡Ahí estaré!- grito Horo-Horo eludiendo la peligrosa cuchilla.

-.-¡Si llegas tarde Anna se enfadara!

Pilika alcanzo a escuchar un "no te preocupes" antes de que su hermano saliera seguido por el Tao; ella suspiro por la falta de seriedad de Horo-Horo, aunque prefirió no prestarle atención.

El ainu sonrió cuando finalmente estuvieron a campo abierto, donde dio comienzo el combate, y a pesar de que Ren no contara con su espíritu acompañante eludía bastante bien los ataques. Claro que no siempre tenia tanta suerte, y varias veces el poder espiritual del ainu lo golpeaba.

Horo-Horo sonreía cada vez que eso ocurría, sabia que a Ren le molestaba no poder terminar el encuentro. A él mismo le daba trabajo conseguir que el Tao se rindiera.

-.-¿te sientes mejor?- pregunto Horo-Horo al momento de estar detrás de Ren, colocando sus brazos alrededor del cuello de este, aplicando una llave, apretando ligeramente para que dejara de moverse.

Por algunos segundos no hubo respuesta, aunque luego el Shaman chino dejo de moverse.

-.-Ahora si- dijo Ren al darle un codazo a su compañero en el estomago, logrando que lo soltara.

Instintivamente Horo-Horo se llevo las manos a la parte afectada, aunque en realidad no le había dolido.

-.-Siempre tan delicado- dijo Horo-Horo con sarcasmo

-.-Tú empezaste, así que no te quejes- repuso Ren

-.-¡Yo no empecé!- se defendió- Fuiste tú con esa actitud tan hosca

-.-¡Yo siempre actuó así!

Ambos se miraron desafiantemente, y concientes de que no harían retroceder al contrario suspiraron. Por un momento no dijeron nada, donde Ren cansado camino hacia la sombra de un árbol.

-.-¿Te preocupa tu hermana?- pregunto Horo-Horo, sabiendo que el otro no diría nada por voluntad propia.

-.-Si- dijo sin verlo a los ojos, sentándose en el pasto.

-.-Oh vamos, ya veras que encontraremos una solución

Ren sonrió levemente cuando observo de reojo a Horo-Horo, aunque luego volvió a mirar hacia el frente, perdiéndose en algún punto de la nada.

-.-te oyes como Yho- comento con simpleza Ren.

El Tao no quería perder a su hermana, ni tampoco al ainu, se sentía inútil al no poder hacer nada para evitar que se fueran de su lado.

Había estado buscando una solución, pero dejo de hacerlo cuando quiso hacer algo que nunca había hecho…le regalo una rosa a Jun. Quizás no demostraba todo lo que la apreciaba, pero fue lo único que se le ocurrió.

-.-Ren…-

Aunque el llamado de Horo-Horo interrumpió sus pensamientos, mas el ainu se quedo callado, así que Ren giro un poco para verlo.

-.-¿Qu…?

No tuvo tiempo de terminar la pregunta pues una leve presión contra sus labios silencio cualquier palabra.

-.-o/o

Cosa que lo tomo desprevenido, no se esperaba ese beso.

-.-Quita esa cara- dijo el peliazul

-.-No tengo otra ¬¬

En respuesta Horo-Horo sonrió, consiguiendo que Ren alzara elegantemente una ceja en señal de duda, sabía que el otro tramaba algo.

-.-Me gusta mas cuando te sonrojas-

-.-Pues no estoy sonrojado ¬/¬- debatió Ren girando hacia otro lado.

-.-No te creo-

Le susurro Horo-Horo al oído, abrazándolo por la espalda, pegando su pecho contra esta, rozando sus labios contra el cuello de Ren.

-.-Ahora no es momento para esto- dijo Ren.

-.-¿Por qué no?- pregunto Horo-Horo, bajando por el delgado cuello, dando ligeros besos.

-.-Por que...

No podía terminar sus palabras, una mano en su cintura lo había jalado hacia atrás, dejándolo sentado en las piernas del ainu.

-.-Es…espera-

Ren sintió unas pequeñas mordidas en su cuello al mismo tiempo que una mano bajaba por su pecho, introduciéndose en su camiseta. Su corazón comenzó a latir más rápido, y esos toques enviaban electrizantes corrientes de placer por todo su cuerpo.

-.-De…tente

Pidió una vez mas, pero le fue imposible no cerrar los ojos mientras un leve suspiro salía de sus labios, las caricias se volvieron mas atrevidas cuando la mano que se infiltro en su camiseta salía para desabotonarla, donde la mano libre recorría sus piernas por encima del pantalón.

En verdad que no era momento para esto, deberían estar ayudando a los demás…deberían buscar una solución…Ren tuvo que morder su labio inferior cuando su camiseta desapareció…deberían…el ainu comenzó a besar y lamer su espalda…debe…oh dios…

El peliazul sonrió, él quería sentir a Ren mas cerca, no sólo físicamente, en verdad lo quería, y le gustaría sentirlo mas suyo. Además esa nívea piel resultaba tan embriagante.

Así que con una mano tomo la barbilla de Ren haciéndole girara para verlo de lado, y sin dudarlo se besaron con el mismo desespero que experimentan, ardiente lujuria, una deliciosa mezcla.

-.-mmmmm

Ese excitante gemido se perdió en el interior de sus bocas cuando una atrevida mano toco la entrepierna del shaman chino. Los corazones latían sin control, donde por falta de aire tuvieron que separarse.

Agitados, y sumamente sonrojados se vieron a los ojos, aunque el contacto no duro mucho, pues Ren cerro los ojos ante las nuevas caricias en sus piernas, los toques se turnaban de los muslos a la entrepierna, y así sucesivamente hasta sacar profundos y roncos gemidos.

Para Horo-Horo aquello resultaba tan excitante, ver el tono carmín en sus mejillas y la expresión de su rostro cambiar por una llena de placer, además de esos deliciosos labios entreabiertos dejando escapar los sensuales sonidos.

Ren quiso soltarse, no porque le incomodara estar así, sino porque sentía la urgente necesidad de tocar al ainu. Aunque su intento se vio detenido por la mano que rodeo su cintura.

-.-¿A…donde...vas?

Pregunto Horo-Horo cuando su lengua se encargo de recorrer el oído de Ren, hasta que sus dientes mordieron muy placenteramente el lóbulo de la oreja.

-.-¡Horo-Horo!

Oírlo pronunciar su nombre fue suficiente como para que Horo-Horo perdiera el poco control que tenia, aunque esto no fue comparable en cuanto Ren se fue hacia atrás, una acción que logro que ambos temblaran.

-.-ah, ah, ah

Los gemidos se confundieron entre si, y el Tao tuvo que morder de nuevo su labio cuando quedo completamente sentado sobre la erección de otro. Se sonrojo violentamente ante su atrevido movimiento, donde su espalda se arqueo levemente debido a las caricias de su entrepierna.

-.-mmmmm…ah, ah…Horo…Horo…mmmmm

Sin pensar Ren se movió hacia atrás, consiguiendo que el ainu gimiera en su oído. Pero esta vez logro que lo soltara.

Con la respiración completamente descontrolada, el shaman chino se alejo, sentándose de nuevo en las piernas del otro, pero esta vez lo veían de frente.

Horo-Horo sonrió cuando sus manos rodearon esa delgada cintura, siendo su sonrisa correspondía en cuanto un nuevo beso los unió.

Sus lenguas jugaron perezosamente en el interior de sus calientes y húmedas bocas, donde Ren metió sus manos dentro de la camiseta contraria, alzándola mientras tocaba lo que quedaba descubierto.

El ainu alzo los brazos en cuanto la prenda no pudo subir mas, dejando que el Tao recorriera con sus manos el territorio desconocido; mientras él trazaba un húmedo camino con su lengua por el cuello de Ren.

Así que entre suspiros y uno que otro gemido, una mano bajo por el abdomen de shaman chino en buscando algo…

…y lo encontró.

El cinturón de su pantalón

-.-mmmmmm- gimió Ren

Sin pensarlo una mano se introdujo dentro del pantalón y los boxers del joven de ojos dorados, el cual apretó fuertemente sus ojos ante aquello que tocaba esa parte tan rígida, caliente y palpitante de su cuerpo, esos dedos comenzaron a moverse buscando mas contacto con su miembro.

-.-dios…Horo-Horo- jadeo, abrazándolo con fuerza

El peliazul también gemía, no supo el momento en que su atrevimiento lo llevo a esa situación, claro que esto tampoco le molestaba, pues Ren se acercaba cada vez más en busca de un contacto mas profundo, cosa que él aprovechaba para lamer esa deliciosa piel, mientras que las manos del Tao se deslizaban por sus costados, acariciando también su cabello y su espalda las cuales mandaban deliciosas corrientes.

Conciente de que si seguía así todo terminaría muy rápido, deslizo lentamente su mano de boxer del Tao. Claro que si Horo-Horo esperaba alguna señal de protesta se equivoco totalmente.

La respuesta de Ren fue bajar su propia mano por el abdomen del ainu, su frente se había apoyado en el hombro de este, parecía que esa posición le ayudaba a observar lo que estaba tocando.

-.-Mmmmm

Jadeo Horo-Horo ante la deliciosa caricia que se termino posando sobre aquella parte tan rígida de su cuerpo, pero esa mano sólo lo tocaba por encima del pantalón. Esto lo agito aun más, por lo que el peliazul comenzó a tocar la espalda y la cintura de Ren, completamente extasiado con las caricias de este.

Aunque esto no se comparo cuando los labios de Ren se posaron en su cuello, besando ligeramente, humedeciendo la piel a su paso….simplemente delicioso.

Y con una enorme fuerza de voluntad que, no creía tener, tomo al Tao por los hombros para alejarlo.

Ren mantenía sus labios entreabiertos y humedecidos por los ardientes besos, aunque no parecía del todo sorprendido por la acción del shaman de hielo, quien luego de observar durante unos segundos ese excitante rostro, sonrió un poco.

La sonrisa fue correspondida antes de que el ainu lo empujara, quedando así acostados en el pasto, estando Horo-Horo encima de Ren.

Sin decir algo, el peliazul se deshizo de ambos pares de pantalones, quedando sólo en ropa interior. No estaban dispuestos a seguir esperando, no había ninguna razón para detenerse.

Volvieron a besarse con hambre, dejando que sus lenguas jugaran, tocándose con urgencia y el deseo insaciable de ir más lejos.

Eso fue como un incentivo, el ainu se acomodo mejor entre las piernas de shaman chino, mientras su mano se deslizaba por el abdomen de este, bajando hasta que removió la ropa interior de Ren.

El beso termino, y Ren le ayudo a Horo-Horo a deshacerse de la única cosa que le impedía verlo por completo. Aquí resulto imposible el no gemir en cuanto sus cuerpos hicieron contacto, los dos calientes, ardiendo de deseo y alivio; si la fricción por encima de la ropa era enloquecedora, ahora simplemente era insoportable.

Sin dudarlo Horo-Horo llevo su lengua por el pecho del Tao, capturando con su boca los erectos pezones, mordiéndolos, haciéndolo temblar de placer

Pronto dos dedos se introducieron en la boca de joven de ojos dorados al mismo tiempo que Horo-Horo recorría con su lengua por la mejilla de este, jadeando al sentir la lengua contraria humedecer sus dedos, acariciándolos de tal manera que producía un erótico placer.

La ansiosa boca suplió sus dedos, besando a Ren con ansiedad, mientras una de las piernas del Tao se entrelazaba en su cintura.

-.-¡Aaaahhhh!

El gemido compartido se debía al atrevido e invitante contacto entre ambos…

…muy bien, no más espera.

Horo-Horo miro fijamente a Ren mientras sus dedos tocaban la entrada del Tao. La imagen que tenía ahora no pudo ser comparada por ninguna otra, gemidos, jadeos y leves gimoteos se escucharon cuando uno de sus dedos se introdujo lentamente en el cuerpo contrario.

Esto consiguió que el ainu se lamiera los labios mientras veía a Ren arquearse de placer.

La sensual imagen, llena de éxtasis mantenía los ojos cerrados, pero los abrió en cuanto sintió que unos labios se posaban sobre los suyos.

Ante el desesperado beso, Ren rodeo con sus manos el cuello de Horo-Horo, jalándolo mas hacia si mismo, quería sentirlo lo mas cerca que fuese posible.

-.-Mmmmmmmm

Aunque la mente del Tao comenzó a nublarse de placer cuando el ainu encontró ese escondido punto de placer en su interior.

-.-¡Horo-Horo!- grito cuando el beso termino.

-.-Me…gusta q…que grites mi ¡ahhhn!…nombre

Le susurro el ainu al oído, lamiendo el mismo, escuchando los pequeños gritillos placenteros de Ren, quien movía sus caderas, jadeando mientras una y otra vez Horo-Horo tocaba ese punto especifico.

Pronto Ren comenzó a gimotear al sentir que llegaba al límite de sus deseos. Al parecer este era el momento que Horo-Horo estuvo esperando pues sus dedos se deslizaron fuera del otro.

Lentamente el Tao abrió los ojos, viendo fijamente al ainu, el cual respiraba igual de agitado.

-.-¿En…en verdad quieres?-

A estas alturas la respuesta debía ser obvia, sin embargo Horo-Horo sentía que debía preguntar, sobre todo cuando se hace algo tan importante para ambos.

-.-Yo…-gimió Ren

Resultaba imposible hablar, demasiado excitado, de sus labios solo salían suspiros y cortos gemidos, así que Ren volvió a jalarlo para besarlo.

Horo-Horo pareció comprender, pues se coloco entre las piernas del pelivioleta, poniendo la punta de su excitación en la estrecha entrada, mientas lo miraba fijamente, esa deliciosa boca ligeramente abierta dejaba escapar hermosos sonidos.

Muy lentamente fue entrando en el delgado cuerpo del Tao, el cual gritó ante la sensación, esto era demasiado, el pequeño dolor que sintió en un principio se transformó en algo increíblemente intenso, puro éxtasis.

Ambos jadearon cuando Ren movió sus caderas, intentando hacer que el ainu llegara más adentro, intentando que sus movimientos fueran más rápidos y profundos, queriendo que golpeara ese punto dentro de si que lo hacía gritar con placer.

-.-¡Ahhhhhhh!

-.-¡Mmmmmmm!

Las embestidas se hicieron más rápidas, más fuertes, y las manos de Ren se aferraron con fuerza a la espalda del ainu, arañando, mientras este besaba y mordía su pecho.

-.-¡Ahhhh Ren!

Esa estrecha entrada lo estaba enloqueciendo, al principio salió un poco, y volvió a entrar sólo para sentir de nuevo esa cálida sensación que lo hacia sentirse en la gloria. Repitió el movimiento cada vez con más velocidad.

Pronto ambos gemían sin impórtales quien los llegasen a oír, produciendo una sensual melodía…deseo carnal.

-.-¡AAAHHHHH!

Las últimas embestidas fuertes y violentas bastaron para llegar al clímax, humedeciendo los abdómenes de ambos, mientras temblaban, jadeando ya exhaustos; el ainu se vino al mismo tiempo, llenando el interior de Ren en algo calido y delicioso, pues en ese momento los dos se entregaron plenamente a la persona que más querían.

Parsimoniosamente ambos regresaron a la realidad, mas no hicieron el mas mínimo intento por moverse, aun estaba abrazados y renuentes de abandonar la calidez que les proporcionaba el otro.

Pero conciente de que no podrían permanecer así por siempre, Horo-Horo se acomodo a un lado de Ren, acostándose a su lado.

El ainu retiro algunos mechones de cabellos de esa sudorosa frente mientras le sonreía, el acto fue correspondido, la bonita y provocativa sonrisa de Ren duro unos hermosos segundos, antes de perderse, pues el shaman chino se había acurrucado contra el pecho de Horo-Horo.

-.-Tendremos que regresar- dijo perezosamente Ren

-.-Todavía no nos esperan- dijo el ainu con el mismo entusiasmo con que el Ren hablo, estrechando la figura contraria, acercándolo mas.

Ren sonrió de nuevo, alzando la mirada para encontrar la de Horo-Horo, depositando así un suave beso.

-.-Por cierto…te amo

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

2:45 PM

Tanto Ren como Horo-Horo habían salido corriendo al ver que se le hizo tarde para la reunión con Anna.

Subieron a prisa las escaleras del hotel, donde abrieron de golpe la puerta de la habitación, consiguiendo que las miradas de los presentes recayeran sobre ellos.

-.-Lo sentimos n.nUU- se disculpo Horo-Horo- Se nos hizo tarde

-.-No importa n—n- dijo Yho- Apenas íbamos a empezar.

El motivo de la reunión era para juntar la información que estuvieron buscando durante toda la noche. Aunque luego de un tiempo, las cosas no parecían dar resultado, y siempre llegaban a la misma conclusión…

-.-¿Cómo pudieron destruir Jusenkyo!- pregunto exaltada Pilika, golpeando la mesa con las manos.

-.-No fue apropósito ¿sabes?- dijo Ryo

Todos suspiraron al no haber encontrado algo de utilidad.

-.-¿Y ahora que hacemos?- se quejo Pilika, ella no quería convertirse en un muchacho para siempre TT.TT

-.-Seguir buscando u.u- dijo Manta

Un suspiro general dio por terminado el tema, el tiempo no estaba a su favor, y ya comenzaban a perder las esperanzas.

-.-Quiero que vuelvan a buscar, no me importa como, pero quiero una solución ¡YA!

La orden de Anna no tuvo que ser repetida, de inmediato todos comenzaron a correr en direcciones distintas, consiguiendo que la Itako suspirara.

Ninguno había dormido, estuvieron buscando toda la noche una nueva solución, cosa que no encontraron, y ahora tenían hasta media noche para hallar la cura. Anna volvió a suspirar.

Aunque algo le llamo la atención, quería hablar con Ren, pero se detuvo al ver que Horo-Horo se acerco al Shaman Chino, consiguiendo que este se sonrojara.

Sonrió un poco ante el gesto del Tao, todo su porte inquebrantable se perdía en cuanto el ainu le hablaba; cosa que parecía complacer bastante a Horo-Horo, quien sonreía abiertamente murmurando cosas que sólo Ren podía escuchar.

Parecía que a cada palabra, Ren adoptaba un carmín más notable en sus mejillas, así que empujo a Horo-Horo consiguiendo que este se riera.

"Que suerte"

Pensó Anna, a ella le gustaría poder estar así con Yho…

-.-¡AI REN n0n!

…cosa que no parecía ser posible en esta vida.

-.-Shian suéltame

Y la interminable y ya predecible plática entre la amazona y el Asakura comenzó; la rubia no estaba de humor para eso, así que suspiro y dio media vuelta con la intención de irse.

Camino por el pasillo, queriendo ocupar sus pensamientos en el problema reciente, así que se centro en el causante…

-.-Hao Asakura

Dijo al recordar que este había desaparecido luego de la destrucción de Jusenkyo, cosa que no le extrañaba, a ese desquiciado castaño todo esto debería de parecerle muy divertido.

-.-Idiota- musito en cuanto dio media vuelta en una esquina.

A ella no le hacia ninguna gracia el tener que permanecer toda su vida como un gato; gruño cuando bajo por las escaleras del hotel, donde ese lujoso y espacioso lugar no parecía ser tomado en cuenta, demasiado ocupada en sus pensamientos.

-.-Que tenga un buen día señorita

Le dijo el hombre que le abrió la puerta, Ann asintió sin ganas, lo que ahora necesitaba era sentir el contacto de la naturaleza, eso la tranquilizaba.

Interrumpió sus pensamientos al ver un acantilado, sin dudarlo se sentó cerca, contemplando la bonita vista del bosque.

Todos se esforzaban mucho, y sabía lo innecesario de pedir resultados, ninguno quería quedarse con la maldición encima.

Su mirada perdió la usual indiferencia, ahora parecía algo abatida, y sus pensamientos se perdieron con el viento mientas la escénica de la naturaleza abrazaba cada uno de sus sentidos en una deliciosa sensación.

-.-Anna

Siendo el llamado el que interrumpió sus pensamientos, no había ninguna razón para girar, ella conocía esa escénica, la tenia impresa en su memoria. Mas el tono de voz la obligo a observarlo, y al hacerlo se extraño de ver esa seria apariencia.

La Itako no se movió, dejando que sus ojos quedaran fijos en Yho, él la miraba sin decir nada, y por un momento sólo se escucho el viento jugando entre sus cabellos.

Claro que el Asakura cambio de inmediato su expresión para sonreírle a la sacerdotisa con despreocupación.

-.-¿Qué haces aquí?- pregunto indiferente Anna, mirando de nuevo al frente.

-.-Quería verte- dijo Yho como si fuese la cosa mas obvia de mundo.

Anna ahora no quería discutir sobre esa amazona que conocían, y que siempre se abalanzaba constantemente sobre el castaño, así que guardo silencio mientras su prometido se sentaba a su lado.

-.-Hable con Shian

Era como si Yho leyera el pensamiento de Anna, aunque aquello fue como si le tiraran un balde de agua fría a la sacerdotisa, demasiado inesperado, pero mantuvo la compostura.

-.-¿De que?- pregunto simplemente, consiguiendo que Yho sonriera.

-.-Sobre cierta prometida rubia que tengo-

-.-Ah… ¿y?

-.-Le dije que no planeaba tener dos prometidas- dijo Yho sonriendo un poco mas debido a la actitud expectante de la sacerdotisa- Por que yo ya elegí a la persona con quien quiero casarme.

Esas palabras turbaron ligeramente a Anna, su prometido ya había elegido con quien casarse, y ella no estaba segura de entender quien era.

-.-¿Quién es?-

-.-¿Y todavía preguntas?- dijo Yho con calidez, pasando una mano alrededor de la cintura femenina- Annita, nunca dude con quien quiero estar, deberías saber que siempre te escogería sin pensar.

Finalizo cuando atrajo a la Itako delicadamente, consiguiendo que ella recostara la cabeza contra su hombro.

-.-Claro que…-titubeo Yho

-.-¿Qué?- pregunto Anna incorporándose un poco, viendo fijamente los ojos del Asakura.

-.-¿Tú compartes mi idea?-

¿Era eso lo que inquietaba a su prometido? Anna sonrió en respuesta, y no pudo sino sonrojarse cuando fue ella quien se acerco a los labios contrarios.

Un simple beso, pero que para la Itako significaba todo lo que no podía decir en palabras.

En cuanto se separaron, el Asakura sonrió ampliamente debido al bonito rubor de Anna, la cual bajo la mirada algo avergonzada, así que se limito a estrechar ese delicado cuerpo, recostando su mejilla contra la cabeza rubia.

-.-Encontraremos la forma de volver a la normalidad- aseguro Yho, consiguiendo otra pequeña sonrisa de Anna

-.-Ya lo se-

-.-No pienso darme por vencido-

Concluyo, él no quería pensar en posibilidad de perder a su prometida, pero eso era lo que ocurriría si no llegasen a encontrar la cura.

La posibilidad de que el Asakura se rindiera nunca fue contemplada por Anna, además la rubia tampoco quería separarse de él, le gustaba sentir esa agradable y reconfortable sensación.

-.-Ya veras que todo saldrá bien-

Quien sabe si Yho lo decía para Anna, o para convencerse a si mismo, estaba conciente de que ella también se encontraba inquieta, todos lo estaban, aunque el único consuelo que pudo darle fue el de abrazarla con mas fuerza.

Anna correspondió el acto, acurrucándose un poco, sintiendo esa calida sensación, queriendo que por un momento el tiempo se detuviera.

En respuesta Yho cerró los ojos, aspirando ese delicioso aroma que envolvía a su prometida. Sonrió un poco mas, acercándola otro poco.

Le gustaba estar así…como si nada mas importase.

-.-Es mejor que vuelva a ayudarles- dijo Yho sin llegar a moverse.

-.-¿Sabes? hace mucho que no entrenas-recordó Anna- Tu entrenamiento se triplicara.

Fue inevitable para Yho reprimir esa conocida risita, alejándose un poco de su prometida, dispuesto a irse. Aunque primero…

-.-Nos vemos-

…se despidió dándole un suave beso en los labios sin dejar de sonreír.

La Itako se quedo sin decir nada, algo sonrojada por el improvisto movimiento. Claro que al verlo alejarse no pudo evitar sonreír.

Se quedo un momento así, viendo el lugar por donde Yho había desaparecido, permitiéndole a ese apacible viento jugaba con su cabello.

Aunque luego frunció el ceño, ella no se iba a dar por vencida, no tenia planeado alejarse del Asakura, después de todo, Anna Kyouyama, seria la futura esposa del Shaman King.

-.-Hola Annita

Un leve estremecimiento la invadió al escuchar su nombre, y sin pensarlo se paro de golpe, dejando visible el rosario que estaba en sus manos, el cual había sido empuñado duramente al oír esa molesta voz.

-.-¿Qué quieres Hao?- cuestiono con evidente molestia

El mencionado salto alegremente del árbol en que estaba, caminando lentamente hacia la rubia, la cual apretó con fuerza su rosario, amenazando con usarlo ante el más mínimo rastro de peligro.

-.-Veras Annita, te necesito para algo-

Culmino con una fría y burlona sonrisa mientras aparecía el espíritu de fuego…

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

3:30 PM

-.-Amo Yho

Llamo Amidamaru cuando su shaman de detuvo. El espíritu también había sentido esa fuerte corriente de aire, proveniente del lugar en el que se encontraba la sacerdotisa.

Yho mantenía los ojos bien abiertos, y con una expresión ilegible en su rostro, aunque Amidamaru supuso que era angustia.

"Hao"

Pensó el Asakura ante la opresión en su pecho, hacia poco que dejo sola a Anna, así que no estaba muy lejos, mas no se movió, esa desagradable sensación se lo impidió.

-.-Hola Yho- dijo Horo-Horo

-.-Don Yho íbamos a buscarlo- dijo Ryo

Las palabras de sus compañeros pasaron por alto, el castaño tenía una expresión extraña en su rostro.

-.-¿Pasa algo joven Yho?- pregunto Tamao mientras se acercaba

-.-Yho- llamo Manta también preocupado.

Repentinamente el mencionado reacciono al empuñar fuertemente su espada, donde Amidamaru se preparo para posesionar el arma.

-.-¿Qué esta pasando?- pregunto Pilika asustada, colocándose atrás de su hermano.

Por un momento pensaron que Yho los atacaría, sin embargo la idea fue desechada en cuanto este se giro, dándoles la espalda.

-.-Hola Yho

Un gruñido fue la respuesta de la mayoría, ahí frente de ellos estaba Hao Asakura, el cual tenia algunos de sus hombres a los lados.

-.-¿No vas a saludar a tu hermano?- pregunto Hao

-.-¡Cállate maldito¿ahora que quieres?- bramo Ryo

Las posesiones no demoraron en aparecer, sin embargo algunos estaban más sobresaltados por el semblante de Yho, notablemente estaba molesto, y parecía que sólo esperaba una oportunidad para atacar.

-.-¿Qué quieres?- pregunto con recelo Yho

-.-Veras, no me ayuda mucho que destruyeran Jusenkyo- repuso Hao

-.-¡Todo fue tú culpa!- exclamo Chocolove

Si el mayor de los Asakura no quería que destruyeran las fosas encantadas pudo haberlo evitado, siendo él tan poderoso, además Hao fue quien inicio todo ese conflicto.

Y es que, no bastándole con la maldición, también altero el agua para que se quedaran así.

-.-Seguramente- agrego Hao sin interés, dirigiendo de nuevo su atención hacia Yho- Sabrás que no me sirve de nada que te quedes como una chica.

-.-¡Debiste pensarlo mejor antes de estar jugando con nosotros!- reprocho Lyserg

-.-¿Jugar¿Quién esta jugando?- dijo Hao viendo al ingles, para luego caminar con su usual elegancia, deteniéndose a una distancia prudente- Sólo necesitaba que el poder de Yho aumentara, y creo que lo he logrado.

El Shaman de Amidamaru frunció un poco el ceño, su poder se incremento a la fuerza, y todo porque los hombres del otro lo atacaban solamente cuando se transformaba en chica.

Todo esto era porque Hao necesitaba a su otra mitad fuerte, y así poder fusionarse en una sola.

-.-Pero si tu escénica cambia, ya no me servirás de nada-

Parecía que su estúpido hermano menor no diría nada, así que Hao sonrió un poco más, complacido por el rencor que veía en los amigos de Yho.

-.-Siempre he pensado que un buen poder espiritual no se pude desperdiciarse ¿no crees?

Como si temieran que Hao los atacase en ese momento, todos alistaron sus posesiones, aunque Yho sólo frunció un poco más el ceño, sabiendo que lo que vendría no seria un ataque.

-.-¡Miserable, por tu culpa estamos así!- bramo Ryo.

-.-Ustedes no me importan, pero resultan muy entretenidos- dijo Hao

-.-Maldito- musito Fausto

Eso era lo único que necesitaban para lanzar un ataque…

KAAABBBBRRROOOMMMMMM

Todos habían saltado, a excepción de Yho, donde los ataques hicieron temblar la tierra, provocando una la fuerte explosión que levanto una gruesa capa de polvo.

-.-Estén alerta- dijo Ren alistando su lanza.

-.-¿A QUIEN ESTÁN ATACANDO!

KKKRRRAAASSSHHHHHHHH

Sin previo aviso los hombres de Hao atacaron traicioneramente a los Shamanes por la espalda, cosa que pudieron eludir por muy poco.

Yho no se movió, simplemente vio a sus amigos ocuparse con los hombres de su hermano, mientras que él miraba fijamente a este.

-.-¿Por qué no ayudas a tus amigos?- pregunto con falso interés Hao.

-.-Tú tienes algo que quiero- reclamo Yho seriamente- Y lo quiero de vuelta.

-.-Eres muy perceptivo- felicito Hao, sonriendo maliciosamente ante las palabras de su hermano- Y como premio te mostrare que tengo.

Al terminar de hablar, el espíritu de fuego apareció, teniendo en sus grandes manos una jaula; el Asakura mayor sonrió cínicamente al ver la expresión de Yho, el cual frunció molesto el ceño.

-.-¡Doña Anna!

-.-¡Señorita Anna!

-.-¡Anna!

Los demás Shamanes habían olvidado sus respectivos combates al ver a la sacerdotisa encerrada en esa jaula dorada, muy similar a la que usaron los soldados X contra ellos.

Y a pesar de las explosiones de poder espiritual que resonaban en todas partes, Yho se mantenía quieto, viendo como Anna sostenía los barrotes de su celda, mirándolo con aparente tranquilidad.

-.-Déjala ir- ordeno Yho, aumentando su poder espiritual de manera amenazante

-.-Rompe la maldición de Jusenkyo y te la devuelvo- condiciono Hao

Se estaba burlando, su hermano se estaba burlando de él; así que Yho apretó con fuerza la espada, lanzándose contra ese molesto shaman de fuego.

Hao sonrió al verlo atacar, y él no tenía ningún problema en eludir los pobres ataques del castaño, cosa que frustraba bastante a este.

KKKRRRAAASSSSSHHHHH

Al parecer los hombres del shaman de fuego, se estaban divirtiendo bastante con esas peleas, mas hubo algo que llamo la atención de Hao, Ren Tao estaba siendo atacado por la espalda. Sonrió otro poco, miro directamente a su gemelo antes de desaparecer.

-.-Rayos- musito Yho buscando al otro

Por otra parte, el shaman chino no se percato de la presencia intrusa tras su espalda, la cual prometía acabar con su vida.

-.-¡Ren!- llamo Jun

Y al darse cuenta era demasiado tarde para eludir el ataque, coloco su lanza al frente en un inútil intento por frenar el ataque, cerro los ojos sin que fuese su intención, esperando el mortal impacto….que no llego.

-.-¿Señor Hao!

Curiosamente Ren se sintió como si estuviera volando, así que abrió los ojos, viendo lo cerca que estaba el Asakura que lo había alejado del peligro. Consiguiendo que uno de los hombres de este observaba a su señor como si no comprendiera lo que hacia.

-.-Ve a encargarte del resto- ordeno Hao

El Shaman obedeció sin pensar, alejándose de ese lugar. Ahora Hao centro toda su atención en Ren, el cual le miraba con la misma frialdad inmutable de siempre.

-.-Eres muy descuidado Ren- señalo

-.-Eso no te importa- dijo Ren cortantemente, moviéndose para intentar que esas manos que lo sostenían por la cintura lo soltaran.

La acción resultaba inútil, así que el Tao intento usar su lanza, mas su muñeca fue sujetada fuertemente por la mano del Asakura, que sonriente se inclino un poco.

-.-¡HAO!- las exclamaciones de Yho y Horo-Horo lograron que el mencionado girara un poco, viendo como ambos lo atacaban, al parecer muy molestos.

-.-Demonios, es muy rápido- se quejo Horo-Horo al ver que el castaño mayor se les había escapado de las manos, junto con Ren

-.-Te repito Yho: tienes que romper la maldición de Jusenkyo si quieres de vuelta a Annita-

Entre el sonido de las explosiones de poder espiritual, la voz de Hao resonó no muy lejos, así que los dos shamanes vieron como este estaba parado en la mano libre de su espíritu de fuego.

Claro que antes de que pudieran moverse, los hombres del Asakura los atacaron, haciendo que retrocedieran.

Anna apretó un poco más fuerte los barrotes de la celda, viendo como su prometido era atacado sin tregua alguna.

-.-¿Qué consigues con todo esto?- pregunto Anna, mirando a Hao el cual aun no soltaba a Ren

-.-Que Yho se haga mas fuerte- respondió con simpleza

Las acciones de ese shaman le hicieron pensar que quizás si había una cura, pero si Hao pretendía que Yho la buscara en medio de los golpes, le hacia dudar de la efectividad de la situación.

La Itako lo observo, Hao mantenía a Ren sujeto fuertemente por la cintura, a pesar del constante forcejeo del Tao, siendo las llamas quemándole la muñeca las que le obligaron a soltar la cuchilla, terminando así cualquier intento de escape.

-.-No te estas tomando esto enserio Yho- dijo Hao en cuanto el mencionado cayo violentamente contra el suelo

-.-¿Qué no me lo tomo enserio?- murmuro al apoyarse en los codos, mirando a través de algunos mechones de cabello a su interlocutor.

-.-Quizás si mato a alguno de tus amigos reacciones-

Los presentes se tensaron, y los shamanes de Hao sonrieron cínicamente, alejándose para que su señor escogiera una victima.

-.-Veamos…-medito un momento sin dejar de sonreír, hasta que centro toda su atención en Ren- Quizás tú

Horo-Horo gruño sujetando su estatuilla, tensándose al igual que Jun en cuanto Hao tomo la barbilla de Ren mientras aumentaba su poder espiritual.

-.-¡Suéltalo!

Exclamaron el ainu y la taoista en cuanto se lanzaron contra el Shaman, el cual los observo con simpleza, y antes de que pudieran acercarse sus hombres les impedían el paso.

-.-O quizás Anna- divago Hao viendo a la mencionada, ella no parecía ni un poco alterada- ¿Tú que dices Yho¿Cuál de los dos debe morir?

-.-No me preguntes eso- dijo Yho- ¡Nadie va a morir!

De inmediato Aminadaru posesiono la espada tan rápido como Yho se lanzaba contra su hermano, siendo de nuevo los amigos de este quienes le impedían acercarse.

BBBRRRROOOOOMMMMMMM

Claro que ellos no eran lo suficientemente fuerte como para detener al molesto Yho, quien ahora se veía saltando hacia Hao, dispuesto a asestarle un fuerte golpe.

Los demás también le siguieron, y ahora Ryo, Lyserg, Fausto y Chocolove se iban a un ataque directo.

-.-Que insignificantes son- susurro Hao

Las atrayentes y mortales llamas no demoraron en aparecer; Ren se fue un poco hacia delante sin que el otro llegara a soltarlo, viendo como uno a uno sus amigos se estrellaban violentamente contra el suelo.

-.-Esto aun no termina-

Débilmente Yho se fue incorporando, sujetando con fuerza la empuñadura de su espada. Mas sus esfuerzos se esfumaron cuando dos shamenes le sujetaron de los brazos, arrebatándole el arma, obligándolo a que se arrodillara ante Hao.

-.-Mira esto- repuso uno de los hombres de su hermano- Mira como tus amigos mueren

-.-¡YHO!

El resto intento acercarse al Asakura para librarlo, pero el camino se le vio obstruido por esos hombres.

Al parecer Hao se estaba divirtiendo de lo lindo, su siempre cínica y mortal mirada que podría matar con el mas mínimo gesto, hicieron que Anna y Ren se preocuparan.

Hao los observo, siempre tan indiferentes, eso le gustaba, claro que esta vez había un poco de angustia en sus ojos… ¿pero que tipo de angustia¿Acaso por ellos mismos¿O por sus amigos?

Sonrió mas, ya lo averiguaría, y sabía como...

-.-Que arda-

Esas palabras y la exclamación de la sacerdotisa hicieron que Ren ladeara la cabeza hacia donde estaba Anna…la jaula estaba envuelta en llamas.

-.-¡ANNA!- llamo desesperado Yho luego de algunos segundos de no creer lo que veía.

-.-¡DOÑA ANNA!

-.-¡ANNA!

La Itako retrocedió inútilmente, los barrotes ardían en fuego, mas las llamas no llegaban al centro del reducido espacio, se movió un poco, viendo a su prometido con algo de tristeza…estaba asustada.

-.-¡Yho!

Llamo Anna antes de que su imagen se perdiera entre el fuego, el mencionado se quedo sin respiración, su mente se veía incapaz de coordinar algún hecho, ni siquiera se dio cuenta cuando los hombres de su hermano lo soltaron para irse a reunir con su señor, dejándolo sentado en la tierra.

El castaño mayor sonrió con prepotencia, mirando hacia abajo a todos los amigos de Yho que se habían acercado a este, mas no decían nada, estaban igual de impresionados, aunque luego de algunos segundos dejaron paso al rencor y la sedienta venganza.

-.-¡Maldito!

Exclamaron cuando se lanzaron contra el Asakura, siendo los hombres de este los que le hicieron frente, iniciando así una nueva pelea.

-.-¿Cómo pudiste?- pregunto Ren viendo la jaula aun en llamas, para luego encarar a ese desquiciado shaman

-.-No te precipites Ren Tao- dijo sonriente, estrechándolo mas contra su cuerpo- Pronto será tu turno

-.-¡Hao!

Sorprendentemente Horo-Horo había logrado eludir a esos shamanes, donde Jun y Lyserg estaban detrás del ainu.

-.-No estorben-

Ren abrió sus labios sin decir nada al ver la pared de fuego que Hao creo para evitar el avance de ellos, consiguiendo que sus compañeros se fueran contra el suelo.

-.-Anna- llamo débilmente Yho desde el suelo, incapaz de alzar la mirada, la cual estaba oculta tras algunos mechones de cabello.

-.-Amo Yho- dijo Amidamaru preocupado por su shaman

-.-Anna- repitió con rabia, apretando los puños, cerrando fuertemente los ojos

A Hao aquello le llamo la atención, su pequeño y estúpido hermano alzo la mirada con tanto odio que le recordó a él mismo.

Era una curiosa sensación, así que sonrió otro poco, soltado finalmente a Ren, el cual retrocedió unos cuantos pasos.

-.-¡Amidamaru!-

Eso era lo que Hao había estado esperando, sin su espada Yho sólo tenia una solución, y era justamente lo que quería que hiciera.

Mientras tanto, tenia que hacer algo con Ren, ladeo un poco la cabeza, mirando al Tao que retrocedía.

-.-Adiós

En ese momento Ren abrió grandes los ojos, olvidándose por completo de respirar…el ataque había sido lanzado.

-.-¡REN!

La opresión en el pecho, y la angustia en las voces de sus compañeros no fueron escuchadas por el mencionado.

Horo-Horo observaba como el shaman chino estaba envuelto entre llamas y se quedo como si el mundo se le viniera encima, incapaz de coordinar algún movimiento.

-.-¡Fusión de almas!

La exclamación de Yho había sido pronunciada justo cuando Hao había lanzado su ataque hacia Ren, y ahora este último observaba con especial atención a su hermano que no se movía.

Para Yho aquello fue como si se hubiera golpeado la cabeza, todo retumbo en su interior, sintió frió, y no pudo sino caer arrodillado en el suelo, abrazándose a si mismo.

Experimento un molesto mareo, y su vista se oscureció a tal punto que no distinguía nada…se sentía vacío.

-.-Amo Yho

Siendo ese lejano llamado el que le hizo regresar a la realidad, analizo con cuidado a su alrededor, todo estaba en un profundo silencio, y parecía que él era el centro de atención.

-.-Amo Yho

Esta vez Yho vio a Amidamaru, y no pudo sino analizar con sumo interés el espíritu que este tenia prisionero.

-.-Una joven- musito viendo a una muchacha castaña muy apreciada a él, y que ahora mantenía su cabeza agachada.

-.-Muy bien Yho- felicito Hao con ese toque irónico tan característico en él- Veo que finalmente rompiste la maldición

-.-¡Eso no me importa!- exclamo Yho, encarándolo con esa fría mirada tan poco característica en él- ¡Pagaras por lo que hiciste!

Parecía que Yho no tomaba en cuenta ese espíritu que sujetaba Amidamaru, y se dirigió a un ataque frontal contra su hermano.

-.-¡Claro!- exclamo Manta que estaba escondido entre los árboles junto con Pilika y Tamao, Shian

Esta última miraba aterrada los violentos golpes, y la desesperación con la que su Ai Ren atacaba. Bajo la mirada entristecida, en verdad que le afecto la perdida de la rubia. Mas sus divagaciones se vieron interrumpidas por la voz de ese joven tan bajito.

-.- La maldición de Jusenkyo son las almas que quedaron prisioneras en esas fosas encantadas, por eso quien cae en ellas toma una apariencia en particular, por que son esas almas las que poseen el cuerpo.

-.-No importa ahora- dijo Pilika con algunas lagrimas en los ojos- Por culpa de ese sujeto Anna…y Ren…

Seguramente Hao había planeado todo eso, atacar a Yho, quitarle su arma, y por ultimo hacer la fusión de almas con el único propósito de que rompiera la maldición…sin embargo para lograr eso, debía hacer que se enfadara…que deseara matarlo.

El poder que se sentía ahora en el Asakura no tenia comparación con el anterior, sin esa alma posesionando su cuerpo, todo el poder espiritual se había liberado, ya su escénica había vuelto a ser una, su poder ya no tenía que dividirse en dos.

Hao sonrió al verlo acercarse, ni sus hombres pudieron detenerlo, es mas, dos de ellos habían caído en el intento.

Eludió por poco el ataque, sonriendo más, mientras se alejaba todo lo que podía, cosa que le estaba costando trabajo.

-.-¿Por qué no atacas?- cuestiono enojado Yho de que su hermano no le tomara en serio.

-.-Todavía no es tiempo de nuestra pelea- repuso con simpleza, sonriendo un poco mas antes de desaparecer.

Yho quiso alcanzarlo antes de que se fuera, sin embargo ya era demasiado tarde, bajo la mirada derrotado, sintiéndose miserable…le había fallado a su prometida.

Apretó con fuerza los ojos, reprimiendo el inmenso impulso de gritar, cosa que imitaron varios de sus compañeros.

Aunque lo que si no pudieron evitar fueron esa leves lagrimas que amenazaban con derramarse.

-.-Esta vez si me dolió

Mas esa voz entre los matorrales les llamo la atención, nadie se movió, sin embargo las miradas estaban puestas en ese punto específico.

-.-¿Qué les pasa?-

Nadie coordinaba nada, simplemente se limitaban a mirar la estoica figura de Ren Tao sacudir un poco su maltrecha ropa, y retirar algunas ramitas de su cabello.

-.-¡Ren!

El primero en reaccionar fue el ainu, que sin dudarlo se acerco, siendo seguido de Jun, ella reprimió algunas lágrimas sin éxito alguno cuando abrazo a su hermano.

-.-¿Cómo nos haces eso?- reclamo Horo-Horo- Eres un inconsciente

Ren observo al ainu sonriéndole un poco, lo dudo un momento, pero luego le importo poco o nada que todo el mundo le viera cuando le dio un leve beso en los labios.

-.-Perdón- dijo en un susurro Ren, mientras su hermana lo miraba y le sonreía calidamente, abrazándolo de nuevo con fuerza.

Por otro lado, Horo-Horo se quedo de piedra debió al inesperado acto que además de hacerle sonrojar, atrajo algunas risitas de sus compañeros.

-.-¿Y ustedes de que se rien!- exclamo prácticamente gritando Horo-Horo

Yho no estaba muy lejos, sin embargo se veía incapaz de moverse, ahora se sentía muy ajeno de aquella felicidad.

-.-Alguien tendrá que pagar por estas manchas-

Quizás queriéndose aferrar a la patética idea de que su Annita estuviera con vida, Yho giro como un autómata hacia el sitio donde creyó oír la voz de la sacerdotisa, después de todo, si Ren logro salvarse porque Anna no.

Para él todo ocurrió en cámara lenta cuando la rubia salio de entre los arbustos, con algunas hojas en su cabello, y algo de tierra en el vestido negro.

No pensó, no dijo nada, sólo se quedo viendo como ella le miraba con esos profundos ojos negros, y luego le sonreía un poco.

Se acerco despacio, queriendo creer que en verdad era ella, cuando estuvo lo suficientemente cerca la miro fijamente.

-.-Hola- dijo Yho

-.-Hola- respondió Anna

Sonrió, y casi a punto de llorar la abrazo con fuerza, como si nunca quisiera soltarla, por un momento tuvo miedo de perderla…de no volverla a ver.

-.-Estas bien- murmuro Yho, abrazándola por la cintura, hundiendo su rostro en la curvatura de ese delgado cuello.

Anna asintió, colocando sus brazos alrededor del cuello de su prometido, acariciando su cabello, apoyando su cabeza en el hombro de este.

-.-No entiendo- dijo Manta- ¿Por qué Hao no los mato si tuvo la oportunidad?

-.-Vamos Manta es inútil pensar en eso- dijo Ryo no queriendo arruinar el momento

Todo estaba bien ahora, la fusión de almas serviría para acabar con la maldición del todos, y ese desquiciado Shaman de fuego no haría nada por mucho tiempo, o al menos hasta que comenzara el torneo de shamanes.

Hao no tenía interés en acabar con Anna y Ren, después de todo ninguno valía la pena…o así lo creía él.

-.-¡AI REN n0n!

-.-¡Prepárate Yho Asakura, Shia será mi esposa!

-.-Oiga, yo no soy Yho ¬¬, mi nombre es Pilika

-.-¡Hoto-Hoto mi amor n0n!

-.-¡Señorita Anna, señorita Ren ya llego por quien lloraban!

Los shamanes se rieron torpemente ante las personas que se les acercaban, iba a ser un problema deshacerse de ellos u.u, aunque bien podrían utilizar el bien conocido "corre y escóndete"

Yho los miro, pero estaba renuente a soltar a Anna, así que cuando ambos se miraron a los ojos, deposito un suave beso en esos finos labios.

-.-Vamos- dijo tomando la mano de Anna, guiándola hacia donde estaban sus amigos

Ella asintió sin decir nada, ahora finalmente se sentía completa, así que entrelazo su mano con la de Yho, el cual le respondió con una sonrisa, quizás esa sensación calida era compartida por Ren.

Vio al Tao y sonrió al verlo sonrojado y con el ceño fruncido debido al intenso interrogatorio al que ahora era sometido, mientras que el ainu explicaba sumamente avergonzado las preguntas maliciosas de sus amigos.

-.-¡Vamos!

Claro que las preguntas cesaron en cuanto el ainu tomo la mano de Ren, jalándolo lejos, fuera del alcance de esos imprudentes shamanes.

-.-Degenerados- dijo Horo-Horo en cuanto ambos estaban sentados en la rama de un alto árbol- Preguntar esas cosas ¬/¬

Ren asintió silenciosamente, viendo como algunos de sus amigos lo buscaban con la mirada, aunque luego interrumpió sus pensamientos ante esos fuertes brazos que le rodearon.

-.-En verdad eres un imbécil- musito Horo-Horo

Por el delgado tono de voz, Ren supuso que el ainu no se refería a lo sucedido con los otros, así que parpadeo un par de veces, desconcertado por el estado de Horo-Horo, pero no dijo nada, sólo correspondió el abrazo.

Si ese maldito de Hao hubiera matado a Ren, estaba seguro de que lo seguiría al fin del mundo con tal de cobrar venganza. Estrecho mas al Tao ante ese pensamiento, afortunadamente él estaba bien…nada más importaba.

Era una deliciosa y reconfortante sensación, saber que a quien querías estaba ahí para ti, y que no se iba a alejar porque sentía la misma necesidad de estar cerca.

Después de todo, no había una buena razón para estar lejos. Inconcientemente Yho sonrió un poco al ver a Anna…

La sensación que experimento el Asakura, fue compartida por Horo-Horo con respecto a Ren.

Yho sabia que iba a pasar toda su vida con la sacerdotisa, porque al lado de ella cumpliría su tan anhelado sueño, el cual era curiosamente compartido por la rubia…

….tener una vida tranquila, y sin mayores preocupaciones, bueno, todas las posibles para un shaman, pero al fin y al cabo juntos.

FIN.

¡WWWWIIIIIIIIIII n0n¡¡¡I FINISH °¬°! Gomen Nasai por la demora n.nUU, tuve unos pequeños problemas TT-TT, espero que el final les haya gustado u.u, me tomo mas tiempo del que creí para escribirlo n-nUU, es que no se me ocurría como terminar o.o.

Pero¡¡¡¡WWWAAAAAAA TT0TT! Se acabo mi Fic TT.TT que tristeza, así que si les pareció ¿Simple o.o?…. ¿sencillo oÔ?... ¿o irremediablemente malo u.u?...GOMEN NASAI si me tire el Fic con este final TT.TT pero no se me ocurrió otra cosa TT0TT

Deja eso y mejor contesta los Reviewers ¡SI REVIEWERS, REVIEWERS n0n! Personas encantadoras que amablemente se toman la molestia de escribirme n—n no sin antes amenazarme por haber demorarme oO

SEHREN KOU: ¡Konichiwa Sehren-san n0n! Ne hacia mucho que no recibía un Reviewer suyo Sehren-san oO, pensé que ya se había olvidado de mi n.nUU; Gomen Nasai por la demora n.nUU, espero que el final le gustara n—n, como ve si hubo Lemmon o.o, algo pobre oO, pero igual espero le guste n.nUU; espero haya pasado una feliz navidad n—n, bye y que tenga un prospero año nuevo n0n

AIKA ASAKURA: ¡Konichiwa Aika-san n---n! Como ve ya finalmente actualice n.nUU, Gomen por la "pequeña" demora, me alegro que el capitulo pasado le gusta n—n, espero que el fin, del Fic valga la pena Ne o.o, bueno gracias por su mensaje n—n, espero que haya pasado una feliz navidad, y que tenga un muy prospero año nuevo n0n, bye y se cuidad n—n

YUMI TAO: ¡Konichiwa Yumi-san n0n! Si n.nUU, me demore un "poquito" en actualizar, Gomen por eso n.nUU, me alegro de que el capitulo pasado le gusta n—n, no se si me quedo "Kawaii" el final oO, pero como ve esta vez no interrumpieron a Horo-Horo y Ren n—n, haber si el Lemmon que puse le gusta Ne n/n; y gracias por pensar que escribo bien n/n, yo creo que si gaste todo mi cerebro en terminar el Fic, casi ni puedo oO. Wueno, gracias por su mensaje n—n, espero haya pasado una feliz navidad n—n, y le deseo un prospero año nuevo Ne n0n, bye y se cuida Yumi-san n—n

XIN THE GODDESS OF THE DEAT: ¡Konichiwa Xin-san n—n! Gomen por la pequeña demora Ne n.nUU, espero que el final valga la pena TT-TT; bueno, aquí nadie interrumpido a Horo-Horo y Ren n/n, espero te guste el Lemmon, me costo algo de trabajo hacerlo ¬¬, y no se si me salio del todo bien o.o; gracias por su mensaje n—n, espero hayas pasado una feliz navidad n—n, y te deseo un prospero año nuevo n0n, bye y te cuidas Xin-san n---n

VICKYNG: ¡Konichiwa Vickyng-san n0n! Ne no podía matar a Hao o.o, si lo hago luego me matan a mí las fans de él TT-TT, Gomen por la tardanza en subir el Fic n.nUU, espero que el final valga la pena o.o; espero haya tenido una feliz navidad n—n, le deseo un prospero año nuevo Ne n-n, bye y se cuida n---n

JIANNETSUKE-TAK: ¡Konichiwa Jiannetsuke-chan n0n! Me alegro de que el capitulo pasado le gusta n—n, espero que este final tan raro también le guste oO. Como ve esta vez nadie interrumpió a Horo-Horo y Ren n/n, usted me dirá como le pareció el Lemmon oO. Me alegro de que saque tiempo para escribirme °-°, espero este durmiendo mejor o.o Ne, wueno, espero haya pasado una feliz navidad n—n, y le deseo un prospero año nuevo Ne n—n, bye y se cuida Jiannetsuke-chan

¡WWWWIIIIIII n0n¡¡¡HERMOSOS, PRECIOSOS, Y ENCATADORES MENSAJES n0n! Los cuales luego de amenazarme por la demora ¬¬ finalmente pidieron una continuación n---n

Espero que después de dos años de larga espera n.nUU, les guste el final Ne n----n¡¡¡MUCHAS GRACIAS NE n0n! Gracias por el apoyo, porque finalmente se termino esta cosa horrorosa que yo valientemente llamo FANFIC TT.TT ya finalmente se deshicieron de mi TT-TT

Una vez mas Gomen por la demora TT.TT, y GOMEN NASAI por el extraño final TT-TT, no soy buena haciendo finales, así que sean amables con esta pobre niña loca TT.TT.

Agradecimientos a: Jiannetsuke- Tak, Sehren Kou, HaoStar, Florchi, Xin the Godness of the deat, Vickyng

Y a todo aquel que le gusto mi Fic n-----n y no me dejo nunca un Reviewers ¬¬, yo se que existen lo que leen y no dejan mensajes u.u, así que también va dedicado a ellos n---n

Tan malo esta que ahora me odian O.o, amenazas de muerte -.-, tomatazos O.O, sugerencias n-n, o lo que se les ofrezca me pueden escribir a cualquiera de mis correos, los cuales los encontraran en mi profile n-n

SE DESPIDE:

ANN SAOTOMO n—n.

"ES FÁCIL LLEGA A LA CIMA, LO DIFICIL ES MANTENERSE AHÍ"