Sara Lance nació un 25 de diciembre en la ciudad Starling. Era un día frío y toda la ciudad estaba cubierta de nieve. Sus padres, Quentin y Dinah, no habían tenido intenciones de tener una segunda hija, ya que con Laurel ya tenían suficiente. Pero la llegada de Sara fue un intento de salvar el matrimonio que tenían. Quentin era policía. Dinah era enfermera.

Sara tenía tres años cuando con su familia se mudaron a California. Ese fue otro intento de Quentin y Dinah de salvar su matrimonio. Siempre tenían ideas para intentar salvar el matrimonio, pero al parecer nada les funcionó por mucho tiempo.

La vida de California resultó muy buena para Sara. Ella tenía un grupo de amigos con las que mantenía un vínculo muy cercano y hacía toda clase de actividades: hacían surf, andaban en skate, jugaban al hockey en patines. Todos eran muy deportivos y les gustaba la adrenalina. El grupo estaba conformado por: Cindy, Juliana, Katie, Laurel, Thea, John, Leonard, Oliver, Roy y Tommy.

Si, su hermana también era parte de su grupo de amigos. Laurel y Sara eran inseparables y tenían una conexión especial, a pesar de que eran muy diferentes. Tan bien se llevaban que ni siquiera notaban esas diferencias, y cuando las notaban eran porque sus padres las recalcaban. Laurel era responsable y tranquila, Sara era rebelde y desafiante. A Laurel le gustaba la historia y la literatura, a Sara las ciencias y la matemática. A Laurel le gustaba tocar el piano y la guitarra, a Sara le gustaba tocar el charango y el bongó. A Laurel le gustaba cantar, a Sara le gustaba bailar. A Laurel en realidad también le gustaba bailar, pero solamente iba a clases de ballet. Sara había intentado seguir ballet como su hermana, pero lo dejó al poco tiempo porque no le gustaba la disciplina que requería. Así que, mientras Laurel hacía ballet, Sara jugaba al hockey en patines. Pero dejando de lado esas diferencias, ellas también compartían gustos, a las dos les gustaba leer libros sobre súper héroes, de magia y fantasía, y de suspenso; a las dos les gustaba nadar y surfear; a las dos les gustaba andar en skate; las dos coleccionaban cómics y las dos tenían unos canarios de mascotas.

Quentin y Dinah se divorciaron cuando Sara tenía diez años, y cuando Sara tenía once Dinah se fue de California y no volvieron a verla. Los siguientes años fueron difíciles, Quentin recurrió al alcohol por un tiempo, hasta que finalmente decidió encaminar nuevamente su vida por sus hijas.

A los doce años Sara tuvo su primer beso, el cual fue con Leonard. Un beso inocente, más de niños que de adultos. Un beso que fue resultado de jugar al juego de la botellita. Pero después de eso, se daban picos algunas veces y se agarraban de la mano, y hasta en algunas ocasiones decían que eran novios.

Cuando Sara tenía trece años ella y su familia se mudaron a Nueva york, al barrio el Bronx. Su papá había conseguido que un amigo con el que había ido a la academia de policías, Luke Garroway, le consiga un trabajo como detective. Quentin creía que el ascenso de su puesto de trabajo y cambiar de ciudad les haría bien después de todo lo que habían vivido desde el divorcio. Sara no estaba de acuerdo y estuvo enojada mucho tiempo por la mudanza, por ir a vivir a la otra punta del país y por tener que separarse de sus amigos.

Pero una vez que se le pasó el enojo, también pudo disfrutar Nueva York. Ella empezó a concurrir a un centro cultural del barrio, donde iba a clases de artes marciales con el profesor Ra's al Ghul. En esas clases se hizo muy amiga de un chico llamado Magnus y tuvo su primer enamoramiento de una chica llamada Nyssa.

Sara sabía que no todas las chicas gustaban de otras chicas, por eso empezó a investigar. Y al hacerlo descubrió que había diferentes orientaciones sexuales, sexualidades e identidades de género. Ella particularmente se sentía identificada con la bisexualidad, así que empezó a reconocerse como tal. Luego de contárselo a Laurel, ella le regaló una pulsera con los colores de la bandera bisexual, y a partir de eso nunca se la quito.

Gracias al centro cultural también se hizo un grupo de amigos, ya que a cambio de que ella les enseñe artes marciales, ellos le enseñaban a bailar hip hop. Empezaron a compartir momentos y se dieron cuenta que también tenían otros gustos en común, como andar en skate y jugar al hockey, Sara los introdujo en la novedad de jugar ese deporte en patines. El grupo estaba conformado por: Candice, Clary, Izzy, Maia, Alec, Jace, Cisco, Magnus, Simon y Wally.

Aprender hip hop hizo que Sara vuelva a enamorarse del baile y se lo contagie a su hermana. Es así como muchas tardes que tenían libre miraban juntas vídeos en youtube para aprender distintos estilos de baile: break dance, clásico, salsa, reggaeton, tap.

A los catorce años Sara y Nyssa compartieron su primer beso, su primer cita y su primer noviazgo.

Cuando Sara tenía quince años Laurel y ella fueron secuestradas por Damien Darhk. Él era un criminal que el padre de ellas había estado buscando por mucho tiempo. Era un asesino serial conocido por sus métodos de tortura. Damien las torturó, hizo cortes y quemaduras en sus cuerpos, y se entretuvo ahogándolas y dándoles descargas eléctricas. Después de tres días de estar secuestradas Quentin las encontró e intentó negociar con Damien, cambiar su vida por las de ellas. Pero Damien le disparó a los tres.

El problema fue que la única que sobrevivió fue Sara. Ella había recibido el tiro en su hombro izquierdo, pero milagrosamente los médicos habían logrado controlar el daño causado y la revivieron. Pero Sara lo vivía más como una maldición que como un milagro, ella había preferido que la dejen morir para no tener que saber lo que era vivir sin su padre y sin su hermana.

Un año después de eso, Dinah, al ser informada de toda la situación, decidió hacerse cargo de su hija nuevamente. Y así es como Sara, con dieciséis años, se encontró viviendo en la ciudad de Starling una vez más.

Ava Sharpe nació un 26 de noviembre la ciudad de Starling. Era un día de otoño, ventoso y soleado. Ella era la cuarta hija producto del matrimonio de Pam y Randy. Sus hermanas se llamaban Anastasia, Alison y Ashley. Pam era una doctora del ejército y Randy era político.

Cuando Ava tenía tres años nació la quinta hermana, a quien llamaron Amanda. Ava siempre le decía Amy. Desde el principio formó una relación muy cercana con ella, siendo ella la única hermana con la que se llevaba bien. Además, partir de ese momento sus padres decidieron dejar de tener hijas, por más que la búsqueda de tener el tan esperado hijo varón había fallado.

Pam decidió dejar su carrera militar y dejar de ir a combate cuando Ava tenía cinco años. Su madre se cansó de estar lejos de su familia por largos períodos. Desde ese momento comenzó a trabajar simplemente como doctora en el Hospital Militar de Starling.

Randy se convirtió en senador de la ciudad de Starling cuando Ava tenía nueve años. Eso hizo que todo lo que sucedía en su vida pública tuvo que empezar a ser pensado y calculado. Su padre les empezó a inculcar la responsabilidad y seriedad con la que debían manejarse para no perjudicar su carrera profesional ni su imágen.

Ava no se llevaba bien con sus hermanas más grandes. Desde muy chica aprendió que todo lo que pasaba entre ellas era una competencia, donde cada una buscaba tener mayor aprobación de sus padres que las otras. Tal vez era producto de que tanto Pam como Randy eran muy exigentes y duros con ellas, o simplemente porque eran competitivas. Pero sus hermanas siempre la hacían sentir menos, y que nunca podría alcanzar los logros de ellas.

Ella no se llevaría bien con sus hermanas, pero por lo menos tenía un grupo de amigos cercanos con quienes hacían todo juntos. El grupo estaba conformado por: Astra, Kuasa, Mona, Nora, Gary, y Kaupe.

A los once años Ava se enteró que era adoptada, y se enteró por accidente. Ella encontró los papeles de su adopción en el escritorio de su padre, cuando estaba buscando la autorización para ir al campamento del colegio. A ella le dolió enterarse esa verdad de esa forma y no entendía porque sus padres no se lo habían contado desde un principio, tampoco entendía porque habían elegido adoptarla cuando ninguna de sus otras hermanas lo era y eso significaba que ellos podían tener sus propios hijos. Un par de días después, cuando ella los enfrentó demandando explicaciones, le contaron la historia de su madre. La madre de Ava se llamaba Jess y era la mejor amiga de Pam. Jess murió en combate. Como Jess no tenía familia, los Sharpe decidieron adoptarla para darle un hogar. Ellos habían decidido que no querían hacer diferencias entre sus hijas biológicas y Ava, por lo cual habían acordado que esa verdad se la iban a contar una vez que ella fuera mayor de edad.

Cuando Ava tenía trece años, ella decidió presentarse a su primera prueba para estar dentro del grupo de porristas. Todas sus hermanas grandes eran porristas, y ella se había propuesta también serlo para continuar el legado familiar y que sus padres estuvieran igual de orgullosos de ella de lo que lo estaban con sus hermanas. Pero Ava no pasó la prueba, y eso solo generó que sus hermanas siempre la molestaran y le hagan bromas por ello.

Desde ese entonces decidió nunca más presentarse a la prueba y buscar alguna actividad por su propia elección y gustos. Así encontró el amor por el baile y en sus tiempos libres se dedicó a aprender danza clásica y jazz. A los catorce años se presentó a la prueba del club de baile que había en su colegio, y al ser aceptada empezó a ser también parte del grupo llamada Leyendas de Beebo. El grupo estaba conformado por: Amaya, Charlie, Zari, Behrad, Constantine, Jefferson, Mick, Nate y Ray.

A los quince años Ava tuvo su primer beso, con un chico de su colegio llamado Jonah. Con ese beso se dio cuenta que a ella no le gustaban los chicos. A ella le gustaban las chicas. Pero lo mantuvo en secreto. No por sus amigos, ella estaba segura que ellos iban a aceptarla. Sino por su familia, tenía miedo de las reacciones de sus padres y sus hermanas… que la traten de rara, que la culpen de que eso pueda arruinar la imagen pública de su padre…

Cuando Ava tenía dieciséis años fue elegida como capitana de las Leyendas de Beebo por sus compañeros de equipo. Ella se sorprendió, pero aceptó el reto. Al parecer sus compañeros valoraban su responsabilidad y su buena disciplina. Pero ella no se tenía confianza en su forma de bailar, consideraba que era muy rígida y técnica. Esa era un crítica que había recibido muchas veces por parte de algunos de sus padres y hermanas. Y hasta alguna vez por parte de su entrenador Rip, por más que él no se había animado a utilizar esas palabras. Y por más que practicaba y sabía las técnicas de memoria, le faltaba aprender a soltarse y ponerle pasión. Ese era el desafío con el que se encontraba ese nuevo año, demostrar que estaba a la altura de ser capitana y que podía expresar sus sentimientos y emociones por medio del baile.

AN: ¡Hola! No sé si hay muchos lectores que les interese leer una fic avalance en castellano, pero hace tiempo que viene rondando esta historia en mi cabeza, así que voy a intentarlo. Esta primera parte es solamente una presentación de los personajes principales, a partir del capítulo que viene va a empezar la historia y la narración va a ser más fluida ya que va a haber diálogos entre los personajes.

Para que tengan en cuenta va a ser una historia dramática (fan del angst), y Ava y Sara van a tardar bastante tiempo en enamorarse (slow burn). Pero si los deja tranquilos sepan que creo en los finales felices.

Cualquier cosa no duden en escribirme.

Besos.

Pau.