Cosas que son mías: Un chingo de tareas, que me tiene harta. Y deseo de dormir, pero las ganas de escribir son más fuertes.

Aclaraciones: Recuerden que estos capítulos están basados en una cronología de los capítulos de la serie original sacados en Instagram, no sé si es del todo confiable, así que por favor déjense llevar.

Y contestando sobre los comentarios, sobre los Shipp de esta serie, les seré sincera casi nunca me desagrada algún tipo de Shipp, Adrinette es mi favorito, porque despierta ternura y son como la miel de abeja. No puedo darles mi opinión de cada Shipp porque algunos no me he dado la oportunidad de leer (entre escuela, trabajo, y el hogar, me permito leer cuando tengo tiempos libres), no me digo Multishipper por que puedo afirmar que en alguno otro fandom hay Shipp que no me agradan pero es muy raro las ocasiones, en Miraculous, no tengo ninguno desagradable ya sea porque no los he leído o porque tanto en la serie original y en algunos fanfics me han hecho amarlo, es dependiendo mucho mi humor y mis ganas de leer, que me diga, "Quiero leer el Adrigami, o Lukanette o incluso el Shipp de AdrienXLuka o KagamiXMarinette o ChloeXMarinette o ChloeXAdrien, FelixXMarinette, Sabrina con tal, Iván con tal, etc., etc." Es lo bonito de este fandom, y de Fanfiction.

Bueno esto se ha vuelto muy largo, no los aburro más.

¡Nos leemos abajo!

Miraculous: Tales of Ladybug and Chat Noir, no me pertenece solo la trama.

Glaciator

Ladybug adoraba su trabajo, puede que en ocasiones llegue a fastidiar algunas de sus planes con sus amigos o a veces cuando requería un respiro, es decir, no hacer nada por un día, Hawkmoth aparecía con algún villano con sentimientos negativos, las responsabilidades de héroes siempre estaban presentes. Aunque no sea Hawkmoth el motivo del problema.

Como ahora…

Después de perseguir el autobús, Chat no tarda en asomarse por una de las ventanillas del vehículo que iba a toda velocidad por las calles de Paris. Chat le hace señas con sus manos, para comunicarle que los frenos no servían. Ladybug asiente.

- ¿Listo Chat? –dice moviendo sus manos de forma rápida.

-Listo, My Lady. –Ladybug comienza correr por enfrente del autobús, sabía que su compañero había dicho algo más, pero no se permitió en observarle, debían actuar rápido.

Se lanza hacia la calle mientras lanzaba su yo-yo para que rodeara todo el vehículo y sujetarlo, al mismo tiempo que capturaba el bastón de su amigo que había lanzado hacia ella, permite que el medio de trasporte pase por encima suyo mientras enrollaba el cordón de suyo yo-yo al bastón de Chat Noir, cuando el autobús deja de pasar, lanza el bastón a Chat quien lo toma en el aire, y no tarda en activar su bastón provocando que se estire y se atore en dos postes de luz.

Ladybug noto con una sonrisa como el trasporte público paraba, al ser sostenido por los dos objetos. El problema no era producto de alguna Akuma, pero salvar a Paris también incluía problemas menores. Se acerca al vehículo con Chat a su lado, desarrollando su yo-yo, y poco después ambos héroes ayudaban en bajar a las personas del transporte. Nota como Chat mueve su mano para llamar su atención, ladea la cabeza haciéndole ver que la tenía.

Chat comienza hablarle, usando su voz, ponía atención a sus labios, algo difícil cuando la gente pasaba por el rostro de su amigo y no le permitía saber lo que decía. Había captado algunas palabras como "cenar", "tejado" y "superhéroes" pero no sabía su conexión, tenía que desviar la mirada en ocasiones para ayudar a los ciudadanos afectados y regresar al rostro de su compañero, intentando entenderle.

Pero no pudo hacerlo, no había entendido nada de lo que dijo su gatito.

- ¿No te gustaría conocernos un poco más? –logra entender lo final, pero aun no saco su confusión. La pregunta estaba fuera de contexto con las anteriores palabras que había logrado entender.

Ladybug iba mover sus manos para pedirle que repitiera de nuevo, pero un ciudadano (imaginaba que el chofer) aparece en el campo de visión de ambos héroes, ofreciendo su mano y agradecer su ayuda. Eso la hizo recordar que no estaban solos y comunicarse con Chat como acostumbran, era peligroso.

Chat se acerca con una sonrisa confiada - ¿Qué te parece? –le dice aun utilizando su voz, esta vez entendió mejor con su proximidad. Ladybug pensó que se refería a su pregunta, de conocerse mejor, talvez el minino quería que sus pláticas fueran un poco más personales y lo que había dicho era poner excusas de ser cuidadoso a pesar de que quería conocerla mejor. Ladybug lo duda por un momento, pero termina asistiendo con la cabeza con una ligera sonrisa, esperando que no se viera la confusión.

Esperaba que no se equivocaba.

Pero no podía seguir preguntando, porque debía irse rápido. Tenía planes con sus amigos y el cometido de hace unas horas ya le había retrasado para poder comer con sus padres, a pesar de que quería pasar más tiempo con Chat. Lanza su yo-yo en uno de los postes de luz.

-Me tengo que ir, nos vemos. –dice ella usando su voz para luego abalanzarse por las calles de Paris. No había notado de que Chat había mencionado algo más. Que era importante para él.

Al llegar a su casa deshace su transformación, sujeta a su Kwami con sus manos y no tarda en darle sus galletas favoritas. Tikki se lo agradece mientras se colocaba en uno de sus muebles y no llenar su cama de migajas. Marinette se apresura en arreglarse para la salida con sus amigos.

Alya había planeado una salida con Nino, Iván, Mylene, Adrien y Marinette, para ir por los helados de André y no había aceptado un no por respuesta por ninguno de los invitados. Marinette no entendía por qué tenía que ir ella y Adrien, los helados de André eran famosos por que se creía que los helados contenían una magia que unía a las parejas o te daba el sabor de tu alma gemela. Sus propios padres tenían su historia con esos helados.

Algo que se le recordó al final de la cena, cuando tuvo que rechazar su postre favorito y el explicar el motivo. Si comía su postre no podría comer un helado de André. Sus padres no tardaron en contarle otra vez el como su padre había pedido matrimonio a su madre, había escondido el anillo dentro del helado de vainilla que la señora Cheng estaba disfrutando, por poco se comía el objeto.

Toma su bolsa dispuesta a irse con sus amigos, pero el toque de su madre en su hombro llama su atención. –Dicen que las parejas que comen el helado de André estarán enamorados para siempre –le dice moviendo tanto las manos como sus labios, cosa que siempre hacia, le sonríe ante la expresión de soñadora de su madre.

Su padre se acerca a su esposa y la abraza por los hombros. –Por cierto, Marinette, ¿Con quién vas a ir por helado? –le dice usando sus manos también. Marinette no pudo evitar pensar en Chat Noir, ir los dos tomados de las manos mirándose como lo hacen sus padres, con tanta ternura y amor. Mientras disfrutaban del helado que el heladero André había preparado para ellos, porque estaban predestinados. Porque ambos debían estar juntos.

Regresa a la realidad, obligándose en alejar ese pensamiento, de nuevo fantaseaba con su compañero, Marinette había decidido mantener sus sentimientos reprimidos, no quería que volviera a repetirse lo de Primer Queen, su enamoramiento solo era platónico. No podía ser más. También era una salida con sus amigos, no una cita con Chat.

Se encoje de hombros y contestar a su padre –Solo con Alya y los demás, no hay nadie especial –O no puedo ir con quien yo quisiera. Se dice a sí misma, pensando en el rostro de su amigo, de su gatito.

Se despide de sus padres, sintiendo un nudo molesto en el estómago.

~o~

Adrien no evita el suspiro de desilusión, no debería sorprenderse que su padre no viniera acompañarlo a comer, pero las pequeñas esperanzas estaban presentes para luego ser dolorosas. Saca su teléfono mandando un mensaje a Nino, poco después Nathaniel aparece, con su característica seriedad y falta de expresión en su rostro.

-No tiene caso que esperes a tu padre, Adrien. –le dice igual de seria –Él va a comer en su oficina.

Se levanta de la silla un poco malhumorado. - ¿Y cuál es el punto de tenerme aquí siempre, si nunca llega? –dice de forma brusca. Nathaniel no cambia su expresión manteniendo sus brazos detrás de ella. Adrien baja la cabeza yéndose del comedor, alcanza a escuchar a la asistente de su padre, que no olvidara en practicar con su piano antes de acostarse, al llegar a su cuarto cierra la puerta aun sintiendo el malestar.

- ¡Por lo menos hubieras traído un pedazo de Camembert de ese plato! –le dice Plagg flotando cerca de su rostro. Adrien rueda los ojos lazando el queso que tomo antes de irse, su Kwami no tarda en tomarlo.

-Carga energía, Plagg. –Toma su teléfono y lo conecta a sus bocinas, donde la pieza de No.15 in D. Flat Major se reproducía por el cuarto, aparentando que tocaba el piano. –Talvez Adrien no pueda salir de la casa, ¡pero Chat Noir sí!

-Tienes prisa a que te dejen plantado –le contesta Plagg comiendo de su queso maloliente. Adrien le dedica una sonrisa confiada.

-Ella dijo que iría. –le contesta.

-Dudo mucho que te haya entendido, la chica estaba enfocada en los ciudadanos.

Adrien recuerda que su Lady se había distraído en ocasiones mientras le hablaba, pero él estaba seguro que Ladybug le habría pedido que lo repitiera sino hubiera entendido lo que le había dicho. En cambio, ella había afirmado sobre su propuesta, con su ligera sonrisa. Tenían una cita. Él y su Lady, y sería la mejor cita para los dos.

Con esto en mente no tarda en transformarse, a pesar de las protestas de su Kwami, sale de su habitación saltando los tejados de Paris.

La idea de la cita se le había ocurrido unas semanas después de lo que sucedió con Primer Queen, Adrien sentía que debía aclarar sus sentimientos a su Lady y descubrir si sus sospechas de ser correspondido eran acertadas, también era una excusa más de pasar tiempo con Ladybug, tenía el presentimiento de que después de esta cita la cosas cambiarían, su relación cambiaria para mejor. A pesar de que dejara plantado a sus amigos en ir por un helado de André, se sentía mal en dejar a Marinette con las parejas, pero sabía que su amiga no le molestaría, solo se preocuparía por él, pero tenían la noche para hablarse, luego se lo recompensaría.

~o~

Marinette llega al punto de reunión con sus amigos, saluda a Alya y a los demás, Mylene estaba siendo abrazado por Iván por sus hombros mientras Nino estaba atento a su celular, Marinette mira un rato más confirmando que Adrien no estaba.

- ¿Dónde está Adrien? –pregunta de forma lenta con sus manos para que Alya entendiera, su amiga da una mueca triste como si quisiera darle consuelo.

-No te vayas a desilusionar, pero Nino recibió un mensaje –dice igual de lento con sus manos, al igual que pronuncia las palabras con su boca, Marinette ya sabía el motivo antes de que Alya lo digiera –El papá de Adrien no lo dejara salir.

No evito su mueca de decepción, como también estaba preocupada por su amigo. Sabia la relación tan conflictiva de su amigo con su padre, es algunos de los temas que suelen hablar cuando nota como Adrien esta triste a pesar de la sonrisa. Puede que Alya sea su mejor amiga y pasan mucho tiempo juntas, pero Marinette le gustaba estar más con Adrien, ya sea porque con el chico era más fácil de hablar, compartían gustos en algunas cosas y se sentaba juntos en clase, se había vuelto mejores amigos a pesar de cómo había iniciado su relación. Adrien lograba escucharla y entenderla, como ella lo hacía con él. Adrien era muy importante para ella, eso lo tenía claro.

Aunque su cercanía provoco que sus demás compañeros malinterpretasen su amistad. Alya era uno de ellos, su amiga varias veces le había preguntado si había un interés amoroso hacia Adrien, Marinette aclaraba que le quería como amigo y nada más, pero no había convencido del todo a la futura reportera.

-Era de esperase – menciona haciendo sus movimientos algo decaídos. Le mandaría un mensaje más tarde al chico para asegurarse de que estuviera bien. Vuelve a mirar a los demás y después dirigirse a Alya para que fuera su traductora. Había dejado la libreta donde suele comunicarse con sus amigos en clase (claro si Alya o Adrien no estaban presente), ya que había pensado que no sería necesario. Alya iba mejorando con el lenguaje de señas, (se había inscrito a un curso solo para poder comunicarse con ella) pero aun fallaba en confundir los movimientos.

- ¿Saben dónde estará André? –dice Alya, traduciendo las señas de Marinette.

-Lo que pasa con André y su helado –dice Nino, moviendo su mano hacia su gorra haciendo que Marinette lo mirara a él –Es que nunca sabe nadie donde estará –Alza su celular, donde aparecía puntos rojos en un mapa de Paris –Hay que seguir las pistas para encontrarlo.

Marinette sonríe, mientras ponía atención a Iván sobre su experiencia de él y Mylene de encontrar a André, habían tardado tres horas en encontrarlo. Mira a sus dos amigos con más atención, se habían dirigido sonrisas cómplices y seguían abrazados. Sintió como el nudo en su estómago aumentaba y comenzara a incomodarla.

Ellos tenían suerte de poder estar juntos sin pensar en los peligros, podía sentir su envidia hacia ellos desenado que algún día las cosas con Chat pudiera suceder de forma libre como Mylene y Iván. Vuelve a la realidad cuando Nino había mencionado algo que no logro entender, pero ante la expresión de los demás, Marinette se dio la idea de que sabían dónde estaba André. Comienzan a correr y deja que Alya sujete su mano, guiándola a donde se encuentra ese dichoso heladero.

Le hubiera gustado que Adrien estuviera con ellos, hablar con él le había permitido distraerse, y tal vez esa sensación en su estómago habría desaparecido.

Logran encontrar a André, pero Marinette ya no tenía los mismos ánimos de probar el helado, Alya no había soltado su mano así que no podía dar una excusa para poder irse, sentía que sobraba con las dos parejas ilusionadas en probar su helado de enamorados, en cambio ella estaba sola, sin ningún enamorado presente, y a quien le gustaría traer debía mantener su identidad secreta.

Los primeros en acercarse fueron Iván y Mylene, quienes fueron recibidos con gran entusiasmo por André, Marinette estuvo atenta al helado que se le fue entregado a la pareja. Alya le explica que era chocolate Praliné y turrón blanco.

- ¡Una mezcla especial para mantener el amor! –logra entender a través de los labios de André. Marinette creía que el entusiasmo del heladero le encantaba a la gente, pero la sensación de incomodidad aun presente, no la deja disfrutar de ese entusiasmo.

Fue el turno de Nino y Alya, Marinette decide sentarse en uno de los bancos más cercanos, mientras observaba como André les ofrecía el helado de coco, plátano y otra fruta que desconoce. Desvía la mirada desanimada, ese molesto nudo se hacía cada vez más grande y no le gustaba como se sentía. Solo podía pensar en Chat y fantasear en algo que nunca pasara, no con Hawkmoth aun libre haciendo maldades. No se sentía correcto sentir envidia a sus amigos, es decir, era personas normales, ellos no tenían la culpa de su situación, nadie la tenía realmente, solo paso.

Siente un pequeño jalón en su chaqueta, Tikki había salido de su bolsita rosa, Marinette mueve su cuerpo de tal forma que no notara a la Kwami sus amigos.

- ¿Por qué no vas por un helado Marinette? –dice su Kwami atenta a su alrededor por si debía esconderse. Marinette se encoje de hombros haciéndole ver a Tikki que no tenía animo de un helado, su Kwami la mira fijamente. Tikki en ocasiones sabía lo que su cabeza pensaba o en quien pensaba, Marinette no le sorprendido que su Kwami supiera lo que le sucedía –Él no está aquí –Vuelve a decir su Kwami con una ligera sonrisa –Pero eso no te impide disfrutar de un helado y una noche divertida con tus amigos –Le da una ligera acaricia en su mano –Además, yo quiero.

Marinette le sonríe de vuelta, agradecida por sus palabras. Pero ese nudo molesto no parecía querer irse, Tikki se esconde en su bolso alertándola de que alguien las viera, nota como André caminaba hacia ella mencionando algo, perdida voltea hacia Alya quien no duda en repetir lo que André le dijo.

¿Qué tiene el sabor para ella para hacerla sonreír?

Aun confundida mira André señalándose, mientras soltaba las palabras con su boca - ¿Yo?

André la levanta guiándola a su puesto de helados - ¿Cómo te llamas?

-Marinette –vuelve a pronunciar esperando que se entendiera.

André voltea sirviendo su helado, Alya se pone junto a ella moviendo sus manos para comunicarle lo que decía el heladero.

-Durazno como el color de sus labios, y menta como sus ojos, ¡come esto querida! –Alya tuvo problemas para decir "querida" así que lo pronuncio con sus labios. - ¡Y tu amado aparecerá!

Marinette recibe el helado, lo mira tan fijamente temiendo que su única esperanza de un futuro con Chat desapareciera, su gatito tiene los ojos verdes, aunque más oscuros, tal vez a causa de su traje de héroe, pero la menta podía ser una buena referencia, nunca se puso a pensar en el color de sus labios a pesar de que siempre los mira para entenderle. El durazno era una buena fruta. Sentía su corazón palpitarle alejando un poco el molesto nudo. Pensar que el helado describía a Chat, le hacía sentir una calidez expandirse por todo su cuerpo. Ella creía en la magia de los helados enamorados de André sus padres era una prueba de su magia, seguían juntos e igual de enamorados o tal vez un poco más.

Pensar que Chat y ella estaba predestinados le hacía sentir que flotaba.

-Esa descripción parece a la de Adrien –le dice Alya usando sus manos sin usar su voz, solo para que Marinette la entendiera. Con una mirada juguetona para hacer sonreír a su amiga. Pero fue lo contrario.

Marinette sintió como un balde de agua fría era arrojado en su cuerpo y extinguía toda esa calidez, Marinette hubiera preferido que Alya no hubiera dicho nada y la dejara unos momentos en su fantasía, su comparación del helado con Chat se desvanece de su mente teniendo la imagen de su amigo. Era cierto que los ojos de Adrien eran un verde más suave como en la bola de helado a sabor de menta que tenía en frente, al igual que sus labios. Ese molesto nudo aumento tanto que tuvo que morder su labio inferior ante su decepción. Mira André algo desesperada.

Negando con la cabeza, vuelve a usar su voz (hecho que le hacía irritarse más) importándole poco si alzaba mucho el tono –Hay un error. Yo no estoy enamorada y además ya perdí el apetito. –Intenta entregarle el helado, negándose en comerlo. Adrien no era el chico que quería.

André le devuelve el helado mirando a Marinette aun con entusiasmo –Pero claro que lo estas mi pequeña –le sonríe con ternura, Marinette se sentía más incómoda y molesta –Cuando hay amor ardiendo en el corazón. ¡André lo sabe desde el inicio! –André pone su mano en el hombro de Marinette acercándose ligeramente a ella como si compartieran un secreto –Disfruta tu helado Marinette, yo sé que él vendrá –Marinette le entiende como también nota el guiño cómplice de André.

Ese era el problema, Adrien no podía ser la persona que ama, porque ella estaba segura de amar a Chat. El helado no era el indicado, Adrien solo era un amigo.

Intenta de nuevo regresársele el helado, pero una figura conocida llama su atención, por un momento creyó ver a Adrien acercándose a ellos, sintió como se paralizaba y sentía sus mejillas sonrojarse de forma ligera. Pero solo era un chico con las mismas ropas de Adrien, no era su amigo. Su corazón estaba palpitando demasiado rápido, y no le gusto la sensación, sintió el empujón de otra persona que había pasado de forma rápida detrás suyo, chocando con ella. Esto provocó que el helado se resbalara de sus manos, cayendo al suelo y se estropeara. Marinette mira el helado unos segundos sintiéndose tan desanimada que deseaba correr hacia su casa e ignorar a todo el mundo en el confort de su habitación. Volta a ver André que tenía una expresión de angustia y decepción.

-La magia solo funciona si lo comes –le dice de forma rápida que aun así logro entenderle –Te preparare otro.

Marinette se negó de nuevo, pero André no parecía escucharla, al aparecer seguía insistiendo que sus helados unían parejas de forma mágica que hasta los famosos lograron unirse, que debía tener fe en la magia de los helados de André. Marinette desvía la mirada comenzando a hartarse de esos helados mágicos por más que digiera con su voz que no tenía ningún enamorado André decidía ignorarla, mira a Iván quien tenía curiosidad del chico de ojos menta. O eso entendía.

Harta de todo deja que sus emociones actúen.

-No es nadie –no le importaba si alzaba mucho la voz o no, o si se lograba entender, al final parecían no escucharla, mira a Alya un poco molesta de forma rápida, continuando –No hay nadie. –Mira a André de reojo –No creo que tu helado tenga poderes mágicos André. Solo es helado.

Camina sin mirar a nadie, no le importo si fue grosera en ese momento, ni que haya herido a André con sus palabras, se permitió ser egoísta, sentía como su corazón había sido lastimado. Al llegar a casa se dirigió directo a su cuarto esquivando a sus padres, se dejó caer en su cama abatida. Al relajarse un poco del mal rato de hace unos momentos, sintió como la culpa remplazaba su egoísmo.

Había arruinado la velada de sus amigos, por un helado y sus sentimientos conflictivos. Y para el colmo fue demasiado grosera con André quien solo había intentado subirle el ánimo a su manera, y se había enojado de forma ridícula con su amiga Alya. ¡Era tan patética!

Comienza a patalear en su cama frustrada, para luego abrazar su almohada. Su Kwami se pone enfrente y comienza hablarle.

-Tranquila Marinette, tal vez exageraste un poco. Pero ya olvídalo mañana será otro día –dice con sus pequeños labios. Marinette desvía la mirada acercándose a su tabla donde miles de fotos de Chat eran exhibidos aun lado de su cama, hace un ligero movimientos que sabe que su Kwami entendería.

-Nunca podre tomar un helado con Chat –sus manos mostraban lo desanimada que se sentía. Tikki intenta volver a decirle algo posicionándose enfrente de ella nuevamente, Marinette niega con la cabeza levantándose y subir a su tejado por la trampilla de su cuarto. No quería hablar con nadie, no quería ser más patética de lo que se sentía.

~o~

Chat Noir comienza a pagar todas las velas del tejado que había decorado para su Lady. Tanto esfuerzo y cuidado para nada, había esperado por horas, mirando por todos lados esperando ver a la heroína vestida de Catarina balancearse hasta él. Pero no paso. Lo había dejado plantado, y no sabía el porqué, pensaba que talvez su Lady había tenido un imprevisto, pero le hubiera avisado, ella siempre lo hacía cuando no podía ir a sus patrullas, no entendía por qué no había venido.

Apaga cada vela pronunciando las palabras "No me quiere" y "me quiere", hasta llegar a la última con la palabra "no me quiere", no pudo terminar de pronunciarlo como tampoco pudo apagar la vela, temeroso de que de que sea cierto. Suspira recargándose en la barandilla del tejado, sintiendo demasiado triste y decepcionado. Hasta que una luz del edificio cercano llama su atención, era la casa de Marinette, la panadería ya había cerrado pero las luces de la parte de arriba aún estaban prendidas, sobre todo en el tejado donde estaba su amiga igual de recargada en la barandilla.

Hablar con Marinette siempre ha sido muy reconfortante, es decir, con ella podía hablar de cualquier cosa, parecía que ella siempre sabía que decirle y como apoyarlo, era su mejor amiga, su relación había mejorado tanto, que normalmente estaba juntos la mayoría del tiempo, era divertido y cómodo estar con ella. Marinette era alguien importante para él.

Para Adrien.

Como Chat no había hablado más que el episodio de Volpina, cuando creyó que la perdería al ser lanzada desde la torre de Paris, pero solo fue una ilusión, muy realista. No estuvo tranquilo hasta que fue a comprobar que su amiga estuviera bien, tuvo que fingir que no sabía de su condición, hasta que ella lo aclarar usando su lenguaje de señas, se permitió hablarle como lo hace en su escuela.

Solo fue una ocasión que su identidad de súper héroe cruzo palabra con su mejor amiga. No había confianza suficiente entre Chat Noir y Marinette, para que decidiera ir hasta su casa y platicar con ella como lo hace en la escuela. Aun así, la conocía y no quería estar solo, de forma sigilosa (mas por costumbre que precaución) se acerca por la parte de atrás del edificio, la chica no había dado inicio de haberlo sentido así que Chat se deja caer en la barandilla con tal de tener la atención de Marinette.

La chica se sobresalta, mirando la barandilla dudosa y luego mirar detrás suyo donde estaba él.

-Buenas noches –dice moviendo sus manos, Marinette lo observa con sorpresa marcada en su rostro –Perdón, no quise asustarte.

- ¿Chat Noir? ¿Qué estás haciendo aquí? ¿No tienes cosas de superhéroes que hacer? –le pregunta con un ligero temblor en sus manos al moverlos ¿Tendrá frio?

Niega con la cabeza ante la pregunta –No tengo ánimos de ser superhéroes esta noche –Marinette frunce ligeramente su ceño, Chat sabía que la chica estaba preocupada, suele hacer esa cara con él en la escuela. Continua en hablarle con sus manos. –Y tampoco tengo ánimos de estar solo –le dedica una sonrisa avergonzada - ¿Me permites estar un rato aquí contigo?

Marinette le devuelve la sonrisa, asistiendo con la cabeza. Chat se posiciona a un lado de ella un poco más cerca, sin dejar de mirarla para que pudiera entenderlo.

-Marinette, ¿cierto? –habla esta vez con su voz, dejando que una de sus piernas colgara de la barandilla y la otra se doblara hasta su pecho y pudiera recargar su brazo en su rodilla, no deja de mirar a Marinette –Eres la chica que uso de ilusión Volpina, ¿no es así?

Marinette vuelve asentir sin moverse de su posición, con un ligero sonrojo en sus mejillas. Talvez si tenga un poco de frio. Marinette mueve sus brazos de forma rápida y temblorosa, aun así, logro entenderle.

-Sí, esa chica creía que también estaba enamorada de mi amigo –Marinette cambia su expresión, como si se apagara, como si hubiera recordado algo no agradable. –Aunque no era así, solo tuve mala suerte.

-Te entiendo –susurra, algo melancólico –Yo también he tenido mala suerte en el departamento del amor. –Noto el sobresalto de Marinette, fija en él, con una expresión que no logro descifrar. La chica pregunta el porqué, con movimientos lentos y aún más temblorosa - Por qué esta noche plañe una sorpresa especial para … -calla, recordando que a pesar de que era Marinette, debía tener cuidado con lo que dice, todo relacionado con Ladybug debía ser secreto. Su Lady, tiene una imagen de ser una súper heroína de pocas palabras y siempre enfocada en su trabajo, toda relación que tiene solo es profesional, si decía de su enamoramiento hacia ella, el esfuerzo de Ladybug por negar algún amorío entre ellos, podía afectarla, Marinette no lo diría a todo el mundo, pero puede tener un desliz con Alya la creadora del LadyBlog. –Una chica que me gusta desde hace tiempo.

Marinette no dice nada, Chat regresa la mirada a las luces que gobierna en Paris, pensando en Ladybug. Siente como Marinette se recarga en la barandilla nuevamente, un poco alejada de él, debió sentir su mirada en ella porque lo observa con una sonrisa apagada y algo desanimada… no, era triste. Se la devuelve con el mismo sentimiento y ambos miran las calles de Paris. disfrutan el momento por unos segundos, hasta que Marinette toca su hombro.

- ¿Cuál era la sorpresa especial? –Chat suspira negando con la cabeza.

-Ya no tiene importancia –Marinette le dedica una mirada de consuelo, que el agradece. –Ella nunca llego.

Marinette desvía la mirada, para que poco después continuar con sus movimientos lentos y ya no temblorosos. –Parase que tú y yo necesitamos que nos levanten el ánimo.

Chat la mira incrédulo, entendiendo ahora esa sonrisa triste. Toca el hombro de la chica con tal de que lo mire, y hacer la pregunta con las señas - ¿A ti también te rompieron el corazón?

Marinette se encoje de hombros con esa sonrisa triste, y desviar de nuevo la mirada. Chat sonríe con sinceridad, colocando su otra mano en el hombro derecho de la chica y así sujetarla con sus dos manos. Marinette lo mira confundida, Chat baja del balcón, comenzando a hablarle.

-Ven conmigo –dice ofreciéndole su mano, soltando sus hombros. Marinette mira su mano por un momento y luego a él, como si tuviera una pelea interna. Al final le sonríe aceptando su mano, Chat la acerca hacia él y termina cargándola, su brazo derecho sujetaba su espalda y la izquierda debajo de las rodillas. Marinette lo mira aun confundida, pero el súper héroe solo le dedica una sonrisa confiada tan común en él –Cierra los ojos y no los abras hasta que te diga –Comienza a tomar impulso. –Sujétate fuerte.

Marinette sigue sus indicaciones rodeando sus brazos en su cuello y cerrar los ojos, al mismo tiempo que se recargaba en su pecho. Lleva a la chica al tejado donde preparo la sorpresa para Ladybug. Deja a Marinette por unos segundos confiado de que no abrirá sus ojos, mientras volvía a reacomodar todos los arreglos. Cuando termino toca el hombro de Marinette indicándole que podía abrirlos.

Vio como Marinette observaba cada detalle con una expresión de sorpresa y fascinación, miraba las luces que daban el ambiente romántico para la ocasión, los pétalos de rosas en el piso del mismo color de rosas que regala a su Lady para obtener una sonrisa suya. Las mismas rosas que Marinette guarda y atesora en su cuarto, pero esa parte Chat Noir no lo sabe.

Le da la espalada a su amiga deseando que fuera Ladybug quien mostraba ese rostro fascinado y no Marinette.

-Lo siento mucho –la voz de Marinette le sobresalta ligeramente, la chica nunca usa su voz. Tal vez era la primera vez que lo escuchaba a pesar de sentir familiaridad, de nuevo deseo (después de varios meses) que Marinette fuera su Ladybug.

La mira - ¿Por qué? No es tu culpa –le contesta algo cortante, tratando de alejar esos pensamientos. No podía estar comparando a dos de sus amigas, no estaba bien para ambas.

-Lo digo por esto –seguía usando su voz, susurraba, pero alcanzaba a oírla bien –Preparaste todo esto y ella… nunca llego –Había algo en su tono que se asemejaba al enojo. Normalmente cuando la chica se enojaba su ceño se fruncía más de lo normal y al igual que sus labios, era muy firme con sus movimientos de manos. Como si estuviera gritándote. Era algo parecida a Ladybug, Se da un golpe mental, regañándose.

-Ella dijo que vendría –le dice sin volver a darle la espalada –Pero al final no apareció.

Marinette se acerca a él, quedando frente suyo. Tomando sus manos y apretársela ligeramente.

-Quizá tuvo una buena razón para no venir –murmuraba esta vez manteniendo sus manos unidas –Como … un problema serio.

-Solo dices eso para que me sienta mejor. –dice con un ligero suspiro, desviando la mirada por un momento. Marinette iba a decir algo, pero él no la dejo jalándola y colocarla detrás de él y protegerla de esa bola de helado color rosa que se había dirigido hacia ellos, la desintegra con ayuda de su bastón al momento de hacerla girar, no tarda en cargar a Marinette y se esconden del villano.

- ¡Marinette escucha bien! ¡Eres muy malhumorada! ¡Glaciator te hará un favor y no te preocuparas por nada! –canta el gigante de helado mientras buscaba a Marinette. Voltea hacia la chica que no sabía lo que pasaba.

- ¿Glaciator? ¿Otro supervillano enojado contigo? –pregunta preocupado ¿Cómo es que la normalmente tranquila Marinette logra enfurecer a dos villanos? La chica mira de nuevo al gigante, su rostro cambia de confusión a compresión. Como no podía usar sus manos para hablar por estar sujetada a él, continua en usar su voz.

-Es André, el heladero.

- ¿El heladero de los enamorados? En este momento no se ve muy amoroso.

Marinette baja la mirada como si estuviera avergonzada –Es una larga historia.

Chat no pierde tiempo en esquivar al gigante y sin ser vistos consigue dejar a Marinette, abre la trampilla que sabe que dará directo a su habitación. Mientras el escucha el canto del Akuma.

-Voy alejarlo de ti, princesa. –le dice usando el apodo que le dio la primera vez que se hablaron con su identidad de superhéroe.

Solo dio dos pasos hasta que fue detenido por su cinturón. Marinette lo había detenido.

-Gracias por levantarme el ánimo –murmura un poco nerviosa Chat se encoje de hombros.

-Me alegro que alguien le gustara la sorpresa –lo dice con el lenguaje de señas. Cuando Marinette lo suelta, se lanza por el tejado para mantener al nuevo Akuma fuera del alcance de su amiga. Aunque esta vez no estaba muy contento en tener que ver a Ladybug.

~o~

Marinette no tardo en transformarse, después de obtener un abrazo en su mejilla de parte de su Kwami, era una forma de consolarla con todo lo que paso hace unos momentos.

Chat estaba enamorado de otra chica, de alguien quien no era ella.

Cuando lo dijo, sintió como su corazón se partió, se había sentido mareada, pero no se permitió llorar. No cuando su compañero, su amigo estaba delante de ella con el corazón igual de destrozado. La sorpresa que había preparado a esa chica, había sido tan hermosa que no entendía como esa chica misteriosa lo había dejado plantado. Si Marinette fuera la enamorada de Chat, hubiera asistido sin falta, lo habría llenado de besos a su gatito producto del entusiasmo y alegría.

En el balcón mirando las velas y la rosas, se permitió soñar con que todo eso era para ella. Se permitió disfrutar de esa calidez que no le pertenecía, el segundo balde de agua fría había sido arrojado hacia ella, cuando vio a su amigo tan triste, devastado. Un corazón roto.

Aleja esos pensamientos tan amargos, mientras se dirige hacia el Akuma, debía tener la mente relajada, no podía distraerse de su deber. Antes de llegar noto como un auto de policía era arrojado por Glaciator, miro con mas atención, notando a su compañero también en el auto. No tarda en hacer con su yo-yo apoyado en dos postes para crear una telaraña capturando a Chat y evitar que se lastimara.

-Hola gatito –dice con su voz, ya que sus manos sujetaban la cuerda de su yo-yo - ¿El villano te dejo frio? –bromea a pesar de que aun su ánimo no era el indicado.

Chat rueda los ojos… ¿enojado? –Cuéntame ¿A ti se te congelo el tiempo? –Ladybug ´parpadea confundida, Chat estaba enojado con ella. Pero…. ¿Por qué?

Siente el movimiento del suelo, como si un camión pasara y provocara pequeños temblores a su alrededor, mira hacia el Akuma quien se acercaba hacia ellos, maldice internamente, no sabía lo que decía tendrá que usar a Chat de traductor. Glaciator lanza sus bolas de helado hacia las personas, con horror se da cuenta que esta terminan congeladas, baja a Chat de su red y ambos se mueven para mantener a los parisinos a salvo, refugiándolos. El Akuma vuelve atacar y ambos héroes son obligados a esconderse.

-El helado sale disparado de su mano. –le dice a Chat moviendo sus manos tratando de hacer memoria con su mal encuentro con André –Antes de ser akumatizado, servía sus helados con un… -Marinette deja de hacer señas, olvidando como tenía que hacer la seña del artefacto - ¿Cómo se llama?

-Una cuchara de helado –dice Chat sin usar sus manos y aun dedicándole una mirada seria –Ahí es donde debe estar el akuma.

Chat comienza a correr y Ladybug se da cuenta que Glaciator los encontró, esquiva los proyectiles, separándose de su compañero malhumorado.

¿Pero qué rayos le pasaba? ¿Por qué ese trato con ella?, decide ignorar el problema, luego hablaran con más calma, había un Akuma que vencer.

Vuelve a reunirse con Chat en uno de los tejados más cercanos, observa a Glaciator después de dedicarle una mirada confundida a su compañero, nota como el Akuma deja libre a una pareja, sin intensión de atacarles. Entonces tuvo una idea, era bastante lógico, era el heladero de los enamorados, a las parejas no las atacaba porque creía en el amor. Mira a Chat que estaba apoyado en una de las chimeneas con los brazos cruzados, fingir ser enamorados era la cereza en el pastel, para este día tan… peculiar. Pero Paris los necesitaba, luego lidiara con sus sentimientos.

-Parece que está dejando las parejas escapar –le dice utilizando sus manos con una mirada juguetona, ignorando el nerviosismo en su cuerpo.

-Lastima por nosotros –contesta Chat, seguía sin comunicarse con ella como normalmente lo hacen, incluso volteo el rostro como si intentara ignorarla. Se acerca con tal de continuar con su plan.

-No lo entiendes –trataba de mantenerse tranquila, pero la actitud Chat la estaba desesperando –Sabemos que no ataca a las parejas así que podríamos fingir… -deja de mover sus manos ante la mirada molesta e indignada de su compañero.

- ¿Fingir, que? –Ladybug no sabía si continuar. Algo le decía que empeoraría las cosas, pero debían actuar, continuo.

-Que estamos enamorados –dice algo dudosa con sus manos. Chat entrecierra los ojos.

-Lo siento –contesta Chat, descruzando los brazos. –Yo no juego los sentimientos de los demás. –Chat se lanza hacia el Akuma sin permitirle decir más.

¿Qué no jugaba con los sentimientos de los demás?

Frunce el ceño.

Entonces… ¿Por qué le regalaba flores? ¿Por qué coqueteaba con ella cuando estaba interesado en otra chica?

Quien debería estar molesta era ella, no él.

Deja que Glaciator golpe a su compañero y le arrebate su arma, cuando noto que estaba a punto de lanzarle un helado gigante, decide ir ayudarlo posicionándose enfrente de su compañero, utiliza su yo-yo, haciéndolo girar y usarlo como escudo.

- ¿Por qué estás tan molesto? –pregunta, sabía que había elevado su voz, al sentir las vibraciones en su garganta. Traga intentando modificar su tono. Chat le dice algo, pero no alcanza a verlo por estar enfocada en el Akuma. –Sea lo que sea que te tiene tan molesto conmigo, lo siento. Pero no es el momento para hablarlo.

Glaciator brinca hacia ellos, ambos héroes actúan rápido ocultándose en uno auto que estaba volteado, las llantas rozaban sus cabezas. Ladybug estaba alerta por otro ataque, pero la mano de Chat tomo su atención. ¡Al fin habla con ella con señas!

- ¿No sabes por qué estoy enojado? –Ladybug niega. Chat la mira a los ojos como si buscara la mentira en ellos, a pesar de sentirse algo herida por la desconfianza, no le aparto la mirada –No llegaste a nuestra cita –continua, siendo claro con sus manos –Tu dijiste que vendrías cuando detuvimos el autobús, te había preparado una sorpresa.

Ladybug se queda en blanco, por unos momentos, hasta que llega las palabras "cenar", "tejado" y "superhéroes" a su mente como también "¿No te gustaría conocernos un poco más?" recordó la sorpresa especial que Chat le mostro a Marinette, ese detalle romántico por la chica que le gustaba a Chat. La chica que estaba enamorado su gatito. Sintió la calidez abrazarla por todo su cuerpo como el sonrojo en su mejilla, abrió un poco más los ojos con la sorpresa marcada en su rostro, mirando a Chat como si fuera un sueño.

La sorpresa era para ella, los detalles románticos, las velas, y las flores eran para ella.

Ella lo dejo plantado.

-Lo siento mucho –dice, lento con sus manos, arrepentida y llena de culpa. –Cuando lo dijiste no te había entendido, estaba distraída y no pude comprender lo que decías. Lo lamento –las emociones de nuevo la estaban dominando. El temblor bajo sus pies, la enfoca en su situación - ¿Podemos hablarlo después?

Chat asiente, encogiéndose de hombros. –Sera en otra ocasión – le dice aun decaído, se asoma para observar el villano, para después regresar con ella. –Deberíamos probar tu idea. –Ella asiente, mientras su gatito volvía a sonreír.

Ambos salen de su escondite dándole cara al Akuma. Chat le ofrece su mano, Ladybug lo acepta, pero decide pasarlo por sus hombros manteniendo entrelazado sus manos, verlo con sus amigos hace unas horas fue que decayera su ánimo, por fantasear algo que no creía posible, aun no era posible, ahora tenía la excusa de estar así con Chat, de forma más íntima, para evitar el ataque de una Akuma. Más vale aprovechar.

Recarga su mejilla en el pecho del chico mientras le dedicaba una sonrisa. Ambos caminan hacia el akuma, se lo que sea que Hawkmoth le digiera, provoco que los apuntara. Ladybug alerta decide ser más osada, le da un beso en la mejilla muy cerca de los labios, del chico. Chat la mira sorprendido, Ladybug se encoje de hombros como respuesta mientras volvía a recargar su mejilla en su pecho. Chat mantiene el abrazo, acariciando los dedos de ella con los suyos.

Ladybug realmente no iba a desaprovechar este momento, porque algo le decía, que, aunque las cosas con Chat parecían corresponderle, debía mantener sus límites.

Se supone que todo era platónico, ¿No?

~o~

Al estar más cerca del akuma Ladybug se separa de él, (muy a su pesar suyo), lanzando su yo-yo dentro de la Akuma, Nota como su lady hace una mueca de sorpresa.

-André no se convirtió en monstruo, él está dentro del monstruo –dice en voz alta, muestra de su sorpresa. Poco después Ladybug fue lanzada por el Akuma, Chat no tarda en atacarlo cortando las piernas del gigante con su bastón, da un suspiro de alivio cuando ve a su compañera aterrizar en el suelo, de forma limpia y sin salir lastimada. Chat la sigue para esconderse.

- ¿Qué hacemos? –pregunta. Ladybug invoca su Lucky Charm, donde un casco de motocicleta aparece ante los ojos de ambos héroes, Ladybug lo mira confundida, le dedica una sonrisa recuperando su humor. –La seguridad es primero.

Ladybug rueda los ojos divertida, mirando a su alrededor, luego lo mira cuando al parecer tiene una idea. Comienza a contarle su plan de forma rápida, al parecer tenía planeado elaborara un propulsor que incluía su cinturón.

Después de construir su propulsor con los materiales que les proporciona la cuidad (una motocicleta, una banca, tres letreros atados en su bastón, su cinturón y un autobús volteado), Ladybug ataca al gigante apoyando su yo-yo a dos postes de luz, capturando al Akuma en su red, Glaciator ataca lazando sus bolas de helados, Ladybug los esquiva llegando a la motocicleta haciéndolo andar, activando el improvisado propulsor, le hace la señal y él activa su Cataclismo para evaporizar el autobús que había servido como escudo temporal.

-Acelera –dice haciendo la seña correspondiente. Ladybug lo hace, provocando que el propulsor fuera más rápido, el gigante de helado desaparece dejando a un André colgado en la red del yo-yo. Chat toma la cuchara akumatizada y se lo lanza a Ladybug.

La súper heroína rompe el objeto, capturando el akuma convirtiéndola en una mariposa blanca, después lanza el casco al aire y las catarinas comienza arreglar todo el desastre del Akuma y volver todo a la normalidad.

Chocan los puños festejando su victoria, hasta que André los abraza agradecido, expresando de ser salvado por una pareja de súper héroes enamorados. Mira a su Lady quien se había sonrojado con una ligera sonrisa en sus labios. Chat no puede evitar sentir satisfacción por aquello. Cuando ella lo mira, no tarda en decirle.

-Él lo dijo –pronuncia encogiéndose de hombros.

Talvez tenía que mostrar su sorpresa una vez más, algo le decía que le ira muy bien esta vez.

~o~

Ladybug le pedio a Chat que le mostrar la sorpresa después de recuperar sus energías en sus Kwamis. Cuando volvieron a reencontrarse, Chat la guía al tejado que ya había visitado como Marinette, su expresión de fascinación seguía siendo igual que la primera vez, y mucho mejor. Porque sabía que el detalle era para ella y de nadie más.

Pero tenía que ser realista, el maestro Fu había sido claro con la relación que debía mantener con Chat, no hay posibilidades de estar juntos con Hawkmoth haciendo desastres por Paris, debían protegerse y eso incluía mantener los sentimientos de ambos al límite, en lo platónico. Lo había discutido con Tikki antes de venir, su Kwami le había aconsejado ser prudente con eso, haciéndole ver que con un solo malentendido ambos habían actuado de forma incorrecta, una palea o algo más grave podía provocar el fin de Paris. ambos eran muy jóvenes y se guiaba mucho por sus emociones, debía extinguir el peligro antes de dar el primer paso. El problema era que Marinette sabía que Chat no sería tan prudente si ella aceptaba sus sentimientos, el chico era capaz de buscar a Hawkmoth esa misma noche con tal de estar con ella. Así que llego a la solución de mentir, aunque no se veía destrozando el corazón de su amigo de nuevo.

Chat toca su hombro para tener su atención. - ¿Te gusta?

Ladybug asiente, utilizando sus manos le aclara su gusto –Es hermoso, Chat Noir.

- ¿Te alegra a ver venido? –Marinette lo mira algo triste, no quería fingir, pero era lo mejor. Además, el helado de André no suele equivocarse, aunque ella quisiera que lo hiciera.

-Si me alegro –Su corazón estaba vuelto loco, incluso hacer las señas le salían temblorosas por las emociones, se sentía en una nube, abrazada por esa calidez que solo Chat provoca en ella, no Adrien como dice el helado de André. Ella está segura que su destino era estar con Chat, en un futuro, por ahora no –Quiero ser sincera contigo –le iba a mentir –Porque eres más que mi compañero –alza su mano señalándose –Yo… -lo señala a él –Y tu… -junta sus manos para luego agitarlo levemente –Somos amigos –Nunca creyó que el movimiento de manos, de su película animada favorita, japonesa, le dejara un sabor amargo en su boca. Ella lo uso la primera vez que se conocieron y su gatito la había mirado confundido como ahora. –Por eso no quiero mentirte –pero tenía que hacerlo.

- ¿Por qué hablas de mentirme? –le pregunta cuidadoso con sus movimientos.

-Hay un chico –el movimiento fue aún más temblorosa que antes, no había ningún chico, solo estaba Chat en su corazón. –Un chico que me gusta. Que estoy enamorada desde que lo conocí. –intento no mirarlo, pero tenía que permanecer fuerte –Por eso yo …

- ¿Quién es? –le pregunta acercándose a ella, Ladybug se mantiene en su lugar mirándolo, la había interrumpido tomando sus manos de forma suave, Chat permanecía quieto esperando la respuesta.

Ladybug desvía la mirada algo dudosa, se libera de su agarre sin mucho esfuerzo –No puedo decirte, no podemos saber nada del uno al otro. Nuestra identidad es secreta, somos súper héroes, Chat Noir. –Las siguientes señas lo hace desanimada –No tenemos opción.

Chat se vuelve acercar más, manteniendo su seriedad - ¿Realmente no sientes nada por mí?

No pudo mentir esa parte, porque al hacerlo, se lastimaría a si misma también. Intento desviar la mirada, pero Chat toca su mentón de manera sueva, alzando su rostro hacia él.

-Si no fuéramos héroes y nos conociéramos en forma de civil, con la personalidad que conocemos del otro. ¿Tendría oportunidad?

Se muerde el labio, sintiendo que su corazón explotaría dándole una muerte trágica, embriagada por sus emociones habla a través de sus manos a esa pregunta hipotética.

-Me gustarías y mucho –confiesa –Realmente me gustas mucho, pero somos héroes y también amo a alguien más. Hay que seguir las reglas.

Chat la mira por un rato más, luego le entrega la rosa que estaba sujetando durante toda su conversación. Ladybug la toma con ambas manos.

-Entiendo –le dice, para que poco después le da un beso en la mejilla –Tu amistad es todo para mí.

Después se retira, dejándole la rosa y un sonrojo en sus mejillas con un corazón explotando en su interior. Y a pesar de todo, Marinette sonríe como una enamorada.

Sonríe feliz.

~o~

Adrien se deja caer en su cama, con un suspiro de enamorado.

-Para reparar un corazón roto solo funciona comiendo un montón de queso –dice su Kwami a su lado, Adrien deja se soñar despierto, le contesta.

-No tengo el corazón roto, Plagg

-Genial, entonces no habrá festival de queso –dice Plagg desanimado, pero Adrien aún se sentía en las nubes.

-Mis sentimientos puede ser correspondidos –dice con ligeros suspiros –Ella dijo que le podría gustar y mucho, puede que le guste ahora. Mis sentimientos aún pueden llegar a ella. Mi corazón lo cree, hasta entonces su amistad es el mejor regalo de todos.

Plagg hace un sonido de asco junto con una mueca –¡Este tema dulce me dará asco!

Adrien lo ignora no poniendo atención a sus pedidos de queso del Kwami. Permitiéndose llenarse con el sentimiento de esperanza una vez más, su Lady no lo haría doloroso. Estaba feliz, ella confeso que le gustaba (de forma hipotética claro), aun podía pensar en esperanzas. De dar comienzo a sus fantasías de amor juntos.

La vibración de su celular, lo regresa nuevamente a la realidad, era un mensaje de Marinette preguntando por su bienestar. Sonríe, contestando a su amiga. Esperando que ella también pudiera arreglar su corazón roto.

¿De quién estará enamorada su amiga?

~o~

André conocía de amor, llevaba años en ese negocio, así que sabía identificar las llamas del amor derritiendo el corazón de sus clientes, el jamás falla con la magia del helado de enamorados.

Ver a Marinette nuevamente era la prueba de ello, le preparo su helado que caracterizaba a su enamorado, Durazno como el color de sus labios, y menta como sus ojos, la chica lo probo esta vez y acepto en creer en la magia, la miro sentarse en las escaleras del puente mientras le daba la espalda y saboreaba su helado.

No se sorprendió ver el chico de mirada de menta con los labios del mismo color que el durazno, que al igual que Marinette, el corazón del chico ardía por el fuego del amor, su corazón palpitaba por su amada.

Así era esto del negocio de los helados de los enamorados, era magia, y solo tenías que creer como lo hace Adrien, quien sostenía su helado de fresa con chispas de chocolate, zarzamora como el cabello de su amada y mora azul como su mirada azul cielo.

Tuvo otros dos clientes felices, ambos destinados.

Por qué André, el heladero del amor, no se equivocaba.

Era solo magia.

.

.

¡Al fin!

No sabe el trabajo que me costó terminar este capítulo, ¡Llevo una semana haciéndola! Mis ojos ya no pueden más, entre tareas, la historia, el trabajo y mis necesarios descansos dividirlos entre dormir y leer me tiene agotada. Esto de clases en línea, es demasiado pesado para un universitario… o bueno una universitaria de naturaleza floja como yo.

¿Qué les pareció la adaptación de este capítulo? Fue muy difícil como comenzar con el malentendido de estos dos héroes, y también como acabarlo, hasta soñaba con las escenas. Pero, en fin, son las dos de la madrugada y agradezco que sea sábado.

También quiero compartirle, recientemente vi una película que me impacto mucho, ahorita no recuerdo el nombre, pero me gustó tanto que mi cerebro no dejaba recrear una historia con una trama parecido, pero no siendo el mismo, pensé mucho en que personajes tomar… aun no es nada decidido, por que como verán tengo el tiempo limitado, pero posiblemente vean otra historia hecha por mie en este Fandom, pero protagonizada por un Lukanette. Si como lo leyeron, Lukanette no Adrinette.

Pero no lo tengo decidido ni tampoco bien planteado. El tiempo lo dirá, si es que no se enoja conmigo.

Déjenme sus comentarios, saben que adoro leerlos, y saber si esta historia sigue teniendo futuro.

El siguiente capítulo será: Despair Bear

Sayo.