Miraculous Ladybug pertenece a Thomas Astruc, ZagAnimation, Disney y TF1, hago esto sin fin de lucro.

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Blanc

Por Mimi chan

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— Podremos querernos de nuevo…— las frías manos enguantadas tomaron sus mejillas y la heroína sintió una especie de loco anhelo que nunca había sentido al ver sus ojos azules, helados como hielo – podremos tener un hámster, tú siempre soñaste con tener uno.

No iba a darse ninguna excusa falsa. No porque pensara que Chat lo necesitara. No porque la loca idea que eso pudiera salvarlo, como un día lo hizo con cupido negro.

Marinette tomó sus mejillas frías, mirando sus ojos azules y acercándose lo besó suavemente, dejando que sus propias lágrimas mojaran su rostro.

Esa idea incesante en su cabeza no estaba más. Siempre había creído que Chat amaba solo un antifaz, la idea fantástica de los súper poderes, la heroína invencible. Pero…

Sus manos enguantadas, el tacto frío de su traje blanco la rodearon y sintió escalofríos y un dolor en el alma que parecía que nunca podría desaparecer. Chat amaba a la chica, a la que soñaba con la casa, los niños e incluso el hámster. A ella, a toda ella.

Y le había fallado.

— Lo siento tanto, tanto Chat…— secó el rastro de sus lágrimas marcadas en sus mejillas.

— Marinette – las afiladas garras del gato blanco la alcanzaron a ella, pero ladybug supo que era solo una caricia condescendiente, sin alma incluso — solo necesito los miraculous y…

— Te he convertido en algo, incluso peor que papillon.

— No, tú nunca…

— Te amo.

Como un amigo, como un compañero, como la persona a la que le confiaría su vida, y lo había amado como más, así que no dudaba que eso siguiera dentro de ella.

Y lo amaba incluso ahora que no era el mismo, si solo…

[…]

Lagrimas amargas que olían a hiel le corrían por las mejillas cuando despertó. No podía parar los sollozos que nacían desde su garganta amenazando con ahogarla.

— Marinette… — Tikki fue hasta ella presionando su pequeño cuerpo contra su mejilla mojada – solo fue un sueño.

— No Tikki, no lo fue.

Y Eso es lo que dolía, en su momento le había fallado, cuando había confiado en él no había sido lo bastante fuerte para protegerlo y él solo había acabado con el mundo, y con ella dejándola solo como un montón cenizas y eso no había sido un sueño.

Se sentó en su cama abrazando sus rodillas enterrando su cabeza en su regazo y apretando los ojos fuertemente tratando de no llorar, tragándose ese sentimiento del que nadie podía darle consuelo.

Ahora todo estaba deshecho, pero su fuerte, dulce y simplón compañero con una broma en los labios siempre había sido en un momento solo destrucción y cenizas y ella se sentía culpable.

Ya no existía más que en su memoria, pero pasaría mucho tiempo antes de que esa memoria pudiera dejar de plagar sus sueños en forma de pesadillas.

Fin

10 de enero de 2020

1:15 p.m.

nota de autora: Tuve esta historia en el cel desde que vi el cap y hasta ahora que estaba limpiando archivos recorde que estaba alli. nada mas que decir... mi bebé empieza a ser mas independiente, ya quiero volver a las andadas.