Boom baby! He vuelto y más recargada que nunca (Ojalá que alguien lo lea jajaja) Espero y sea de su agrado.

Me presento formalmente como Maretta, una chica que hace varios años fue Bloody Mary Fire y perdió su cuenta por varios motivos. Hoy he decidido regresa y finalizar una historia que hace tiempo muchos de ustedes leyeron y aceptaron. Ojalá en este ocasión ocurra lo mismo

El fanfic tendrá cambios importantes será actualizado a mi punto de vista en el 2019, es decir mi situación acrual y verídica. Hace riempo cree inconcientemente un OC llamado Ryder y lo pasé como real porque yo lo sentía real. Sufrí de más joven un complejo de distorsión de la realidad y veía todo muy distinto. Pero bueno esa es otra historia.

Disclaimer: Avatar The Last Airbender no me pertenece, sino el Zutara sería canon y este fic no existiría. ¡Disfrútenlo!


Érase una vez en una tierra lejana, una tierra encantada donde vivía una hermosa princesa y su celular recién comprado, revisando twitter como de costumbre, donde vió una foto recién subida de Dante Basco y su chamarra Zutara.

―¡Qué maldito coraje!―casi grité al ver la foto― No puedo creer que enserio ya hayan pasado casi 11 años y yo siga con esto. Pero sé que tengo razón ¡El zutara pudo ser canon!

Está bien, no era una tierra muy lejana, ni encantada sino alguna ciudad de Veracruz en México, tampoco habitaba una hermosa princesa que era una completa dama, pero si era feliz y si estaba quejandose por enésima vez "¿Porque el Zutara no era real?"

Se trataba de una muchacha algo torpe y terca pero de buen corazón y con ganas siempre de seguir, si esa soy yo.

El zutara, lo había apoyado desde el primer momento era mi pareja favorita de todos para mi ellos dos se veían demasiado bien juntos y merecían quedar al final.

Ya muerta de sueño decidí ir a dormir, pues mañana debía ir al trabajo, cuando de repente una estrella fugaz se vió por mi ventana, suspiré y dije en voz alta:

―Desearía que la serie volviera a empezar y poder hacerla zutara

Cerré mis ojos y después de varios minutos concilié el sueño.

Pesadillas tuve, pero lo que me hizo despertar fue el inmenso…¿Frío?

Abrí los ojos de inmediato y me pude ver en una pequeña isla cubierta de hielo y nieve totalmente animada, el paisaje parecía el de cierta caricatura primero lo consideré una locura pero después vi una escena sumamente familiar.

―No se escapará esta vez― habló un joven moreno con una lanza en la mano quien perseguía un pez con la mirada listo para cazarlo ― Ve y aprende Katara así es como se atrapa un pez

Ella le dio una rápida mirada y algo molesta, luego lo ignoró volteó al lado contrario y se quitó un guante, respiró ligeramente y empezó a mover la mano lo que hizo que del agua un pez saliera rodeado de un halo de agua

― ¡Sokka mira!― exclamó la morena emocionada

―Shhhh, Katara los vas a espantar― calló inmediatamente a su hermana menor ―Mmm, ya puedo oler la comida

―Pero Sokka, atrapé uno― replicó mientras seguía moviendo el agua con el pez adentro de un lado a otro, al momento que la chica quiso a cercar el pez al guerrero éste subió su lanza y golpeó la capsula de agua provocando que se reventara y el agua le cayera a él y el pez escapara y una discusión entre ellos comenzara, ya saben la del agua control.

"¿Katara? ¿Sokka? ¡O por dios!" fue lo que pensé inmediatamente" ¡Estoy en el niño en el iceberg! Y Sokka ya era tan gracioso, bueno eso ya nadie se lo puede quitar

Después de la tremenda sorpresa me llevé otra más grande, intenté mover el agua como Katara y sirvió

― ¡Dios mío! ¡Soy una maestra agua! ― grité primero feliz y luego algo decepcionada ― ¡Ah! ¡Yo quería ser una maestra fuego! Bueno al menos soy una maestra

En ese momento me vi en algo peor que eso, me hallaba en medio de una islote de hielo y se supone que Sokka y Katara iban directo a donde estaba Aang la pregunta era ¿Cómo se supone que saliera y fuera a cambiar la historia? Eso es lo que debía descubrir.


Maretta: Bueno al final lo dejé casi igual sólo con una pequeña "actualizaxión" correspondiente a mi vida actual. Sin nada más aue decir me despido

Xoxo, Maretta.