Capítulo 1 Atlanta
La luz entraba a raudales por la ventana abierta, abrió los ojos con lentitud esperando encontrar a Shane de pie a lado de su cama con ese jarrón de flores en sus manos.
Pero no habia nadie en la habitación, se levantó con cuidado, sentía las piernas débiles, como si no las hubiera usado por días.
-Shane, ¿Estas en el baño? –se volvió hacia la mesita de noche y vio que las flores estaban ahí, pero habia algo extraño. Estaban secas.
Miro a su alrededor y vio más cosas extrañas, como que el reloj en la pared no avanzaba y las maquinas médicas.
Los recuerdos llegaron a su mente.
La persecución, el auto volcado, los disparos.
"Shane, no le cuentes a Lori ni a Daryl lo que sucedió ¡Nunca! ¿Entendiste?".
El abrasador dolor en la espalda
"¡Le dieron a Rick!"
La imagen de Daryl en su mente antes de caer en la inconsciencia.
Poco a poco trato de levantarse pero las piernas no lo sostuvieron y cayó al piso.
Se puso de pie con esfuerzo, y apoyándose en la pared logro llegar a la entrada pero al abrirla vio un panorama desalentador e inquietante.
Contra la puerta habia una camilla y el pasillo se veían devastado. Habia papeles por todo el piso e instrumentos médicos tirados alrededor pero no se veía ni una sola persona.
Algunas luces estaban prendidas pero parpadeaban como si fueran a apagarse en cualquier momento.
Comenzó a caminar por el pasillo dirigiéndose a la recepción, tomo el teléfono pero no habia línea.
Se asomó por una de las puertas cerradas y vio a una mujer en el pasillo, con el abdomen desgarrado que tenía tiempo muerta.
Fue en dirección contraria por el pasillo y continúo observando.
El lugar estaba destrozado, habia agujeros de bala en las paredes y sangre en el piso. No entendía que habia pasado pero no habia ni una sola persona viva.
Llego hasta una puerta con un cartel en la parte superior que rezaba cafetería la cual tenía una gruesa cadena y candado además de unas letras pintadas que decía "No abrir, muertos dentro".
Pero vio con sorpresa que las puertas se entreabrían y escuchaba gemidos, de entre las rendijas salieron un par de manos y Rick ya no resistió más.
Salió corriendo. Al abandonar el hospital supo que algo horrible habia pasado. Habia muertos colocados en hileras, cubiertos de sábanas blancas, en el atrio del hospital.
Seguramente se trató de alguna epidemia, o algo peor.
Habia también objetos militares. Autos, tiendas y helicópteros.
Siguió caminando, en ese momento solo le importaba una cosa, llegar con su familia.
No sabía si lo que habia visto en el hospital habia sido solo ahí, o en todo el mundo pero tenía que encontrarlos.
Llego hasta un parque donde vio una bicicleta tirada y fue por ella. A lado de esta habia un cuerpo cercenado que le daba la espalda. Nada más era el torso y la cabeza.
Pero al momento de tomar la bicicleta el cuerpo se movió hacia él. Horrorizado tiro la bicicleta mientras la criatura trataba de llegar a él, gruñendo y estirando sus brazos.
Rápidamente se montó en la bicicleta y se alejó.
Tardo aproximadamente quince minutos en llegar a su vecindario, sobre todo por la debilidad que aun sentía.
Entro a su primer parada, la casa de su hijo pero la encontró vacía.
Habia ropa en la cama, así como puertas y cajones abiertos, como si hubieran salido a toda velocidad. Cada vez con más miedo salió del lugar rumbo a su segundo objetivo. Su casa.
Su pareja y el vivían en el mismo vecindario que su ex-esposa y su hijo, solo a dos calles de diferencia, pero también la encontró vacía y aun mas revuelta que la otra.
Al ver como la mayoría de las cosas de su habitación estaban tiradas finalmente se derrumbó.
No sabía que habia ocurrido, ni donde estaba su familia. Estaba completamente perdido.
Escuchar lo que habia pasado de Morgan y Duane fue un impacto. Estaba horrorizado pero no podía negar que fuera real, no después de lo que habia visto en el hospital y la criatura del parque.
Cuando le hablo del centro de refugiado vio una esperanza. Si su familia estaba en algún lado, seguramente era ahí. Confiaba en su pareja y sabía que habría puesto a salvo a Lori y Carl.
Los tres se dirigieron a la estación para poder tomar un baño y cambiarse. Rick tomo todas las armas que habia en la estación, así como las municiones.
Antes de salir Rick reviso en su casillero y encontró lo que estaba buscando, un pequeño anillo plateado con dos iniciales grabadas en el interior y una fecha.
-¿Un regalo de tu pareja? –dijo Morgan mirando el anillo y Rick asintió.
-Lo intercambiamos en nuestro primer aniversario –le mostro el grabado en el interior –son nuestras iniciales y la fecha de la primera cita.
Se sentaron mientras Duane terminaba de cambiarse en los vestidores. Rick se puso el anillo en el anular izquierdo* y lo acaricio con delicadeza mientras una sonrisa se instalaba en sus labios recordando el día en que habia conocido a su novio.
-Nos conocimos hace tres años, cuando arreste a su hermano por conducir ebrio…Lori y yo estábamos en proceso de divorcio, solo faltaba que salieran los papeles y firmarlos. Fuimos amigos un año hasta que lo invite a salir. Hace un año compramos una casa juntos, a dos calles de la de Lori y Carl.
-¿Cómo sobrellevaron tu ex y tu hijo que salieras con un hombre?
-Carl adora a Daryl como un segundo padre, se llevan muy bien. En cuanto a Lori, ella sabía que era bisexual desde que comenzamos a salir pero no lo acepto tan bien como esperaba. Al pasar el tiempo se dio cuenta que era algo serio así que finalmente llego a un acuerdo con eso. Además, Daryl es una buena persona. Parece un chico malo, con su motocicleta y su ballesta pero es muy diferente en el interior. Es emocional, cariñoso y honesto.
Morgan sonrió al escuchar el sentimiento en la voz del ayudante del Sheriff, pero ya no dijo nada más pues Duane salió de los vestidores y Rick se puso de pie para tomar sus cosas y salir de ahí.
Una vez ya preparados se separaron con la promesa de comunicarse al menos una última vez.
Rick vio al grupo que habia encontrado en Atlanta mientras se dirigían a su campamento con aprehensión.
Habia esperado encontrar a su familia en el centro de refugiados pero no necesito pasar mucho tiempo ahí para saber que tal centro no habia existido y si alguna vez lo hubo habia caído.
Ahora ya no sabía dónde buscar o si los encontraría. Estaba muy preocupado.
Al llegar al campamento vio varios carros y casas rodantes, poco a poco comenzaron a bajar de los vehículos mientras los miembros del campamento los veían y caminaban hacia ellos saludando a los recién llegados.
Rick bajo del auto acercándose al grupo. Entonces vio una persona que le hizo detenerse en seco y que las lágrimas poblaran sus ojos.
-¡Papa! –grito un niño pequeño y corrió hacia Rick quien se agacho para cargarlo
-¡Carl! ¡Carl! –dijo sosteniéndolo mientras las lágrimas corrían por sus mejillas.
Alzo la vista y vio a Shane y Lori parados mirándolo.
-Shane, Lori –dijo acercándose a sus amigos y abrazándolos
-No puedo creerlo –le dijo Shane separándose de él y mirándolo –Rick, hermano…no puedo creer que estés vivo…creí…creímos…
-Lo sé, tranquilo…-finalmente se separó de ellos y bajo a Carl. Miro a su alrededor esperando ver una sonrisa tímida y unos ojos azules brillantes pero no fue así.
Con el miedo apretándole el pecho miro a Lori y Shane.
-¿Dónde está? –pregunto
Ambos intercambiaron una mirada.
-Rick…-Shane fue el primero en hablar
-¿En dónde está Shane? –volvió a repetir pero al ver que no contestaba se desesperó -¡¿Dónde está Daryl?!
-Daryl no está aquí papa –dijo Carl mirando a su padre. Rick miro al niño con el pánico brillando en los ojos –Shane fue a buscarlo pero no lo encontró…
Rick se volvió hacia su mejor amigo.
-Shane…
-Hermano…fue a buscarlo cuando todo comenzó pero…no lo encontré…él se habia ido…
-¿A dónde? ¿Con quién? –dijo mientras las lágrimas se deslizaban por sus mejillas.
Siempre habia dado por hecho que Daryl estaría en el mismo lugar donde Carl y Lori estuvieran y ahora, ellos estaba ahí, pero él no…no sabía qué hacer.
-No lo sé hermano…la última vez que lo vi fue cuando le dije que te habían disparado…él se fue después de eso…creo que te dio por muerto y….
-No –le dijo –Daryl no se habría ido así…el no…no…-se dejó caer al piso mientras trataba de controlar su respiración y sus lágrimas.
-Rick…-Lori se hinco a su lado –lo siento...lo siento mucho…
-Basta…no hables del como si estuviera muerto –dijo el –él no lo está…y no me dejo –miro a Shane –algo más paso…lo se…el está bien…y lo voy a encontrar…-se puso de pie mirando a su ex-esposa –volveré y lo encontrare…
-No –dijo Lori sosteniendo su brazo –no puedes volver a irte, no puedes dejar solo a Carl…no puedes dejarme sola de nuevo, tienes que quedarte…
-No voy a abandonarlo Lori –le dijo –el está afuera…en alguna parte y solo…es mi familia y…
-¡Nosotros somos tu familia! –Le grito Lori – ¡Carl es tu hijo! ¡Y yo soy…! Aun te amo…quédate conmigo…
Rick la miro por un minuto, desvió su vista hacia Shane quien negó levemente. Estaba dividido entre las dos personas que mas amaba, su pequeño Carl y su querido Daryl, pero el sabia que su novio era un sobreviviente mientras que Carl solo era un niño.
Y, aun cuando le doliera, conocía cual habría sido la decisión de Daryl de haber estado en su posición.
-Bien…me quedare, por Carl –Lori le sonrio
-Ven, vamos a la tienda, para que descanses –le dijo sonriendo y lo arrastro hacia la tienda de campaña.
-¿Esta es tuya? –le pregunto al acercarse a ella y Lori le dio una afirmación.
Rick la detuvo y, tras asegurarse que nadie en el campamento la veía le dijo
-Lori ¿Qué pretendes?
La mujer lo miro sorprendida.
-No sé de qué hablas, quiero que descanses en nuestra tienda.
-No es "nuestra" tienda Lori, sabes perfectamente que ya no te amo, que amo a Daryl.
-El no está aquí, y nosotros somos…
-Basta –la miro desafiante –aun cuando decidí quedarme, no dejare de buscarlo porque él es mi familia, igual que Carl es mi hijo…lo siento pero así son las cosas –se alejó de Lori acercándose hacia Glenn quien discutía con T-dog para ver si tenían otra tienda de campaña.
Al negar, Rick decidió quedarse a dormir en el camión que habia conseguido en Atlanta, por lo que Glenn le cedió una bolsa de dormir sin hacer mas preguntas.
Mientras tanto, Shane se acercó a Lori, quien se limpiaba las lágrimas de rabia que habían caído por sus mejillas.
-¿Sigues estando en contra de lo que hice? –le dijo en el oído.
La mujer lo miro y negó
-No…ahora está dolido…pero lo superara y volverá…además tenías razón…Daryl Dixon no era para el…hiciste lo correcto cuando lo alejaste.