Naruto y sus personajes no me pertenecen.

Drabble 8


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First Time

En el que Ino acepta

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Extrañaba a Shikamaru a horrores, contaba los días para volver a verlo y abrazarlo, para besarlo y decirle que lo amaba con infinita locura. Y si no fuera porque la campanilla sonó, seguiría pensando en él.

Y de inmediato frunció el entrecejo al reparar en la figura masculina que acababa de ingresar a la tienda.

—¿Se te ofrece algo, Sasuke? —dijo de mala gana, sin ni siquiera intentar disimular su mal genio.

—Hnm.

Se acercó hasta el mostrador, y una vez frente a Ino, se cruzó de brazos y la miró fijamente. Ino rodó los ojos, restándole importancia; no se dejaría intimidar, claro que no.

—¿Tienes idea de lo que quieres? —puso los brazos en jarra—. Porque el día de hoy estoy muy ocupada —señaló con el cuello un par de vasijas con flores sin armar todavía— y no tengo tiempo para…

—Necesito tu ayuda.

—¿Qué? —abrió los ojos.

—¿Eres sorda? —sonrió de medio lado ante el semblante furioso de la rubia—. Dije que necesito tu ayuda, Yamanaka.

Ino tuvo que morderse el interior de la mejilla para no soltarle una palabrota. Aunque le dirigió una mirada que decía: púdrete, Uchiha, púdrete, púdrete. El joven no se inmutó ni un poco, por lo que Ino tuvo que obligarse a respirar profundo.

Después de unos segundos, habló.

—De todas formas, ¿para qué quieres mi ayuda?

—Hnm —desvió la cara para otro lado, e Ino no supo comprender porqué—. Mi jardín —susurró.

—¿Tu qué? —se inclinó sobre el mostrador para poder escucharlo.

—Tks —chasqueó la lengua—. El jardín Uchiha.

En ese momento, Sasuke se giró hacia adelante. Grave error.

Los ojos oscuros de Sasuke chocaron directamente con los aguamarinas de Ino. Se encontraban demasiado cerca el uno del otro, que Sasuke podía aspirar perfectamente el aroma a rosas del cabello de Ino.

Ino se quedó quieta, observando a Sasuke por lo que pareció ser una eternidad. Luego, fue Ino quien rompió el contacto visual, carraspeando la garganta y volviendo a su lugar, a una distancia más considerable. No, ella prefería evitar cualquier contacto con aquel chico, sobre todo cuando conocía los posibles "sentimientos" de él hacia ella.

No obstante, un jardín era un jardín.

—Yamanaka ¿me ayudarás?

Ella tragó duro. Su pasión y amor le impedían dejar morir un jardín.

—Este… yo…

Simplemente no podía.

—Yo…

¿Qué debía hacer? Sasuke estaba ahí, pidiéndole ayuda, quizá sus intenciones no eran malas, o quizá buscaba una oportunidad mientras Shikamaru estaba fuera de la aldea. Quizá estaba exagerando al imaginar que todo giraba en torno suyo. Porque pudiera ser que Sasuke ni siquiera pensara en ella desde que lo rechazó. Ella reconocía el gran orgullo que poseía.

—De acuerdo.

Aceptó. ¿Qué podría pasar?

Ella amaba a Shikamaru.


N/A:

Mil gracias por leer :D :D

Agradezco enteramente sus comentarios.

(Mi amor hacia el SasuIno me orilló a meter a Sasuke en la historia. Un poco de drama no viene mal, ¿o si?)