DISCLAIMER: Naruto es propiedad de Masashi Kishimoto y esta historia le pertenece a Snow Lily RandomMuch, quien amablemente me concedió su permiso para traducirla. Lo único mío aquí es la traducción y una que otra corrección/modificación. Todos los derechos reservados a sus respectivos autores.

¡Espero que sea de su agrado! n_n


xXx Destiny's Fate xXx

Chapter 1

Una pequeña niña pelirrosada tarareaba animadamente mientras caminaba a través de la nieve junto a su padre por las semiocupadas calles del mercado de konohagakure, sin prestarle atención a la fría brisa que golpeaba su expuesto rostro. La pareja se dirigía hacia la residencia de un importante clan, con la intención de hacer negocios con uno de sus líderes. Rió alegremente, sacando la lengua en un intento de atrapar los suaves copos de nieve que lentamente caían del cielo. Estaba emocionada de finalmente llegar a presenciar su primera nevada, una de las pocas que se producían en el Pais del Fuego. El hombre se rió entre dientes de sus payasadas y tomó su pequeña mano enguantada, instándola gentilmente a caminar más rápido.

"Andando, Sakura. No queremos hacer esperar al jefe de los Hyuga ¿o si?"

La niña volvió sus esmeraldinos ojos hacia su padre. Esbozó una adorable sonrisa y negó furiosamente con la cabeza. Causando que sus cabellos rosa bebé se agiten alrededor de su cara.

"¡No! ¡Eso estaría muy mal!"

Kizashi rió de nuevo, de acuerdo, mientras veía a Sakura apretar el paso por la nieve, tratando de llegar rápido a su destino. Negó con la cabeza, sonriendo divertido, para luego ceder a los insistentes jalones de la chiquilla e ir tras ella, siguiendo su camino rumbo la residencia de los Hyuga.

...~xXx~...

Sakura vagaba sin rumbo fijo por los extensos corredores de la vasta mansión Hyuga, esperando impacientemente a que su padre termine con sus negocios con el jefe del clan, así podrían irse a su casa y jugar. Largó un suspiro arrastrando su pie descalzo por el brillante y límpio suelo del pasillo, pasando otro par de puertas en su exploración por la vivienda.

Cómo deseaba tener a alguien con quien jugar.

No obstante, sabía que casi todos en el complejo debían de estar ocupados y probablemente no estarían de humor- recientemente ha ocurrido un grave incidente, por lo que tal vez todavía debían estar tristes o en shok. Su heredera había sido raptada y alguien murió (o al menos eso fue lo que oyó de su padre)- Y por más que supiera que él querría que se quedara quieta y lo esperara, estaba cansada de permanecer en esa aburrida habitación. Más que eso. estaba aburrida de estar sola. Desesperadamente quería- no, necesitaba tener a alguien con quien jugar.

Suspiró una vez más al doblar otra esquina.-

-y de repente se congeló. Sus brillantes ojos esmeralda se abrieron con sorpresa y curiosidad al captar el suave sonido de alguien llorando. ¡Sonaba como un niño! Agudizó el oído para escucharlo mejor y comenzó a caminar lentamente en dirección de donde provenía aquél ruido. Se asomó por las puertas entreabiertas de cada habitación a lo largo del corredor,pero para su decepción, todas estaban vacías. Siguió revisando más cuartos a medida que el sonido se hacía cada vez más fuerte, hasta que llegó a la última puerta al final del pasillo. El débil llanto se había convertido en un constante sollozo. Sakura se armó de valor y se acercó más para abrir lentamente la puerta deslizante, metió su pelirrosada cabeza y dejó que sus chispeantes ojos escanearan el lugar.

¡Ahí! Percibió a una pequeña figura acurrucada en una esquina de la gran sala- muy parecida a un dojo-. Empezaba a preguntarse si era un niño o una niña, especialmente por el cabello largo. No lo podía asegurar, ya que su rostro estaba enterrado entre sus brazos. Su cuerpo temblaba violentamente debido a la fuerza de su llanto y Sakura no pudo evitar sentirse triste por él o ella. Miró por encima de su hombro, comprobando los pasillos para ver si alguien venía, para luego tomar una decisión y silenciosamente entrar a la habitación. Caminó sigilosamente hacia la silueta hasta encontrarse en frente de ella, ladeó su cabeza con intriga y se decidió a hablarle.

"Oye... ¿Por qué lloras?"

El otro infante levantó de súbito la cabeza al oír su voz y la mirada de Sakura se encontró con los hermosos ojos perla que todos los Hyuga poseían, aunque estos tenían un lindo tinte lavanda. Resultaba ser un niño, que ahora trataba de cubrir su frente mientras se limpiaba las lágrimas y, al mismo tiempo, intentaba encajarle dagas con la mirada a la pobre niñita de tres años de edad. Pero ella ignoró eso ¡Gracias a Kami-sama! ¡Sus deseos fueron escuchados!"

¿Quién eres tú?" Pregunto el niño bruscamente. Ella parpadeó, luego le sonrió y le tendió la mano.

"¡Soy Sakura! ¿Cuál es tu nombre?" Chilló ella alegre. Su radiante actitud parecía sorprenderlo con la guardia baja.

Sus pálidos rasgos reflejaron una extraña expresión que Sakura no pudo comprender. Él no le tomó la mano pero si le dijo su nombre, aunque algo inseguro.

"Soy... Neji"

Ella le sonrió, se arrodilló frente a él y le ofreció un pañuelo que había sacado de su bolsillo.

"¡Encantada de conocerte Neji-kun! Pero sabes, mi mamá dice que no se supone que los niños lloren."

Neji se sonrojó avergonzado por su declaración y y rápidamente se pasó la mano por los ojos, tratando de deshacerse de las ya casi inexistentes lágrimas restantes en su rostro. Esto le causó risa a la pequeña pelirrosa. Él inmediatamente la fulminó con la mirada. Sakura, una vez más, ignoró su hostilidad. Le agarró la mano y tiró de ella, levantándolo en contra de su voluntad y lo condujo hacia la puerta. Sonriendo, lo sacó de la habitación y se hechó a correr por el pasillo.

"¡Vamos, Neji-kun! ¡Juguemos afuera! ¡Esta nevando!"

Dicho niño sólo se limitó a seguirla sin decir nada, pero le tomó la mano en cuanto se dió cuenta de que iban por la dirección equivocada y la llevó por el camino correcto. Sakura rió alegremente en cuanto divisó la puerta corredera del jardín a unos cuantos metros y se apresuró a abrirla, para adentrarse en el blanco abismo nevado de afuera. Se volvió a él y le sonrió traviesa.

"¡Apuesto a que podría vencerte en una pelea de bolas de nieve, Neji-kun!"

El pelicastaño sonrió arrogante.

"Eso ya lo veremos"

Y asi comenzó una guerra entre los dos pequeños.

...~xXx~...

Las risas resonaban por todo el patio mientras Neji y Sakura se dejaron caer cansados, sentádose uno junto al otro en el porche después de todos sus juegos en la nieve. Habían hecho hombres de nieve (o niños de nieve, a juzgar por el tamaño), fuertes y numerosos ángeles de nieve. Tantos, que hasta la mas pequeña parte aislada del jardín estaba cubierta por ellos. Sakura sonrió y se echó para atrás, observando el cielo nublado. Luego se volvió hacia Neji.

"Eso fue divertido ¿No es así, Neji-kun?"

El niño mayor asintió en silencio con una sonrisa juguetona en sus labios.

"Si" Respondió el con sencillez. Una sonrisa de satisfacción surgió en sus infantiles facciones y la pequeña pelirrosa contuvo un suspiro.

"Me alegra"

Neji la miró interrogante, pero ella solo negó con la cabeza y se rió. Se sumieron en un cómodo silencio, que luego se vió abruptamente interrumpido por las ansiosas llamadas de sus tutores. Sakura hizo una mueca al escuchar a su padre y se inclinó para delante, preparándose para levantarse. Parpadeó sorprendida al ver que Neji ya se había levantado y ahora le tendía la mano, la tomó y él la ayudó a ponerse de pie. Le sonrió y ambos se sacaron los zapatos que tomaron prestados y corrieron a reunirse con los adultos. En cuanto el padre de Sakura vió a la pequeña pareja soltó un profundo suspiro de alivio.

"¡Sakura! ¡Ahí estas!"

Ella sonrió, pero se ocultó con timidez detrás del niño a su lado al ver al alto e intimidante jefe del clan, Hiashi Hyuga, de pie junto a su padre. Notó a sus fríos ojos perla estidiarlos y analizarlos a ella y a Neji, como si intentara descifrar la relación entre ellos, y se estremeció involuntariamente. El niño se inclino.

"Oji-sama"

Hiashi no dió ninguna señal de haberlo escuchado. Simplemente le hizo un gesto con la mano para que se le uniera. Los niños se miraron, antes de soltar sus manos y tomar sus respectivos lugares al lado de sus tutores. Kizashi sonrió, disculpándose; le agarró la mano a su hija y se dirigió hacia el hombre con un asentimiento de cabeza.

"Gracias por su tiempo, Hyuga-sama"

"Gracias a usted, Haruno-san"

Kizashi sonrió, y comenzó a caminar con Sakura hasta la salida de la mansión. Ella se giró para ver a Neji, quien sólo los veía marchar; y le saludó con la mano. Sonrió al verlo devolverle vacilántemente el saludo y le gritó algo antes de desaparecer con su padre por el camino hacia su casa, al otro lado de la aldea.

"¡Me alegro de que ya no estés triste, Neji-kun!

Neji parpadeó y esbozó una ligera y genuina sonrisa, reflejando alegría en sus jóvenes rasgos por primera vez desde la muerte de su padre. Y su sonrisa sólo se amplió más cuando una realidad lo golpeó.

A ella no le había importado su frente.


NT: Hola :D Bien, hace tiempo ya que leí este fic y pues me gustó tanto que decidí traducirlo para ustedes :) Soy una completa novata en este mundo asique puede que haya sido un asco, espero que con el tiempo y la práctica vaya mejorando. Les ruego algo de paciencia. Volviendo a lo de la historia, si leen la original se darán cuenta de que cambié levemente una que otra frase, esto lo hice para que al traducirla no se viera como una mera traduccion literal y algunas palabras que como que no me convencían. Nada extremo, el contexto sigue siendo el mismo. Pero si se les ocurre alguna palabra o frase que crean que quede mejor en alguna parte, no duden en decírmelo :D

Bueno eso es todo por hoy. Las críticas siempre serán bienvenidas, pero porfa, sin ofensas ¡Que con la paz todo es mejor!

¡Cuídense y hasta el siguiente capitulo!