60 Years in a Summer
Autor: Isys Luna Skeeter.
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Spoilers: Si no conoces los libros de HP, ¡Ve a leerlos!
Disclaimer: No tengo derecho sobre ningún personaje, ellos les pertenecen a J.K. Rowling. Lo único que es mío son los errores.
Esta obra es una TRADUCCIÓN, la trama de esta historia le pertenece a Isys Luna Skeeter, quién me dio su permiso muy amablemente para traducirla.
Capítulo: 1/?
Pareja (s) en este capítulo: Ninguna.
Advertencia en este capítulo: Muerte de un personaje menor.
"Hablando"
'Pensando'
-Parsel-
Sueño/ Memoria/ Carta/ Revista/ Libro/ Periódico
Cambio de Tiempo/ Fecha del Tiempo
Capítulo I
-Serpens Lynx Black-
Sábado, 24 de junio de 1995
"No fue tu culpa, Harry." La Señora Weasley susurró.
"Le dije que tomará la copa conmigo," dijo Harry.
Ahora la sensación de ardor estaba en su garganta también. Deseó que Ron mire hacia otro lado. La Señora Weasley puso la poción encima de la mesita de noche, se inclinó y rodeó con sus brazos a Harry. No tenía ningún recuerdo sobre ser abrazado así, como si fuera por una madre. Todo el peso de lo que había visto esa noche pareció caer sobre él lo sujetó contra ella. El rostro de su madre, la voz de su padre, la vista de Cedric, muerto en el suelo todo comenzó a girar en su cabeza hasta que casi no podía soportarlo, hasta que estaba su cara presionando contra el aullido de miseria luchando salir de él.
Se escuchó fuertemente un ruido de un portazo, y la Señora Weasley y Harry se separaron. Hermione estaba de pie junto a la ventana. Ella sostenía algo apretándolo en su mano.
"Lo siento," susurró.
"Tu poción, Harry," dijo la Señora Weasley rápidamente, limpiándose los ojos con el dorso de su mano.
Harry lo bebió de un trago. El efecto fue instantáneo, una ola irresistible de poción sin sueños se quebrantó sobre él; cayó sobre la almohada y no pensó más.
Viernes, 24 de junio de 1927.
Harry se despertó con un gemido; todo era borroso y no podía recordar donde estaba y lo que había sucedido.
"¿Todo está bien, joven?" Harry escuchó la voz de una mujer joven preguntarle con preocupación.
Harry abrió sus ojos para ver a una mujer vestida como una monja frente a él, mirándolo con preocupación. Harry frunció el ceño al ver el biberón en su mano.
"¿Dónde estoy, señora?" Harry preguntó con voz ronca.
"El Orfanato de Lana, joven. En la guardería."
Harry se sentó, notando que estaba medio tumbado en una silla de madera; eso no sería bueno para su espalda. Entonces, se dio cuenta de la cuna en la esquina donde un niño estaba sentado y mirándolo.
"Ese es Tom. Él es un muchacho tranquilo. Pero nunca encontrarás a uno mejor." Dijo la mujer con orgullo. "Por desgracia, nació aquí y su familia nunca vino a recogerlo. Nadie trato de adoptarlo."
Harry se puso de pie con las piernas temblorosas y se acercó a la cuna. Miró al niño dentro de ella. El chico inclinó su cabeza hacia un lado antes de levantar de repente sus brazos hacia Harry.
"Le gustas. A Tom no le gusta nadie."
Harry miró a la mujer.
"¿Señora?"
La mujer le sonrió a Harry de una manera maternal y Harry fue consciente de una sensación de opresión en su pecho.
"¿Sí joven?"
"¿Usted dijo que estaba en un orfanato? ¿Cómo llegué aquí?"
"No estoy tan segura. Cuando entré ya estabas en la silla. Sospecho que la Señora Cole te habrá llevado hasta allí, mientras trataba de conseguirte una habitación. ¿Eres un nuevo huérfano?"
Harry volvió a mirar al chico que seguía sosteniendo en sus brazos.
"No lo sé."
"Bueno, soy Martha." La mujer le dijo antes de agarrar al bebé y obligar a Harry en la silla. Ella le entregó el bebé a Harry. "Y usted, Señor, vas a alimentar a Tom, él obviamente quiere que lo hagas."
Harry bajó su vista para ver a los ojos grises mirándole de regreso y luego le sonrió a la mujer.
"Como usted quiera, señora. ¿Puedo tomar la botella?"
Harry agarró la botella y, cómo Martha le enseñó, alimentó al joven Tom en sus brazos. No tenía idea de lo que estaba pasando, pero sabía que no debía reclamar. Además, sintió una conexión con el niño; era como si él estuviera destinado a encontrarle. Martha sacó una silla y se sentó antes de Harry, recogiéndolo.
"¿Cuál es tu nombre?"
Harry levantó su vista de los fascinantes ojos grises de niño a Martha.
"Black." Dijo Harry a la vez. No tenía idea de dónde estaba, si había sido transportado a algún lugar no podía dejar que Voldemort le siguiera la pista. "Soy…" '¡Vamos, Harry, piensa! ¡Los Black siempre tomaban sus nombres de las constelaciones! ¡Piensa en nombres de estrellas! ¿Qué nombres sa…?'
"Serpens Lynx Black, señora." Los ojos de la mujer crecieron y Harry se sonrojó. "Tradición familiar. Utilizamos siempre nombres de las constelaciones y estrellas."
Mentalmente, Harry se preguntó por qué esos nombres habían venido a su mente. Por otro lado, Serpens era una constelación que se divide en dos mitades, tal como Harry era. Después de todo, ¿No era mitad Slytherin y mitad Gryffindor? Y Lynx, un felino. Lynx equilibraría la serpiente con su corazón de león de Gryffindor. Las iniciales SB hacían referencia a su querido padrino: Sirius Black. Por supuesto, tanto Serpens y Lynx eran constelaciones en el cielo del norte Británico que no iba a cambiar, ni ahora, ni en cincuenta años o incluso en medio milenio.
La mujer sonrió.
"Es un buen nombre, no te preocupes. Ahora déjame preparar tu cama en la esquina." La mujer le dijo, apuntando a una cama al lado de la cuna. "Todas las habitaciones están llenas, así que tendremos que esperar hasta mañana para encontrarte una habitación con los otros niños. Espero no te importe dormir aquí con Tom."
"No, en lo absoluto, señora."
La mujer sonrió.
"Bien, voy a encontrar algo de ropa de cama." Martha dijo antes de levantarse y salir.
Harry bajó su mirada hacia el niño que había terminado su botella. Dejó la botella a un lado y lo miró en silencio. Había algo sobre este niño que lo llamaba, como si el niño fuera la razón por la que estaba allí…
"Aquí tienes." Martha volvió a entrar y preparó el colchón viejo de la esquina. "¿Ya terminó su botella? Voy a tener que ponerte en la hora de alimentación ahora, Serpens. Siempre es una lucha hacer que Tom beba su comida.
Harry sonrió y se puso de pie con Tom, colocándolo en su cuna antes de colocarse el mismo sobre la cama. Martha lo arropó antes de apagar las velas y salir de la habitación. Harry miró al niño en la cuna que estaba sentado mirándolo, con nada más que la luz de la luna para hacerles verse entre sí.
"Duerme Tom. Es tarde." Harry le susurró al otro chico.
Por último, Tom cerró sus ojos y balbuceó algo. Harry podría haber jurado que sonaba como su nombre, o el nombre de Serpens en su caso.
Suspirando, Harry miró hacia el techo. No tenía idea de lo que estaba pasando, solo que el pequeño Tom lo necesitaba y eso era todo lo que le importaba. La vieja habitación no le importaba. El viejo colchón en el piso que olía a moho no importaba. El viento que podía escuchar fuera de su ventana –y en los agujeros en las paredes y ventanas que parecía que el viento estaba dentro de la propia guardería- no importaba.
En realidad, el viento sonaba más como una canción de cuna que una tormenta real. Harry sonrió divertido al escuchar a Tom balbucear de nuevo antes de que su respiración se acompase. Incluso si no sabía lo que estaba pasando, no podía ser tan malo como había encontrado a Tom, así que tendría que hacer mañana por la mañana… se aseguraría de estar allí para el bebé de cabello negro, ojos grises.
Finalmente, el sonido del viento afuera, incluso la respiración de Tom y los sonidos repentinos que Tom hacía –que siempre trajo una sonrisa en la cara de Harry- lo llevó a un sueño tranquilo. No hubo pensamientos de Voldemort y Cedric ni nada de lo que había sucedido el año pasado pasó por su mente. Sólo la imagen del bebé Tom durmiendo tranquilamente bajo la luz de la luna.
Continuará...
NOTA DE TRADUCTORA:
¡Hola! ¡Comenzamos una nueva historia! ¿Qué les pareció este primer capítulo? Me gustaría saber su opinión al respecto.
Me gustaría aclarar que esta historia está en emisión, pero Isys tiene intención de continuarla :)
En fin, ¡Nos vemos en el siguiente capítulo!
Se despide,
Maya.