PACIFIC RIM

Renuncia de los personajes de Ficción.

Yo no poseo el poder sobre los personajes de cada Ficción, ni mucho menos el poder sobre su historia, trama y creaciones. Yo solo los tomo para entretener a los lectores que se aparezcan por aquí.

Géneros.

Mecha, Acción, Ficción, Recuerdos de la vida, NO Harem, y etc.

Conceptos a los Diálogos.

Personaje hablando: —Todo siempre así tan fácil, desde el principio.
Personaje pensando: —"Muchos nos odian por destruir sus pertenencias".
Comunicación vía electrónica: —¡Sus ordenes han sido muy claras!
Mensaje por teléfono: —"Vamos, no seas tan distraído"
Habla por medio de un Jaeger: —Todo ciudadano debe mantener la calma.

Aceptación

—Y dime…—Naruto presto atención a Sasuke. —¿Qué les hiciste a los 4 de allá atrás? —Termino preguntando el pelinegro Sasuke, apuntando a sus espaldas, en donde estaban los Uchiha y Namikaze, sentados un poco aparte del resto en el comedor de Hong Kong. El grupito ese se veía muy desanimado y con su aura de tristeza en ellos.

—Umm—Naruto puso su rostro desinteresado de siempre. —No sé, solo les dije unas palabritas y ya—Comento el muchacho albino con su actitud de siempre.

—Sabes que las palabras hieren mucho, ¿no? —Pregunto el pelinegro de forma seria, un chibi Naruto asintió con un pan en la boca y algo nervioso. —Pero no importa, si ellos se lo buscaron no hay problema alguno—Un chibi Naruto, con orejas y cola de zorro naranja, estaba sonriendo de forma muy feliz a las palabras de su amigo.

—Oh, eso está bien entonces—Comento de forma muy feliz el peliblanco, para segundos después regresar a su estado normal de siempre.

—A los cadetes Uzumaki Naruto, Uchiha Sasuke y los hermanos Namikaze y Uchiha, reportarse en las oficinas del Mariscal Pentecost—Resonó por la alta voz, la voz era de una mujer, una IA que Naruto había entregado a esta causa, a esta resistencia y a esta instalación.

—¡Si ves lo que causas! —Sasuke se levantó de su asiento junto con su plato de forma muy enojada. —¡Ahora por tu culpa estamos en problemas! —Sasuke empezó a salir hacia la oficina del Mariscal, todo el lugar estaba concentrado en ese alboroto que en sus respectivas comidas.

—"¿Chuta y ahora?" —Pensó un nervioso Naruto. El albino también se levantó de su lugar con su plato ya vacío, estaba algo nervioso por la llamada de atención hacia ellos.

Suponía un poco que los Namikaze y Uchiha no se pudieron aguantar esa pequeña golpiza y palabras, unos cobardes a la vista del peliblanco. Pero dejo esos pensamientos de lado al ver que esos 4 de allá también estaba sorprendidos, algo que hizo despejar sobre que ellos fueron lo que le dijeron algo al Mariscal, ahora pensándolo bien, el Mariscal no escucharía este tipo de quejas, aquí no estaban niños, aquí había soldados dispuestos a dar su vida por el bien de la humanidad.

Dejando su planto en donde tenía que ser dejado, el peliblanco empezó a alejarse fuera del comedor, a sus espaldas estaban viniendo el resto de chicos que fueron llamados, 2 estaban nerviosas, 2 estaban algo serios, pero de igual forma nerviosos.

…WL…

Ahora los 6 pilotos estaban en la oficina del Mariscal, los Namikaze y Uchiha estaban felices de ver a sus padres de nuevo, Naruto y Sasuke estaban con el rostro monótono y serio, respectivamente.

—Los 6 fueron llamados aquí para lo siguiente—Empezó hablando el Mariscal de forma seria. —Los 6 tendrán 3 días de vacaciones, se lo merecen—Termino el Mariscal de igual forma seria, este hecho era una petición de los padres de todos los chicos de aquí, a los pilotos Naruto y Sasuke también los enviaba con ellos porque se lo merecían, ya llevaban mucho tiempo peleando con los Kaijū que nunca tuvieron un tiempo de este tipo, ahora que el reloj estaba apuntando que los Kaijū no atacarían dentro de una semana, este tiempo era perfecto para ellos.

—¿Oíste eso Naruto? Vacaciones, ya había olvidado el termino de esa palabra—Comento un feliz Sasuke, sonriendo un poco y pensando que en esos 3 días se iría de nuevo a EEUU a ver a su novia.

—Ohhhhh—Naruto estaba con un brillo de felicidad en sus ojos, eso era bueno, ahora iría a caminar por todo Hong Kong y ver que de bueno era que tenía todo este lugar.

—Así es pilotos, sus guías serán los señores Uchiha y Namikaze—La felicidad de dos chicos se fue al carajo al escuchar esas palabras. —Compórtense bien en todo momento, si sale algún contratiempo, Gipsy Danger, Strike Eureka, Cherno Alpha y Crimson Typhoon los detendrán hasta que vengan en camino si resulta ser muy complicado—Informo algunas cosas más el Mariscal, en el Shatterdome aun habían 4 Jaeger más, así que no había problema si tenían algún ataque, los otros pilotos harían un buen trabajo defendiendo Hong Kong.

—Pero Mariscal—El nombrado presto atención al pelinegro Sasuke. —Ya tenemos edad como para valernos por nosotros mismos, ha sido así desde hace mucho—Esas palabras dolieron en los corazones de los padres de los dos chicos. —Así que no puede ponernos en el grupo de ellos, no somos niños—El pelinegro estaba algo indignado, no quería estar ni un centímetro cerca de sus "hermanos" no quería que su estúpida arrogancia, cinismo, poderío, se le contagiaran a él, aunque eso era imposible.

—Estoy completamente de acuerdo con Sasuke, Mariscal Pentecost—Ahora fue el turno de Naruto, su habla era monótona al igual que su rostro. —Tenemos la edad suficiente como para cuidarnos solos el uno del otro, no necesitamos guías…—Minato, Kushina, Jin y Natsuki se pudieron tristes por esas palabras. —O compañía no deseada cerca de nosotros—Con esas últimas palabras, los dos grupos de padres e hijos se pusieron tristes, esas palabras eran nombradas por los dos, aun si uno solo hablaba.

—Eso es verdad, ya no son unos niños—Sasuke y Naruto sonriendo un poco, ya que no tendrían que estar cerca de personas no deseadas. —Pero…—Ese, pero, no les gusto para nada. —Si fueron ya unos adultos, serian responsables. Acaso se les olvido el incidente en EEUU, en un casino, en el cual Uchiha Sasuke quedo endeudado por 850.000 dólares—Sasuke trago duro por eso. —También está el incidente en un bar, solo por defender a su novia de las garras de otros tipos o, no meterse en problemas con las personas del mismo equipo, no pelearse con su Jaeger, no hacer concursos de bebidas alcohólicas con menores de edad—Sasuke estaba que echaba espuma por su boca por todo eso, y eso que también faltaban muchos más. —Los incidentes de Uzumaki Naruto. Incendiar un restaurante, experimentar en un laboratorio de New York sin autorización, hacer explotar un edificio abandonado, desarticular la banda terrorista ISIS, destruir casi el 40% de las instalaciones de New York, y etc. Si fueran unos adultos, nada de eso hubiese pasado—Naruto estaba sudando a mares por todo eso.

Los familiares de ambos chicos se estaban conteniendo las risas que amenazaban por salir de sus labios al exterior, ver esas expresiones de los chicos era muy graciosa, era como un tipo de programa de bromas más bueno de todos los tiempos.

—Pe-pero…—Ambos chicos trataban de poner excusas, pero la mirada seria y fría del hombre les dejo sin habla.

—Sin peros. Mientras no se cumplan los tres días o haya algún atentado Kaijū, ustedes dos estarán bajo el cuidado de los señores Namikaze y Uchiha—Informo de forma muy seria. —Eh sido claro, ¡soldados! —El Mariscal se acercó a los jóvenes, mirándolos a los dos desde arriba.

Los dos jóvenes estaban muy intimidados por el porte y poderío que estaba expulsaba el hombre en frente de ellos, sus cuerpos estaban algo tensos y estaban por empezar a temblar por la mirada que les estaba dando su jefe. Si perder tiempo, se pusieron derechos, sus expresiones de seriedad en sus rostros y el clásico saludo militar, hablaron luego de eso.

—¡Señor, si señor! —Naruto y Sasuke hablaron luego de haber puesto su postura correcta en frente de este señor, el máximo régimen de liderazgo.

—Bien—Ahora el Mariscal estaba satisfecho con esto. Posando su mirada en los padres de los dos chicos, hablo de igual forma, muy seriamente. —Señores Uchiha y Namikaze, espero y esta decisión sea la correcta, no quiero tener que levantar cargos en vano, espero y cuiden bien a estos dos soldados y a los otros también—Los padres de los chicos se tensaron mucho por la mirada que les estaba dando el hombre moreno ahora mismo.

—N-No se preocupe Mariscal Pentecost, l-los cuidaremos bien—Afirmo Mikoto de forma seria y nerviosa, no perdería la oportunidad de recuperar el cariño de su hijo Sasuke.

—¡Así es Mariscal, cuidaremos muy bien a nuestros hijos! ¡no dejaremos que se metan en problemas! —Kushina, siempre energética, hablo de igual forma, con una seriedad palpable y carismática.

—Cuidaremos bien de ellos—Fugaku y Minato hablaron al unísono, ellos ayudarían a sus mujeres a recuperar la confianza de sus hijos.

—Bueno. Ya pueden retirarse a ver sus respectivas cosas para estos tres días soldados, parten en una hora—Con eso dicho, los jóvenes pilotos salieron de la oficina del Mariscal a sus respectivas habitaciones, dos de ellos estaban caminando de forma muerta, no queriendo aceptar el ir con esos ineptos de padres y hermanos, eran escoria para ellos. Pero, no podían desobedecer una orden directa, así que, solo les quedaba aceptar lo que ya estaba hecho.

Ellos y sus miedos. El miedo siempre está en el interior de una persona, solo hay que saber cómo despertarlo.

…WT…

Esto en verdad era muy incómodo para los padres y hermanos de Sasuke y Naruto. Ahora los 10 personajes estaban yendo en una limusina negra algo larga, los 6 jóvenes usaban ropas normales, casuales y demás, los padres por otra parte siempre llevaban sus trajes de negocios. Ahora estaban yendo a la mansión Namikaze, en donde se hospedarían todos, los Uchiha no tenían alguna casa por estos lugares, así que los Namikaze se los ofrecieron como muestra de amistad y confianza.

—Bu-Bueno…—Kushina hablo de forma nerviosa, mirando a los dos chicos que estaban en frente de ellos. —¿Qu-Que opinan de Hong Kong? —Hizo su pregunta la mujer, pregunta dirigida hacia los dos chicos de en frente.

—Para ser una ciudad y país que ni siquiera conozco, se puede decir que esta algo bien—Contesto Naruto de forma monótona, Sasuke ni siquiera estaba prestando atención al lugar, solo estaba con los auriculares puestos y escuchando música a todo el volumen, no quería hablar con esta escoria de gente.

—Y-Y-Ya veo—Comento un tanto avergonzada Kushina, ya que le pregunto algo que no tenía mucho sentido hacia su hijo. —¿Te-Terminaste tus estudios Naruto? —Pregunto Kushina de nueva cuenta, quería saber más de su hijo albino.

—Hace mucho, ya tengo mi doctorado y no me preocupo por eso—Contesto el chico, sorprendiendo a todos en el lugar por escuchar esas palabras, apenas y Naruto tenía sus 18 años y ya tenía un doctorado, eso debería ser algo irreal, al menos que el chico sea un total prodigio. —Y si, soy un prodigio que nace cada 100 años—Contesto ante las dudas que se iban a incrementar en todos los individuos en el lugar, menos Sasuke, que seguía en su mundo de música.

—Eso es algo increíble, felicidades, Naruto—Felicito Minato, estaba muy orgulloso de su hijo, haciendo maravillas por todos lados, él también era como un prodigio, pero no a la altura de su hijo menor.

—Las gracias ya me los dieron mi fallecido abuelo; Sarutobi y mi fallecido padrino; Jiraiya, no necesito más gracias—Comento de forma muerta el muchacho, su abuelo Sarutobi, de cariño lo llamaba así, falleció hace 3 años atrás, el no pudo salvarlo, teniendo una mente capaz para poder crear una cura para el cáncer de su abuelo, no pudo crearlo a tiempo y termino culpándose por la muerte de su ser querido. Por otro lado, su padrino Jiraiya, falleció por su culpa de nuevo, un Kaijū ataco New York y el White Lightning estaba por esos lugares, él y Sasuke salvaron muchas vidas allí, pero la de su padrino no contaba en esas vidas salvadas.

Naruto bajo la cabeza hacia abajo, con sus manos se agarró su cabeza, era doloroso el recordar eso, esos recuerdos y esos sucesos lo cambiaron mucho, haciéndolo un ente muy aparte de su anterior yo, uno muy frío, solitario, indiferente y sin emociones, en eso se refugiaba el chico, gracias a esas dos perdidas, su mente se rompió más de lo que ya estaba.

Pam…

Naruto cayó al suelo de la limusina inconsciente, Sasuke tenía su mano derecha con la palma abierta, el pelinegro le dio un golpe en la nuca, golpe que dejo fuera de combate al peliblanco que estaba en el suelo con lágrimas cayendo de sus ojos, cuando el muchacho albino se tomaba la cabeza de esa forma, era una muy mala señal, para todos.

Esto preocupo a los padres del chico, los hermanos del peliblanco se mostraban molestos con el pelinegro Sasuke, Mizore de igual manera se mostraba enojada con su hermano menor por haber hecho aquello, los padres del pelinegro estaban ya mismo por reprenderlo por haber hecho eso, Itachi miraba de forma enojaba a su hermanito.

—No lo hagan recordar cosas que le rompen más su frágil mente—Todos se callaron al momento de que el peligro hablara. —Esos recuerdos los hacen vulnerable, lo hacen perder la cabeza por completo, los recuerdos de haber perdido a sus dos seres más queridos, por su propia culpa. Naruto se culpa así mismo por la muerte del señor Sarutobi y del señor Jiraiya, en ese entonces este Naruto no existía, pero para ocultar al antiguo Naruto, uno cruel y sanguinario, se creó este nuevo "Naruto" —Explicaba Sasuke, mientras tanto Mizore, Kushina y Natsuki estaban viendo el estado del albino. —Así que mejor no le recuerden el pasado, él está haciendo un esfuerzo muy grande el estar soportándolos a ustedes, así que mejor sean agradecidos y… levántenlo del suelo—Sasuke de nueva cuenta alzo el volumen de su teléfono y se perdió en el mundo de la música.

Naruto una vez despierte estaría bien, su actitud de ahora era la que siempre estaría, eso lo sabía muy bien, una vez tuvo la gracia de ver esa faceta asesina del albino, casi no sale vivo de esa pelea, era gracias a los otros soldados y al mismo Mariscal, que él seguía vivo al igual que el peliblanco, allí mismo fue en donde Naruto les explico sobre que era lo que le pasaba y del porque actuaba de esa forma, todo tenía sentido luego de esa explicación, tanto grafica como de solo palabras.

El resto del camino fue algo normal, por llamarlo de esa manera, solo que debes en cuando Mikoto trataba de entablar una conversación con el pelinegro Sasuke, el cual la ignoraba por completo gracias a su alto volumen de sonido y el estar con los ojos cerrados, algo que molestaba al padre del chico, no quería ver a su mujer llorar porque Sasuke no le prestaba atención, Itachi y Mizore eran el mismo caso que el de su padre, pero no decían nada y solamente se mantenían callados.

Naruto despertó a los pocos minutos de llegar a la mansión de los Namikaze, el albino despertó recostado en las piernas de la pelinegra Uchiha, la cual le sonrió y suspiro de alivio al ver que el chico estaba bien. Naruto se levantó de allí de forma rápida, agradeció el gesto y el de haberlo ayudado al resto, se sentó al lado de Sasuke y unos auriculares pequeños los saco de su bolsillo y se los puso el mismo, para perderse de esta realidad tan bárbara.

—Bienvenidos a la mansión Namikaze, residente en Hong Kong—Minato hablo de forma orgullosa.

Todos vieron por las ventanas a la mansión de los Namikaze, aunque los dueños mismos ya sabían del cómo era, pero de igual forma eran un poco presumidos en torno a sus cosas, ya saben, el quien tiene más que el otro. Esa presentación más que todo fue para los Uchiha y los pilotos de White, pero solo los primeros estaban algo impresionados, los segundos, ni atención a sus palabras le prestaban.

La mansión era como los clásicos modernos de hoy en día, con un muro de concreto que media alrededor de 5 metros de alto, con picos de metal en el final de lo alto de ese muro. La entrada era de barrotes plateados con dorado en las puntas, en la entrada estaban dos guardias vestidos con traje negro, como un guardaespaldas, los cuales hicieron una reverencia al momento de que la limusina pasara al interior. El camino era decorado por unos bloques de concreto con muchas formas, a los lados del camino estaban arbustos redondos que decoraban el ambiente, más adelante estaba una fuente de agua de forma redonda, y ya al frente de la fuente, estaba la enorme mansión, casi parecía un castillo, pero se asemejaba a las mansiones de ultima de este año, siendo ya 2066, mucho se avanzó en ese tiempo.

Una vez los integrantes de la limusina se bajarán de allí, en fila, les esperaban múltiples Maid con vestidos franceses de color negro y blanco, además, más al frente estaban unos mayordomos que estaban recogiendo el equipaje de sus jefes, aunque los equipajes de Sasuke y Naruto solamente eran una mochila con unas cuantas ropas y sus accesorios de juegos y trabajo. Mochilas que ellos mismos cargaban en sus hombros.

Todos caminaban en fila recta por todas las Maid que estaban en el lugar hasta la puerta, cada una de ella teniendo expresiones algo serias y profesionales, además les estaban haciendo una reverencia a los dueños e invitados que estaban pasando en frente de ellas.

—Tal parece que no se van con juego a la hora de gastar el dinero de sus ganancias—Murmuro Sasuke con seriedad, pero seguía con su música, pero no con todo el volumen. —Tan patético—Comento ahora algo fuerte, haciendo que los del frente lo escucharan y que Jin se diera vuelta y encarara al pelinegro.

—No te creas mucho Sasuke—Jin se paró en frente de Sasuke, el cual miro un poco hacia arriba, ya que este rubio era alto. —Ten un poco de respeto al que te da alojamiento—Comento con seriedad, no dejaría que insultaran a su padre o del como el gastaba el dinero.

—Grandes palabras para alguien como tu—Sasuke solamente se hizo a un lado y siguió caminando como si nada, ni siquiera estaba intimidado ni nada. —Me importa un poco si me dan alojamiento o no, tengo dinero de sobra para poder irme a un hotel 6 estrellas y sin problema alguno—Sasuke paso de largo hacia el interior, ya que ninguno de los que estaban en el lugar estaba caminando hacia adentro.

—Mejor déjalo ser por una vez, esta algo sobrecargado con su música Rock Cristiano—Naruto miro al rubio sin ninguna expresión, para luego proceder a pasar al frente y pasar a los demás de esa misma forma.

—¡No es Rock Cristiano! —Se escucho un grito proveniente desde el interior de la mansión. —¡Es Dubstep! —Termino de aclarar el pelinegro, haciendo que todos en el lugar tengan una gotita estilo anime por esa declaración parecida a la de un niño pequeño y enojado.

—Me-Mejor solo sigamos al interior—Propuso Minato, no estaba ofendido ni nada, era como una realidad, él jugaba con el dinero debes en cuando. —Por favor tráigannos un poco de té y galletas—Minato ordeno a la Maid general de este lugar; una hermosa peliblanca, ojos aperlados y expresión estoica.

La Maid principal era aquella mujer, vestida con un estilo de atuendo diferente, siendo el principal el color azul marino y el blanco en diversos aspectos de traje, media alrededor de unos 1.65, su cuerpo es voluptuoso, su piel es de la misma porcelana, una belleza sin igual era aquella mujer de nombre desconocido.

—A la orden, Minato-sama—Hablo la mujer peliblanca, su voz era seria y armoniosa. Se giro para ver a las demás Maid, dejando que sus amos ingresaran a la casa y fueran a la sala a esperar el té y galletas. —Ya oyeron la orden de Minato-sama, complazcamos sus órdenes y el de nuestros señores. Bien, a moverse todo el mundo—La mujer dio la orden a todo empleado que se encontraba en esas dos filas.

Los Mayordomos y algunas Maid fueron a preparar las habitaciones para los invitados de sus señores, algunas Maid fueron a la sala en donde estaban sus señores, a ver si pedían u ordenaban algo mientras otras Maid y Mayordomos estaban ocupados preparando la orden de Minato y de igual manera preparando la cena de esta noche.

—"¿Estás de acuerdo con quedarte aquí en estos tres días?" —Naruto vio el mensaje de texto que había recibido por parte de Sasuke.

—"No tengo más opciones, ambos tendremos que quedarnos aquí en estos tres días, son órdenes directas después de todo. Pero si los Kaijū atacan Hong Kong, rápidamente iremos en ayuda de los demás… no sé, algo me dice que esto será como un triple golpe" —Sasuke miro el mensaje algo largo de su hermano albino, algo que hizo que se tensara un poco por lo último.

—"Eso sería ya muy complicado de manejar, pero no importa, estamos nosotros dos y esta escoria que ayudara en algo, al menos espero y el salvarle el trasero a esta escoria no me haga un chico "bueno", je, hasta parece muy gracioso todo eso. Pero no te preocupes Naruto, nosotros pelearemos juntos, hasta el final" —Naruto sonrió un poco por las palabras del pelinegro.

—"Si, eso es verdad. Pero bueno, ¿Qué haremos ahora? Traje el juego electrónico que querías, ¿Qué tal una partida una vez estemos en nuestras respectivas habitaciones?" —Sasuke solo sonrió con superioridad, ambos eran buenos en estos juegos electrónicos que siempre estaban en la nube a la espera de su compra y descarga.

—"Solo espero que no pierdas, ya te voy ganando un buen tiempo" —Naruto miro eso y frunció el ceño un poco.

—"¿Disculpa? Acaso te tengo que hacer el recuerdo de que yo voy como 26 victorias y tu solo vas 20 de 30. Yo debería de decirte que no llores luego de que pierdas ante mi intelecto avanzado" —Sasuke tuvo un tic en su ceja al leer eso en su mente.

—"¡Ya verás, esta vez te ganare y apostaremos 1.000 dólares!" —Naruto sonrió un poquito ante este escrito.

—"Bien, entonces 1.000 serán, solo espero que God's of Marte no me haga ganar tan fácil ese dinero tuyo" —Sasuke estaba que quería golpear a su hermano albino. El pelinegro Sasuke miro a su hermano, el cual estaba mirándolo de forma retadora, el también no se quedó atrás ante esa mirada, esta vez, tenía que ganar ese dinero, ya había perdido mucho con su albino hermano.

—Cof, cof—Minato llamo la atención de los dos jóvenes. Todos los que estaban en la sala enorme, se quedaron mirando a ese par de chicos, ya que estaban tecleando en sus teléfonos y el sonido del mensaje llegando se escuchaba en todo el lugar, pero una vez el té y las galletas fueran servidas, el rubio mayor decidió llamar la atención de los dos chicos. —El té y las galletas están servidas, pueden empezar a degustarlas sin ningún problema—Informo Minato de forma carismática, empezando a tomar una taza de té que una de las muchas Maid le trajo a él y a su familia.

Los Uchiha tenían un plato aparte lleno de galletas que expulsaban un aroma agradable, el té no se quedaba atrás y desprendía un suave humo y al probarlo, también era muy exquisito.

Sasuke y Naruto tenían un plato aparte, sus tazas de té fueron puestas en frente de ellos, en una mesita de cristal con un florero en el medio, otras dos mesas eran las mismas que tenían las dos familias que estaba en frente.

Sasuke solamente tomo el té y empezó a beberlo con calma, Naruto tomo su té e imito la pose de su hermano pelinegro, ambos soltando suspiro de alivio una vez hayan terminado de probar este té tradicional de Japón, claro, también puede haber en muchos lugares del mundo, pero este té tenia las características de la patria de ambos chicos.

—Y Sasuke—El nombrado miro con desinterés a su padre. —¿Qué has hecho con tu vida? ¿has conseguido alguna novia? ¿algún trabajo? —Pregunto el hombre con expresión estoica y de seriedad, no se dejaría doblegar por su hijo menor para nada del mundo.

—¿Mi vida? —Sasuke se llevó la tasa de té a su boca, bebiéndolo suavemente para luego responder a las preguntas. —Pues con mi vida no les interesa para nada, eh vivido atrocidades más que los ataques de los Kaijū, así que no hay problema. ¿Novia? Si, tengo una novia que me ama y yo comparto ese mismo sentimiento con ella. ¿Trabajo? Pues, no sabría cómo responderte a eso. Si te refieres a los trabajos que me tocaba tomar cuando me desheredaste de todo de tu fortuna, pues son puros trabajos a mercenarios, drogadictos, contrabandistas, proxenetas, prostitutas, terroristas, asesi-…—Sasuke estaba hablando casi toda su historia de niñez y adolescencia resumidas, pero la palma abierta de su hermano albino lo obligo a callarse, se estaba pasando un poco con sus palabras, todo era verdad, pero no tenía que estar hablándoles de su pasado a los provocadores de tal pasado.

—Como ya se abran dado cuenta, no todo fue feliz para Sasuke cuando aún tenía 13 años, el mundo luego del ataque del primer Kaijū y los demás, cambio mucho para adaptarse al nuevo ambiente, pero algunas costumbres del humano aún seguían en pie, así que para alguien como Sasuke y yo, solo nos tocó aceptar lo que nos pedían por tan solo un poco de comida o posada para dormir aunque sea una noche de frío—Naruto miro a todos y cada uno de los que tenía en frente, todo ellos estaba con los rostro de sorpresa y mucha tristeza por esas revelaciones del pelinegro Sasuke, el cual estaba tomando el té como si eso no le afectara, solo era el pasado siendo recordado en el presente. —Pero eso fue el pasado, ahora estamos en un futuro algo no tan alejado del pasado, cambiamos, nos adaptamos y nos convertimos en lo que ahora somos—Naruto puso una sonrisa pequeña en sus labios, Sasuke también puso la misma sonrisa.

—¡Somos los pilotos del White Lightning! —Dijeron los dos al unísono, con esas sonrisas de depredadores marcados en sus rostros, sus miradas también reflejaban la misma determinación de ambos, los dos pilotos de aquel Jaeger,

El Jaeger de nombre; White Lightning.

…WL…

Fin del episodio.

Notas

Perdonen las faltas de ortografía que hayan visto a lo largo y corto de la lectura.

Lamento que el episodio sea corto.

Ya falta poco para que este FF, llegué a su final tan esperado.

...Nos vemos...