A comparación de Wakatoshi, yo soy un iletrado.

Me di cuenta de ello en nuestro ensayo de primer año, pues mientras la profesora de literatura echaba literalmente aplausos por su "sublime" trabajo sobre astronomía, a mí ya me estaba queriendo reprobar el año por mi brillante ensayo de cómo la Weekly Shounen Jump influye en nuestro estado psico-emocional.

Al tiempo que su trabajo tenía palabras "bonitas" y poéticas–por así decirlo– lo mío era tan nefasto y propio de alguien que no sabe el significado de la palabra "indulgente".

Probablemente hubiera sido toda una obra maestra y es que ¡Vamos! ¿Quién no quiere oír sobre mi decadencia depresiva cuando no puedo comprar la revista semanal?

Aún recuerdo la primera vez que nos conocimos, ¡Vaya que no pude hacer diferencia entre un anciano y alguien de secundaria!

Hablaba tan apropiadamente, tanto que me hizo sentir culpable por poseer tan corto e impuro vocabulario. Desde ese entonces decidí aprender de él.

La elocuencia de Wakkun tiene ese factor contagioso que te motiva –o más bien, obliga– a construir oraciones con un nivel de sintaxis decentemente excepcional, ya que es necesario para entenderle en la mayoría de ocasiones.

Porque podía decir "sucumbir" en lugar de morir, porque podía decir "exultante" en lugar de emocionante.

Me enseñó que había mil maneras para decir que estaba feliz, triste, enojado, cansado y así un sinfín de palabras sofisticadas que te hacen parecer un verdadero presumido.

Pero había algo que llenaba de ironía el impecable dialecto de mi buen amigo Wakatoshi, y era que por más que tuviera una vasta cantidad de palabras para expresarse, casi nadie le comprendía.

A exteriores parecía un ser tan entrópico e intimidante, que cada palabra que emitía era una amenaza de peligro, y era gracioso ya que en esa clase de momentos, la locuacidad y gracia que poseía no servía para nada.

Pese a ello me tomo la libertad de alegorizar–¿Qué clase de palabras son estas? ¿Me estaré volviendo un pretencioso? – la esencia de Wakkun con la de un diccionario.

Así es, ambos asustan. Ambos son grandes, pesados e incomprensibles y hasta da paja tratar de lidiar con ellos.

Pero hay algo que nadie sabe, y es que son un portal hacia un mundo nuevo y desconocido.

Siento que ni siquiera pertenece al planeta tierra, podría ser de Andrómeda o de una de las lunas de Saturno. Definitivamente un ser como él no era parte de esta superficialidad terrestre.

Pero si ese fuera el caso, no necesito palabras rebuscadas para comunicarme, bueno, realmente nunca las he necesitado. El me entiende y yo, sorprendentemente, también le entiendo.

Sí, así es, a comparación de Wakatoshi soy un gran iletrado. Pero eso no me importa si con mi precario léxico puedo comprender el universo dentro él.

Y así el no solo me enseña palabras nuevas, sino que hay incontables maneras de entender la vida.

¿El sinónimo de Wakatoshi?

Asombroso.

¿Un antónimo de él?

Humano.

Pues creo que es una estrella combustionando a millones años luz de las personas.

N/T:

¿Recuerda la vez en donde Ushi le dijo a Hinata la palabra "Pueril" y este tuvo que recordar cuando Yachi le dijo el significado?

Bueno, esto nace eso asdfghjk.

Escribí esto hace ya algún tiempo para un concurso y hablando con alguien -coffcoff Iván coffcoff- (Si estás leyendo esto, holi) recordé su existencia.

¡Espero que les haya gustado!

¡Nos vemos!