Shingeki no Kyojin pertenece a Hajime Isayama.

Veintisiete centímetros

No podía creerlo. Se había subido a un taburete para poder alcanzar los libros que estaban en la parte más alta de la estantería, pero ni aun así lo había conseguido.

Escuchó una suave risa a su espalda que la hizo mirar avergonzada a su alrededor en busca del testigo que acababa de presenciar aquello: el profesor Levi… no, no podía haber sido él; Jean, imposible, estaba en los brazos de Morfeo desde hacía rato; y, a su lado, Marco, concentrado en su lectura —y, de vez en cuando, en mirar a su amigo—, tampoco podía ser él.

La misma risa se repitió y, esta vez, al voltearse, descubrió a una chica de pecas que la miraba con una sonrisa burlona, y que se aproximó a ella.

—Si quieres que te ayude a coger ese libro y que nadie se entere de lo que acaba de ocurrir, tendrás que compensarme de alguna forma —susurró Ymir en su oreja.

Así pues, aprovechando aquel taburete que, aunque no era lo suficientemente alto como para alcanzar el último anaquel de la librería, sí le otorgaba la altura necesaria para romper la barrera de veintisiete centímetros que siempre la separaba de la castaña, acercó su rostro al de Ymir y rozó sus labios con los de ella durante unos segundos.

—Luego volvemos a por el libro —murmuró sonrojada la de pecas, llevándose en brazos a su pareja a algún lugar más íntimo.