¡BUENAS! Advertencia: Este fanfic está super malo, léelo si quieres xd Es TsukkiYama, pero tendrá otros mil ships, probablemente. Conforme vaya sucediendo, ya saben.

Disfruten.


La práctica iba bien, como cualquier otra.

Kageyama hacía sus tan terriblemente precisas levantadas.

Tsukishima bloqueaba gran parte de los balones.

Azumane daba origen a algunos de los mejores remates.

Nishinoya cubría todo desde atrás, evitando que cayeran.

Todo como de costumbre.

Pero hubo una cosa con la que nadie contaba durante aquel partido de práctica.

— Sugawara-san— La voz pertenecía al joven de pecas, que pedía que el armador de tercero levantara para él.

— Yamaguchi— Pronunció apenas el balón tocó las yemas de sus dedos.

Los torpes pies del muchacho no podrían traicionarlo en una mejor situación; nadie notó cómo o por qué, pero de un momento a otro, quien había pedido el remate se encontraba en el suelo.

Un estruendoso golpe fue escuchado por todo el gimnasio, todos los presentes dejaron sus actividades para prestar atención a quien había provocado ese sonido. Aquella persona no tuvo tiempo de colocar sus manos para disminuir el impacto, lo recibió de lleno con la cabeza.

Estaba inconsciente y nadie se movió un milímetro, probablemente por el impacto que recibían.

— ¡Yamaguchi! — El primero en reaccionar fue su mejor amigo. Rara vez tenía un semblante preocupado, pero esta situación lo ameritaba.

Justo después de eso todos corrieron a formar un círculo alrededor del ahora inconsciente Tadashi.

— Tsukishima— La amable voz de Suga se hizo presente— creo que lo mejor será llevarlo a la enfermería, creo que ese alguien debes ser tú— Puso una mano en su hombro.

— Sí, Sugawara-san— Con la ayuda de Daichi subieron a Yamaguchi a su espalda.
Kei emprendió paso a la enfermería sin dejar que nadie lo siguiera.

— ¿Qué sucedió? — Preguntó Hinata, inocentemente.

— Hinata, idiota— No hace falta especificar quién le dirigió la palabra—. Yamaguchi se golpeó contra el suelo, en la cabeza.

— ¿Y eso qué? — Seguía sin comprender la situación.

— Puede tener una contusión, puede lastimarse, puede darle jaqueca…

— O peor— Completó Suga.

— ¿Qué podría ser peor?

— He leído de casos en los que…— De sólo pensar en eso, su piel se erizó con miedo— se pierde la memoria.

— Pero eso no le pasará a Yamaguchi, ¿verdad? — Shouyo era el preocupado ahora. No recibió respuesta— ¿Verdad? — Repitió.

— No lo sabemos, Hinata— Fue el turno de Daichi.

— ¡Pero Yamaguchi es fuerte! — Alentó Noya— ¡No nos preocupemos tanto, las posibilidades de que eso pase son mínimas!

— Nishinoya tiene razón— Secundó la estrella—. Creo haber escuchado de eso también. La pérdida de memoria es en ocasiones contadas.

— Cierto, cierto. Ya verán que para cuando todos salgamos de la práctica estará bien, disculpándose por preocuparnos— El joven de poco cabello trató de animar el ambiente—. Sigamos con el entrenamiento, ya verán que para cuando salgamos él estará bien. Para asegurarnos iremos todos a la enfermería. Falta…— Revisó su celular— una hora y media para que salgamos.

— No discutiré eso— El capitán le dedicó una sonrisa al equipo—. Por ahora sólo podemos pensar en que Tsukishima llevará a Yamaguchi con bien a la enfermería. ¡Profesor!

— Ah, sí. Muchachos, son un equipo así que como equipo deben confiar en que Tsukishima-kun se encargará de Yamaguchi-kun. Él estará bien, pero de todas formas me pondré en contacto con los padres de Yamaguchi-kun, para ver si pueden venir por él más temprano.

— ¡No haga eso, por favor! — Rogó Hinata.

— Pero, Hinata-kun, sus padres deberían de comprobar que está bien antes que nadie…

— Es que si se lo llevan a casa puede que no veamos a Yamaguchi en un tiempo— Interrumpió.

Takeda lo pensó un momento, pero de no ser por el apoyo de Ukai, no hubiese tomado una decisión.

— Bien. Pero apenas lo vean llamaré a los padres de Yamaguchi-kun.

— Escucharon al profesor, ahora vayan a entrenar. ¡Una serie de saques! Cinco por persona. ¡Ahora! — Ordenó Keishin.

— ¡Sí! — Todos contestaron.

El entrenamiento siguió pero el ambiente no era el mismo alegre de antes, sino que era tenso, sombrío y triste.

De haber despertado, estaban seguros, Tsukishima les avisaría, por lo que apenas terminaron de limpiar corrieron a la enfermería.

El primero en entrar a la habitación fue Shouyo; en el tiempo transcurrido ahí había formado una buena amistad con Yamaguchi. La imagen con la que se encontró fue más que impresionante: Tsukishima, a quien todos consideran un frío y antipático hombre, estaba tomando la mano de Tadashi entre las suyas, apoyándolas en su frente.

En cuanto notó la presencia del pelirrojo en la habitación soltó (aunque con delicadeza) la extremidad que mantenía sujetada.

— Aún no despierta— Informó—. La enfermera dijo que sólo estaba inconsciente, pero que despertaría en unas horas, probablemente.

Los demás entraron a la habitación permaneciendo en silencio.

— Esperen…— Dijo Daichi— creo que está despertando…

Los parpados del joven pecoso fueron abriéndose con lentitud; su vista era borrosa y apenas podía distinguir las siluetas. Se incorporó pero, apenas pudo mirar como es debido, formuló una pregunta que a todos los dejó desconcertados, específicamente para el rubio a quien iba dirigida la pregunta.

— ¿Quién eres tú?


P Para escribir esto estuve investigando; un golpe muy fuerte o haciendo deporte puede provocar pérdida de memoria.

Sé que está muy dramático aun así, pero ps ya qué. Gracias por leer.

Trataré de actualizar al menos dos veces por semana, pero no me crean, soy una pinche incumplida, je.

¿Review?