Formación de equipo

Si alguien le decía que ser un ninja era un trabajo sencillo, era un estúpido.

Si alguien le decía que ser un sensei de una academia era un trabajo sencillo, eso más depende de la suerte y de los alumnos en sí.

Eso es lo que pensaba un Chunin, caminando a través de los pasillos de la academia, viendo quienes serían sus alumnos por unos papeles que tenía en mano y rezando para que no saliese nada mal, ya que el salón donde iba a estar estaban todos los hijos de los clanes más importantes de Konoha.

Y sobre todo….él.

Abrió la puerta y pude ver que los futuros jóvenes que estaban charlando entre sí, desde las cosas cotidianas como sus gustos, hasta cosas que debían de estar hablando como el tipo de Taijutsu que usan, jutsus que estaban practicando o vieron por otras personas, o parecidos.

Bueno, casi todos.

De todos los niños que veía, solo cuatro estaban de los más silenciosos o susurrando entre sí.

El niño Nara, que estaba en una esquina en la mitad de los asientos, además estaba un tanto atento hacia alguien.

La niña Hyuga, que estaba al final de la fila, que tenía un leve sonrojo y mirando a la misma dirección que el Nara y susurrando ante su amigo de al lado.

El niño Aburame que estaba justamente al lado de la Hyuga, que a pesar de tener anteojos oscuros sabía que tenía una mirada fija hacia alguien.

Y finalmente el niño Uzumaki, que estaba en la segunda fila, teniendo al lado a Sasuke que este tenía el mismo semblante serió y margado de siempre, estaba mirando a través de la ventana.

Que tenía un gran respeto hacia él.

Al principio pensaba cómo todos los demás acerca del Uzumaki, que era el demonio en vez del niño que era, pero….después de "Ese" suceso….

Simplemente cambió de opinión acerca de este joven.

- Buenas – saludo el Chunin, pero todos, menos esos cuatro, que miraron al sensei de forma curiosa, pero los demás no le pararon atención.

– ¡Buenas! – levantó un poco más la voz y aún siguieron charlando, como si él jamás hablase.

Hizo un simple sello de mano, inhalo, y grito, haciendo que su cabeza creciese de una manera irreal.

- ¡SILENCIO! - grito, haciendo que varios se tapasen los oídos y otros diesen saltos por el susto que le dio el Chunin.

Todo miraron al Chunin, que era de color levemente moreno, ojos negros, cabello marrón, portaba su típica ropa de Chunin, y lo que llamó la atención de casi todo el mundo era una cicatriz encima de su nariz.

Sabiendo que tenía la atención de todos, tosió un poco para aclararse un poco la garganta – Buenas alumnos, soy su nuevo Chunin por estos últimos 3 años que van a estar en la academia. Me llamo Iruka Umino pero llámenme Iruka sensei ¿entendido? – todos asintieron, pero no le gusto esa respuesta. Iruka hizo un sello como una amenaza.

- ¡HAI SENSEI! – todos gritaron, haciendo que el sensei diese un leve movimiento de cabeza de aprobación.

-Muy bien chicos – camino hacia el escritorio. Apar estra al frente de la pizarra y comenzando a escribir - El día de hoy estudiaremos…

Toda la clase estaba de acuerdo en algo con respecto a este sensei, que daba una conferencia de lo más aburrida, además de que, si alguien no le prestase la atención, le tiraba una tiza con una precisión que puso celoso a varios jóvenes, precisamente el Nara, que se sorprendía cada vez que le daba, ya que este se movía a centímetros para que fallase, pero aún así le daba cómo si jamás se moviese.

Quizás el único que se salvaba era Naruto que, a pesar de estar viendo afuera, prestaba atención y respondía correctamente las preguntas, haciendo que varios jóvenes se mirasen entre si sorprendidos.

O en este caso, correctamente mal, haciendo que varios se burlasen.

Menos a los tres jóvenes y al Chunin, aunque este sabía la razón de su….mente bruta. Aunque siempre lo regañaba para no levantar la atención de manera equivocada.

Ese era su plan para no tener al consejo civil respirando encima de su cuello.


Omega estaba caminando a través de la aldea, pasando el rato mientras que su joven amigo terminase las clases con cierto Chunin que conocía y que lo salvo de un aprieto personal que tenía.

Estaba tranquilo en sus pensamientos, o lo más cercano a pensamientos humanos, hasta que lo paro un grito.

- ¡Detente! – Omega se volteó y vio a un hombre corriendo hacia su dirección dejando detrás de él una cortina de humo por la carrera.

Se detuvo a centímetros de Omega, derrapando en el progreso.

Este hombre vestía una malla apretada de color verde oscuro junto con su chaqueta de ninja, aunque esa ropa era uno apropiado para misiones de espionaje en las zonas boscosas, pero para la moda ninja era muy rara, piel blanca, cejas anormalmente gruesas, ojos negros y cabello negro, además portaban unas pesas del tamaño de un niño.

Omega sabían que esas pesas pesaban bastante, gracias a algunas explicaciones de Anko.

- ¿Quién es usted? – preguntó Omega, haciendo que este hombre, con respiración algo pesada, le señale.

- ¡Te desafío a comer dangos extra picantes de las montañas volcánicas de Konoha!

-…- Omega inclino su cabeza de manera muy confundida, pero simplemente levantó los hombros y asintió – Adelante.

- ¡YOSH! – y cómo vino, se fue.

Pero casi se detiene por olvidarse de su adversario de la comida, iba a detenerse para regresar, pero para su sorpresa estaba a su lado igualando su velocidad, haciendo que este tuviese una sonrisa aún más grande.


Omega, al principio no sabía del escándalo que se armó al comer esto estúpidos dangos, pero después que él se abrirse y esperando que no tuviese comida por ahí, se llevó una sorpresa y a su vez una respuesta de esas expresiones.

Su cuerpo si tenía un estómago, aunque no sabía de su utilidad. Ya que su energía que le daba vida era de todo desde aire hasta el mismo movimiento que hacía, así que debería de darle la misma lógica a este estómago que tenía.

Y lo otro era que lo podía analizar lo que comía, haciendo que pudiese saber si lo que comía era veneno o darle una respuesta positiva o negativa de la comida.

Pero su sorpresa de esta comida era que no era picante, era extremadamente picante.

O en un sentido sarcásticamente correcto, era como comer lava comible.

Y aquí estaban el hombre que le desafío y Omega, que lo estaba cargando después de abrir algo de una "Puerta" y comerse 50. Algo increíble pero Omega le ganó al comerse 100.

- E-Eres bueno – dijo el hombre, haciendo que Omega asintiese.

- Tampoco lo hiciste nada mal, sabiendo que tan picante era esa comida – Omega miro al hombre – Lo hiciste increíble para resistir todo ese picante sin ir al baño.

El hombre miro a Omega con una sonrisa – Gracias…soy Gai.

-Soy Omega y supongo que eres ese hombre de las 5.

Gai le dio una sonrisa grande ante sus palabras - ¡Hai y pensaba que sin abrir la puerta lo podía comer, mi gran equivocación de confiarme de esa comida!

- ¿Por qué lo haces? – preguntó Oemga.

- No es obvio ¡es para superar y romper mis límites!

Omega miro por un instante a Gai, viendo a una cara similar al escuchar esas palabras, haciendo que este se riese un poco bajo.

- ¿Dije algo estúpido? – preguntó, esperando una respuesta algo similar como la de su eterno rival.

Omega, para la sorpresa de Gai, negó con la cabeza – Me recuerdas a alguien, siempre superando sus propios límites para saber dónde podría alcanzar hasta que su cuerpo no le dé más. Eres una persona extraordinaria y te mereces mi respeto, Gai-san.

Gai abrió los ojos de la sorpresa al escuchar esas palabras. Quizás él no conocía a este hombre raro y sus respuestas secas, aunque no mal intencionadas, pero sabía que él era fuerte, pero también era una persona justa y amigable.

- Omega….te recordaré – y después de decir esas palabras, se quedó dormido por el cansancio gracias a esos dangos/lava.

Omega simplemente bufo – Igual como tú Shadow – sabía que su amigo ya fallecido y él eran dos personalidades completamente opuestas, pero si tenían algo en común y era que se querían superar y romper sus propios límites. Aunque su amigo sólo quería superar a Sonic.


El Hokage estaba intercambiando miradas entre el papeleo de los nuevos genins que estaba a punto de salir de la academia y a los jonins, aunque uno de estos jonins estaba solamente presente solo para ser testigo de la decisión del Kage.

Pero la única Kunoichi que estaba presente en esta reunión tenía sus propios pensamientos con respecto a la selección de los nuevos genins. Ya que a diferencia que la de sus compañeros, que esperaba la decisión de su Kage acerca de la selección de genins, espiaba hasta el último día a los nuevos genins para averiguar cuales serían sus futuros genins y a ver si su Kage estaba en lo correcto. Bueno, era más bien un leve pasatiempo a último minuto, pero solo le interesaba desde que está sería su primer día de ser una jonin. Además sabía perfectamente cual sería la profesión donde ella y sus genins iban a estar.

Espionaje e infiltración.

Sabía perfectamente que clase de genins iba a tener.

Kiba Inuzuka.

Hinata Hyuga.

Shino Aburame.

Esos tres futuros shinobis iban a estar debajo de su ala para entrenarlos y salir vivos en las misiones que iban a hacer cuando hagan misiones más avanzadas que las "D".

Pero tenía muchos sentimientos encontrados y era con respecto a su equipo.

Shino, por lo que veía, era una persona antisocial y no expresaba sus emociones de forma abierta. Era típico cómo todo Aburame, pero si quería seguir adelante no cómo shinobi sino como persona, más para los clientes para que no se sientan incómodos.

Hinata era una chica tímida que no hablaba mucho, y si hablaba era a través de tartamudeos. Era una chica muy gentil, quizás demasiado para esta profesión que se requiere manchar las manos de sangre. Pero algo la sorprendió y era que siempre miraba al niño Kyubi, Naruto Uzumaki.

La verdad era que ella no tenía sentimientos negativos hacia el niño que fue elegido por el Yondaime para ser la cárcel de ese monstruo que atacó Konoha hace casi 12 años, más bien veía a un niño que tuvo la mala suerte de haber nacido en ese momento oscuro para la aldea.

Y ese era su problema.

A diferencia de que los senseis ponían hacia Naruto, que era un estúpido, gritón, tenía una ropa que llamaba poderosamente la atención y bastante hiperactivo.

Al verlo, quería darle una paliza a ese sensei que anoto todas esas mentiras.

Más bien era calmado, bastante callado, antisocial y peor que la de Shino, y tenía un conjunto permisible para ser ninja aunque puede mejorar.

Y ese era un problema interno.

La verdad era que no tenía problemas con Kiba, pero simplemente no cuadraba. Era bastante gritón, se enfadaba con extrema facilidad y era un pervertido, ya que quería montarse encima de Hinata por ser un macho alfa.

Sabía que esa era la personalidad de los Inuzukas, pero Kiba estaba llevando eso a la octava potencia y más bien su cachorro se comportaba más ninja que él.

La voz del Hokage la sacó de sus pensamientos, ya que estaba nombrando a los equipos con sus respectivos senseis.

Solo esperaba que Naruto estuviese en su equipo, ya que quizás pueda ayudar a los otros dos miembros. Cierto, que a diferencia que Kiba era más callado, pero quizás le ayude a sacar a esos dos de sus respectivos caparazones.

- Equipo 7 estará conformado por Naruto Uzumaki, Sasuke Uchiha y Sakura Haruno. Equipo 8 estará conformado por Kiba Inuzuka, Hinata Hyuga y/Disculpe, Hokage-sama – la mujer intervino en la selección. Quizás era más bien una queja personal, pero ella sabía que esos dos del equipo 7 tenía sentimientos negativos hacia Naruto ¿Por qué? No lo sabía, pero tampoco quería saberlo – Estoy en desacuerdo con su organización de los genins – todos estaban susurrando entre sí. Era la primera vez que un jonin intervenía al Hokage.

- ¿En qué sentido? – preguntó el Hokage con una mirada dura.

-Naruto Uzumaki no debería estar en el equipo 7 – todos los susurros se detuvieron al sentir una mirada más fría del Kage.

"Ahora tengo que elegir mis palabras cuidadosamente" – El equipo 7 es una muy mala posición para Naruto, ya que los dos miembros Sasuke Uchiha y Sakura Haruno tienen sentimientos negativos hacia Naruto Uzumaki y déjame recordarte que no tiene una buena amistad con los aldeanos de Konoha – la mirada del Hokage se suavizó. Antes de que pudiese preguntarle algo, se escuchó un libro cerrándose y todos miraron a Kakashi-con la excepción de Kurenai-de manera sorpresiva, ya que era la primera vez que Kakashi daba toda su atención ante algo o por lo menos cerraba el libro por algo.

-Me opongo – simplemente dijo esas palabras mirando a Kurenai.

"¿Qué?" pensó Kurenai algo sorprendida ante las palabras del Jonin, quizás no conocía mucho a Kakashi, pero sabía que no era un hombre que hablase de esa manera, más bien dejaba que las cosas fluyan a su propio ritmo.

- Es simple. Kakashi propuso que esos 3 estuviesen en el mismo equipo.

Kurenai miro a Kakashi de manera sorpresiva. No sólo estaba prestando la atención, sino que también quiso tener a esos tres en el mismo equipo.

Pero ya que estaba aquí, no iba a rendirse sin pelear.

- ¿Qué sabes de Naruto? – preguntó, haciendo que todos mirasen a Kurenai como si estuviese loca.

- Que es un niño gritón, maleducado, hiperactivo y no sabe la palabra "quieto".

Kurenai puso una sonrisa, sabiendo que jamás lo vio y solo caso sus conclusiones por los senseis – Pues tengo MIS propios registros hacia Naruto y sus dos compañeros – sacó de su bolsillo de su pantalón un papel y se la dio al Hokage, haciendo que Kakashi mirase a Kurenai de una manera algo profunda.

Además, este papel era una especie de…¿seguro?, simplemente anoto todas las observaciones de los futuros genins, más específicamente acerca de ese trio.

El Hokage, al terminar de leer, bajo el papel y se masaje los ojos y suspiro de agotamiento, haciendo que Kurenai se preocúpese un poco por su edad y por su heredero muerto por el puesto del Hokage, pero no podía disminuir su torcedura mental – Si así esos dos actúan de esa manera ¿puedes adivinar si se enterasen del secreto? O ¿en una misión de vida o muerte? – pudo ver como el Hokage se puso tenso de forma leve.

- ¡Eso es algo estúpido! – uno de los chunins de la academia grito enojado - ¡Jamás escuche de algún padre hablando de ese demonio!

Kurenai miro de mala manera a ese sensei de academia, deseando lanzarle un genjutsu personal para cierto tipo de gente. Pero se controló para no darle la satisfacción de enfurecer a un jonin - Quizás, pero eso no significa que se lo digan de la manera indirecta, diciendo a sus hijos que lo odien sin razón aparente – contra golpeó Kurenai, haciendo bufar al Chunin.

- Pues se lo merece – susurro, haciendo que Kurenai le mirase peor que antes.

- Creo que sabes que Naruto es alguien duro de entrenar, más para que se quede quieto – Kurenai miro de forma seria a Kakashi, preguntándose por qué quiere tanto a Naruto.

- Igualmente como a ese Uchiha, con ese ego tan grande y deseos de venganza tan enormes que debes de ponerle una correa para que no salga de control.

- Pero Kiba es una mejor elección, más para un equipo de infiltración y espionaje.

- Y en tu caso sería igual, Hatake. Kiba es un ninja leal y quizás le ponga en la cabeza de ese Uchiha la palabra "Camarería".

- ¡Basta! – grito Hiruzen ante los dos jonins, para después suspirar y cerrar los ojos para analizar las palabras de los dos.

Odiaba decir esto, pero….

- Este será mi última palabra para acerca de esta selección y será esta.


Si lo que podía decir estaba preocupada por las pruebas finales de la academia, entonces ella se reirá en la cara de esa persona, pero si le decían que estaba preocupado por alguien entonces señalaría a Naruto.

Esa eran sus preocupaciones de Hinata, al ver que su amor en secreto salía del cuarto de pruebas con su Hitai-ate de metal en su frente, aún con esa mirada seca y fría que le preocupaba, para después saliesen todo el mundo ya que mañana en la tarde le iban a decirles acerca de sus miembros de equipo y su sensei.

Y estaba preocupada por Naruto.

Entre ella y Shino eran las mejores selecciones que tenía Naruto. Shikamaru quizás fuese una buena selección, pero sabiendo lo que pasó con esa cena quizás fuere una relación tóxica.

Ella junto sus manos y rezo a cualquier deidad que le escuchase para que Naruto estuviese entre ella y Shino.

Y si no es así, que no sea con Sasuke y Sakura.

Al salir, con su compañero Shino, vieron que Naruto estaba hablando con ese sensei de cabello blanco con una sonrisa falsamente cariñosa, para después desaparecer los dos gracias al Shunshin que utilizo el sensei.

- ¿Qué quiere Mizuki con Naruto? – preguntó Shino, con una voz levemente preocupado.

-N-No lo sé, pero espero que no sea nada malo.


- Es algo que simplemente no harías ¿acaso tienes un plan? – pregunto Omega, viendo la torre del Hokage al frente de ellos.

- Mizuki quiere el pergamino prohibido para pasarme directamente al rango Chunin – Naruto comenzó a caminar lentamente mirando por todas partes, con su Rinnegan activado para detectar algún anbu o directamente a Hiruzen.

- Sabes que es una trampa mal disfrazada.

Naruto miro a Omega con cara de "Enserio", para después seguir adelante.

- Y ya que estamos aquí ¿Cómo entramos? – Omega se cruzo de brazos, no viendo una entrada…sencilla para los dos – Dudo que Hiruzen haya dejado las llaves de su oficina debajo de la alfombra.

- No – Naruto camino, siendo seguido por Omega hasta llegar a la parte trasera de la torre – Hace varios días, un Chunin estaba practicando un jutsu katon, se le salió de control y volo una buena parte en el mismo piso que la habitación de Hiruzen.

Omega bufo ante ese accidente inoportuno – Te esperare aquí.

Naruto asintió y, en la reparación de la torre, saltando entre las vigas de madera y soportes de madera donde los trabajadores estaban para reparar.

Además era de noche y era más difícil que le detectasen en cierta distancia moderadamente larga.

Al llegar a la oficina, entrando por la ventana y, aún con el Rinnegan activado, vio que estaba completamente vacio.

Era muy raro.

Las veces que estaba aquí para hablar con Hiruzen, gracias a su habilidad de sensor y por Kurama, podía sentir a varios Anbus custodiando la oficina.

Y ¿ahora? Vació.

"O eso o suprimieron su chakra al máximo"

"Noticia, si alguien hace eso va a hacer igual a un vegetal" le corrigió Naruto, haciéndole asentir.

Entro a la oficina y, según las indicaciones de Kurama gracias a los recuerdos de Kushina, fue al marco de una foto del primer Hokage y, detrás de él estaba una mano que solo se podía activarse ante un Hokage.

Y de ser el hijo de un Kage, debería de funcionar, o si no, esto iba a serse una fiesta ruidosa.

Puso su mano derecha y le suministro un poco de su Chakra, para después deslizándose de un lado la pared.

Y ahí estaba, el pergamino. Casi de su altura y que Mizuki para "Pasar de rango".

Naruto se volteó, detectando a Hiruzen acercándose y con varios de sus Anbus, aparentemente lo vigilaban. Se fue por la misma ventana sin dejar ninguna especie de rastro.

"Fue muy fácil"

"Si estuviese el Yondaime, les crucificaría, aunque no sé quién lo hará primera"

Naruto asintió, bajando rápidamente antes de que Hiruzen viese por la ventana, para después irse con Omega para la reunión con Mizuki.

- Naruto…¿Qué harás con el pergamino? – se preguntó, sosteniendo la esfera de cristal en mano. Sabía que no tenía pensamientos oscuros para utilizar el pergamino prohibido, pero aún así rezaba que no hiciese una locura.

- ¿Lo seguimos? – pregunto uno de los Anbus, con un tono de voz preocupado por el joven.

El Hokagre miró a estos Anbus, ya que a diferencia de los demás Anbus que tienen muchos sentimientos encontrados con Naruto, estos tenían pensamientos puros con él.

- Síganle, pero no interfieran a no ser que los necesiten.

Todos asintieron y salieron por la ventana, la misma que salió Naruto.

Solo Hiruzen podía rezar, esperando que fuese una muy mala broma por parte de él.


Naruto estaba saltando por su cuenta completamente solo, ya que Omega se separó de él por si acaso Mizuki trajese algún amigo.

Y aunque tenía el elemento sorpresa, con referente a su verdadero poder que mostraba en la academia, aún no podía bajar la guardia.

Por qué, al final, él era un chunin y Naruto simplemente un genin y la principal diferencia entre los dos era la experiencia.

Se detuvo al frente de una cabaña en medio del bosque, notándose que fue abandonada desde hace tiempo.

Puso el pergamino en el piso y lo abrió, para ver algo interesante.

Y si, había algo interesante.

Después de ver y poner una cara de extrañeza y un poco de susto ya entendiendo del titulo de este pergamino, había algo guardado.

Minato Namikase para su hijo.

Naruto, levantando la ceja, suministro un poco de su Chakra y sacó un pequeño pergamino. lo guardo, ya que no sabía en que momento iba a aparecer Mizuki para tenerle en la emboscada final, aunque eso no le detuvo para seguir leyendo el pergamino.

Pasaron varias horas y Naruto estaba sentado con las piernas cruzada esperando.

Y la peor persona que esperaba en este instante.

- ¡NARUTO! – Iruka aterrizó en frente del joven entre una mezcla de enojo y preocupación.

- ¿I-Iruka-sensei? – Naruto estaba impactado ante su presencia.

- ¡¿Por qué te robaste el pergamino prohibido?!

- Fue Mizuki que me dijo eso. Creo que intenta puñalearme en la espalda o, en el peor de los casos, traicionar a la aldea llevando el pergamino a alguien.

- ¿Qué…? – Iruka se puso un poco azul, ya que Mizuki y él eran amigos desde hace años ¿Por qué traicionaría a su aldea, a su familia, a sus amigos en esas dos posibilidades?

Antes de que pudiese preguntar algo más, su sexto sentido le grito y agarró a Naruto y lo aparto, para después voltearse rápidamente y protegiéndose con sus dos brazos de varios Kunais.

- ¡IRUKA! – Naruto giro su mirada hacia el lanzado y veía su objetivo.

- ¡Mizuki! – Ikura se saco uno de varios Kunais que estaba incrustado en su pierna.

- Vaya, vaya, que tenemos aquí – dijo Mizuki, aunque su voz no sonaba tan sorprendida ante su aparición – Pensaba que irías a buscar al demonio después de decirte eso.

Iruka abrió sus ojos, para después sonreír, haciendo enfurecer a Mizuki - ¿Cuál es la gracia?

- Sabía que pasaba algo, sé que Naruto puede ser todo menos ladrón, más si se habla de un pergamino peligroso – Mizuki se veía sorprendido, ya que no se esperaba nada de eso, ya que iba a utilizar a Naruto cómo cabeza de turco si su plan inicial no funcionaba.

Mizuki apretó sus dientes ante el enojo que sentía. Agarro uno de dos grandes shuriken y miro a Naruto, con una sonrisa – Aparentemente nadie te dijo el secreto que se te guardo por 12 años.

- …

- …

Mizuki se quedo levemente congelado ante el silenció casi de ultratumba, haciendo que se ponga más rojo por el enojo y se preparaba para lanzar su gran shuriken.

"¿Cómo se convirtió en chunin con ese temperamento?" pensó, levantándose del suelo preparándose de una pelea con un chunin.

Mizuki sonrió de forma descarada - ¡Muere! - en vez de lanzarle a Naruto, lo lanzó a Iruka, que este abrió los ojos ante este ataque.

Pero alguien lo salvo.

Omega apareció delante de Iruka, con una especie de cuchillas saliéndose de sus dedos.

- ¿Qué – antes de que pudiese seguir, fue golpeado por su rostro, sacándolo del árbol yéndose directamente al suelo, justamente al detenerse agarró su otra shuriken y se la lanzó a Naruto, que lo esquivo moviéndose de un lado.

- ¡Crees que puedes vencerme Kyubi, soy un chunin y tu no eres nada! – grito Mizuki, viendo a Naruto bajando del árbol de un salto.

- Intenta tocar a mis amigos – sus ojos se convirtieron en el Rinnegan, haciendole tener una mirada casi demoniaca, haciendo temblar de miedo a Mizuki, haciéndole retroceder un poco – Te mato.

- J-Ja, si eso te lo crees… - Mizuki palideció, vio que Naruto hizo un sello y varios en los arboles y en el suelo aparecieron alrededor.

Lo peor, es que dijo "Kage Bunshin no Jutsu".

- Se nota que te gusta comer puñetazos – los Narutos pusieron una sonrisa macabra ante un Mizuki que se estaba poniéndose cada vez más azul. Levanto su mano, preparándolo para chasquear los dedos - Bon appetit – chasqueo los dedos y todos los Narutos se lanzaron, dándole una paliza bastante agresiva.

Mientras que Omega, que estaba atendiendo a Iruka sacándole los Kunais, podían escuchar los gritos de dolor de Mizuki.

- Omega-san – él asintió, haciéndole saber que le prestaba atención – Recuérdame nunca enfurecer a Naruto.

- Y yo pensaba que Shadow era malo si se enfurecía.


Hiruzen estaba sentado en su escritorio, con las manos cruzadas mientras esperaba el informe de los Anbus que mando. No utilizó la esfera ya que confiaba plenamente a esos Anbus, eso y que quería que la sorpresa le diese de llenó.

Después de que llegasen esos pensamientos, uno de esos Anbus entro por la ventana, portando la máscara de búho.

- Hokage-sama – el Anbu se arrodillo ante Hiruzen.

- Dime ¿acaso fue una mala broma?

El Anbu negó con la cabeza, haciendo suspirar de alivió al Hokage – Mizuki fue el traidor, engaño a Naruto-san para que robase el pergamino prohibido y lastimo de gravedad a Iruka-san aunque puede estar aún en operativo mañana – Hokage asintió, aunque no esperaba una víctima, por lo menos no fue por un camino más grave.

- ¿Mizuki?

- Si me permites utilizar estás palabras, mis compañeros aún estamos apostando cuantos puñetazos le dio a Mizuki después de invocar a un número anormal de Kabe Bushin.

Hiruzen miro un poco curioso al Anbu - ¿Cuántos?

- …Entre 150 a 200, pero se movían tan rápido que pudo haber una cantidad mayor o menor – Hiruzen miraba impresionado. Sabía que era un Jinchuriki y un Uzumaki, pero ¿creando una cantidad que una persona lo habría matado? Ni siquiera ninguno de sus 3 estudiantes podrían crear tantos sin dejar alguna secuela.

- Pero apareció Omega, salvando a Iruka-san de una shuriken gigante.

- ¿Cómo? – Hiruzen sabía que simplemente Omega no se lanzó y salvo a Iruka.

- Utilizo un Kekkei Genkai donde saco unas cuchillas de metal de sus dedos, quizás de sus huesos.

Hiruzen se masajeó el mentón, un poco interesado ante la nueva información "¿Acaso es un miembro del clan Kaguya? Pero su Kekkei Genkai hacia Salir huesos normales, no metálicos…¿acaso una ventaja genética entre ellos?" sabía que estaban extintos después de la guerra de sangre, pero si él era uno de los sobrevivientes ¿Por qué no recuerda nada de su pasado? "O me está ocultando algo o directamente es uno de los sobrevivientes de Orochimaru…solo espero que sea la primera"- ¿Algo más que comentar?

- Mizuki le dijo el secreto – la mirada de Hiruzen se puso enojada – Pero aparentemente ya lo sabía.

Hiruzen estaba en estado de shock. Era imposible que Omega supiese de su estado cómo Jinchuriki, o que alguien le hubiese dicho sin que él se enterase, entonces ¿Quién le dijo eso? "O eso o lo descubrió eso…espero que lo haya tomado bien" aunque quisiera ir a su casa y preguntárselo, quizás se sentiría completamente traicionado por ocultarle ese secreto, más por alguien que veía como parte de su familia.

Hiruzen suspiro, agitando su mano haciendo que el Anbu se fuese.

"Solo espero que la decisión que tome fuese la correcta"


Iruka miraba a los genins con una mirada seria, aunque este se veía un poco golpeado por lo de ayer, teniendo un torniquete y una muleta, aunque los alumnos preguntaron con respecto a sus lesiones más bien se hizo oídos sordos – Les felicito a todos por graduarse, pero no esperen que sea fácil. Habrá momentos donde deberán tomar decisiones difíciles. Buena suerte a todos – agarro unos papeles y comenzó a decir los equipos.

-Equipo 7: Sasuke Uchiha, Sakura Haruno y Kiba Inuzuka y su sensei será Kakashi Hatake

- ¿Por qué debería estar con el emo y la frentona? – se quejó Kiba, haciendo que varios se burlasen mientras que los dos ofendidos miraban mal a su compañero.

Mientras que Hinata y Shino suspiraban aliviados de esto, por eso había más posibilidades que estuviesen en su equipo e igualmente no.

-Equipo 8 – siguió hablando Iruka después que todos se tranquilicen – Hinata Hyuga, Shino Aburame y Naruto Uzumaki – si los dos no estuviesen calmados de forma profesional, quizás estuviesen saltando de alegría a su modo.

Mientras que Naruto.

"Tienes que alegrarte que no estas con esos dos" le comentó Kurama.

"Si, pero aun así…." Aún Naruto no confiaba en esos dos y fijo su mirada ante esos dos. Cerró los ojos y suspiro "Quizás…les dé una oportunidad" le respondió, al recordar las palabras de Cosmo.

Solo esperaba que no fuese cómo esa vez.

-Su sensei será Kurenia Yuhi. Equipo 9 aún está en servicio. Equipo 10: Nara Shikamaru, Ino Yamanaka y Chouji Amakame y su sensei será Asuma Sarutobi.

- ¡Por qué estoy con estos dos y no con Sasuke! – se quejó en voz baja la niña de pelo rubio, haciendo que Chouji se riese y el Nara susurrase "Problemática".

- Dentro de una hora los jonins vendrán a buscarlos, pueden irse conociéndose mientras tanto…. suerte a todos.

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