Disclaimer: Alicia en el País de las Maravillas/A través del espejo no me pertenecen, todos los derechos reservados a Lewis Carrol y a quienes crearon guiones y dirigieron las películas en las que se basan mis fics. El fic sí es de mi completa autoría.

Querencia

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Tatum Abby Hightopp Kingsleigh fue la primera en nacer, aquel día en que Tiempo sintió la llegada en sus entrañas y se fue a registrarla entre sus papeleos de linajes. Llegó al aire libre, en el medio del jardín real, rodeada de los conocidos, asomando bajo el vestido de su madre y sostenida por la buena doctora que llegó justo al instante debido. Una bolita de piel rosada con una mata de pelo rojo tirando a naranja.

Fue idea de Tarrant llamarla Tatum, unas horas después de nacida y cuando ya estaban instalados en su linda morada, nombre que Alicia quizá no había pensado ni sabía que podía ser especial por algo.

—Es que quisiera que sea como tú…

Y ella no entendió aquello sino hasta el momento en que le explicaron que, ese nombre, significaba que sería una mujer fuerte, que haría que las cosas sucedieran. Se sintió enteramente conmovida por la decisión del Sombrerero. Para entonces, ella igual la nombró Abby, siendo que la niña no paraba de sonreír desde el primer día, cuando no lloraba por hambre, y en especial mientras dormía.

Cuando sus piernas comenzaron a mantenerse por sí solas, solo un año después, Tatum resultó verse predispuesta y con una energía incomparable con cualquiera a su alrededor.

Tenía rizos que parecían resortes pegados a su cabecita, de ese color estrafalario que Alicia tanto amaba de su compañero, las mejillas rosadas y moraditas por su joven niñez, como también su padre las tenía de niño pero siendo más llamativas en ella por ser niña (Alicia ya se había percatado que las niñas pequeñas tenían los colores de su rostros más llamativos que los niños, en especial al ver a Mirana e Iracebeth de pequeñas aquella vez, hace años), tenía sus ojos cafés, sin embargo.

Sus labios finos solían curvarse hacia arriba tanto por inconformidad y llanto como por alegría y sonrisas, en sus pucheros había una mueca divina que compraba a todos a su alrededor.

Sus hermanos nacieron cuando ella tenía cinco años, mientras jugaba a las escondidas con los amigos de sus padres y se revolcaba en las hierbas altas de los bosques de Infratierra, riendo con su risa chillona y estridente de niña feliz y entretenida. Era una risa contagiosa, nadie podía evitar acompañarla en ella. Denotaba la alegría que todo a su alrededor exhalaba por la llegada de quienes iban de camino.

Y éstos fueron Albern Baird y Beau Aiden Hightopp Kingsleigh. Los niños de los cabellos dorados.

Sin embargo, eran todo menos parecido a lo que su madre pudo haber sido de niña (una metida en una sociedad donde soñar con aquel mundo estaba mal visto y no debía ser, que debía siempre estar tranquila y nunca hacer nada vergonzoso). Tenían los mismos rizos que Tarrant también, pero más volubles, sus rostros pálidos y los ojos verdes, brillantes.

Ni hablar de sus sonrisas, que eran dignas de las miradas picarescas de Tarrant y serían el principal augurio de sus travesuras o metidas de pata, ocultas bajo los sombreros que su abuelo les hacía con dedicación y cariño (y que quizá fueran lo único que ellos resguardaban con total celos de los demás).

—¿Por qué Albern Baird? —Mirana estaba extrañada, observando las pequeñas cositas sonrosadas que acababan de nacer hacía unas horas.

—Son nombres que indican valor uno y curiosidad otro —respondió Alicia, que tenía a Tatum sentada a su lado, mirando también a sus hermanos.

—Papá y yo elegimos Baird —acotó la niña, Tarrant rió con su características.

—Y mamá sabe que fue una buena elección.

—Totalmente —cercioró Alicia, llenándosele la mirada de cariño al ver las mejillas rosas de su hija. Mirana pasó sus ojos y sonrisa al otro bebé.

—¿Y Beau Aiden?

—Pues, uno también es de valor y el otro… digamos que tuve el presentimiento de que se parecería más a Tarrant —explicó la mujer, Mirana sintió aclaradas sus dudas y, pronto y sin perder tiempo, se volteó a su ahijada y sobrina con expresión tentativa.

—¿Vienes a tomar el té conmigo y el señor Tiempo?

La niña ni lo pensó. —¡Por supuesto que sí! —De un salto bajó de la cama de sus padres y salió antes que la reina, quien se giró a los recientes padres y les guiñó un ojo antes de volver a salir.

—¿Cuándo será que yo encontraré un amor así? —Se le escuchó decir mientras bajaba las escaleras.

Alicia miró a Tarrant, que sonreía sin poder dejar de hacerlo y dirigía su mirada de los niños a su esposa. Entonces, como quien despierta abruptamente de un sueño, borró su expresión de completa alegría y se llenó de dudas.

—¿Qué tiene ese nombre que ver conmigo?

—Dicen que Beau es para un niño coqueto y atractivo.

El Sombrerero abrió sus ojos un poco más de lo usual y sonrió otra vez, riendo divertido y a su modo. —Oh, mi querida Alicia, muchas gracias por eso.

Algunos años después, mientras comían fruta bajo el sol ardiente y veían a los niños ir y venir, haciendo un ruido bullicioso y llenando así el ambiente de más vida de la usual, mientras reían, gritaban, hablaban y arrastraban a Bayard, Cheshire, Tweedledum y Tweedledee a sus juegos, Alicia se cercioró de que aquel agradecimiento no tenía lugar.

Miró a Tarrant, que le devolvió la mirada y, sonriendo, se inclinó a su rostro para besarla con ternura y cautela.

—Gracias por todo —murmuró él. Ella reaccionó antes de que se alejara, sujetándole el rostro y manteniéndolo cerca.

—Oh, no, mi querido Sombrerero. Yo doy las gracias a tu mundo, en realidad, y mil gracias a ti por todo lo que me dieron —Y lo volvió a besar, con todo lo que el cariño que podía darle.

Fin

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Nombres:

Tatum: Una mujer fuerte y hermosa que actúa para que las cosas sucedan.

Abby: Divertida, bella y siempre dispuesta a sonreír.

Aiden: Voluntarioso y que sabe lo que quiere.

Albern: Hombre valiente, fuerte y decidido.

Baird: Dinámico, curioso y con talento musical.

Beau: Chico coqueto y atractivo.

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No es digno de un final, ¿verdad? Qué va a hacerse, no encontré uno mejor.

Quería agradecerles a quienes me han seguido en este camino explorando el Fandom de Alicia, les tengo como regalo un one-shot adicional que publicaré en seguida, también, donde los protagonistas son Tiempo y Mirana. Si lo buscan en mi perfil lo van a encontrar titulado "Problema de tiempo".

Sin más, espero que les haya gustado aunque sea un poco.

¡Espero sus comentarios! Cuídense mucho.

Ciao!