N/A:Los personajes y la historia les pertenecen a sus respectivos dueños.

Basado en la canción del mismo nombre del Soundtrack de Hunter. Les recomiendo oírla mientras leen yo la redacté mientras lo hacía.


Sólo tú y yo, nadie más, cuando las notas suaves preceden lo que vendrá, justo ahora, cuando dos razas se cruzan, dos seres completamente distintos, no puedo evitar sentirme afortunada, y las lágrimas afloran de mis ojos, no podíamos estar juntos, somos tan diferentes, nadie lo comprendía, pero aun así te quería, aun así me relajaba al escuchar tu voz, aun así me sentía protegida a tu lado, y me sentía halagada al estar frente a ti.

"4-4-1 Peón."

"6-5-1 caballero."

"2-7-2 nuevo espía, ¿Komugi sigues aquí?"

Aún recuerdo tus palabras, las más dulces que alguien antes me había dirigido, "estás bien" no pude evitarlo y lloré desahogando todas mis penas, ¿realmente alguien podía ser tan bueno conmigo?, ¿con alguien que casi no servía para nada, y que su vida dependía del ganar o perder?

"Sí por supuesto, no iré a ninguna parte, 4-5-1 Teniente general."

"Eso es jaque mate… ¿Komugi sigues aquí?"

Realmente no tenía palabras para agradecerte, ni tampoco las tengo ahora, con valentía nos enfrentamos al último juego, el que durará eternamente, en el cual ganaremos y perderemos todo y nada a la vez.

"Sí, sí justo frente a usted, juguemos otra partida, el perdedor va primero."

"Komugi."

"Sí, ¿qué sucede?"

"Parece que no te he derrotado ni una sola vez."

"Pero que está diciendo, si apenas henos comenzado."

"Tienes razón, 1-5-1 mariscal."

"9-5-1 mariscal."

"Komugi."

Ya estamos en el final de todo y mientras me preguntas "¿sigues aquí?", "si por supuesto es su turno Rey Meruem" te respondo suavemente, porque ya podemos estar juntos, ya nada nos detiene, ni la maldad del mundo, ni los prejuicios de la gente, ni el rencor, ni siquiera nosotros mismos, que no sabíamos lo que estábamos sintiendo, pero ya lo sabemos.

"Estoy… un poco cansado, necesito… tomar una siesta, ¿tú… sostendrías mi mano?, Komugi… ¿sigues aquí?"

"Puedo oírlo. Entendido... ¿Así?"

"Despertare dentro de poco… ¿te quedaras a mi lado hasta que despierte?"

"Komugi."

"Sí, sí que sucede."

"Gracias."

"De nada."

"Me llamarías…"

"Si."

"Por mi nombre... una última vez."

Ahora ya descansas apaciblemente en mi regazo, acaricio tu rostro, tus ojos se han cerrado ya no se abrirán más, busco tu mano y la tomo entre la mía, "Buenas noches Meruem… pronto llegaré a donde estás tú".