Aviso: Esta historia es paralela a "Un futuro de esperanzas y sueños". Los eventos que ocurran en este fic no tendrán efecto en la otra historia, pero los eventos que han ocurrido, y algunos de los que ocurrirán, en "Un futuro de esperanzas y sueños" sí se ven reflejados en esta. Un aviso relacionado con Pokémon es que el nombre de los ataques serán de la versión castellana del juego.

Pokémon pertenece a Game Freak, Nintendo. Undertale pertenece a Toby Fox. Sólo soy dueña de los Ocs que hacen las veces de personajes secundarios.


Prólogo: un encuentro inesperado

Aquel era un hermoso día. Las flores brotaban, los pájaros cantaban. En días como esos, los niños como Frisk... estaban de excursión.

El bosque que rodeaba el monte Ebott, y en cuya linde se situaba la ciudad de New New Home, era un lugar hermoso. Apenas había sido tocado por los humanos, dado que el oscuro rumor que decía "aquellos que se adentran en la montaña, no vuelven jamás" los había mantenido alejados de allí ( o al menos a la gran mayoría) y sólo tras el regreso de los monstruos a la superficie se había convertido en un lugar atractivo (no obstante, dichos monstruos hacían todo lo posible para preservar el buen estado del bosque). Tampoco había una fauna peligrosa, si bien las ardillas tenían la mala fama de robar las provisiones a los exploradores y campistas. El bosque era, por lo tanto, el lugar ideal para que un grupo de estudiantes pasara un día educativo y divertido. O eso era al menos lo que Toriel pensaba.

La mayoría de los alumnos estaban entusiasmados con el bosque. Muchos niños monstruo se entretenían admirando a los insectos y flores de la superficie, mientras que los humanos habían optado por jugar al "pilla pilla". Toriel buscó con una mirada a Frisk: se había subido a las ramas de un árbol llevando a Flowey atado a su espalda, y parecía que le estaba mostrando el paisaje desde ahí arriba. Le preocupo un poco ver a Frisk en una parte tan alta del árbol, no fuera a hacerse daño, pero sabía que Frisk era hábil y que podía bajar de ahí sin hacerse daño. Y si se lo hacía, siempre estaba ella ahí para curarle. Toriel decidió apartar su atención de Frisk y centrarla en el resto de sus alumnos.

-Mary, ¿quieres hacer el favor de dejar el móvil?- le pidió la antigua reina de los monstruos a la única de sus alumnas( una niña de piel clara y pelo rubio) que parecía no estar disfrutando del aire libre, ya que no dejaba de mirar un móvil de alta gama.

-¡¿Por qué no llega el wi-fi hasta aquí arriba?!- se quejaba la niña, ignorando la petición de su profesora.

-Sólo apágalo y disfruta del hermoso día- le recomendó Toriel.- He preparado unas actividades educativas a la par de divertidas para el día de hoy. Y creo que es el momento ideal para empezarlas...¡Todos, venid aquí!- llamó la profesora a sus alumnos.

Frisk se deslizó del árbol en el que se había subido y se agrupó junto a los demás compañeros de su curso.

-Muy bien clase- comenzó a decir la profesora.- El primer juego que tengo planeado para hoy es sencillo: he escondido siete banderas como esta- Toriel mostró una bandera violeta con un caracol dibujado en ella- en los alrededores de este claro del bosque. En grupos de tres, tendréis que buscarlas y traerlas hasta aquí-explicó.- El primero que llegué tendrá el honor de escuchar uno de mis chistes- al oír aquello, a los alumnos adoptaron una expresión de incomodidad: sólo a Snowdrake le gustaban los chistes de la profesora.- Tranquilos, es broma- les tranquilizó.- No hay ningún premio por ganar, pero si toda la clase encuentra las banderas en menos de una hora, mañana llevaré tarta a clase. Ahora haced los grupos y pasadlo bien. Si necesitáis algo, estaré por aquí. Tampoco tenéis porque tener miedo de perderos: yo sé donde estoy en todo momento y acudiré en vuestro auxilio así fuese necesario.

-Eso último da mal rollo- murmuró alguien.

De manera automática, un puesto del grupo de Frisk estaba ocupado por Flowey, lo cual sólo dejaba una bacante en su grupo. Dicha bacante fue ocupada inmediatamente por Monster Kid. Los tres juntos procedieron a explorar las inmediaciones del bosque, en busca de la bandera.

-¡Vamos a encontrar esa bandera en menos de lo que canta Shyren!- comentaba alegremente Monster Kid mientras avanzaba por el bosque. No tardó en perder el equilibrio y darse de cara contra el suelo, sólo para levantarse un segundo después. Flowey siempre encontraba aquello bastante cómico. Aunque normalmente el joven monstruo salía ileso de sus tropezones, esta vez se había hecho un pequeño arañazo en la cara. Frisk sacó una tirita del bolsillo y la aplicó sobre la herida.

-Muchas gracias- le dijo Kid.

"No fue nada" le respondió Frisk mediante señas.

No tardaron en reanudar la marcha. Kid se paraba varias veces a lo largo del camino porque había divisado algo que nunca antes había visto, aunque para Frisk y cualquier persona criada en la superficie fuese lo más común del mundo. Frisk lo dejaba estar, al fin y al cabo Kid, así como el resto de su especie, se había criado bajo tierra.

Habían pasado diez minutos desde que salieron en busca de la bandera cuando por fin la avistaron situada sobre una roca. Frisk se acercó a cogerla pero algo le detuvo en medio del camino: la vibración de su móvil (que seguía siendo el mismo que Toriel le había regalado tras conocerle y que más tarde Alphys había mejorado y que, por lo tanto, era más potente que cualquier móvil hecho por humanos). Con confusión, Frisk sacó el aparato de su bolsillo y notó que había recibido un sms de un número desconocido. Frisk decidió que lo mejor sería abrirlo.

eh frisk. soy sans. quería hacerte una pregunta...¿has utilizado tus poderes hoy?

Aquello era extraño. Por un lado, Sans no solía enviarle mensajes al móvil (era vago hasta para eso), y por otro lado, ¿a qué venía aquella extraña pregunta?

-¿El asqueroso saco de huesos te ha mandado un mensaje? Que raro- comentó Flowey, quien había leído el mensaje mirando por encima del hombro a Frisk. Mosnter Kid, por su parte se acercó a recoger la bandera en lugar de Frisk, utilizando la boca para ello dado a su falta de brazos.

No me he visto en la necesidad de hacer uso de mi SAVE hoy. ¿Ha pasado algo? Le envió Frisk al esqueleto. Un minuto después Sans respondió:

no. es sólo que he sentido algo extraño... ten cuidado. aparte de esto, espero que pases un sansacional día

-Agg, me ha dado algo malo con ese chiste- gruñó Flowey.-Pero, ¿a qué se refiere con eso de que ha sentido algo extraño? ¿Crees que hay alguien manipulando el tiempo por aquí?

Frisk se encogió de hombros como toda respuesta y comenzó a escribir un mensaje para Sans.

Jaja. ¿quieres que te avise si -comenzó a escribir Fris,k pero de pronto se escuchó un extraño chillido, seguido de un gruñido que le hizo soltar el móvil.

Antes de que Frisk o sus dos acompañantes pudiese reaccionar un extraño animal salió corriendo desde lo profundo del bosque. Era una especie de pequeño zorro con un pelaje blanco y brillante. El animal estaba al límite de sus fuerzas. Frisk no dudó en acercarse a socorrer al pequeño ser.

Apenas Frisk se había acercado a la criatura, otro extraño animal salió de la misma dirección de la que había venido el primero. Este era una especie de leopardo de color morado, con unas manchas violetas en su lomo. El leopardo miraba al zorro con malicia, haciendo que este retrocediera temeroso. Frisk recogió al zorro y lo protegió entre sus brazos.

-Eh vosotros dos: pelear está mal- dijo de pronto Monster Kid, quien había escupido la bandera. ¿Acaso esos dos seres eran monstruos?

-Lie- gruñó el leopardo mirando fieramente a Kid. Algo en el comportamiento de ese ser hizo que el joven monstruo retrocediera amedrentado y se escondiese tras Frisk y Flowey junto al zorro.

-Cobarde...- le dijo Flowey a Monster Kid.

El leopardo gruñó hacia los tres, pero Frisk no se acorbardó. Todo monstruo al que se había enfrentado en el pasado había acabado por hacerse amigo suyo. Aquel leopardo no sería excepción.

-¡Muy bien, Liepard! Has sabido darle caza- se oyó decir a una voz tras el leopardo.

Detrás del leopardo no tardó en aparecer un humano. Era de tez muy pálida, vestido con una chaqueta de cuero negra y pantalones a juego. El leopardo se giró hacia el humano y lo miró con sumisión.

-¡Eh, mocoso! ¡Aparta de ahí! ¡Ese Eevee variocolor es mío!- ordenó el hombre a Frisk. Frisk echó una rápida mirada al zorro (o Eevee como le había llamado) y comprobó como este se notaba atemorizado por el hombre.

Frisk dudaba que ese hombre pudiese entender sus signos, así que se limitó a negar con la cabeza.

-¿Quién eres tú? ¿Qué quieres?- le preguntó Flowey con agresividad al hombre.

-¡Un Sunflora que habla! -exclamó el hombre alegremente.-Ya me iban a dar un dineral por el Eevee, pero si tienes un Sunflora que habla no me va aquedar más remedio que quitarte de en medio.

-¡¿Qué me acabas de llamar?!- exclamó Flowey, enfadado.

-En cambio el Scraggy lisiado te lo puedes quedar: nadie quiere un Pokémon mutilado.

-¿Qué es un Scraggy?- dijo un confundido Mosnter Kid.

-Oh, ¿el Scraggy también habla? Pues entonces no hay nada más que hablar: entrégame tus Pokémon si no quiere sufrir las consecuencias- amenazó el hombre.

-¿Qué es un Pokémon?- pregutó de nuevo Kid.

-¡No os hagáis los tontos conmigo! Liepard, ¡usa mordisco para quitar a ese criajo de en medio!- ordenó el humano.

Liepard, como aparentemente se llamaba la extraña criatura, se abalanzó hacia Frisk, quien esperó a que su alma apareciera como cada vez que le ataba un monstruo.

Pero su alma no apareció.

Antes de que tuviese tiempo de sorprenderse el Liepard le golpeó con fuerza, tirándole al suelo de espaldas. La maceta de Flowey se le clavó en la espalda, lo cual le hizo gruñir de dolor, pero en ningún momento soltó al Eevee.

-¿Pero de qué vas, tío?- le preguntó un enfadado Monster Kid al humano. El monstruo se interpuso entre Frisk y el Liepard.

-¡Nadie se interpone entre lo que quiero y yo! Liepard, ¡usa tajo umbrío!- volvió a ordena el hombre.

Frisk miró con temor como el ataque se dirigía hacia Kid. ¿Y si lo mataba? Trató de reunir fuerzas para levantarse e interceptar el ataque. Su determinación hizo posible que pudiese apartar a Kid de un empujón y recibir el golpe por él. Frisk cerró los ojos ante el inminente impacto.

Pero el golpe no se produjo.

Cuando Frisk abrió los ojos, se encontró con la espalda de Toriel.

-Que miserable criatura. Utilizar a otros para atacar a unos jóvenes e inocentes niños- dijo Toriel con fría furia en su voz. Un grupo de bolas de fuego comenzaron a rodear su cuerpo. Toriel se giró un poco para ver a Frisk.-No temas cielo, ya estoy aquí para protegerte.

Frisk suspiró con alivio y se sentó en el suelo. No había sentido tanto dolor desde que se había enfrentado contra Undyne en su primer RESET. Kid se acercó para atenderle. Flowey, por su parte, miraba con odio al hombre que había osado herir a Frisk. De no haber sido por la llegada de Toriel, él mismo habría atacado al hombre.

El hombre por su parte tenía una expresión de temor en su monstruo. La imponente presencia de Toriel había borrado de un plumazo toda la confianza en si mismo que pudiera tener.

-¡Liepard! ¡Ataca con Finta!- ordenó el hombre atemorizado, pero Liepard no se movió: estaba demasiado aterrorizado para atacar a la recién llegada. En lugar de eso, obedeció a su instinto y huyó de aquel lugar.-¿Qué haces Liepard? ¡Vuelve aquí!- le gritó el humano al verle alejarse.

Toriel extendió una mano hacia el hombre e hizo aparecer su alma. Era de color violeta: perseverancia. La antigua reina de los monstruos podía sentir también que aquella alma irradiaba codicia y egoísmo.

-No eres precisamente muy buena persona- comentó Toriel con cierto pesar.- Tendré que llevarte ante la justicia.

El hombre por su parte miraba a su alma con una expresión indescriptible en su rostro. Pese al miedo que inundaba cada fibra de su ser, el hombre consiguió reunir fuerzas para huir despavorido de aquel lugar.

Toriel se alarmó al ver al hombre salir corriendo, pero no podía dejar a Frisk detrás con esas heridas. Su preocupación se disipó cuando, unos segundos después, de pronto el hombre volvió volando hacia su dirección. Toriel no pudo evitar notar como su alma se había vuelto azul.

-¡NINGÚN CRIMINAL ESCAPA DEL GRAN PAPYRUS Y SU ATAQUE AZUL!- exclamó Papyrus apareciendo justo en la dirección por la cual había tratado de huír el humano.

-Esqueletos...putos esqueletos humanos que hablan- decía atemorizado el hombre, quien había quedado inmovilizado por el ataque azul de Papyrus.

-esa boca: hay niños delante- le riñó Sans apareciendo tras su hermano.

-¡Sans! ¡Papyrus! ¿Qué hacéis aquí?- preguntó Toriel confundida.

-MI HERMANO RECIBIÓ UN MENSAJE DE FRISK MUY RARO Y PENSAMOS QUE PODÍA ESTAR EN APUROS- explicó Papyrus.- ¡MI HERMANO NOS TRAJO HASTA AQUÍ POR UNO DE SUS ATAJOS JUSATO A TIEMPO PARA VER CÓMO ESTE MALHECHOR ESCAPABA!

-este es el mensaje- añadió Sans, extendiendo su móvil frente a él.

Jaja. ¿quieres que te avise si sdsasdassad

-no es un mensaje muy lógico, así que pensé que o bien a frisk le había dado algo malo o bien se le había caído el móvil por algún motivo- continuó el esqueleto.- en cualquier caso, papyrus estaba presente cuando lo recibí y decidimos que teníamos que saber que le había pasado a frisk.

-Esto debe ser una pesadilla- murmuraba el atemorizado hombre. Tantas emociones en tan poco tiempo habían drenado sus energías y no tenía fuerzas para resistirse a la magia de Papyrus.

-oh vamos: toriel no está ni una pizca de gorda, así que no puede ser si quiera un poco pesada- bromeó Sans.

Toriel dejó escapar una risa y procedió a acercarse a curar a Frisk.

-NO VOY A HACER NINGÚN COMENTARIO AL RESPECTO- dijo Papyrus con exasperación.

-¡¿En serio?! ¿Después de lo que acaba de pasar vas y haces un chiste tan malo ?- le gritó Flowey al esqueleto con furia. El esqueleto se limitó a encogerse de hombros.

Por su parte, Toriel terminó de curar a Frisk, aplicando su magia curativa directamente en su alma, el efecto de la curación siendo inmediato. Frisk le mostró a la criatura que sostenía entre sus brazos e inmediatamente Toriel entendió que quería que lo curase. La antigua reina utilizó su magia para hacer aparecer el alma del ser.

-Chicos: mirad esto- pidió Toriel, asombrada ante lo que acababa de descubrir.

El alma de la criatura que Frisk sostenía en brazos, malherida, no tenía forma de corazón. Era de color gris y tenía una forma esférica. Un extraño dibujo, semejante a una estrella de seis finas puntas, estaba dibujado en su centro.

-vaya, esto es totalmente nuevo- murmuró Sans admirado.

-¡Qué bonita!- comentó Monster Kid.

-¡ESTOY DE ACUERDO CONTIGO!- concordó Papyrus.

-¡Papyrus está de acuerdo conmigo! - exclamó el joven monstruo.-Si no fuera por lo que le ha pasado a Frisk, hoy sería el mejor día de mi vida.

Frisk por su parte no podía dejar de mirar al alma del ser. No sabía el cómo ni el por qué, pero de pronto sintió como si su destino estuviera conectado al de ese "Eevee". Abrazó con cariño a la criatura. Su pelaje era increíblemente suave y le relajaba tocarlo... Poco a poco el agotamiento le fue venciendo y Frisk cayó en un sueño profundo.

Sus amigos y familia miraron como Frisk se dormía.

- Creo que será mejor suspender la excursión. Aunque hallamos detenido a este criminal, la bestia que lo acompañaba anda suelta por ahí y podría ser un peligro para los alumnos- comentó Toriel recogiendo a Frisk entre sus brazos.

-estoy de acuerdo- concordó Sans.- nosotros llevaremos a este a la comisaría, aunque antes quiero que me conteste un par de preguntas.

El humano miró a Sans. Pese a que su voz había sonado amable, no podía evitar notar como el esqueleto le juzgaba con la mirada. Supo que negarse a responder a las preguntas de ese monstruo, demonio o lo que fuera no era una opción.

-Está bien. Pero es una historia un poco larga...


Esta historia se me ocurrió por la mañana y el primer capítulo ha salido por si sólo en un par de horas. Espero seguir con el ritmo y poder daros pronto el primer capítulo. Tengo grandes ideas para este fic. En fin, ¡Nos leemos!