Capitulo X

"¿Qué es el amor? El amor es una niebla que quema con la primera luz del día de la realidad." ~Charles Bukowski

Aquella noche fue un descanso sin sueño, en realidad fue tan efímera que creyó haber cerrado los ojos por unos cuantos minutos nada mas, pero el día ya había llegado y la luz del sol ya se filtraba por su ventana, en realidad era bueno poder ver el sol tan temprano a pesar de que no era lo suyo notar ese tipo de cosas, en cierta forma era como si el sol le diera el visto bueno a su búsqueda.

Ya habiéndose levantado por completo, el joven pelinegro se dispuso a hacer los deberes cotidianos, eso sin pasar por su habitación, no quería quedar como un fisgón ante la joven que ahí dormía, una vez que termino se fue a la cocina a preparar el desayuno, ahora que lo pensaba bien, se había levantado muy temprano pero al menos ya no se sentía tan agotado, justo cuando estaba terminando de preparar los cereales, una suave voz lo interrumpió…

-Bueno días, Vanitas – escuchó decir a la joven que ya se encontraba preparada para el largo día, en realidad se preguntaba en qué momento se había duchado pero decidió no decir nada al respecto.

-Buenos días, Aqua – contesto de inmediato el pelinegro dándole así el desayuno a la chica, la cual agradeció con una gran sonrisa – me iré a preparar, seguro Ax… mi amigo ya debe estar por llegar – dicho eso, el joven se fue a su habitación y se dispuso a ducharse, tenía más o menos todo planeado, al menos lo básico, había quedado con Riku para la tarde, así no tendría que inventar excusas sobre Axel y más aún sobre Aqua, aunque en el fondo deseaba contarle todo, unos minutos después justo cuando bajaba las escaleras el timbre de su casa interrumpió sus pensamientos.

-Yo abro- dijo en voz alta Vanitas que se acercó a la puerta y la abrió con cuidado….

-Vaya vaya miren a quien tenemos en esta hermosa mañana – hablo primero el pelirrojo cuyo cabello quedaba perfectamente con el día soleado – así que este es tu nido de amor ¿eh? – Bromeo haciendo que el pelinegro se avergonzara dejando mostrar a la chica peli azul que recién se asomaba- ¿Aqua? – pregunto algo confundido.

¿Axel? – pregunto del mismo modo la joven.

-¿Ya se conocen?

-S-Si-dijeron ambos al mismo tiempo, en realidad que se conocieran haría más fácil las cosas, al menos no tendría que presentarles.

-Bueno, será mejor que aprovechemos al máximo el día, termino de desayunar y vamos a hacer lo que debamos hacer - dijo dirigiéndose a la cocina y dejando entrar al pelirrojo.

-Yo debo buscar algunas cosas – dijo la joven –es un placer verte de nuevo, Axel – sonrió la chica a medida que subía las escaleras.

-Espera, espera – esta vez hablo el pelirrojo dirigiéndose al pelinegro – ¿desde cuándo se conocen?

-Ehmm, desde ayer – Dijo mientras que terminaba de comer.- ¿Quieres un poco?

-No te preocupes, ya desayune- esta vez se encontraba sentando en el sofá- ¿Pero no paso nada anoche, picarón?

-A que te refieres –le lanzó un mantel al pelirrojo y miró hacia arriba esperando que Aqua no lo escuchara, este no hizo más que reírse de la reacción del pelinegro – Aunque anoche si paso algo en la casa de Xion.- esto último llamo la atención de su compañero.

-¿Qué cosa? – Vanitas se limitó a contarle cada detalle, desde la pelea hasta la manera en que se presento Terra, agregando además que Riku aún recordaba a Xion, en cómo conoció a su compañera que se encontraba en el piso superior y en su perseguidor con túnica; en el fondo por alguna razón el pelinegro sabía que podía contar con Axel, así que decidió no ocultarle nada.

-Ya veo, eso sí fue extraño, conozco a Terra– Eso alivió un poco al pelinegro – no es mala persona, pero no sabía que tenía una aprendiz y que esta fuera Xion, y hablando de aprendices, Aqua y él fueron hermanos de armas en su momento.

-Espera, ¿Quieres decir que…?

-Sí, ambos fueron entrenados por el mismo maestro, que hayas conocido a los dos en el mismo día es algo cuando menos curioso-el pelirrojo se mostraba pensativo. – y referente a Riku y al tío de la túnica creo que…- Hubiese continuado pero estos fueron interrumpidos por la joven que bajaba con una mochila en sus hombros.

-¿De qué hablan?

-De los posibles lugares de búsqueda – contesto el pelinegro, ahora que lo mencionaba no sabía por dónde comenzar.

-Vale me parece una buena idea – dijo a la vez que se sentaba en el sofá - ¿Axel?

-¿Si?

-¿Cómo vas con la tienda? – pregunto curiosa la chica.

-Todo bien, hoy deje a una vieja amiga a cargo, ya sabes. – El pelirrojo sonrió- ¿Y qué hay de Terra? – Al pelinegro casi se le salían los ojos al escuchar esa pregunta – Digo, tiempo que no sé de él.

¿Terra?- se dijo a sí misma la chica- ahora que lo dices meses que no lo veo, quizás deba preguntarle a él sobre mi amiga perdida.

-Entiendo- ante la muestra de sinceridad de la chica ambos se quedaron tranquilo, el pelinegro no hizo más que seguir con los preparativos subiendo así a su habitación. - ¿Y qué tienes referente a tu amiga perdida? – termino de preguntar el pelirrojo.

-No mucho, solo esta nota, la razón por la cual esté hoy aquí, más allá de… - el pelinegro no pudo entender nada más, estando arriba y una vez dentro de su habitación se limitó a organizar lo básico mientras que pensaba en qué lugar debían buscar primero, pero revisando los bolsillos de uno de sus sweater encontró una hoja de papel que respondió automáticamente su pregunta.

-Al final tendré que verme contigo nuevamente – término de recoger todas sus cosas y con una mochila en mano bajo para informar a sus dos acompañantes. – Vamos es hora de irnos.

-¿Ya sabes por dónde empezar?-preguntó Axel que se mostraba dispuesto ante la aventura.

-Sí, más o menos. – acto seguido le mostró una invitación a sus acompañantes.

-¡Curioso! – Exclamó pelirrojo- yo también estoy invitado a esa fiesta.

-Espera, no pasa nada si yo voy – interrumpió la chica preocupada. – quiero decir que no me han invitado. – el pelinegro sabia que ella no tenía inconveniente con eso.

-Serás mi acompañante, conozco a Namine desde hace varios años, no creo que me ponga alguna queja por llevarte y como nuestro amigo aquí tiene una invitación- decía a la vez que bloqueaba la salida de la casa. – Hoy tenemos fiesta – eso ultimo lo dijo como si le hubiesen dado un dulce a un niño pequeño.

-Sí, todo genial pero para ello necesitamos partir para lleg… - hubiese continuado pero el pelirrojo lo interrumpió.

-Mi joven amigo, en verdad crees que nosotros haremos un viaje de varias horas.- El pelinegro sabía que era una pregunta retórica así que espero que continuara.- Yo mismo haría los honores pero hay un maestro entre nosotros, mejor dicho maestra. – terminó haciéndole una reverencia a la joven peli azul.

-¿Así que ya lo sabías?-dijo Aqua un poco apenada.

-No todos llegan a tener ese título y cuando uno de tus amigos llega a tal nivel es imposible no enterarse – el pelirrojo sonrió haciendo que la chica se apenó más de lo que ya estaba, el pelinegro se preguntaba en que parte de la conversación se había perdido.

-Gracias Axel- la chica respiro profundamente y levanto su brazo.- Esta bien aparecerse cerca de tu tienda, ¿no?.

-Sí, no te preocupes.

-Espera, ¿Aparecerse?

-Aun eres muy joven. – El pelirrojo le dio unas leves palmadas en la espalda a Vanitas, segundos después apareció una burbuja frente de la mano de Aqua que fue creciendo y que terminó atrapando a los presentes.- Seguro es tu primera vez así que aguanta la respiración.- Pero ya era demasiado tarde, de la nada los tres empezaron a elevarse a tal punto que el pelinegro pensó que iban a chocar contra el techo, pero lo traspasaron sin más y los tres ya se encontraban volando sobre la casa, de repente una presión inexplicable apareció en su pecho como si algo le robara el aire, todo se movía muy rápido y la imagen de su entorno se mezcló como si de una paleta de colores se tratara pero antes de que se diera cuenta ya habían llegado, la presión de su pecho desapareció y se encontraban en un lugar familiar para él.

-¿Todo bien?- Pregunto la chica algo preocupada.

-S-Si- aun le costaba respirar. – No estoy acostumbrado.

-Vale, cuando quieras te enseño.- El pelinegro no sabía si de verdad quería usar eso.

-Mi método es más genial sabes.- interrumpió el pelirrojo- flamas por todos lados, como espectáculo de año nuevo – terminó de decir bromeando.

-Dudo mucho que eso aligere la experiencia- contesto el pelinegro que ya se había recuperado, era sorprendente ver que se encontraban en Twilight Town, al frente de ellos estaba la pared que ocultaba la tienda de Axel, el joven se pregunto porque no pudieron aparecerse dentro de la tienda, pero le extrañaba mas ver que la personas en los túneles no se hubiesen percatado de su aparición, por otro lado pensó que Aqua pudo haber usado eso para irse de su casa anoche, lo que abrió más interrogantes al final .

-Tomaré algunas cosas de la tienda si quieres entramos- invitó el pelirrojo con animó pero ambos decidieron esperarlo afuera. – Vale ya regreso.

-¿Crees que podamos encontrar alguna pista de las personas que estemos buscando? – Pregunto Aqua luego de varios segundos en silencio.

-Espero que sí, a donde vamos, la anfitriona de la dichosa fiesta conocía a la chica que ando buscando, espero que se acuerde de ella, si no es así, estaremos en problemas mayores, aunque aun debemos revisar el lugar donde encontraste la carta – el pelinegro sabia de sobra que eso no aportaría demasiado, pero cualquier pista ayudaría mantener la esperanza, no importa lo pequeña que fuera.

-Entiendo- la chica se quedo pensativa - ¿y sabes cuál es su nombre?

-Xion –contestó suspirando a la vez que trataba de analizar la reacción de su compañera en vano.

-Es un bonito nombre, seguro ella ha de ser hermosa- trato de animar el pelinegro- Espero que podamos encontrar alguna pista- dicho eso ambos se quedaron sumido en sus propios pensamientos; el pelinegro ya había cancelado su encuentro con Riku diciéndole que se encontraba en la ciudad mas no le dijo la razón.

-Bueno será mejor que vayamos a la casa de Namine antes de que llegue la muchedumbre - bromeo el joven pelirrojo que se volvió a reunir con su compañeros, esta vez tenía una mochila.- Tomaremos un atajo, pero una vez que lleguemos al bosque…

¿Bosque? – Aqua le quitó la pregunta a Vanita de la boca.

-Sí, Namine vive en una mansión y para llegar a dicha mansión hay que pasar por el bosque, y dicho bosque no es mortífero pero si hay que tener cuidado con las cosas que suceden y se aparecen ahí.

-Espera- interrumpió el pelinegro- si es así, ¿cómo hacen las personas cuando van allá?, digo deben darse cuenta de todo esto.

-Bueno – el pelirrojo invitó a sus acompañante que los siguiera, de todos ellos el que mejor sabía moverse en ese lugar era él sin duda. – primero que nada, que es lo primero que te llama la atención al llegar a la ciudad, de la forma convencional quiero decir.

-La muralla. – contestó casi que automáticamente el pelinegro.

-Exacto, todo lo que está afuera de la muralla es bosque y luego está el océano, ese bosque es el mismo que da a la casa de Namine, por ende su casa esta…

-Fuera de la muralla- esta vez contesto la chica. –Pero si ella vive afuera y ese bosque es peligroso, eso quiere decir…

-Exacto, Namine no es alguien que se pueda tomar a la ligera, al menos no como hechicera y menos como su enemiga, después de todo ella es otra maestra – Vanitas estaba tratando de entender todo- y ella y su familia tienen habilidades únicas, y respondiendo lo de las personas – eso hizo que el pelinegro volviera en sí- la sección del bosque que da a la casa de ella es la única que tiene un hechizo ilusorio por parte de su familia, es decir que si una persona mortal entra por ahí, a pocos minutos volverá al punto de partida, claro todo eso causándole una emoción de cómo si se hubiese perdido con el fin de que no vuelva más por ese camino, y ojo, eso solo en esa sección y para personas normales, para alguien como nosotros hay otro tipos de trampas, y si una persona va mas allá de los límites del bosque de la mansión corre el riesgo de toparse con algo desconocido y no volver nunca, no por nada se le conoce como el Bosque Perdido.

-¿Y qué clase de trampas hay en ese bosque? – Vanitas se sorprendió al ver que el único que estaba preocupado por eso era él, a pesar de lo sorprendida que estaba Aqua por Namine y el bosque, las trampas parecían ser lo menos preocupante para ella, al final el hecho de que fuera una maestra, sea lo que sea que eso significaba, era de utilidad para ese tipo de cosas o quizás su valentía no tiene límites.

-Para empezar… – Los tres se pararon frente a una tienda de instrumento musicales, al entrar el pelirrojo se fue a saludar a alguien del mostrador – esperen aquí- el pelinegro solo pudo escuchar que el sujeto se llamaba Demyx y que a primera vista parecía tener una buena relación con Axel, una vez que se despidieron este se acercó de nuevo a ellos, Aqua estaba fascinada por la cantidad de instrumentos de la tienda. – Síganme.– para su sorpresa el pelirrojo se fue a la parte trasera de la tienda, al pasar al lado del sujeto este no hizo más que sonreírles y desearles una linda tarde, luego de unos segundos se toparon con unas escaleras, el pelirrojo bajo sin tanto preámbulo, la chica le siguió después, las escaleras parecían infinitas de igual manera que los pisos que se perdían con la bajada, pero Axel se detuvo en seco y tocó la pared que estaba en frente de él dejando mostrar una puerta- Por aquí. - ahora que se percataba había pasado un buen tiempo desde que alguien dijo algo, además que por un momento se preguntó que había más abajo, ya que las escaleras parecían seguir y seguir, una vez pasado el umbral la puerta se cerró y todo fue oscuridad.

-Si quieres…

-No te preocupes, en esto soy bueno. – interrumpió Axel a la chica y acto seguido chasqueo sus dedos haciendo aparecer una larga y potente llama de su mano, agarró una especie de antorcha que estaba colocada en la pared y la encendió, el lugar era un pasillo largo que parecía curvarse a la distancia, claro todo estaba oscuro pero a pesar de eso no tenía rastro de humedad e increíblemente todo estaba demasiado limpio, tétricamente limpio.- le sugiero que estén atento a partir de ahora – el pelinegro dio un suspiro al interpretar el tono de cautela de su compañero-, ¿en dónde estaba?, ah sí, en las trampas del bosque.

-Sí.

-Bueno para empezar, si tienes mala intenciones el hechizo que tiene el bosque es capaz de interpretar eso, así quienes van ahí con pensamientos malos no lo llevan bien, de igual forma si tu intención no es esa, puedes ser sometido a toda clases de hechizos e ilusiones, incluso pueden aparecer cosas que tan solo decir que son peligrosas me quedaría corto o peor aún – El pelirrojo siguió avanzando por aquel pasillo mientras que sus dos compañeros le seguían el paso.- ver cosas que realmente no están ahí.

-¿Cómo eso puede ser peor? – pregunto el pelinegro dudando sobre el hecho de que algo que no fuera real pudiera ser más peligroso que algo que si lo era.

-Veras- esta vez fue la joven quien hablo – para personas como nosotros lo peor que nos puede pasar es que perdamos la cordura, la demencia y la locura, es algo serio y peligroso para aquellos que tienen mucho poder, con algo así puede que tus enemigos no sean reales pero el daño que se puede causar es muy real, por eso se tiene mucho cuidado a la hora de elegir aprendices y ese tipo de cosas.- El pelinegro asintió en señal de entender lo delicado del asunto.- Y no sería la primera vez que una ilusión llevara a la locura a alguien.

-Exacto, por eso no se debe tomar a la ligera ese bosque.-continuo el pelirrojo.

-Pero sabiendo todo esto, ¿cómo es que vamos a poder cruzarlo? – Con cada aclaratoria solo aparecían más preguntas en la mente del joven.

-Sencillo, primero, Namine y yo nos conocemos, no es la primera vez que voy a su casa, para las personas quienes se le ha permitido ir una vez, por lo general pueden ir nuevamente sin ningún inconveniente, segundo – el pelirrojo saco una carta de su bolsillo. – tenemos esta invitaciones que son como una especie de pases lo cual nos permitirá entrar sin problema.

-Si es así, ¿Por qué tanto cuidado con el bosque? – Aqua preguntó de repente.

-Bueno verán, el camino que estamos tomando no es el que todo el mundo tomará para ir a la fiesta – Tanto como Vanitas como Aqua se mostraron confundidos pero Axel siguió antes de que pudieran preguntar algo. – Lo sabrán una vez que crucemos eso.-El pelirrojo mostró una especie de pared traslúcida que dejaba ver una calle a través de ella.

-Es como la pared de tu tienda.

-Te diste cuenta rápido eh Vanitas –sonrió el pelirrojo- podemos cruzarlo pero hay que asegurarnos que no haya nadie pasando por ahí, pueden ver esa gran grieta por ahí. – Axel la señalo- esa es nuestra entrada al bosque.

-No es que era muy peligroso, y aun así tienen una grieta que da a toda la ciudad…

-Lo es, pero por alguna razón las personas creen que el peligro no pasará la muralla, ya saben por la cantidad de luz y esas cosas, pero el peligro real solo se presenta cuando se cruza dicha grieta, así que todos están a salvo.-el pelirrojo apagó la antorcha y solo quedo la luz naranja que provenía del exterior-Bueno no hay nadie, será mejor que salgamos de aquí.

Una vez afuera los tres se fueron directo a la grieta, para sorpresa del pelinegro esa parte de la ciudad se encontraba desolada, aunque era de esperarse por la hora, una vez adentro tanto como la joven como Vanitas se quedaron sin palabra al ver la densidad del bosque y de cómo sus ramas tan altas evitaban que la luz del sol entrara por completo.

-Será mejor no separarnos- esta vez Axel se mostró serio, luego de eso, los tres iniciaron su marcha hacia la mansión.